ARETAS

Aretas (gr. Arétas y Harétas, “grabador” o “agradable”; transliteración del ár. Jâritah; aparece en inscripciones nab.). Cuarto de 4 reyes nabateos con ese nombre. Su capital fue Petra, al sur del Mar Muerto. Los 4 reyes fueron: Aretas I (c 170 a.C.), Aretas II (c 96 a.C.), Aretas III (c 18 a.C.) y Aretas IV (9 a.C.-40 d.C.). La hija de Aretas IV se casó con Herodes Antipas, quien la rechazó cuando se enamoró de Herodí­as. Aretas inició una guerra de venganza contra Antipas, y ocupó partes de Perea, al este del Jordán. Cuando Antipas pidió 95 ayuda a Tiberio, el emperador envió a Vitelio, el gobernador de Siria, para castigar a Aretas. Pero Tiberio murió y la expedición no se llevó a cabo. Calí­gula parece haber sido amigable con Aretas, y le dio el control de Damasco, que entonces era administrado por un etnarca en nombre de Aretas (2Co 11:32, 33). El perí­odo de ocupación nabatea de Damasco fue sin duda entre la muerte de Tiberio (37 d.C.) y la muerte de Aretas (40 d.C.).

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

(agradable, virtuoso). Rey nabateo, suegro de Herodes el tetraca, cuyo oficial trató de apresar a Pablo en Damasco (2Co 11:32; comparar Act 9:24).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

(Nabateo: Virtuoso, agradable). Nombre de varios reyes nabateos. Este pueblo semita habitaba una parte del territorio de Edom, siendo una de sus principales ciudades la famosa Petra. Al principio eran nómadas, pero se situaron en ese lugar por ser estratégico para el tráfico de las caravanas. Fueron grandes comerciantes. Uno de sus reyes, A. III, conquistó †¢Damasco. Cuando los romanos hicieron lo mismo, dejaron como gobernador a un nabateo. La mención que hace Pablo en 2Co 11:32-33 (†œEn Damasco, el gobernador de la provincia del rey A.†), se refiere a un oficial de A. IV, que reinó en tiempos de †¢Herodes Antipas.

Una hija de A. IV fue esposa de este Herodes Antipas, pero él se divorció de ella para casarse con Herodí­as. Por eso, y por una disputa fronteriza, hubo guerra entre A. IV y Herodes Antipas. Los nabateos ganaron, pero Herodes apeló a los romanos, quienes mandaron un ejército al mando de Vitelio, procónsul de Siria. éste, sin embargo, no llegó a atacar a A. IV al enterarse de la muerte del emperador Tiberio. El nuevo emperador, Calí­gula, dio cierta autonomí­a a A. IV.
en esa época cuando sucede la conversión de Saulo y sus primeros testimonios en Damasco. Los judí­os de la localidad, en complicidad con las autoridades †œguardaban las puertas de dí­a y de noche† (Hch 9:24), con el propósito de matarle. Para salvarle, †œlos discí­pulos … le bajaron por el muro, descolgándole en una canasta† (Hch 9:25).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, REYE BIOG HOMB HONT El apelativo común (como Faraón para los reyes de Egipto) de los reyes árabes del norte de Arabia. Significa, en árabe, “forjador”. El gobernador de Aretas en Damasco intentó arrestar a Pablo (2 Co. 11:32). Este rey, que era suegro de Herodes Antipas, le hizo guerra por haberse divorciado de su hija, y le derrotó. Vitelio, gobernador de Siria, recibió orden de tomar a Aretas vivo o muerto, pero Tiberio murió antes de que esto pudiera llevarse a cabo. Calí­gula, que le sucedió en el imperio, hizo desterrar a Antipas. Hizo ciertos cambios en Oriente y se supone que Damasco fue separada de la provincia de Siria, y dada a Aretas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

(Virtuoso; Excelente).
El último de los diversos reyes árabes así­ llamados dominaba Damasco cuando su gobernador se unió a un complot judí­o para deshacerse de Pablo. No obstante, sus discí­pulos lo descolgaron en un cesto de mimbre por una ventana del muro de la ciudad y pudo escapar. (Hch 9:23-25; 2Co 11:32, 33.)
Aretas habí­a dado su hija en matrimonio a Herodes Antipas (véase HERODES núm. 2), quien se divorció de ella para casarse con Herodí­as, matrimonio adúltero que Juan el Bautista condenó. (Mt 14:3, 4.) Irritado además por las disputas fronterizas, Aretas atacó a Antipas y lo derrotó. Entonces el emperador Tiberio ordenó a Vitelio, gobernador de Siria, que prendiera a Aretas vivo o muerto. Vitelio, aunque tampoco era partidario de Antipas, movilizó sus fuerzas, pero debido a la muerte en el año 37 E.C. de Tiberio, la campaña contra Aretas no se llevó a cabo. Calí­gula, sucesor de Tiberio, cambió por completo la polí­tica exterior, nombró a Agripa I en lugar de Antipas y permitió que Aretas gobernase en Damasco. Se ha encontrado una moneda de Damasco de aquel tiempo que lleva una inscripción de Aretas.

Fuente: Diccionario de la Biblia

La referencia en 2 Co. 11.32 es a Aretas IV Filópatris, el último y el más famoso rey *nabateo del mismo nombre (ca. 9 a.C.-40 d.C.). Augusto le confirmó la tenencia de su reino vasallo, si bien con cierta reticencia, por cuanto lo había tomado sin autorización. Su hija se casó con *Herodes Antipas, quien se divorció de ella cuando quiso casarse con *Herodías (Mr. 6.17). Aretas le declaró la guerra a Herodes y lo derrotó en el 36 d.C. Roma apoyó a Herodes, pero la expedición punitiva que al fin se envió a las órdenes de Vitelio, gobernador de Siria, sólo había llegado hasta Jerusalén cuando la noticia de la muerte del emperador Tiberio en el 37 d.C. hizo que se abandonara el intento.

Sobre la base de 2 Co. 11.32 parecería probable, aunque sorprendente, que Aretas en algún momento estuvo en posesión de Damasco, la vieja capital Siria. Comúnmente se supone que Cayo (37–41 d.C.), cuya política consistía en alentar la existencia de reinos vasallos, le había dado la ciudad. Más aun, no se sabe que se haya acuñado ninguna moneda romana en Damasco entre el 34 y el 62 d.C. Este intervalo puede o no ser significativo. Es muy posible que haya habido una ocupación por Aretas en algún momento entre 34 (ó 37) y el 40, o la actividad de su “etnarca” posiblemente admita alguna otra explicación. La referencia es potencialmente importante para la cronología paulina, pero sobre la base de las pruebas existentes, las indicaciones son demasiado inciertas y las posibilidades demasiado diversas como para llegar a una conclusión. Si es posible equiparar los acontecimientos de 2 Co. 11.32 tanto con los de Gá. 1.17–18 como con los de Hch. 9.23–29, lo que estamos considerando podría ubicarse “tres años” después de la conversión de Pablo. Esta opción podría, según algunas interpretaciones del caso, concordar más fácilmente con una fecha temprana para la conversión del apóstol, lo cual parecería probable si se toman como base otros elementos.

E.M.B.G., C.J.H.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico