GOG

Eze 38:2 tu rostro contra G en tierra de Magog
Rev 20:8 a G y a Magog, a fin de reunirlos para


Gog (heb. Gôg, quizá “montaña” o “techo”; gr. Gog) 1. Hijo de Joel de la tribu de Rubén (1 Cr 5:4). 2. Dirigente de un grupo pagano que Ezequiel predijo que atacarí­a al estado judí­o restaurado (Eze 38:2, 3, 14, 16, 18; 39:1, 11, 15). Todos los intentos de identificarlo con una figura histórica del tiempo de Ezequiel o perí­odos posteriores han sido infructuosos o no convincentes (véase CBA 4:733). Por tanto, Gog parece ser sencillamente un nombre ideal para un lí­der de las huestes paganas que se combinarí­an para atacar a Israel. Acerca de las profecí­as referentes al Israel restaurado, véanse Profeta (II); CBA 4:27-40. 3. Persona similar al lí­der pagano mencionado en Eze_38 y 39, o una nación hostil a Dios, que simboliza a las naciones impí­as a quienes Satanás reúne después del milenio para atacar a Cristo y tomar la nueva Jerusalén (Rev 20:8). véase Gog 2.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

nombre de varón, que aparece dos veces en las Escrituras. 1. Hijo de Joel, de la descendencia de Rubén, 1 Cro 5, 4. 2. Personaje no identificado, rey de Magog, palabra ésta que significa precisamente †œpaí­s de G.†, prí­ncipe de Mesek y Túbal, paí­ses en el Asia Menor, al norte de Palestina. A este G., al que se refiere el profeta Ezequiel en los capí­tulos 38 y 39, no hay por qué buscarle una identificación histórica, pues por los rasgos con que lo pinta el profeta, no es más que la personificación del mal, pero controlado y usado por Dios como instrumento. Este texto sobre G. es un poema de carácter apocalí­ptico, en el cual el profeta habla de sus visiones sobre las últimas tribulaciones de Israel y revelan un futuro en el que se olvidarán estos sufrimientos. G. prepara un poderoso ejército, que vendrá del norte, para atacar a Israel, pueblo que vive tranquilo en ciudades desprotegidas; pero la ira de Dios se volverá contra G., que cree actuar por su cuenta cuando en realidad es un instrumento de Dios, y vendrá la gran matanza, el desastre del ejército de G., hasta el punto de que se necesitarán siete semanas para sepultar los cadáveres y durante siete años los israelitas harán fuego con las armas tomadas a los vencidos. Estas visiones de G., revelan a los israelitas en el destierro un porvenir de lucha y dolor; pero les muestran, también, los misterios del futuro, la victoria definitiva del bien sobre el mal., cuando G. es vencido, muerto y sepultado en el valle de los Oberim, por lo que este lugar será llamado Hamón G., esto es, †œvalle de la Horda de G.†, al este del mar Muerto. Este personaje de G. tuvo mucha influencia en la literatura apocalí­ptica posterior al profeta Ezequiel, en los escritos apócrifos, y, concretamente, en San Juan. En estos textos G. y Magog son dos soberanos aliados contra los justos, y en el Apocalipsis, en el segundo combate escatológico, los dos personajes representan a las naciones paganas aliadas contra la Iglesia al final de los tiempos, Ap 20, 8.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

(Ornamento de oro). Nombre de personas del AT y un grupo de naciones en el NT.

1. Descendiente de Rubén. Hijo de Joel (1Cr 5:4).

. Personaje mencionado por Ezequiel. Se dice de él que es †œprí­ncipe soberano de Mesec y Tubal†. Dios está contra él, porque éste viene al frente de una confederación de pueblos entre los cuales se nombra a †œPersia, Cus y Fut … Gomer … la casa de Togarma, de los confines del N†, a †œlos montes de Israel†, con ánimo destructor y en búsqueda de botí­n. Pero G. perecerá †œsobre los montes de Israel†. Habrá una mortandad tal que se tardará siete años recoger las armas de guerra que quedarán en el campo de batalla y tomará siete meses enterrar los cadáveres de los muertos. †œY será para ellos célebre el dí­a en que yo sea glorificado, dice Jehovᆝ, quien no esconderá más su rostro de los hijos de Israel. †œPorque habré derramado de mi Espí­ritu sobre la casa de Israel, dice Jehová el Señor† (Ez. 38-39).

. †œG. y Magog† es una fórmula usada para aludir †œa las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra†, que serán engañadas por †¢Satanás cuando éste sea †œsuelto de su prisión† (Apo 20:6-8). Esta profecí­a parece estar relacionada con Ez. 38 al 39.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, BIOG ESCA HOMB HOAT

vet, (a) Hijo de Semaí­as, rubenita (1 Cr. 5:4). (b) Gog es un nombre simbólico del poderoso y soberbio caudillo de las vastas hordas de Escitia y Tartaria. Magog fue el hijo de Jafet (Gn. 10:2), cuyos descendientes se esparcieron por las inmensas estepas del norte, dando su nombre a la tierra. Estas hordas, provenientes del norte, “como nublado para cubrir la tierra” (Ez. 38:9), atacarán Israel en la tierra de Palestina, pero serán aplastadas por Dios (Ez. 38:18-23; 39:1, 6, 11). En Apocalipsis (Ap. 20:8) se vuelve a mencionar a Gog y a Magog atacando Jerusalén, “el campamento de los santos y la ciudad amada”. Muchos no aceptan la identificación del Gog de Ezequiel con el de Apocalipsis, estableciendo que en Ezequiel, Gog es visto actuando antes del Milenio, en tanto que en Apocalipsis, Gog actúa después. Otra razón que se da en contra de la identificación del Gog de Ezequiel con el de Apocalipsis es que en Ezequiel, Gog es visto viniendo “de los confines del norte” (Ez. 38:6), en tanto que en Apocalipsis, Gog y Magog son identificados con “las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra” (Ap. 20:8). Sin embargo, ambos pasajes se pueden conciliar sin dificultades: (A) Además de la mención “confines del norte” en Ez. 38:6, se afirma la coligación de Gog con “Persia (al este), Cus (Etiopí­a, al sur), y Fut (Libia, al este)” (Ez. 38:5). Así­, concuerda con Ap. 20:8: “los cuatro ángulos de la tierra”. (B) Ez. 38:8 no puede ser conciliado con la época de la Tribulación. Se dan dos alternativas: o bien se trata de un perí­odo de transición entre la Tribulación y el Milenio, o bien se trata de Israel morando en la época del Milenio. Una tercera posibilidad, y la más armónica con la caracterí­stica de la profecí­a bí­blica, es que haya un doble cumplimiento, antes de la época del Milenio, y un cumplimiento total al término del Milenio. La destrucción definitiva de Gog y Magog dará paso final a la instauración del estado eterno, previo el Juicio del Gran Trono Blanco (Ap. 20-22). Allí­, la justicia ya no sufrirá, como ahora, ni reinará, como en el Milenio (véase), sino que, una vez destruida toda oposición, morará. Bibliografí­a: A. T. Pearson: “Ezequiel”, The Wycliffe Bible Commentary (Moody Press, Chicago, 1962); R. H. Alexander: “Ezequiel” (Pub. Portavoz Evangélico, Barcelona, 1979), PP. 123-134.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

No se sabe con certeza el significado de este nombre.

1. Descendiente de Rubén. (1Cr 5:3, 4.)

2. El nombre se halla en los capí­tulos 38 y 39 de Ezequiel, donde se aplica al caudillo de un asalto internacional, semejante a una tormenta, contra el pueblo de Dios. El ataque ocurre después que Jehová ha recogido a su pueblo de las naciones y los ha devuelto a las †œmontañas de Israel†, previamente devastadas. Debido a que moran en seguridad, sin ninguna señal visible de protección, y disfrutan de abundante prosperidad, Gog es atraí­do a lanzar un ataque malvado y furibundo contra ellos. Con este fin, congrega a un vasto ejército de muchas naciones; pero su ataque hace estallar la ira de Jehová, lo que provoca una terrible derrota y destrucción de Gog y toda su muchedumbre. Sus cadáveres llegan a ser alimento para los pájaros y las bestias, y sus huesos son enterrados en el valle al que después se llama el valle de la Muchedumbre de Gog (literalmente, valle de Hamon-Gog).

El origen y el propósito del ataque. El ataque tiene su origen muy lejos de la tierra de Israel. Gog es †œde la tierra de Magog†, situada en †œlas partes más remotas del norte†. (Eze 38:2, 15.) Es †œel cabecilla principal [†œgran prí­ncipe†, CI; †œprí­ncipe soberano†, NC, Val] de Mesec y Tubal† (38:2, 3). Algunas traducciones dicen en este texto †œprí­ncipe de Ros, Mesec y Tubal† (BAS, Mod), entendiendo que †œRos [término hebreo para †œcabeza†]† se refiere a un paí­s o pueblo. Sin embargo, en ninguna otra parte de la Biblia se da este nombre a una tierra o pueblo. Mesec y Tubal, al igual que Magog, son nombres dados a los hijos de Jafet (Gé 10:2), y las tres tierras que llevan este nombre están situadas al N. de Israel. (Véanse MAGOG núm. 2; MESEC núm. 1; TUBAL.) Otros miembros de las fuerzas atacantes del N., también jaféticos, eran: Gómer y Togarmá (quienes, al parecer, fueron los progenitores de los antiguos cimerios y armenios, respectivamente). La Persia jafética estaba situada al NE., pero en la conspiración entraron también los miembros camí­ticos del S.: Etiopí­a y Put, que se hallaban en ífrica. (Eze 38:4-6, 15.) Por consiguiente, el papel de Gog es el de comandante de una imponente fuerza de ataque que ejerce gran presión para aplastar como en un torno al pueblo de Jehová.
Se dice que Israel está †œmorando en el centro de la tierra†. (Eze 38:12.) El antiguo Israel no solo estaba situado en un punto central con referencia a los continentes euroasiático y africano, sino que también era el centro de la adoración pura del Dios verdadero, y El lo consideraba como la †œniña de su ojo†. (Dt 32:9, 10; Zac 2:8.)
Jehová declara que †˜pondrá garfios en las mandí­bulas de Gog†™ y lo conducirá a este ataque. (Eze 38:4; compárese con 2Re 19:20, 21, 28.) Sin embargo, la profecí­a muestra claramente que este ya es el deseo de Gog y que el proyecto sale de su propio corazón. (Eze 38:10, 11.) No obstante, Jehová provoca a Gog restaurando al pueblo que lleva Su nombre y haciendo que vuelva y prospere. Esto incita a Gog a manifestar su maldad hacia el pueblo de Dios y voluntariamente se precipita en un proceder que le acarrea destrucción rápida a él y a todos sus asociados. Al derrotar y aniquilar a Gog y a sus fuerzas, Jehová magnifica y santifica su propio nombre ante todos los observadores. (Eze 38:12-23; 39:5-13, 21, 22; compárese con Joe 3:9-17.)

Identificación de Gog. A las tierras y pueblos mencionados en la profecí­a sobre Gog se les puede identificar en la Biblia y hasta cierto grado en la historia seglar, pero no se ha podido relacionar a Gog con ningún gobernante terrestre histórico. Con mucha frecuencia se le relaciona con Giges, quien fue rey de Lidia, en la parte occidental de Asia Menor, y que aparece con el nombre de Guggu en los registros del monarca asirio Asurbanipal. (Ancient Records of Assyria and Babylonia, de D. Luckenbill, 1927, vol. 2, págs. 297, 351, 352.) Sin embargo, Giges habí­a muerto décadas antes de que Ezequiel escribiera su profecí­a, por lo que esta identificación resulta inaceptable. A esto hay que añadir que la profecí­a misma sitúa el ataque de Gog †œen la parte final de los años†. (Eze 38:8, 16; compárese con Isa 2:2; Jer 30:24; 2Ti 3:1.) De modo que el nombre de Gog debe ser enigmático o simbólico y no corresponde a ningún rey o caudillo humano conocido.
Los hechos muestran que la profecí­a se cumplirí­a en un perí­odo llamado en otras ocasiones †œel tiempo del fin†. (Da 11:35; 12:9; compárese con Rev 12:12.) Los comentaristas y eruditos bí­blicos por lo general reconocen que la profecí­a se refiere al perí­odo del Reino mesiánico. Por ejemplo, The New Schaff-Herzog Encyclopedia of Religious Knowledge (edición de S. Jackson, 1956, vol. 5, pág. 14) señala: †œGog aparece como el caudillo del último ataque de las potencias mundiales al Reino de Dios†. Puesto que no hay pruebas de que se cumpliera en el Israel natural, es lógico pensar que su cumplimiento durante †œla parte final de los dí­as† está relacionado con el Israel espiritual, los miembros de la congregación cristiana (Ro 2:28, 29; Gál 6:16), a quienes el apóstol Pablo llama hijos de la †œJerusalén de arriba†, y que son dirigidos por ella. (Gál 4:26.) Todos estos puntos nos ayudan a llegar a la correcta identificación de Gog.
El libro de Revelación suministra ayuda adicional. Las visiones proféticas allí­ registradas predijeron que aumentarí­a notablemente la persecución contra la congregación cristiana por parte del dragón simbólico, Satanás el Diablo. Esto acontecerí­a una vez que se le arrojara de los cielos a la región de la Tierra junto con sus demonios, una acción que realizó el reino de Dios por medio de Cristo cuando empezó a ejercer autoridad real. (Rev 12:5-10, 13-17.) En estas visiones se pone de relieve la concentración de las naciones terrestres contra Dios, su Hijo y sus siervos fieles sobre la Tierra, así­ como también la derrota y desolación total de tales fuerzas enemigas. (Rev 16:13-16; 17:12-14; 19:11-21.) El que los pájaros banqueteen con los cadáveres de tales enemigos del gobierno del Reino de Cristo tiene una correspondencia con el relato de Ezequiel. (Compárese Eze 39:4, 17-20 con Rev 19:21.)
Según Revelación, la figura central o caudillo del ataque mundial contra el Reino mesiánico y sus súbditos es Satanás el Diablo. Esta es la única persona del registro bí­blico de quien se puede decir que encaja perfectamente con la descripción y el papel que tiene †˜Gog de Magog†™ en la profecí­a de Ezequiel. De modo que la profecí­a registrada en Ezequiel con respecto a Gog predice un ataque malicioso y extendido por toda la Tierra contra el pueblo de Dios, ataque maquinado y dirigido por el degradado Satanás el Diablo. La profecí­a también revela que este ataque provoca la completa aniquilación de tales fuerzas satánicas por medio del impresionante poder de Dios. (Eze 38:18-22.)

Entierro de la muchedumbre de Gog. El entierro de †œGog y toda su muchedumbre† tiene lugar en †œel valle de los que van pasando, al este del mar†. (Eze 39:11.) La Nueva Biblia Española lo traduce como †œla nava de Abarí­n, al este del Mar Muerto†. El nombre Abarim aparece en Números 33:47, 48, y hace referencia a las montañas que están al E. del mar Muerto. (Véase ABARIM.) En esta región encontramos dos valles profundos o gargantas, el Arnón y el Zered. El Arnón tiene unos 3 Km. de ancho en su parte superior y unos 520 m. de profundidad. Pero el Zered es un cañón aún más gigantesco; algunos de sus escarpados acantilados tienen alrededor de 1.190 m. de profundidad. Ambos valles pueden usarse como representación de este lugar de entierro profético; el Arnón por encontrarse al E. del mar, y el Zered, situado al SE., porque era el más transitado. No obstante, ya que la escena que se representa es simbólica, no es necesaria la existencia de tal valle. Este entierro en un lugar profundo cerca del mar Muerto tiene también un paralelo con el relato de Revelación, que dice que a los opositores del reino de Dios se les arrojará al lago de fuego simbólico y que a Satanás se le abismará. (Rev 19:20; 20:1-3.)

¿Es el Gog de Revelación el mismo que el de Ezequiel?

3. Revelación 20:8 también habla de †˜Gog y Magog†™. Sin embargo, aquí­ no se hace referencia a un comandante o gobernante individual. Se aplican ambos nombres a †œaquellas naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra† y que se dejan extraviar por Satanás después que este es libertado del †œabismo† simbólico. Puesto que otros textos enseñan que el gobierno milenario de Cristo pone fin a los gobiernos nacionales y a las divisiones (Da 2:44; 7:13, 14), parece que tales †œnaciones† son el producto de la rebelión contra su dominación sobre toda la Tierra. Avanzan †œsobre la anchura de la tierra† para rodear †œel campamento de los santos y la ciudad amada†. Esto acontece después que el gobierno milenario de Cristo Jesús sobre la Tierra llega a su término. (Rev 20:2, 3, 7-9.)
El uso de los nombres †˜Gog y Magog†™ sirve para destacar ciertas analogí­as entre esta situación posterior al milenio y el ataque anterior (antes de que Satanás fuese abismado). Por ejemplo: tanto en Ezequiel como en Revelación los opositores son numerosos (los de Revelación son un número indefinido: †œComo la arena del mar†), el ataque es el resultado de una conspiración muy extendida y se dirige contra los siervos de Dios cuando se encuentran en un estado de gran prosperidad. De modo que es muy oportuno el uso de la expresión †˜Gog y Magog†™ con referencia a aquellos a quienes se conduce a una rebelión después del milenio. Por supuesto, su fin es la destrucción completa. (Rev 20:8-10, 14.)

Fuente: Diccionario de la Biblia