ITALIA

Act 18:2 un judío .. Aquila .. recién venido de I
Act 27:1 decidió que habíamos de navegar para I
Heb 13:24 saludad a todos .. Los de I os saludan


Italia (gr. Italí­a, “tierra de becerros [Italo]”). Patria de los romanos, con Roma como su capital, y también del imperio. En tiempos precristianos era el nombre de un pequeño distrito del sur de la pení­nsula, que ahora se llama Italia, pero que en el tiempo del NT ya se aplicaba, como ahora, a todo este territorio. Mapa XIX, C-S. Estaba habitada por diversos pueblos, como los galos (que viví­an en el norte), los griegos (en el sur), y los latinos, los sabinos, los etruscos y otros (que habitaban las regiones centrales). No mucho después del 300 a.C. la ciudad-estado de Roma habí­a extendido sus control sobre la mayor parte de Italia, y por el tiempo del NT sus pobladores recibieron la ciudadaní­a romana. Italia aparece 4 veces en el NT: 1. Como el paí­s del cual emigraron Aquila y Priscila (que más tarde fueron ayudantes de Pablo) cuando los judí­os fueron expulsados de Roma por Claudio (Act 18:2). 2. Como el paí­s al cual Pablo fue enviado prisionero (27:1). 3. Como el destino de una nave alejandrina que tomaron Pablo y los demás en Mira. Licia, en la costa sur del Asia Menor (vs 5, 6). 4. Como la tierra donde viví­an o habí­an vivido los cristianos que enviaron saludos a los destinatarios de la carta a los hebreos (Heb 13:24). Italiana, La. Véase Compañí­a (1).

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

paí­s de toros. Los griegos desde muy tempranas épocas se establecieron en las costas de Calabria, fundaron varias colonias, entre ellas, Sí­baris, Crotona y Locri, las cuales llegaron a ser consideradas entre las principales ciudades de la Magna Grecia, siglos V y IV a, C., y le dieron a esta región el nombre de I. En el siglo III, Roma conquistó esta región, unificó la pení­nsula y se le dio el nombre de I. En tiempos de Julio César, I. tení­a, aproximadamente, las dimensiones actuales, y en tal sentido se menciona en el N. T., Hch 18, 2; 27, 1 y 6; Hb 13, 24.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

El area geográfica del paí­s cuya capital era Roma. Se le menciona cuatro veces en el NT (Act 10:1; Act 18:2; Act 27:1; Heb 13:24). El cristianismo fue introducido a Italia muy temprano, pero el tiempo y las circunstancias son inciertas.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Véase ROMA.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico

Paí­s cuya capital es Roma.

(Hec 18:2, Hec 27:1, Hec 27:6, Heb 13:24). El Imperio Romano mandaba en Israel cuando Jesús nació: (Lc.2).

Diccionario Bí­blico Cristiano
Dr. J. Dominguez

http://biblia.com/diccionario/

Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano

Pení­nsula y paí­s en el S de Europa. Desde su capital, Roma, se expandió un gran imperio que llegó a dominar la mayor parte del mundo occidental conocido. Aunque es posible que algunos judí­os conocieran I. por haber viajado allí­ como comerciantes, las relaciones entre Israel y Roma aparecen registradas a partir de la embajada que envió Judas Macabeo a esa ciudad para establecer un tratado en el año 161 a.C. (1Ma 8:1-32). Mucho después los romanos, comandados por Pompeyo, invadieron Israel en el año 63-61 a.C., ocupando la tierra y tomando muchos prisioneros que llevaron a I. como esclavos. Julio César dio un buen tratamiento a los judí­os, permitiéndole ciertas excepciones para que pudieran cumplir con sus costumbres religiosas. Consta que en el año 19 d.C., bajo el gobierno de Tiberio, unos cuatro mil judí­os residentes en I. fueron enviados a Cerdeña, como un castigo por cierta falta, lo que sugiere que la población judí­a en I. era abundante.

Se decretó varias veces la expulsión de los judí­os de Roma. Pero estos decretos duraban corto tiempo. Siendo †¢Claudio emperador los conflictos entre la comunidad judí­a y la cristiana le llevaron a emitir una orden expulsando a ambas poblaciones (†œ… Claudio habí­a mandado que todos los judí­os saliesen de Roma…† [Hch 18:1-2]). Fue así­ que Aquila y Priscila salieron de Roma por uno de esos decretos, y encontraron a Pablo en Corinto.
el Señor Jesús vivió en Israel habí­a allí­ muchos ciudadanos de I., funcionarios, soldados y comerciantes. El dí­a de Pentecostés muchos de ellos (†œ… romanos aquí­ residentes† [Hch 2:10]) escucharon el evangelio. Una iglesia se formó poco después, probablemente como consecuencia de la persecución tras la muerte de Esteban, pues †œlos que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio† (Hch 8:4). A la iglesia que se formó en Roma fue a la que Pablo dirigió su epí­stola, titulada †œa los Romanos†, en donde expresa su deseo de viajar a I. para luego encaminarse a España (Rom 15:24, Rom 15:28). Ese deseo, sin embargo, sólo pudo cumplirlo cuando fue enviado preso a Roma (Hch. 27 al 28). †¢Italiana, La.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, PAIS

sit, a9, 74, 118

vet, En el siglo V a.C., este término geográfico designaba tan sólo una pequeña parte del extremo meridional de la pení­nsula italiana. Poco a poco se fue aplicando a mayores extensiones; en el siglo primero de nuestra era ya tení­a el sentido que se le da actualmente. Una cohorte llamada Itálica estaba de guarnición en Siria (Hch. 10:1). Aquila y Priscila vivieron un cierto tiempo en Italia (Hch. 18:2). La apelación de Pablo a César exigió que se dirigiera a Italia, por mar (Hch. 27:1, 6). El saludo con que se concluye la Epí­stola a los Hebreos (He. 13:24) indica la presencia de cristianos no sólo en Roma, sino también en otros lugares del paí­s (cfr. Hch. 28:14).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

(posiblemente del lat. vitulus, †œbecerro†).
Pení­nsula en forma de bota que, partiendo de la Europa continental, se extiende hacia el SE. en el mar Mediterráneo. Desde los Alpes, al N., hasta el estrecho de Mesina, al S., tiene una extensión de unos 1.130 Km. La anchura oscila entre 160 y 240 Km., limitando al E. con el mar Adriático y al O. con el mar Tirreno. La cordillera de los Apeninos recorre el centro de la pení­nsula como si fuese su espina dorsal, con sus valles fértiles que se extienden hacia las llanuras del litoral. Los rí­os principales son el Tí­ber y el Po. Italia tiene unos 301.000 Km.2 de superficie.
Según Antí­oco de Siracusa (del siglo V a. E.C.), el nombre Italia en un principio tan solo designaba a la región donde viví­an los itali, zona que hoy corresponde a la provincia de Calabria, al S. de la pení­nsula. Al parecer, este nombre es una forma helenizada de Vitelia, emparentada con la palabra latina vitulus, que significa †œbecerro†. Posiblemente se llamara así­ a esta región debido a su ganado y tierras de pasto, o bien a que sus habitantes creí­an ser descendientes de su dios-toro. Hacia el siglo I E.C., el nombre Italia habí­a llegado a designar una gran parte del mismo territorio que en la actualidad.
A través de los siglos, pueblos de diferentes orí­genes raciales inmigraron a esta fértil tierra. La historia antigua de Italia recoge las guerras entre los que ya estaban allí­ y las oleadas de invasores que asolaban el paí­s periódicamente. La pení­nsula, por lo tanto, sirvió como crisol de idiomas, sangre y costumbres, ya que estos diferentes grupos nacionales se establecieron y se casaron entre sí­.
El cristianismo llegó a Italia en una fecha temprana, puesto que en el dí­a del Pentecostés de 33 E.C., tanto prosélitos italianos como judí­os de Roma fueron testigos del derramamiento del espí­ritu santo, escucharon la explicación de Pedro y sin duda algunos estuvieron entre los aproximadamente †œtres mil† que se bautizaron en aquella ocasión. (Hch 2:1, 10, 41.) Es posible que al regresar a Italia formasen el núcleo de la congregación cristiana de Roma, a la que Pablo dirigió una de sus cartas algunos años más tarde. (Ro 1:1-7.) Puede ser que íquila y Priscila pertenecieran a esa congregación cuando hacia el año 49 o principios de 50 E.C. el emperador Claudio les ordenó que abandonasen el paí­s. Llegaron a Corinto poco antes de que Pablo estuviese allí­ por primera vez en el transcurso de su segundo viaje misional. (Hch 18:1, 2.)
Cornelio, un oficial del ejército de la †œbanda italiana† que viví­a en Cesarea, también era italiano. (Hch 10:1.) En esta ciudad Pablo apeló a César en su juicio delante de Festo. Luego se le trasladó en barco a Mira, donde fue transbordado —junto con otros prisioneros— a otro barco que transportaba cereales desde Alejandrí­a y que se dirigí­a a Italia. (Hch 25:6, 11, 12; 27:1, 5, 6.) Debido a que sufrieron un naufragio durante la travesí­a, tuvieron que pasar el invierno en la isla de Malta. Probablemente en la primavera del año 59 E.C., Pablo pisó por primera vez suelo italiano en Regio, en la †œpunta de la bota† de Italia, y poco después desembarcó en Puteoli, en la bahí­a de Pozzuoli (Nápoles). En este lugar, a unos 160 Km. al S. de Roma, Pablo permaneció durante una semana con la congregación local antes de subir a Roma por la ruta de la ví­a Apia, donde los hermanos de Roma salieron a su encuentro, concretamente en †œla Plaza del Mercado de Apio y las Tres Tabernas†. (Hch 28:11-16.) Es probable que el apóstol Pablo escribiera la carta a los Hebreos durante su estancia en Italia, hacia el final de su primer encarcelamiento en Roma o poco después de su liberación, aproximadamente en el año 61 E.C. (Heb 13:24.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

(gr. Italia). A mediados del ss. I este nombre ya había alcanzado sustancialmente su significado geográfico moderno. “Todos los caminos conducían a *Roma”, y aun antes de la época de Cristo muchos judíos se habían trasladado a Italia, especialmente a la metrópoli. Fue a causa de la purga de judíos llevada a cabo por el emperador Claudio que Pablo conoció a *Aquila y Priscila (Hch. 18.2). Italia era el punto de destino del apóstol cuando, después de apelar a César, él y otros prisioneros embarcaron en Cesarea en lo que iba a ser su viaje más famoso (Hch. 27.1, 6). En He. 13.24 leemos que “los de Italia… saludan” a los destinatarios de la carta.

J.D.D.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico