PEDIR

v. Demandar, Orar, Requerir, Rogar, Suplicar
Exo 3:22; 11:2


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Acción de reclamar, con humildad o sin ella, algo que se debe o algo que se precisa. La petición en el hombre es una acción de humildad constitutiva: el niño a sus padre, el amigo pide al amigo, el alumno al profesor, el pobre al rico.

Por eso el termino de pedir entraña una connotación antropológica radical, que también debe traspasarse a la dimensión espiritual: los hombres, criaturas contingentes, pedimos dones a Dios, Ser Supremo. O, si se quiere hablar en términos más evangélicos: los hijos de Dios y hermanos de Jesús, pide a su Padre Dios conforme el mismo Jesús le enseñó durante su vida mortal.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

Es desagradable insistir, así­ corno es desagradable seguir pidiéndole al Señor. Cuando nuestra plegaria gueda aparentemente sin respuesta, nos imaginamos que Dios está un poco sordo y vivimos en la incertidumbre del que se queda fuera, esperando que el otro reaccione y le abra la puerta. Conforme pasa el tiempo, vamos perdiendo la confianza en Dios. Sin embargo, Jesús nos repite: sigue pidiendo, porque el pedir ya es una gracia, el pedir te convierte en hijo, en la petición está la concesión; si no descuidas esta plegaria, aunque pueda parecer material, pobre y repetitiva, te convertirás misteriosamente en hijo y recibirás incluso el pan para alimentar a otros, aunque tú estés cansado, aunque seas árido y pobre. No se trata de una oración fácil, tranquila, gozosa, provechosa, sino de una oración sufrida. Sin embargo, es a través de ella como Dios nos concede el verdadero pan, es decir, la conciencia de nuestra condición filial, el don de vivir abandonados al Padre, seguros de que él nunca nos dejará solos. En seguida surge la pregunta: ¿cómo es que Dios necesita nuestra insistencia? ¿Acaso no sabe, antes que nosotros, aquello que necesitamos? En realidad somos nosotros quienes, al pedir con insistencia, nos purificamos y, pasando por la humildad de reconocer que no sabemos orar, nos convertimos en hijos.

Carlo Marí­a Martini, Diccionario Espiritual, PPC, Madrid, 1997

Fuente: Diccionario Espiritual

1. aiteo (aijtevw, 154), pedir. Se debe distinguir del Nº 2. Aiteo sugiere con la mayor frecuencia la actitud de un suplicante, la petición de uno inferior en posición a aquel a quien se le hace la petición; p.ej., en el caso de hombres pidiendo algo a Dios (Mat 7:7); de un hijo a un progenitor (Mat 7:9,10); de un súbdito a un rey (Act 12:20); de sacerdotes y pueblo a Pilato (Luk 23:23); de un mendigo a uno que pasaba (Act 3:2). Con referencia a pedir a Dios, este verbo se encuentra en las epí­stolas de Pablo en Eph 3:20 y Col 1:9; en Stg cuatro veces (1.5, 6; 4.2, 3); en 1 Juan, cinco veces (3.22; 5.14,15, dos veces, 16). Véase DEMANDAR, Nº 1. Cf. , Nº 1. 2. erotao (ejrwtavw, 2065), sugiere con la mayor frecuencia que el que pide está en terreno de igualdad o familiaridad con la persona a la que hace la petición o pregunta. Se utiliza de un rey al hacer una petición a otro rey (Luk 14:32); del fariseo que “rogó” a Cristo que comiera con él (Luk 7:36), indicándose con el uso de este verbo el bajo concepto que tení­a de Cristo; cf. 11.37; Joh 9:15 “preguntar”; 18.19: “preguntó”. Acerca de esto es significativo que el Señor Jesús nunca utilizara aiteo en lo que respecta a pedir al Padre. “La conciencia de su igual dignidad, de su intercesión poderosa y prevalente, se muestra en esto, que cada vez que El pide, o afirma que El pedirá algo al Padre, siempre utiliza el verbo erotao, esto es, pedir en términos de igualdad (Joh 14:16; 16.26; 17.9,15,20), y nunca aiteo. Marta, al contrario, revela claramente el pobre e indigno concepto que tení­a ella de la persona del Señor, al adscribirle †¦ aquel aiteo que El nunca se adscribe a sí­ mismo (Joh 11:22)” (Trench, Synonyms,¶ x1). Esta distinción deberí­a señalarse en los pasajes en que se utilizan ambos términos, incluso si no pueden traducirse adecuadamente al castellano. En Joh 16:23 “en aquel dí­a no me preguntaréis nada”, el verbo es erotao, en tanto que en la última parte del versí­culo, en la frase: “todo cuanto pidiereis al Padre”, el verbo es aiteo. La distinción queda patente, así­, al traducir el primero como “preguntar”, y el segundo como “pedir”; el significado de “preguntar” queda confirmado por el hecho de que los discí­pulos habí­an querido hacerle una pregunta (erotao, v. 19). Si el Espí­ritu Santo hubiera sido dado, habrí­a pasado el tiempo de hacerle preguntas al Señor. En Joh 14:14, donde no se trata de una pregunta, sino de una petición, se utiliza el verbo aiteo. Ambos verbos se encuentran en 1 Joh 5:16, en la frase “pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado no de muerte”, el verbo es aiteo; pero con respecto al pecado de muerte, en la frase “por el cual yo no digo que se pida”, el verbo es erotao. Posteriormente, la tendencia fue que el significado de erotao se aproximara al de aiteo. Véanse PREGUNTAR, ROGAR. Nota: En Mat 19:17, margen (RVR77), siguiendo los mss. más comúnmente aceptados, se traduce “¿Por qué me preguntas acerca de lo bueno?”; en TR aparece lego, llamar (véase LLAMAR, A, Nº 9). 3. apaiteo (ajpaitevw, 523), pedir devolución, demandar de vuelta (apo, desde, o de vuelta, y Nº 1). Se traduce “no pidas que devuelva” en Luk 6:30 (RV, VM: “no vuelvas a pedir”); en 12.20: “pedir” (RV: “vuelven a pedir”), en sentido impersonal (VM: “te será demandada”; lit., “reclamarán”).¶ Se utiliza con frecuencia en los papiros en el sentido de demandar, de entablar demandas. 4. exaiteomai (ejxaitevomai, 1809), forma intensiva del Nº 1 (ex, o ek, intensivo), se traduce “Satanás os ha pedido” (Luk 22:31).¶ Notas: (1) Para deomai, traducido “pidiéndonos” en 2Co 8:4, véase ROGAR; (2) eperotao, véase PREGUNTAR, se traduce “le pidieron” (Mat 16:1; RV: “pedí­an)”; (3) para kataseio, traducido con el verbo pedir en Act 19:33 “pedido silencio con la mano” (VM: “hizo señal”), véase SEí‘AL (HACER); (4) para paraiteomai, que aparece en los mss. más comúnmente aceptados en Mc 15.6, y traducido con el verbo pedir en todas las versiones en seguimiento de aiteo, que aparece en TR, véase ROGAR, etc.; (5) proseucomai, véase ORAR, A, Nº 2, se traduce “hemos de pedir” en Rom 8:26; “pida en oración” (Rom 14:13); “pido en oración” (Phi 1:9); (6) zeteo, véase BUSCAR, Nº 1, se traduce “pidiéndole” (Mc 8.11); v. 12: “pide”; véase también PROCURAR; (7) el verbo epizeteo es una forma intensificada del anterior, y se traduce “pide” en Mc 8.12, pasaje en el que aparece en TR, en lugar del anterior, que aparece en los mss. más comúnmente aceptados; véanse BUSCAR, Nº 4, DEMANDAR, Nº 6.

Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento