Pero tú, oh Jehovah, ten misericordia de mí; haz que me levante, y les daré su merecido.
ten misericordia de mí. Sal 57:1; Sal 109:21.
y les daré el pago. Sal 18:37-42; Sal 21:8-10; Sal 69:22-28; Sal 109:6-20; Luc 19:27.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
hazme levantar era la plegaria de David para sanar la enfermedad que lo había postrado en cama (v. Sal 41:3). En otro sentido, estas palabras anticipan la resurrección de Jesús (Sal 16:10, Sal 16:11; Sal 118:17, Sal 118:18).
no se huelgue: El del enemigo de David para destruir su vida era un indicador de la complacencia de Dios en la vida de David.
mi integridad: Estas palabras sugieren que es la persona justa la que está sufriendo en este salmo, no un pecador impenitente (Sal 26:1).
delante de ti para siempre: David ruega no sólo por una larga vida en la tierra (v. Sal 41:2), sino por la vida eterna en la presencia de Dios (Sal 23:6). Su esperanza final es glorificar y alabar a Dios en su presencia y por siempre.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
— su merecido: Frente a lo que ocurre en otros salmos (ver Sal 5:10; Sal 17:13 ss; Sal 28:4), es aquí el salmista, y no Dios, quien castigará a los rivales.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
s 1393 Sal 57:1
t 1394 Sal 18:37