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Comentario de Salmos 136:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Salmos 136:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Alabad a Jehovah, porque es bueno: ¡Porque para siempre es su misericordia!

(Título) Este Salmo es mas que nada una repetición del anterior, con adición del estribo, “porque para siempre es su misericordia” al final de cada verso; y sin duda fue compuesto en la misma ocasión. Evidentemente parece que fue un cántico antifonal; la primer parte del verso fue probablemente cantada por los levitas, y el estribo por le pueblo.

Alabad a Jehová. Sal 105:1; Sal 106:1; Sal 107:1; Sal 118:1; Sal 119:68; 2Cr 7:3, 2Cr 7:6; Esd 3:11; Jer 33:11.

porque para siempre es su misericordia. Sal 103:17; 1Cr 16:34, 1Cr 16:41; 2Cr 20:21; Luc 1:50; Jud 1:21.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Una exhortación a dar gracias a Dios por sus favores especiales, Sal 136:1-26.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Este es el salmo más puro de alabanza descriptiva. El líder en la adoración, tal vez un sacerdote, leería la primera parte de cada versículo. Entonces, el pueblo respondería con su alabanza centrada en la misericordia de Dios: «porque para siempre es su misericordia». Este salmo, conocido como el «Gran Hallel», se solía recitar en el Templo mientras se degollaba el cordero de Pascua. El «gran Hallel» incluye parte del salmo Sal 135:1-21 y los cánticos graduales (Sal 120:1-7; Sal 121:1-8; Sal 122:1-9; Sal 123:1-4; Sal 124:1-8; Sal 125:1-5; Sal 126:1-6; Sal 127:1-5; Sal 128:1-6; Sal 129:1-8; Sal 130:1-8; Sal 131:1-3; Sal 132:1-18; Sal 133:1-3; Sal 134:1-3). El patrón del salmo es:

(1) un llamado al pueblo para que alabe a Jehová (vv. Sal 136:1-3);

(2) alabanza a Jehová pues es el gran Creador (vv. Sal 136:4-9);

(3) alabanza a Jehová que es el gran Libertador (vv. Sal 136:10-22);

(4) alabanza a Jehová que recuerda a su pueblo para siempre (vv. Sal 136:23-25);

(5) un llamado de conclusión al pueblo para que alabe a Jehová (v. Sal 136:26).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Alabad significa «dar reconocimiento público»; es una de las principales palabras de alabanza en los salmos (Sal 35:18Sal 105:1Sal 122:4).

misericordia, que también puede traducirse como «amor leal», es el término más significativo que se usa en los salmos para describir el carácter de Dios. Su bondad es «para siempre»; es parte de su personalidad eterna.

Dios de los dioses: El poeta usa los superlativos hebreos para proclamar a Jehová como la deidad suprema.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

PORQUE PARA SIEMPRE ES SU MISERICORDIA. Este reiterado estribillo enseña que la misericordia y el amor de Dios son el fundamento de todas sus obras a favor de sus hijos y el origen de toda acción de gracias de ellos. Su misericordia incluye su fidelidad y su bondad.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

Salmo 136 (Vg 135): Canto de Acción de Gracias.
E ste salmo también tiene un aire litúrgico y se asemeja mucho al anterior por su contenido, aunque literariamente se distingue por la inserción de un estribillo en la segunda parte de cada versículo, lo que indica su carácter responsorial, cantado con alternanza de coros. Sabemos por Esd 3:11 y 2 Par 7:3-6 que en la organización del culto cantaban alternativamente los coros, declarando la bondad y longanimidad de Yahvé. Algunas veces intervenía todo el pueblo con la contestación Amén, Aleluya! Entre los judíos, este salmo era llamado “Gran Hallel,” en contraposición al simple “Hallel,” que comprendía los salmos 113-118; pero aquella denominación pasó a designar también el conjunto integrado por los salmos 135-136 y 120-136.
Podemos distinguir en este himno tres partes: a) Yahvé, Creador del universo (1-9); b) libertador del pueblo escogido (10-24); c) providencia sobre toda criatura (25-26). Como el salmo anterior, éste abunda en reminiscencias de otros salmos y pasajes bíblicos. Parece que en él se inspiró el autor de Eco 51:1-15 para componer su cántico. Algunos autores consideran el salmo 136 como una explicitación o adaptación coral del contenido del salmo 135.

Yahvé, creador de todas las cosas (1-9).
1 Alabad a Yahvé, porque es bueno, porque eterna es su piedad. 2 Alabad al Dios de los dioses, porque eterna es su piedad. 3 Alabad al Señor de los señores, porque eterna es su piedad. 4 Al que es único en hacer portentos, porque eterna es su piedad. 5 Al que hizo sabiamente los cielos, porque eterna es su piedad. 6 Al que afirmó la tierra sobre las aguas, porque eterna es su piedad. 7 Al que hizo los grandes luminares, porque eterna es su piedad; 8 el sol para dominar de día, porque eterna es su piedad; 9 la luna y las estrellas, para dominar de noche, porque es eterna su piedad.

El salmista inicia su himno responsorial invitando a reconocer la bondad divina y su soberanía sobre todo, incluso sobre los supuestos dioses de los otros pueblos, que para él no tienen vida propia. Su poder es omnímodo, y se manifestó en la obra de la creación. El canto sigue el relato de Gen 1: la formación de los cielos y de la tierra sobre las aguas; después destaca el mundo sideral: el son, la luna y las estrellas, que, lejos de ser divinidades, como creían los pueblos gentílicos, son unos instrumentos al servicio del hombre. Cada uno de ellos tiene su momento fijado para aparecer: el sol de día, la luna y las estrellas de noche. Y todo conforme a un plan divino previamente fijado conforme a su sabiduría.

Protección divina sobre Israel (10-24).
10 Al que hirió a los primogénitos de Egipto, porque es eterna su piedad. n Y sacó a Israel de en medio de ellos, porque es eterna su piedad. 12 Con mano fuerte y brazo tendido, porque eterna es su piedad. 13 Al que dividió en partes el mar Rojo, porque es eterna su piedad. 14 E hizo atravesar a Israel por medio de él, porque es eterna su piedad. 15 Y sumergió al faraón y a su ejército en el mar Rojo, porque eterna es su piedad. 16 Al que condujo a su pueblo por el desierto, porque eterna es su piedad. 17 Que hirió a grandes reyes, porque eterna es su piedad. 1S Y mató a reyes poderosos, porque eterna es su piedad: 19 a Seón, rey de los amorreos, porque es eterna su piedad; 20 y a Og, rey de Basan, porque es eterna su piedad; 21 cuyas tierras dio en heredad, porque es eterna su piedad, 22 en heredad a Israel, porque es eterna su piedad; 23 que en nuestra humillación se acordó de nosotros, porque es eterna su piedad; 24 y nos libró de nuestros opresores, porque es eterna su piedad.

Esta segunda sección del salmo está calcada sobre la segunda del salmo anterior, de la que es una simple adaptación litánica para ser cantado alternativamente con el pueblo.

La Providencia divina (25-26).
25 Que da pan a toda carne, porque eterna es su piedad. 26 Alabad al Dios del cielo, porque es eterna su piedad.

El v.25 parece fuera de lugar, pues la mención de la Providencia sobre todos los seres interrumpe bruscamente el himno, que canta la protección divina sobre Israel como pueblo 2. Parece que forma parte de una sección perdida en la que se cantaría la solicitud providente de Yahvé sobre todos los animales y sobre el hombre, al estilo del salmo 104. La composición termina invitando a alabar al Dios del cielo, expresión que sólo aparece aquí en el Salterio y en los libros de la época persa 3. Es una traducción de un título similar aplicado a los dioses de Persia.

1 Cf. Sal 106:48. – 2 Cf. 104:273; 145:15; 147:9. – 3 Cf. Esd 1:2; Neh 1:4; Neh 2:4; 2Cr 36:23; Jon 1:9; Dan 2:18.

Fuente: Biblia Comentada

él es bueno. Vea la nota sobre el Sal 135:3.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

Este salmo, sumamente semejante al Sal 135:1-21, pone fin al Gran Hallel. Cosa singular que no aparece en el resto de los salmos. El Sal 136:1-26 usa el estribillo antifonal «Porque para siempre es su misericordia» después de cada estrofa, quizá pronunciada por el pueblo en acción de respuesta en alabanza. Se desconocen el autor y la ocasión.

I. Llamamiento a la alabanza (Sal 136:1-3)

II. Causas para la alabanza (Sal 136:4-22)

A. La creación de Dios (Sal 136:4-9)

B. La liberación de Dios (Sal 136:10-15)

C. La solicitud y el don de Dios (Sal 136:16-22)

III. La alabanza final (Sal 136:23-26)

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

Salmo 136 (135): Himno de alabanza que aclama a Dios por su obra creadora y su actuación en la historia de Israel como expresiones de su amor y bondad. Es el único salmo que adopta la forma de letanía al repetir el mismo estribillo en cada uno de sus versos.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Sal 106:1.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

— por su bondad: Como en el salmo anterior (Sal 135:3; Sal 135:5), la invitación a la alabanza está motivada por la bondad y grandeza del Dios de Israel que es superior a todos los dioses.

— es eterno su amor: Esta fórmula litánica, bien conocida en el AT, era posiblemente recitada por todo el pueblo.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Salmos 135, 136. El Pueblo Escogido Del señor

Es apropiado que estos Salmos se cuenten entre los Sal. 120-134 en «Alabanza del Peregrino». ¿Puede haber algo más adecuado para los peregrinos que acaban de llegar que un canto que recuerda los pasos del gran peregrinaje fundamental de Egipto a Canaán, alegrándose en los beneficios recibidos de la elección divina (135:4), y otro canto (136) que, usando el mismo material en una gran antífona, enumera los mismos atributos y poderes del Señor y los mismos beneficios otorgados a su pueblo atribuyéndolos a una realidad permanente dentro de su naturaleza, su misericordia que dura para siempre?

Salmo 136. Israel escogido: su raíz es el Señor

La realidad suprema no es la posición del Señor (1-3), ni su obra en la creación (4-9) y la historia (10-22), ni siquiera su bondad hacia Israel (23-25) sino quién es él mismo, aquel cuya misericordia … es para siempre. Todo vuelve a este punto de énfasis y reiteración. Su posición de por sí causaría asombro; sus obras en la creación, maravilla; su poder evidente en la historia, sumisión; su bondad, gratitud. Pero cuando vemos que todas estas grandezas emanan de un amor inmutable que se deleita en manifestar su poder en actos de misericordia y providencia, entonces el Señor realmente es reconocido con maravillado asombro, amor y alabanza. ¿Qué podría significar para nosotros el hecho de que sea bueno, supremamente exaltado, el Creador, el Señor de la historia, el benefactor de la humanidad en el pasado, si no estuviera también el amor inmutable que nos trae también a nosotros al calor del abrazo y el cuidado de semejante Dios?

Por lo tanto, nosotros, con nuestros hermanos y hermanas peregrinos de la iglesia del AT, podemos analizar nuestro peregrinaje fundamental de Egipto a Canaán y cantar con ellos a cada paso que para siempre es su misericordia. No hay poder que lo resista (1-3; Rom. 8:31-39; 1 Cor. 8:5, 6; Ef. 1:19-22); estamos seguros porque el mundo en que vivimos es el mundo de él (4-9); también nosotros experimentamos la redención (10-15; Juan 1:29; 1 Cor. 5:7; 1 Ped. 1:18-21), gozamos de su provisión sea cual fuere nuestra circunstancia (16; Fil. 4:12, 13, 19), recibimos nuestra herencia por medio de su victoria (17-22; Col. 1:12-14), nos maravillamos de que se dignara elegirnos a nosotros (23, 24; 1 Cor. 1:26-31) y comemos nuestro pan cotidiano, viendo con gratitud la mano que nos alimenta (25), la misericordia que es para siempre.

Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno

136.1ss A través de este salmo se repite la frase: «Porque para siempre es su misericordia». Este salmo quizás fue una lectura de respuesta, la congregación decía estas palabras al unísono después de cada oración. La repetición hizo que esta lección importante penetrara en ellos. El amor de Dios incluye aspectos de amor, bondad, misericordia y fidelidad. Nunca tendremos que preocuparnos que Dios se quede sin amor debido a que su bondad amorosa fluye de una fuente que nunca se apaga.

Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir

NOTAS

(1) O: “amor leal”.

REFERENCIAS CRUZADAS

a 4942 Sal 106:1; Sal 107:1; Luc 18:19

b 4943 2Cr 7:3

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

Salmo 136 Este Salmo es un himno de alabanza a Dios por su misericordia eterna a Israel. En la tradición judía este Salmo se reconoce como el gran « Hallel» (expresión de alabanza) tal vez porque se repite 26 veces el refrán porque para siempre es su misericordia mientras en Sal 113-118 (el hallel egipcio) se repite sólo cinco veces. El Salmo consiste de un llamamiento introductorio a la alabanza (vers. 1-3), una sección larga en medio que da la esencia de la alabanza (vers. 4-22) y una conclusión que incluye un llamamiento a la alabanza (vers. 23-26). La sección del medio consiste de dos estrofas que alaban a Dios por sus maravillas en la creación (vers. 4-9); primero en general [vers. 4-6] y luego por sus maravillas específicas en los cielos [vers. 7-9] y por su misericordia en la historia de Israel (vers. 10-22). A su vez, la última sección se organiza en dos partes de seis vers. cada una. La primera celebra las actividades de Dios cuando formó a Israel al sacar a la nación de en medio de Egipto (vers. 10-12) y del mar Rojo (vers. 13-15). Los próximos seis vers. celebran el tiempo cuando El conquistó los grandes reyes y dio sus tierras a Israel por herencia (vers. 17-22). El vers. 16 celebra la preservación de Israel en el desierto. La declaración que se acordó de nosotros en nuestra humillación…y nos rescató de nuestros adversarios (vers. 23, 24) explica el sentido de misericordia . Las divisiones más cortas del Salmo están señaladas por la frase Al que (vers. 7, 10, 16, 17) según la forma fijada en la repetición triple de vers. 4-6. La forma hebrea de El que que presenta (vers. 23) es única y separa los vers. concluyentes.

Fuente: La Biblia de las Américas

Separado por un estribillo que exalta el amor fiel de Jehová (heb., hesed, véase nota en Ose 2:19), este himno comienza con un llamado a la alabanza (vv. Sal 136:1-3) debido a las grandes obras de Dios en la creación (vv. Sal 136:4-9), Sus actos misericordiosos en la historia de Israel (vv. Sal 136:10-22) y Su misericordia para con todos (vv. Sal 136:23-25), y concluye con otro llamado a la alabanza (v. Sal 136:26). Este Salmo probablemente era leído de forma antifonal en la adoración en el Templo. En la liturgia judía se le conoce como «el Gran Hallel» y se recitaba en la ocasión de la cena de la Pascua después el «Hallel Menor» (véase nota en el Sal 113:1-9).

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

Este salmo se abre de la misma manera que los Sal 106:1-48; Sal 107:1-43 y Sal 118:1-29. Pero lo peculiar de este es que la 2a parte de cada v. es igual en cada uno de sus 26 vv. Por su estructura, se nota que era cantado de forma antifonal: el estribillo lo cantaban los levitas o la congregación.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

Este salmo se abre de la misma manera que los salmos 106, 107 y 118. Pero lo peculiar de éste es que la 2ª. parte de cada v. es igual en cada uno de sus 26 vv. Por su estructura, se nota que era cantado de forma antifonal, el estribillo lo cantaban los levitas o la congregación.

Fuente: La Biblia Textual III Edición