Todo el duro trabajo del hombre es para su boca; y con todo eso, su alma no se sacia.
Todo el trabajo del hombre. Gén 3:17-19; Pro 16:26; Mat 6:25; Jua 6:27; 1Ti 6:6-8.
su deseo, o su apetito no se sacia. Ecl 6:3; Ecl 5:10; Luc 12:19.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
La palabra hebrea para deseo puede también traducirse por apetito. Si se entiende como paralela a la palabra boca de la primera línea, apetito podría resultar apropiado en este contexto. No obstante, la traducción deseo se ajusta bien al argumento del don que se mantiene separado de la facultad de gozar del don (Ecl 5:10).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
La falta de satisfacción del alma procede de trabajar solo por lo que se consume (v. Ecl 6:7), de ver poca diferencia al final entre los sabios y los necios (v. Ecl 6:8), de no saber el futuro (v. Ecl 6:9), de darse cuenta de que solo Dios lo controla todo (v. Ecl 6:10), y de que el verdadero entendimiento del presente y del futuro está limitado (vv. Ecl 6:11-12).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Ecl 6:7-12 : Entre reflexiones sobre temas conocidos o aludidos apunta uno de los ejes de la sección: el ser humano desamparado y desconcertado ante un futuro ignoto e incomprensible.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
Deseo insaciable. El trabajo de una persona no es por puro placer sino para ganarse la vida con la esperanza de hallar satisfacción en ella. Pero su alma no se sacia (la referencia es a más que lo físico). 8 Dos preguntas esperan una respuesta negativa. Ni la sabiduría ni el hombre pobre recomendándose a sí mismo mejoran su suerte. El v. 9 puede ser aconsejador, y estar instando al conten tamiento. Pero a la luz de 9b, el pensamiento probablemente es que el pobre, aunque tenga mucho para ver, sólo experimenta un deseo errátil que añade a la frustración.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) Lit.: “el hombre terrestre”. Heb.: ha·’a·dhám.
REFERENCIAS CRUZADAS
ñ 249 Gén 3:19; Pro 16:26
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
su apetito no se sacia. El pan solo no satisface las necesidades básicas del hombre (cp. Dt 8:3; Mt 4:4).
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit., su alma no se llena