Comentario de Isaías 25:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Se dirá en aquel día: “¡He aquí, éste es nuestro Dios! En él hemos esperado, y él nos salvará: ¡Este es Jehovah! En él hemos esperado. ¡Gocémonos y alegrémonos en su salvación!”
Y se dirá en aquel día. Isa 12:1; Sof 3:14-20; Apo 1:7; Apo 19:1-7.
éste es nuestro Dios. Isa 8:17; Isa 26:8, Isa 26:9; Isa 30:18, Isa 30:19; Gén 49:18; Sal 27:14; Sal 37:5-7; Sal 62:1, Sal 62:2, Sal 62:5-7; Miq 7:7; Luc 2:25, Luc 2:28-30; Rom 8:23-25; Tit 2:13; 2Pe 3:12; Apo 22:20.
nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación. Isa 12:2-6; Isa 66:10-14; Sal 9:14; Sal 20:5; Sal 21:1; Sal 95:1; Sal 100:1; Zac 9:9; Rom 5:2, Rom 5:3; Flp 3:1, Flp 3:3; 1Pe 1:6, 1Pe 1:8.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Nótese el cambio de mi Dios (v. Isa 25:1) a nuestro Dios. Este versículo es un canción fiel de alabanzas a Jehová.
nos gozaremos y nos alegraremos puede reformularse como «alegrarse increíblemente». La salvación es la liberación de la represión, ya sea por caer en el pozo de la desesperación (Sal 40:2), o por la represión del pecado y la muerte.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
LE HEMOS ESPERADO. Isaías describe a los fieles del reino de Dios como los que han esperado al Señor. Todos los creyentes debieran estar a la expectativa de la venida del Señor y del cumplimiento de todas sus promesas (véanse Luc 2:25, nota; 1Co 1:7; Tit 2:13).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
lo hemos esperado. Esperar a Dios requiere de confianza absoluta en Él y no impacientarse si su «horario» para la salvación final es diferente al nuestro (cp. Isa 26:8; Isa 33:2; Isa 40:31).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
El final del orgullo. 9 Este versículo pertenece tanto al párrafo anterior como a este mismo; pero tal vez la conjunción porque (v. 10) es la que une más estrechamente estos versículos. Hay una insinuación de tensa expectativa más que de mera pasividad en el verbo traducido hemos esperado; cf. 26:8; 33:2; 40:31; 49:23b.
10 Moab, sorprendentemente local en una escena tan universal (cf. “Edom” en 34:5) se la exhibe como la personificación del orgullo (v. 11b; cf. 16:16), quizá especialmente el orgullo de gente pequeña. De la misma manera el muladar expresa la indignidad tanto como lo inexorable del juicio para los orgullosos; cf. la secuencia en 14:14, 15, 19.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) “Nuestro Dios.” Heb.: ’Elo·héh·nu.
(2) Lit.: “en la salvación de él”.
REFERENCIAS CRUZADAS
w 1063 Deu 32:3; Isa 25:1; Rev 19:1
x 1064 Sal 27:14; Sal 37:34; Sal 146:5
y 1065 Gén 49:18; Pro 20:22; Luc 2:30
z 1066 Éxo 6:2; Sal 97:5; Sof 3:12
a 1067 Sal 20:5; Sal 21:1; Sal 62:1; Sal 95:1; Miq 7:7; Sof 3:14
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Se sigue LXX → §194