Comentario de Éxodo 3:21 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

También daré a este pueblo gracia ante los ojos de los egipcios, de modo que cuando salgáis no os vayáis con las manos vacías.

Éxo 11:3; Éxo 12:36; Gén 39:21; Neh 1:11; Sal 106:46; Pro 16:7; Hch 7:10.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Dios humillaría tanto a su líder Faraón que la gente común de Egipto llegaría a estar dispuesta favorablemente hacia Israel. Los israelitas, que habían sido esclavos en Egipto, no se iban a ir con las manos vacías. Ellos despojarían a los Egipcios simplemente pidiéndoles sus tesoros (sobre el cumplimiento de la profecía, lea Éxo 11:2; Éxo 12:35, Éxo 12:36). Más tarde, los israelitas dieron esos mismos tesoros a Dios como ofrenda para el tabernáculo (cap. Éxo 35:1-35). De esta forma Dios enriqueció un pueblo esclavo de modo que a su vez ellos pudieron devolverle sus riquezas con acción de gracias.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Halle gracia: Otras traducciones dicen: «Se ganen la buena voluntad» (DHH), «se gane el favor» (NBE), «se gane la simpatía» (NVI). TLA dice: «Les hagan muchos regalos», dando el sentido a partir de una lectura dinámica del texto original. Lo importante al abordar esta expresión es que el traductor transmita el sentido de que Dios hará que los egipcios vean con buenos ojos a los israelitas. Se puede utilizar la idea de “tener prestigio” o “ser respetado” (Hosborn-Hatton), de modo que se podría traducir: “Los egipcios los miren con respeto”.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

Éxo 11:2-3; Éxo 12:35-36; Gén 15:14.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

n 112 Éxo 11:2; Éxo 12:35

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

al pueblo… TM añade este. Se sigue LXX → §194.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

despojaréis…Éxo 12:35-36.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

g Éxo_12:35-36.

Fuente: La Biblia Textual III Edición

[o] LOS EGIPCIOS DESPOJADOS No olvidemos que este párrafo ha sido escrito muchos siglos antes que el sermón en el Monte. Despojar al enemigo, ya fuera por la fuerza o la astucia parecía demostrar que Dios estaba devolviendo el honor a su pueblo humillado: Dios lo bendecía entregándole las pertenencias de sus opresores. Este detalle proviene a lo mejor de las tradiciones que inspiraron el relato de la décima plaga y se deben a algunos grupos que fueron expulsados con ocasión de una plaga. Se culpaba entonces con mucha facilidad a los extranjeros por cualquier plaga que ocurriera: seguramente habían alterado el orden de la naturaleza. Había entonces un tal deseo de verlos irse que se hacía cualquier cosa para apresurar su partida..

Fuente: Notas de la Biblia Latinoamericana