Comentario de Miqueas 4:13 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
¡Levántate y trilla, oh hija de Sion! Haré que tu cuerno sea de hierro y tus uñas, de bronce. Desmenuzarás a muchos pueblos, y consagrarás a Jehovah el botín de ellos, y sus riquezas al Señor de toda la tierra.
Levántate y trilla. Isa 41:15, Isa 41:16; Jer 51:33.
y tus uñas. Deu 33:25; Isa 5:28.
y desmenuzarás a muchos pueblos. Miq 5:8-15; Dan 2:44; Zac 9:13-15; Apo 2:26, Apo 2:27.
y consagrarás a Jehová su botín. Jos 6:19; 2Sa 8:10, 2Sa 8:11; Sal 68:29; Sal 72:10; Isa 18:7; Isa 23:18; Isa 60:6-9; Rom 15:25-28; 1Co 16:2; Apo 21:24-26.
y sus riquezas al Señor. Zac 4:14; Zac 6:5.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Levántate y trilla: Jehová reunirá a las naciones como gavillas en la era (v. Miq 4:12). Esta fue una manera de hablar de la victoria final sobre todos los enemigos de Israel.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
cuerno como de hierro … uñas de bronce. El lenguaje simbólico de un animal con partes de metal expresa que el Señor anticipa la llegada de un día en el que Israel derrotará de forma permanente a sus enemigos.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
— cuernos… pezuñas: Imágenes para describir a Jerusalén como una bestia poderosa que aplasta y tritura a sus enemigos.
— consagrarás al Señor su botín: Ver segunda nota a Jos 2:10.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) “Al Señor [verdadero].” Ca(heb.): לָאֲדוֹן (la·’Adhóhn); Leningrado B 19A(heb.): לַאֲדוֹן (la·’Adhóhn); gr.: Ky·rí·oi; sir.: leMa·ra’; lat.: Dó·mi·no. Véase Ap. 1H.
REFERENCIAS CRUZADAS
m 152 Isa 41:15; Jer 51:33
n 153 Zac 9:13
ñ 154 Jos 6:19; 2Sa 8:11; Isa 18:7; Isa 23:18
o 155 Zac 4:14; Zac 6:5
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
La venganza del pueblo de Dios sobre sus enemigos es el medio que Dios usaría para llevar a cabo el juicio sobre ellos (Zac 12:6; 14:4), pues estas naciones habían sido arrogantes e instrumentos abusivos en el castigo de Dios a su pueblo (Is 10:5– 7, 12– 19). La frase, Señor de toda la tierra es una expresión usada en el contexto de victorias militares y del juicio de Dios (Jos 3:11, 13; Sal 97:5; Zac 4:14; 6:5).