Comentario de Zacarías 8:7 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
“Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: ‘He aquí, yo salvaré a mi pueblo de la tierra del oriente y de la tierra del poniente.
yo salvo a mi pueblo. Sal 107:2, Sal 107:3; Isa 11:11-16; Isa 27:12, Isa 27:13; Isa 43:5, Isa 43:6; Isa 49:12; Isa 59:19; Isa 66:19, Isa 66:20; Jer 31:8; Eze 37:19-25; Ose 11:10, Ose 11:11; Amó 9:14, Amó 9:15; Mal 1:11; Rom 11:25-27.
pueblo de la tierra del oriente. Sal 50:1; Sal 113:3.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Los términos oriente y donde se pone el sol representan todas las partes de la tierra. La expresión mi pueblo y seré a ellos por Dios (Zac 2:11) está presente en las descripciones de la relación del pacto de Dios con su pueblo (Éxo 19:5; Éxo 29:45; Lev 26:12; Ose 2:23). Con estas palabras, Zacarías anticipa una renovación del pacto de Dios con su pueblo (Jer 31:31-34).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
YO SALVO A MI PUEBLO. La restauración después del exilio babilónico fue sólo del oriente. De modo que esta sección se refiere a una futura restauración del oriente y del occidente, es decir, de toda la tierra (cf. Isa 43:5-6). Dios será de veras el Dios de su pueblo, y participarán de su justicia por medio de Cristo.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
del oriente … donde se pone el sol. El contexto asegura que este retorno alude a una reagrupación a escala mundial en la segunda venida de Cristo. El regreso de Babilonia no puede ser el cumplimiento de esta promesa, porque la nación de Israel no fue esparcida hacia el O («donde se pone el sol») hasta la diáspora iniciada por los romanos en el primer siglo de nuestra era.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
El pacto de la promesa renovado. Cuando Judá fue al exilio a Babilonia muchos huyeron a países vecinos. Ellos también podrían regresar a Jerusalén. Es difícil darnos cuenta de lo importante que era Jerusalén para el pueblo de Israel y Judá, porque sabemos que podemos adorar a Dios en cualquier parte del mundo. Aun aquellos que enfatizan mucho a Roma, a Canterbury, o a Ginebra no consideran dichas ciudades de igual manera como los judíos a Jerusalén. Era el único lugar donde se podían ofrecer sacrificios, era el único templo autorizado como casa de Dios, una señal de que el Señor estaba en medio de su pueblo. Así que, la restauración del templo en Jerusalén significaba la confirmación de las promesas del pacto de Dios (véase sobre 2:10-12).
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
REFERENCIAS CRUZADAS
m 211 Sal 107:3
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Salvaré…sean fuertes vuestras manos. Esta oferta de restauración está acompañada de una demanda de obediencia.
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit., de la salida del sol