PARA VIVIRLO

Ser desleal en el matrimonio

Mientras más aumenta el porcentaje de divorcios en una nación, más mira Dios la situación como un escándalo nacional. Ese parece ser el sentido de las palabras de Malaquías con respecto al divorcio (Mal 2:14-16). Aparentemente, en Judá después del cautiverio, una cantidad considerable de esposos estaba «portándose deslealmente» al divorciarse de sus mujeres. Esta traición involucraba una retractación de sus votos matrimoniales, pero también representaba una traición contra el Señor.

¿Qué fue lo que provocó este súbito aumento en la tasa de divorcios? El libro de Esdras y el de Nehemías relatan de esos dos líderes que desafiaron a los hombres de la tierra a «apartar» a aquellas mujeres que habían tomado por esposas de entre los cananeos y otros pueblos de la tierra (Esd 9:1-15; Esd 10:1-44; Neh 13:23-27). Estos divorcios eran vistos como un medio de purificación nacional y como un regreso al pacto.

Sin embargo, ¿es posible que esta política de disolver matrimonios mixtos ayudara a crear una actitud cínica ante el divorcio? ¿Podría esta haber contribuido a un clima en el cual el divorcio se volviera una alternativa fácil, incluso cuando ambos en la pareja fueran judíos, de lo cual también hallamos evidencia en los días de Jesús (Mat 19:3-9)?

Malaquías, un contemporáneo de Esdras y de Nehemías, habló claramente acerca de la actitud de Dios, quien «aborrece el repudio» (Mal 2:16). El profeta advirtió al pueblo: «Guardaos en vuestro espíritu». Una actitud ligera hacia el divorcio era un síntoma del problema en la actitud del corazón de la persona hacia el Señor. Lo importante era la lealtad hacia Él.