Comentario de Mateo 3:17 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Y he aquí, una voz de los cielos decía: “Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.”
3:17 Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia. — En otra ocasión la voz del cielo dijo la misma cosa (Mat 17:5) y luego agregó: «a él oíd». No se puede negar que la obediencia de Jesús en el bautismo era un evento muy importante, porque los cielos abrieron, el Espíritu Santo descendió y venía sobre Cristo, y una voz de los cielos anunció, «Este es mi Hijo amado en quien me he complacido» (LBLA). Si Jesús no se hubiera sujetado a la «justicia de Dios», siendo bautizado de Juan, ¿habría acontecido este fenómeno? Ahora cuando alguno es bautizado, los cielos no se abrirán, ni descenderá el Espíritu Santo, ni habrá voz de los cielos, pero algo sumamente importante sucede: el bautizado recibe el perdón de los pecados, es recibido por Dios como hijo, se añade a la iglesia (Hch 2:47), es bautizado en el un cuerpo (1Co 12:13), es trasladado al reino de Cristo (Col 1:13).Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
hubo una voz de los cielos. Jua 5:37; Jua 12:28-30; Apo 14:2.
Este es mi Hijo amado. Mat 12:18; Mat 17:5; Sal 2:7; Isa 42:1, Isa 42:21; Mar 1:11; Mar 9:7; Luc 3:22; Luc 9:35; Efe 1:6; Col 1:13; 2Pe 1:17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
mi Hijo amado, en quien tengo complacencia. Este importante pronunciamiento combina el lenguaje usado en Sal 2:7 e Isa 42:1, profecías muy bien conocidas por aquellos que tuvieron expectativas mesiánicas.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
3:17 Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia. — En otra ocasión la voz del cielo dijo la misma cosa (Mat 17:5) y luego agregó: «a él oíd». No se puede negar que la obediencia de Jesús en el bautismo era un evento muy importante, porque los cielos abrieron, el Espíritu Santo descendió y venía sobre Cristo, y una voz de los cielos anunció, «Este es mi Hijo amado en quien me he complacido» (LBLA). Si Jesús no se hubiera sujetado a la «justicia de Dios», siendo bautizado de Juan, ¿habría acontecido este fenómeno? Ahora cuando alguno es bautizado, los cielos no se abrirán, ni descenderá el Espíritu Santo, ni habrá voz de los cielos, pero algo sumamente importante sucede: el bautizado recibe el perdón de los pecados, es recibido por Dios como hijo, se añade a la iglesia (Hch 2:47), es bautizado en el un cuerpo (1Co 12:13), es trasladado al reino de Cristo (Col 1:13).
Fuente: Notas Reeves-Partain
Mat 17:5 y par; 2Pe 1:17; (ver Isa 42:1-4; Sal 2:7).
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
h 110 Jua 12:28
i 111 Gén 22:2; Sal 2:7; Luc 9:35
j 112 Mat 17:5; Luc 3:22
k 113 Isa 42:1; Mat 12:18; 2Pe 1:17
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
mi Hijo amado…complacido. Estas palabras enfatizan la relación exclusiva de Jesús como Hijo (cp. 1:37; Sal 2:7; Is 42:1), su ministerio como el Mesías davídico (cp. 1:32), y su relación especial con el Padre (cp. 2:49). También lo relaciona con el siervo sufriente de Isaías 49:6.
Fuente: La Biblia de las Américas
17 (1) El descenso del Espíritu era el ungimiento de Cristo, mientras que el hablar del Padre atestiguaba que Cristo es el Hijo amado. Este es un cuadro de la Trinidad Divina: el Hijo subió del agua; el Espíritu descendió sobre el Hijo; y el Padre habló del Hijo. Esto demuestra que el Padre, el Hijo y el Espíritu existen simultáneamente, lo cual tiene como fin la realización de la economía de Dios.
17 (a) Mat_17:5 ; 2Pe_1:17 ; Jua_12:28
17 (b) Mat_17:5 ; Mar_9:7 ; Luc_9:35
17 (c) Isa_42:1 ; Mat_12:18
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
el amado… → Gén 22:2; Isa 42:1; Mat 12:18; Mat 17:5; Mar 9:7; Luc 9:35.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R372 El adjetivo verbal ἀγαπητός tiene la idea de perfección: amado.
M7 El verbo aoristo εὐδόκησα significa: yo apruebo (es decir, estoy complacido con; se refiere a una reacción inmediata; comp. 2Pe 1:17).
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., mi Hijo, el Amado
Fuente: La Biblia de las Américas
g Isa 42:1; Mat 12:18; Mat 17:5; Mar 9:7; Luc 9:35.