Pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
SI NO PERDONÁIS. Aquí Jesús pone énfasis en que el creyente debe estar dispuesto a perdonar las ofensas de los demás. Si no perdona al ofensor arrepentido, Dios no lo perdonará a él y sus oraciones no tendrán ningún efecto. Ese es un principio importante por el cual Dios perdona (Mat 18:35; Mar 11:26; Luc 11:4.)
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas. Esto no quiere decir que Dios descuenta un poco de justificación de aquellos que ya han recibido el perdón gratuito que dio a todos los creyentes. Esta clase de perdón, permanente y completa liberación de la culpabilidad y el castigo eterno por el pecado, pertenece a todos los que están en Cristo (cp. Jua 5:24; Rom 8:1; Efe 1:7). Las Escrituras también enseñan que Dios castiga a sus hijos desobedientes (Heb 12:5-7). Los creyentes deben confesar sus pecados para obtener una limpieza diaria (1Jn 1:9). Este tipo de perdón es una simple limpieza de la deshonra que trae el pecado y no una repetición de la limpieza general de la corrupción del pecado que viene con la justificación. Más que un baño completo es un lavado de pies (cp. Jua 13:10). Esta clase de perdón es la que Dios amenaza retener a los cristianos que rehúsan perdonar a otros (cp. Mat 18:23-35).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
REFERENCIAS CRUZADAS
u 259 Mat 18:35; Stg 2:13
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
15 (a) Mat_18:35
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
perdonará… M↓ añaden vuestras ofensas → Mar 11:25.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
M i añaden sus ofensas.
6.15 g Mar 11:25-26.