Comentario de Mateo 8:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Porque yo también soy un hombre bajo autoridad y tengo soldados bajo mi mando. Si digo a éste: “Vé,” él va; si digo al otro: “Ven,” él viene; y si digo a mi siervo: “Haz esto,” él lo hace.
8:9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a éste: Vé, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.— El entendía que sus superiores tenían el derecho de darle órdenes, esperando la obediencia, y que de la misma manera él tenía la autoridad para dar órdenes a sus inferiores y le deberían obedecer. El conocía la autoridad, y la reconocía en Cristo. Estaba seguro que Jesús podía mandar aun a la enfermedad de su siervo y que su orden sería obedecida; es decir, si Jesús dice a una enfermedad “vé”, la enfermedad “va”. Tenía mucha razón, pues Jesús podía mandar enfermedades, demonios, vientos y olas, y aun a los muertos. Este centurión excepcional no sólo tenía un concepto correcto de sí mismo, sino también tenía un concepto muy correcto de Jesús. En El veía autoridad, poder y majestad. Al mismo tiempo veía a un Señor poderoso que era accesible al pueblo; es decir, cualquier podía acercarse a El con sus peticiones, dudas e inquietudes. Jesús demostraba esto repetidas veces durante su vida aquí en la tierra.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Ve, y va. Job 38:34, Job 38:35; Sal 107:25-29; Sal 119:91; Sal 148:8; Jer 47:6, Jer 47:7; Eze 14:17-21; Mar 4:39-41; Luc 4:35, Luc 4:36, Luc 4:39; Luc 7:8.
Haz esto, y lo hace. Efe 6:5, Efe 6:6; Col 3:22; Tit 2:9.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
8:9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a éste: Vé, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.- El entendía que sus superiores tenían el derecho de darle órdenes, esperando la obediencia, y que de la misma manera él tenía la autoridad para dar órdenes a sus inferiores y le deberían obedecer. El conocía la autoridad, y la reconocía en Cristo. Estaba seguro que Jesús podía mandar aun a la enfermedad de su siervo y que su orden sería obedecida; es decir, si Jesús dice a una enfermedad “vé”, la enfermedad “va”. Tenía mucha razón, pues Jesús podía mandar enfermedades, demonios, vientos y olas, y aun a los muertos.
Este centurión excepcional no sólo tenía un concepto correcto de sí mismo, sino también tenía un concepto muy correcto de Jesús. En El veía autoridad, poder y majestad. Al mismo tiempo veía a un Señor poderoso que era accesible al pueblo; es decir, cualquier podía acercarse a El con sus peticiones, dudas e inquietudes. Jesús demostraba esto repetidas veces durante su vida aquí en la tierra.
“Haz esto”. La gente que no obedece a Cristo (no obedece al evangelio) no tiene fe en Cristo. El centurión muestra claramente la relación entre la fe verdadera, la autoridad de Cristo y la sumisión a El. Bien sabía que Jesucristo tenía autoridad para mandar y que cuando El dice “haz esto”, es necesario obedecerle. Heb 5:8, “Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; 9 y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen”.
Fuente: Notas Reeves-Partain
REFERENCIAS CRUZADAS
h 331 Hch 10:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
9 (1) El centurión, un gentil, reconoció la autoridad del Salvador real y se dio cuenta de que Su palabra tenía potestad para sanar. Por lo tanto creyó, no sólo en el Salvador real, sino también en Su palabra, y le pidió que no fuera personalmente, sino que sólo diera la palabra. Esta era una fe más fuerte, y el Señor se maravilló de ella (v.10).
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
hombre bajo autoridad. Si un oficial de inferior categoría puede dar órdenes, ciertamente lo podrá Cristo, que posee toda autoridad.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
BD336(1) El aoristo de imperativo πορεύθητι significa: vé, mientras que el presente de imperativo ἔρχου puede significar: ven conmigo.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., teniendo
Lit., debajo de mí