Biblia

Comentario de Juan 9:28 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Juan 9:28 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Entonces le ultrajaron y dijeron: —¡Tú eres discípulo de él! ¡Pero nosotros somos discípulos de Moisés!

9:28 Y le injuriaron, — Hch 23:4; 1Co 4:12; 1Pe 2:23. Puesto que no podían resistir su sabiduría y que no querían aceptar la verdad, les quedaba solamente una alternativa: injuriarle (Mat 5:11). Sus palabras sencillas y directas dieron en el blanco, dejando derrotados a los judíos, y ellos

— muy irritados, enojados y amargados — querían avergonzarlo.

— y dijeron: Tú eres su discípulo (Literalmente, tú eres discípulo de ese); — ni siquiera querían pronunciar el nombre de Jesús. Para ellos cualquiera que hablara favorablemente de Jesús era su discípulo.

— pero nosotros, discípulos de Moisés somos. — Si este hombre hubiera dejado a Moisés para escuchar a otro profeta, habría sido un apóstata, pero Moisés escribió acerca de este Profeta (Deu 18:15-19) (JWM). Como ellos se jactaban de ser descendientes de Abraham, también se jactaban de ser discípulos (seguidores) de Moisés. Según el concepto de ellos había rivalidad entre Moisés y Jesús, pero véase Hch 3:22-23.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

Y le injuriaron, o insultaron. Jua 9:34; Jua 7:47-52; Isa 51:7; Mat 5:11; Mat 27:39; 1Co 4:12; 1Co 6:10; 1Pe 2:23.

pero nosotros discípulos de Moisés somos. Jua 5:45-47; Jua 7:19; Hch 6:11-14; Rom 2:17.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Tú eres su discípulo: El hombre sanado no había dicho ser discípulo de Jesús. Sólo preguntó a los líderes judíos si estaban interesados en este caso porque querían hacerse discípulos de Jesús (v. Jua 9:27).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Tú eres su discípulo; pero nosotros, discípulos de Moisés somos. En este punto, la reunión degeneró en una batalla campal de gritos e insultos. La perspicacia del hombre sanado había expuesto el sesgo injustificado de sus inquisidores. En lo que competía a las autoridades, el conflicto entre Jesús y Moisés era irreconciliable. Si el hombre sanado defendía a Jesús, esa defensa solo podía significar que era un discípulo de Jesús.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

9:28 Y le injuriaron, — Hch 23:4; 1Co 4:12; 1Pe 2:23. Puesto que no podían resistir su sabiduría y que no querían aceptar la verdad, les quedaba solamente una alternativa: injuriarle (Mat 5:11). Sus palabras sencillas y directas dieron en el blanco, dejando derrotados a los judíos, y ellos — muy irritados, enojados y amargados — querían avergonzarlo.
— y dijeron: Tú eres su discípulo (Literalmente, tú eres discípulo de ese); — ni siquiera querían pronunciar el nombre de Jesús. Para ellos cualquiera que hablara favorablemente de Jesús era su discípulo.
— pero nosotros, discípulos de Moisés somos. — Si este hombre hubiera dejado a Moisés para escuchar a otro profeta, habría sido un apóstata, pero Moisés escribió acerca de este Profeta (Deu 18:15-19) (JWM). Como ellos se jactaban de ser descendientes de Abraham, también se jactaban de ser discípulos (seguidores) de Moisés. Según el concepto de ellos había rivalidad entre Moisés y Jesús, pero véase Hch 3:22-23.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Entonces lo insultaron. El verbo que expresa la acción de las autoridades indica una actitud abusiva, fuertemente violenta con palabras. Se puede buscar equivalencias como: “Y le expresaron toda clase de insultos” o “Le dijeron palabrotas ofensivas gritando: ¡Tú eres discípulo de ese! ¡Nosotros somos sólo discípulos de Moisés!”, «Seguidor de ese hombre lo serás tú. Nosotros somos seguidores de Moisés» (TLA). En ciertos contextos quizás la palabra discípulo no exprese el sentido de la controversia aquí. Por eso se puede buscar otra lectura como: “Tú eres el que obedece todo lo que ese individuo te dice. ¡Nosotros sólo obedecemos lo que Moisés nos dice!”.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

somos discípulos de Moisés. Véase coment. en 1:17. Los fariseos no solamente honraban los libros de Moisés, sino también las tradiciones orales que según ellos, provenían de Moisés.

Fuente: La Biblia de las Américas

R707 Un gesto también pudo haber acompañado la observación de los fariseos (σὺ μαθητὴς εἶ ἐκείνου; la idea de desprecio es evidente; comp. Jua 7:11).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego