Comentario de Juan 16:6 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Más bien, porque os he dicho esto, vuestro corazón se ha llenado de tristeza.
16:6 Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón. — (14:1, 27) «El siervo no sabe lo que hace su señor», pero el Señor Jesús descubrió todo a sus apóstoles, tanto lo malo como lo bueno. Era necesario que oyeran estas cosas para que estuvieran prevenidos. Los apóstoles eran muy humanos. Jesús les había explicado que El resucitaría de entre los muertos, que volvería al Padre para preparar un lugar para ellos para que pudieran estar con El en el cielo, que al volver al Padre les enviaría al Espíritu Santo (el Consolador) y que El haría grandes cosas por ellos; al oír todo esto les convenía regocijarse, tanto por la gloria que esperaba al Señor (17:5), como también por las bendiciones que ellos recibirían, pero aun con todas estas maravillosas promesas la «tristeza ha llenado vuestro corazón». ¡Así somos nosotros! Siempre exageramos la aflicción que sufrimos sin tomar en cuenta tantas bendiciones que gozamos. En cualquier momento si nos tomáramos la molestia de contar nuestras bendiciones, nunca estaría afligido nuestro corazón, pero se nos olvida hacerlo. Como dice Heb 12:11, «ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza»; pero recuérdese 2Co 4:17-18. Después de la resurrección y la ascensión de JesúsFuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Jua 16:20-22; Jua 14:1, Jua 14:27, Jua 14:28; Jua 20:11-15; Luc 22:45; Luc 24:17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
tristeza [Gr. lupç] ha llenado vuestro corazón: Las perspectivas de separación y sufrimiento impidieron todo pensamiento de consolación y fortaleza.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
16:6 Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón. — (14:1, 27) «El siervo no sabe lo que hace su señor», pero el Señor Jesús descubrió todo a sus apóstoles, tanto lo malo como lo bueno. Era necesario que oyeran estas cosas para que estuvieran prevenidos.
Los apóstoles eran muy humanos. Jesús les había explicado que El resucitaría de entre los muertos, que volvería al Padre para preparar un lugar para ellos para que pudieran estar con El en el cielo, que al volver al Padre les enviaría al Espíritu Santo (el Consolador) y que El haría grandes cosas por ellos; al oír todo esto les convenía regocijarse, tanto por la gloria que esperaba al Señor (17:5), como también por las bendiciones que ellos recibirían, pero aun con todas estas maravillosas promesas la «tristeza ha llenado vuestro corazón». ¡Así somos nosotros! Siempre exageramos la aflicción que sufrimos sin tomar en cuenta tantas bendiciones que gozamos. En cualquier momento si nos tomáramos la molestia de contar nuestras bendiciones, nunca estaría afligido nuestro corazón, pero se nos olvida hacerlo. Como dice Heb 12:11, «ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza»; pero recuérdese 2Co 4:17-18. Después de la resurrección y la ascensión de Jesús — aun antes de venir el Espíritu Santo — «volvieron a Jerusalén con gran gozo» (Luc 24:52).
Fuente: Notas Reeves-Partain
Dice literalmente: “pero porque yo les he dicho estas cosas”, por lo que varias versiones incorporan elementos temporales en la búsqueda de mejorar la expresión y la claridad, como lo hace la TEV: «Y ahora que yo les he hablado a ustedes», aunque esta traducción no expresa la fuerza de la causa por la tristeza. La NEB reestructura el versículo escribiendo la oración principal primero y luego la oración causal dependiente: «ustedes están aún sumergidos en la pena por lo que les he dicho». La BL ofrece más información recordando la pregunta anterior: «Pero solamente con saber que me voy, tienen el corazón lleno de tristeza». Las DHH y NVI traducen el contraste expresado en “pero porque” con «al contrario», mientras que la RV95 prefiere: Antes, porque os he dicho. La frase “estas cosas” puede tomarse como referencia a la persecución o también a lo dicho en el versículo anterior.
Vuestro corazón se traduce en singular como término colectivo, a pesar de que la tendencia es traducir en plural “los corazones de ustedes”. Pero en algunas culturas dejarlo en plural sería impropio, pues se daría la idea de que cada persona tiene varios corazones, por lo que la BL y otras versiones en español lo dejan en singular. Para evitar esta ambigüedad varias versiones omiten “corazón”, traduciendo con paráfrasis equivalentes: «se han entristecido» (DHH, LPD, NVI), «se han puesto muy tristes» (TLA), «la tristeza se ha apoderado de ustedes» (BA). En este caso es suficiente expresar la tristeza con un verbo y un adverbio de intensidad, como: “están supremamente agobiados de tristeza” o “están muy embotados en la tristeza”. La palabra “tristeza” se encuentra en Juan sólo en este capítulo (cf. Jua 16:20, Jua 16:21, Jua 16:22) y nunca se usa para referirse a Jesús. En algunos idiomas la tristeza se expresa de forma idiomática muy diversa: “estar aplastado por la tristeza”, “hundido”, “hecho polvo”, “sumido por el pesar”, “inundado por las lágrimas”.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
Jua 16:20-22; Mat 17:23.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
g 901 Mat 17:23; Jua 14:1; Jua 16:22
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
la tristeza ha llenado vuestro corazón. El dolor de los discípulos continuará hasta que experimenten el gozo de la resurrección del Señor (vers. 22).