Comentario de Hechos 8:21 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Tú no tienes parte ni suerte en este asunto, porque tu corazón no es recto delante de Dios.

8:21

— No tienes tú parte ni suerte en este asunto, — Si Simón hubiera seguido como fiel discípulo, posiblemente los apóstoles le habrían impartido algún don, pero debido a su actitud no tenía parte ni suerte en el asunto de impartir el poder de Dios.

— porque tu corazón no es recto delante de Dios. — El corazón es la fuente de toda maldad (Mat 12:34; Mat 15:19; Pro 4:23; Stg 1:14). Esto quiere decir que el problema de Simón no era simplemente una deficiencia de entendimiento, sino que todavía quería satisfacer los deseos carnales (Gál 5:16), que no los había crucificado (Gál 5:24). El bautismo mismo no es algo mágico que quite tales deseos. La verdadera conversión requiere que se deje el amor al pecado, que haya cambio de corazón, y que se resuelva de todo corazón a crucificar los deseos carnales. «Despojaos del viejo hombre que está viciado conforme a los deseos engañosos» (Efe 4:22); «Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros» (Col 3:5).

Felipe hizo milagros para confirmar la Palabra (Mar 16:20; Hch 14:3; Heb 2:2-3) y de esa manera la obra avanzaba, pero el corazón de Simón no era recto sino egoísta, pues él solamente quería beneficios personales.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

no tienes tú parte. Jos 22:25; Eze 14:3; Apo 20:6; Apo 22:19.

porque tu corazón no es recto. 2Cr 25:2; Sal 36:1; Sal 78:36, Sal 78:37; Hab 2:4; Mat 6:22-24; Jua 21:17; Heb 4:13; Apo 2:23.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

TU CORAZÓN NO ES RECTO. El bautismo en el Espíritu Santo a través de todo el libro de Hechos ocurre solo donde hay discípulos consagrados a Jesucristo.

(1) Dios rechazo a Simón, que procuro el poder y el don del Espíritu, así como la autoridad para impartir el don (v. Hch 19:1-41), porque su corazón no era recto delante de Él, y su pecado y maldad lo tenían preso (vv. Hch 8:22-23). El don genuino del Espíritu Santo será derramado solo sobre los que le temen y hacen lo recto (Hch 10:35; cf. Hch 10:44-48; véase también Hch 5:32).

(2) Antes y después del día de Pentecostés, los seguidores de Cristo estaban consagrados al Señor resucitado (Hch 1:2-14; Hch 2:32) y comprometidos en oración continua (Hch 1:14; Hch 6:4). Llevaban vidas apartadas del pecado y del mundo (Hch 2:38-40) y obedecían la enseñanza de los apóstoles (Hch 2:42; Hch 6:4). Nuevos derramamientos del Espíritu se les daban solo a los creyentes que se habían vuelto de sus pecados y malos caminos para vivir en obediencia a Cristo (cf. Hch 2:42; Hch 3:1; Hch 3:19; Hch 3:22-26; Hch 4:8; Hch 4:19-35; Hch 5:29-32; Hch 6:4; Hch 8:14-21; Hch 9:1-19; Hch 10:34-47; Hch 19:1-6; Hch 24:16). El vivir por el Espíritu y el ser dirigido por El son siempre condiciones de ser lleno del Espíritu (véanse Gál 5:16-25; Efe 5:18).

(3) No es de Cristo ninguna experiencia sobrenatural que parezca ser el bautismo en el Espíritu si ocurre en alguien que continua en los caminos de la naturaleza pecaminosa (cf. 1Jn 4:1-6). Al contrario, es una falsificación del bautismo en el Espíritu y puede ir acompañado de dones y poderes demoniacos (Mat 7:21-23; 2Ts 2:7-10; véase el ARTÍCULO PRUEBA DEL GENUINO BAUTISMO EN EL ESPIRITU, P. 1534. [Hch 10:44-45]).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

8:21 — No tienes tú parte ni suerte en este asunto, — Si Simón hubiera seguido como fiel discípulo, posiblemente los apóstoles le habrían impartido algún don, pero debido a su actitud no tenía parte ni suerte en el asunto de impartir el poder de Dios.
— porque tu corazón no es recto delante de Dios. — El corazón es la fuente de toda maldad (Mat 12:34; Mat 15:19; Pro 4:23; Stg 1:14). Esto quiere decir que el problema de Simón no era simplemente una deficiencia de entendimiento, sino que todavía quería satisfacer los deseos carnales (Gál 5:16), que no los había crucificado (Gál 5:24). El bautismo mismo no es algo mágico que quite tales deseos. La verdadera conversión requiere que se deje el amor al pecado, que haya cambio de corazón, y que se resuelva de todo corazón a crucificar los deseos carnales. «Despojaos del viejo hombre que está viciado conforme a los deseos engañosos» (Efe 4:22); «Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros» (Col 3:5).
Felipe hizo milagros para confirmar la Palabra (Mar 16:20; Hch 14:3; Heb 2:2-3) y de esa manera la obra avanzaba, pero el corazón de Simón no era recto sino egoísta, pues él solamente quería beneficios personales.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Sal 78:37.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

v 443 Sal 78:37; Efe 5:5

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

21 super (1) El don de Dios (v.20).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

Sal 78:37.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

R541 Σοί se usa como un dativo de posesión (comp. tu esclavo).

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

O, enseñanza; lit., palabra

Fuente: La Biblia de las Américas

g Sal 78:37.

Fuente: La Biblia Textual III Edición