Comentario de Éxodo 25:18 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Harás también dos querubines; de oro modelado a martillo los harás en los dos extremos del propiciatorio.
dos querubines de oro. Éxo 37:7-9; Gén 3:24; 1Sa 4:4; 1Re 6:23-28; 1Re 8:6, 1Re 8:7; 1Cr 28:18; Eze 10:2, Eze 10:20; Eze 41:18, Eze 41:19; Heb 9:5.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
dos querubines: La única imagen que se permite en el arca sagrada era una hermosa representación artística de estos misteriosos seres celestiales. El querubín (Heb. kerub) era una criatura de cuerpo de león y cara humana, y con grandes alas de pájaro. Otras culturas antiguas tienen una invención similar. Se han tejido, en la tapicería de las cortinas del tabernáculo, modelos adornados de querubines (Éxo 26:1).
Las alas del querubín se deben extender y mirar hacia al frente cubriendo el propiciatorio. Los rostros deben mirar al propiciatorio.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
DOS QUERUBINES. Estos eran esculturas de los seres angelicales que dan vueltas alrededor del trono de Dios en el cielo (cf. Heb 8:5; Apo 4:6 Apo 4:8). Simbolizaban la presencia y el reino de Dios entre su pueblo en la tierra (1Sa 4:4; 2Sa 6:2; 2Re 19:15). Su lugar en el arca daba testimonio de la verdad de que Dios permanecería entre su pueblo siempre y cuando se hiciera el sacrificio de sangre y el pueblo tratara de guardar los mandamientos de Dios.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
querubines. Forjados de una pieza con la cubierta de oro del arca había dos seres angelicales que se levantaban a cada extremo y frente a frente, con las alas extendidas hacia arriba y por encima, en forma de arco. De forma muy apropiada, se tejieron tapices con querubines, asociados con la majestuosa gloria y presencia de Dios (cp. Eze 10:1-22) como cortinas del tabernáculo y para el velo del Lugar santísimo (Éxo 26:1; Éxo 26:31), porque era en este lugar donde Dios estaba presente con su pueblo. Las Escrituras los revelan como los portadores del trono de Dios (1Sa 4:4; Isa 37:16) y como los guardianes del Edén y del árbol de la vida (Gén 3:24).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Querubines: Es la palabra hebrea que ha sido transliterada e ingresada en el castellano. El término es de origen mesopotámico y designa a criaturas híbridas aladas, compuestas de parte humana y parte animal. Sus estatuas eran colocadas a la entrada de templos y palacios, pues se entendía que ellos cuidaban el interior de ambos de los enemigos celestiales. Todas las versiones utilizan esta palabra, con excepción de DHH, que ofrece «seres alados». El traductor debe evaluar si es preferible utilizar la palabra querubineso recurrir a la forma de DHH, más explícita y clara.
Labrados a martillo: Los querubines tendrán su propio sistema de confección. No serán tallados ni fundidos en moldes. Antes bien, deberán ser fabricados a golpes de martillo.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
— querubines: La palabra hebrea kerubim es de origen babilónico, en donde designaba a unos seres con forma semihumana y semianimal (Eze 1:5-14), que velaban a la puerta de los templos y palacios. El AT atribuye distintas funciones a estos seres alados: guardianes del huerto de Edén (Gén 3:24), soportes del trono del Señor (1Sa 4:4) y portadores del vehículo donde se manifiesta su gloria (Eze 1:22-28).
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
w 1089 1Sa 4:4; Heb 9:5
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
querubines. El profeta Ezequiel vio los querubines como seres celestiales con cuatro alas y cuatro caras (Ez 1:5– 14; cp. Ez 10:15). No se menciona nada del diseño de estos querubines; quizá fueron revelados directamente por Dios a Moisés.
Fuente: La Biblia de las Américas
dos querubines. Véanse notas en Eze 1:5 y Apo 4:6.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
Lit., desde
Fuente: La Biblia de las Américas
[=] *1Sam 4:4 *1Re 6:23 *Sal 80:2