En cambio, el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.
14:3 — Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación — La superioridad del don de profecía sobre el don de lenguas se ve en que la lengua humana, que fuera desconocida al corintio, no podría hacer lo que hace la profecía, que sería en lengua griega; a saber, edificar, exhortar y consolar. La edificación hace madurar y desarrollarse a la persona, al darle más conocimiento de las cosas de Dios. La exhortación le conduce a andar en el camino de Dios, y así le anima. La consolación ayuda a la persona en los tiempos de aflicción y dolor. (El libro Apocalipsis es una buena ilustración de lo que esta frase comentada dice, porque es un gran libro de consolación para los cristianos perseguidos). Para que estos efectos se logren, es necesario que el lenguaje sea entendido. En esto vemos lo práctico de la profecía. Las lenguas desconocidas, aparte de la interpretación, no aprovechaban a nadie en la audiencia.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
para edificación. 1Co 14:4, 1Co 14:12, 1Co 14:26; 1Co 8:1; 1Co 10:23; Hch 9:31; Rom 14:19; Rom 15:2; Efe 4:12-16, Efe 4:29; 1Ts 5:11; 1Ti 1:4; Jud 1:20.
y exhortación. Luc 3:18; Hch 13:15; Hch 14:22; Hch 15:32; Rom 12:8; 1Ts 2:3; 1Ts 4:1; 1Ts 5:11, 1Ts 5:14; 2Ts 3:12; 1Ti 4:13; 1Ti 6:2; 2Ti 4:2; Tit 1:9; Tit 2:6, Tit 2:9, Tit 2:15; Heb 3:13; Heb 10:25; Heb 13:22; 1Pe 5:12.
y consolación. 1Co 14:31; 2Co 1:4; 2Co 2:7; Efe 6:22; Col 4:8; 1Ts 2:11; 1Ts 3:2; 1Ts 4:18; 1Ts 5:11-14.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
el que profetiza: Aquí se pueden incorporar todos los dones de comunicación (Rom 12:6; 1Pe 4:11) que edifican a otros, como lo demuestran los resultados en los vv. 1Co 14:3 y 1Co 14:4.
edificación … exhortación … consolación: Pablo prefiere que los corintios ejerciten este don en vez de «hablar en lenguas», a través de las cuales uno a sí mismo se edifica.
quisiera que todos hablaseis en lenguas: Tal vez el apóstol contrasta el Espíritu que da el don de lenguas (note el plural), con hablar en una lengua (singular). O tal vez Pablo reconoce el valor en privado de la oración personal dicha en una lengua, aun cuando su objetivo es corregir el abuso de las lenguas en la adoración pública. En alguna otra parte el apóstol expresa que el desearía que todos fueran célibes como él (1Co 7:7), pero ciertamente él no esperaba que ocurriera así exactamente. Pablo vio beneficio en el verdadero don de lenguas, pero uno limitado.
mayor es el que profetiza … a no ser que las interprete: Cuando el don de lenguas se interpreta, beneficia a la iglesia.
EN FOCO
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«Lenguas»
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(Gr. glossa) (1Co 12:10; 1Co 14:2, 1Co 14:4-6, 1Co 14:9, 1Co 14:13, 1Co 14:14, 1Co 14:18, 1Co 14:27; Hch 2:4; Hch 10:46; Hch 19:6) # en Strong G1100: El término griego glossa quiere decir «lengua» o «idioma». Cuando los antiguos creyentes recibieron poder de parte del Espíritu Santo en el Día de Pentecostés, recibieron la capacidad de hablar en muchos idiomas diferentes, tanto que los visitantes de todo el mundo romano pudieron escuchar las glorias de Dios en sus lenguas nativas (Hch 2:4-11). La familia de Cornelio también habló en diferentes lenguas cuando ellos fueron bautizados en el Espíritu Santo (Hch 10:46). Y lo mismo ocurrió con los nuevos discípulos de Éfeso (Hch 19:6). Además de estos casos, se mencionan prioritariamente las lenguas en Corinto, donde hablaban en diferentes lenguas como una manera de orar a Dios. Cuando hablaban lenguas fuera del culto colectivo, no se necesitaba la interpretación; pero cuando ellos hablaban en la reunión, Pablo requería la interpretación para que los demás pudieran comprender y ser edificados (1Co 14:2-27).
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Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
PROFETIZA… PARA EDIFICACIÓN. El don de profecía en la iglesia es motivado por el Espíritu Santo, no para predecir el futuro sino para fortalecer la fe, la vida espiritual y la determinación del creyente de seguir fiel a Cristo y a sus enseñanzas. Sin embargo, la profecía no es predicar un mensaje preparado, sino hablar espontáneamente bajo el impulso del Espíritu Santo para la edificación de la persona o de la congregación (véase el ARTÍCULO DONES ESPIRITUALES PARA LOS CREYENTES, P. 1632. [1Co 12:7]).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
profetiza. En contraste dramático a la confusión incoherente de las lenguas adulteradas, estaba el don auténtico de la profecía o la predicación de la verdad (vea la nota sobre 1Co 12:10). Este producía la edificación de la iglesia, alentaba a la obediencia y alentaba en medio de la tribulación, lo cual era el deseo de Dios para su iglesia. Los dones espirituales siempre son para beneficio de los demás y no solo para uno mismo.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
14:3 — Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación – La superioridad del don de profecía sobre el don de lenguas se ve en que la lengua humana, que fuera desconocida al corintio, no podría hacer lo que hace la profecía, que sería en lengua griega; a saber, edificar, exhortar y consolar.
La edificación hace madurar y desarrollarse a la persona, al darle más conocimiento de las cosas de Dios. La exhortación le conduce a andar en el camino de Dios, y así le anima. La consolación ayuda a la persona en los tiempos de aflicción y dolor. (El libro Apocalipsis es una buena ilustración de lo que esta frase comentada dice, porque es un gran libro de consolación para los cristianos perseguidos). Para que estos efectos se logren, es necesario que el lenguaje sea entendido. En esto vemos lo práctico de la profecía. Las lenguas desconocidas, aparte de la interpretación, no aprovechaban a nadie en la audiencia.
Tanto la profecía, como las lenguas, eran dones que procedían del Espíritu Santo, y las dos cosas revelaban verdades de Dios, pero la primera por sí sola podía obrar buen efecto en la iglesia, mientras que la segunda sola, sin ayuda de un intérprete, no lo podía. Compárese ver. 19.
Por medio de este versículo vemos que la profecía era más que predecir eventos futuros, como es el caso en Hch 11:27-28.
Como el que hablaba una lengua desconocida hablaba a Dios (ver. 2, y a sí mismo, ver. 28), el que profetizaba hablaba a los hombres (en la iglesia, ver. 3).
Fuente: Notas Reeves-Partain
REFERENCIAS CRUZADAS
e 683 2Co 10:8
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
3 super (1) Puesto que profetizar, es decir, proclamar al Señor, ministra a Cristo a la gente, entonces edifica a los demás y les da ánimo y consolación.