Comentario de Efesios 6:9 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas; porque sabéis que el mismo Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que no hay distinción de personas delante de él.

6:9 — «Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas». En la iglesia primitiva había esclavos y amos. Filemón era amo. Los amos eran tentados a proferir amenazas y asustar a los siervos para que trabajaran mejor y se sujetaran.

El castigo causa sufrimiento, y también lo causa el saber de antemano que podemos ser castigados. Pero el evangelio requería que los amos buscaran el bienestar de los siervos, porque en Cristo «no hay esclavo ni libre» (Gál 3:28). Con tales enseñanzas de hermandad el evangelio socavaba para terminar la esclavitud.

— «sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para El no hay acepción de personas». Dios no reconoce las distinciones de clase hechas por los hombres; los «amos» también tienen Amo. Dios es el Defensor de los siervos, de los pobres, de la viuda y los huérfanos y de todo necesitado. Los que maltratan a los tales

— o no cuidan de ellos — darán cuenta a Dios.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

haced con ellos. Lev 19:13; Lev 25:39-46; Deu 15:11-16; Deu 24:14, Deu 24:15; Neh 5:5, Neh 5:8, Neh 5:9; Job 24:10-12; Job 31:13-15; Isa 47:6; Isa 58:3-6; Amó 8:4-7; Mal 3:5; Col 4:1; Stg 5:4.

lo mismo. Efe 6:5-7; Mat 7:12; Luc 6:31; Stg 2:8, Stg 2:13.

dejando las amenazas. Lev 25:43; 1Sa 15:17; Dan 3:6, Dan 3:15; Dan 5:19, Dan 5:20.

sabiendo que. Sal 140:12; Ecl 5:8; Mat 22:8, Mat 22:10; Mat 24:48, Mat 24:51; Luc 12:45, Luc 12:46; Jua 13:13; 1Co 7:22.

el Señor de ellos y vuestro. 1Co 1:2; Flp 2:10, Flp 2:11.

no hay acepción de personas. Hch 10:34; Rom 2:11; Col 3:25.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Los amos cristianos deben dejar de usar el lenguaje de las amenazas con sus siervos, y recordar que también ellos son siervos de un Señor mucho más poderoso que ellos en los cielos, el cual es absolutamente justo.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo. Debe existir honra y respeto mutuos entre los empleadores cristianos y sus empleados, con base en su lealtad y sumisión común al Señor. dejando las amenazas. El superior que es lleno del Espíritu usa su autoridad y poder con justicia y gracia, por eso nunca amenaza y tampoco es abusivo o desconsiderado. Sabe muy bien que tiene un Amo celestial quien es imparcial (cp. Hch 10:34; Rom 2:11; Stg 2:9).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

6:9 — «Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas». En la iglesia primitiva había esclavos y amos. Filemón era amo. Los amos eran tentados a proferir amenazas y asustar a los siervos para que trabajaran mejor y se sujetaran.
El castigo causa sufrimiento, y también lo causa el saber de antemano que podemos ser castigados. Pero el evangelio requería que los amos buscaran el bienestar de los siervos, porque en Cristo «no hay esclavo ni libre» (Gál 3:28). Con tales enseñanzas de hermandad el evangelio socavaba para terminar la esclavitud.
— «sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para El no hay acepción de personas». Dios no reconoce las distinciones de clase hechas por los hombres; los «amos» también tienen Amo. Dios es el Defensor de los siervos, de los pobres, de la viuda y los huérfanos y de todo necesitado. Los que maltratan a los tales — o no cuidan de ellos — darán cuenta a Dios.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Los amos o señores también tienen una obligación moral y laboral hacia sus esclavos. Deben tratarlos con suma consideración respetando e incluso poniendo de relieve su dignidad humana y su calidad de hermanos en la fe. Esto ya era suficiente para sacudir aquella sociedad esclavista. El traductor debe pensar en el mejor término que en su cultura sirva como equivalente a la idea de amo. Puede ser señor, jefe, dueño, patrón, su merced.

Las palabras haced con ellos lo mismo tienen un alcance amplio. ¿A qué se refiere el autor con lo mismo? Se refiere a que las mismas normas y estándares que se demandan y esperan de los esclavos deben caracterizar también a sus amos. El principio de reciprocidad y sumisión mutua con el cual inició esta sección (Efe 5:21), ahora se reitera al final marcando y envolviendo así todo el espíritu del pasaje (cf. la figura de lenguaje llamada “inclusión”). Si los esclavos ponen todo su empeño y su mejor actitud para buscar el bienestar de sus amos, éstos de igual manera deben poner su mejor disposición y esfuerzos para buscar el bienestar de sus esclavos. Aquí hay otra semilla de liberación. Se puede traducir: “ustedes amos, traten a sus esclavos con la misma consideración y respeto”, “traten bien a sus esclavos”.

El siguiente enunciado adverbial modifica al imperativo haced lo mismo. El gerundio sugiere la idea de modo, es decir, indica de qué manera se ha de llevar al cabo la orden dada: dejando las amenazas (la palabra se usa también en Hch 4:29 y Hch 9:1). Es muy importante la actitud y el método que los amos usan para lograr que sus esclavos les obedezcan. Era común en aquellos días exprimir hasta la última gota de energía de los esclavos bajo la amenaza de castigos corporales. La manera cristiana es sin amenazas. Todo trato duro, cruel e inhumano es proscrito por el apóstol. La obediencia voluntaria y gozosa se consigue sin coerciones, sin el uso de la fuerza y el castigo. Una posible traducción es: “sin que les adviertan que los van a castigar”.

Los amos también deben recordar y tener siempre presente el hecho de que sus acciones tienen una dimensión moral y espiritual. Ellos, como sus esclavos, son responsables ante el Señor de su comportamiento y deben por ello tratar a sus esclavos como Dios manda, con un trato digno, respetuoso y justo. Tarde o temprano rendirán cuentas de su mayordomía. Además, los amos han de tener en mente que para Dios, el Señor que está en el cielo, no existen categorías sociales y no se impresiona ante la importancia y grandeza humanas. Para él no hay acepción de personas. La palabra griega prosoopolempsía (cf. Col 3:25; el sustantivo se encuentra además en Rom 2:11; Stg 2:1; Hch 10:34; 1Pe 1:17; en el AT se encuentra la misma idea en Deu 10:17; Sal 62:12) lliteralmente significa “aceptar el rostro”, e indica que Dios en su carácter de juez no es parcial ni muestra favoritismo en Una posible traducción es: “Dios trata igual a los amos y a los esclavos” o, incluso con más fuerza, “Dios no trata mejor al amo que al esclavo, para Dios ambos son iguales”. El traductor ha de buscar aquellas expresiones que mejor expresan la idea de este concepto. Por ejemplo, en algunas culturas se dice “llamar a un gorrión gallina”, o “darle la mejor pieza de carne a una persona del clan”. (LN).

Reflexión bíblica y pastoral

Al referirse a los esclavos y exhortarlos a que actúen como hombres libres, con una obediencia voluntaria, gozosa y total, Pablo reconoce su dignidad e importancia para el Reino de Dios. La reciprocidad esperada de los amos hacia sus esclavos, reitera el hecho de la igualdad de condiciones y situación ante Dios y los unos con los otros. La conducta cristiana en el ámbito familiar debe estar marcada por el amor, servicio y entrega mutuos. Así se trabaja, a partir del hogar, para hacer la paz

En el contexto de un poderoso imperio, entonces y ahora, que siembra su “Pax” por medios violentos y brutales, Efesios plantea la construcción desde abajo, a partir de los débiles (mujeres, hijos e hijas, esclavos y padres) de una nueva sociedad. A partir de las relaciones domésticas, de la casa como núcleo social fundamental, se opta por una estrategia de penetración social que hace de las familias cristianas su unidad de avanzada más poderosa para construir la “Pax cristiana” que la fe en Jesús es capaz de crear. “Es una nueva humanidad que prefigura y anuncia con su vida interna (fraterna, transparente, modélica en la forma misma de dilucidar sus conflictos, en la manera de ejercer la autoridad ) el destino de toda la humanidad; y debe aspirar a enriquecer la imaginación social y la solera cultural de la sociedad.” (Rafael Aguirre).

Esa es nuestra misión hoy.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

— de igual manera: El autor de la carta no rechaza de forma directa la esclavitud, pero establece los principios que llevarán a su abolición. Ver carta a Filemón.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Deu 10:17; Hch 10:34; Rom 2:11; Gál 2:6; Col 3:25; Stg 2:1; 1Pe 1:17.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) O: “Señor”.

REFERENCIAS CRUZADAS

q 335 Lev 25:43

r 336 1Co 7:22

s 337 2Cr 19:7

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

9 super (1) Los amos, quienes tenían el derecho sobre las vidas de sus esclavos, debían dejar sus amenazas, porque el Señor en los cielos era el Amo verdadero tanto de ellos como de los esclavos.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

Amos…Col 3:25; Col 4:1; Deu 10:17.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

R502 Los genitivos αὐτῶν y ὑμῶν preceden al nombre κύριος (el genitivo normalmente aparece después del sustantivo). [Editor. Así que la posición en este versículo denota cierto grado de énfasis.)

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Lit., a

O, Amo

Fuente: La Biblia de las Américas

g Col 4:1.

6:9 g Deu 10:17; Col 3:25.

Fuente: La Biblia Textual III Edición