Comentario de Colosenses 3:3 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.
3:3 Porque habéis muerto, — con Cristo, al pecado, al mundo, y a sí mismos (Rom 6:2-11), como si estuvieran en el ataúd, con la tapa clavada, sordos al llamado del mundo, ciegos a las atracciones de la carne (L-S). Esta figura muy fuerte indica que ya no estamos bajo la influencia del mundo. Como el sordo no es afectado por el ruido del tráfico, como el ciego no es afectado por las cosas más feas, así el que está muerto al mundo ya no es afectado por los placeres del mundo. «Habéis muerto» al pensamiento de encontrar gozo y satisfacción en las cosas mundanas. «Cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido» (Stg 1:14); por eso, es obvio que se tiene que quitar del corazón los malos pensamientos y deseos para ser muerto al pecado. Los apetitos carnales existen porque se han cultivado y estimulado; por eso, pueden ser eliminados. El ser muerto al pecado no solamente significa dejar la práctica del pecado, sino también el suprimir y acabar con todo deseo carnal.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
porque habéis muerto. Col 2:20; Rom 6:2; Gál 2:20.
y vuestra vida. Col 3:4; Col 1:5; Jua 3:16; Jua 4:14; Jua 5:21, Jua 5:24, Jua 5:40; Jua 6:39, Jua 6:40; Jua 10:28-30; Jua 14:19; Rom 5:10, Rom 5:21; Rom 8:2, Rom 8:34-39; 1Co 15:45; 2Co 5:7; Heb 7:25; 1Pe 1:3-5.
está escondida con Cristo. Col 2:3; Mat 11:25; 1Co 2:14; Flp 4:7; 1Pe 3:4; 1Jn 3:2; Apo 2:17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
habéis muerto. Vea las notas sobre Rom 6:1-11; 2Co 5:17; Gál 6:14. El tiempo del verbo conjugado indica que una muerte ocurrió en el pasado, en este caso al momento de la muerte de Jesucristo en la que los creyentes fueron unidos con Él, su castigo por el pecado fue pagado por completo, y ellos fueron resucitados con Él a una vida nueva. escondida con Cristo en Dios. Esta expresión profunda tiene significado triple: 1) los creyentes tienen una vida espiritual común con el Padre y el Hijo (1Co 6:17; 2Pe 1:4), 2) el mundo no puede entender todo lo que incluye la nueva vida del creyente (Rom 8:19; 1Co 2:14; 1Jn 3:2) y 3) los creyentes están asegurados por la eternidad, protegidos de todo enemigo espiritual y con acceso a todas las bendiciones de Dios (Jua 10:28; Rom 8:31-39; Heb 7:25; 1Pe 1:4).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
3:3 Porque habéis muerto, — con Cristo, al pecado, al mundo, y a sí mismos (Rom 6:2-11), como si estuvieran en el ataúd, con la tapa clavada, sordos al llamado del mundo, ciegos a las atracciones de la carne (L-S). Esta figura muy fuerte indica que ya no estamos bajo la influencia del mundo. Como el sordo no es afectado por el ruido del tráfico, como el ciego no es afectado por las cosas más feas, así el que está muerto al mundo ya no es afectado por los placeres del mundo. «Habéis muerto» al pensamiento de encontrar gozo y satisfacción en las cosas mundanas. «Cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido» (Stg 1:14); por eso, es obvio que se tiene que quitar del corazón los malos pensamientos y deseos para ser muerto al pecado.
Los apetitos carnales existen porque se han cultivado y estimulado; por eso, pueden ser eliminados. El ser muerto al pecado no solamente significa dejar la práctica del pecado, sino también el suprimir y acabar con todo deseo carnal.
— y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. — La palabra escondida no significa «que es segura… sino que pertenece al invisible y eterno al cual pertenece Cristo» (ASP). Ya no vivimos en el mundo (2:20). Nuestra vida es espiritual y es una comunión continua con Dios. «Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce a él» (1Jn 3:1).
Nuestra vida está escondida con Cristo, porque fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte (Rom 6:5). «Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí» (Gál 2:20); «Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia» (Flp 1:21). «Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo» (Flp 3:20). ¿Por qué está escondida nuestra vida con Cristo en Dios?
De esto algunos concluyen que «Ningún infernal ladrón puede violar la combinación de este cierre» (ATR), pero el santo mismo puede dejar de seguir a Cristo. Por eso Pablo escribió esta carta para que los santos no cayeran en la trampa de los falsos maestros. Si no podían caer, ¿por qué preocuparse? Dijo a los gálatas (5:4) «De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído».
Fuente: Notas Reeves-Partain
REFERENCIAS CRUZADAS
f 153 Rom 6:2
g 154 Gál 2:20
h 155 Jua 17:21
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
3 (1) Morimos con Cristo y así fuimos libertados de las cosas terrenales, especialmente de las cosas relacionadas con el ascetismo. Fuimos bautizados en Su muerte ( Rom_6:3).
3 (2) Nuestra vida (no nuestra vida natural, sino nuestra vida espiritual, la cual es Cristo) está escondida con Cristo en Dios, quien está en los cielos. Por eso, no debemos preocuparnos por las cosas terrenales. El Dios que está en los cielos debe ser la esfera de nuestro vivir. Con Cristo debemos vivir en Dios.
3 (3) Esto significa que nuestra vida está escondida con Cristo en los cielos.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
R587 Ἐν τῷ θεῷ puede compararse con el uso frecuente que Pablo hace de ἐν Χριστῷ (comp. Jua 15:4).
R628 Cuando σύν se aplica a Cristo, puede expresar la unión mística e íntima con Cristo (como ἐν).