Comentario de Tito 1:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Para los que son puros, todas las cosas son puras; pero para los impuros e incrédulos nada es puro, pues hasta sus mentes y sus conciencias están corrompidas.
1:15 — «Todas las cosas son puras para los puros». Ahora Pablo afirma lo contrario de lo que decían los mandamientos de hombres que era que ciertas carnes eran prohibidas por ser impuras intrínsecamente (ver. 14). Algunas versiones dicen «limpias», en lugar de «puras» (N.M., N.T.P, J.T.D.). En 2Ti 1:3 aparece la misma palabra griega, que allí nuestra versión dice «limpia», en lugar de «pura». Los puros, pues, son los limpios de corazón y conciencia; son fieles a la sana doctrina.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
para los puros. Luc 11:39-41; Hch 10:15; Rom 14:14, Rom 14:20; 1Co 6:12, 1Co 6:13; 1Co 10:23, 1Co 10:25, 1Co 10:31; 1Ti 4:3, 1Ti 4:4.
mas para los corrompidos. Pro 21:4; Hag 2:13; Zac 7:5, Zac 7:6; Mat 15:18; Rom 14:20, Rom 14:23; 1Co 11:27-29.
su mente y su conciencia están corrompidas. 1Co 8:7; Heb 9:14; Heb 10:22.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
En este versículo Pablo subraya los errores del ascetismo de los falsos maestros de Creta. Ellos habían señalado ciertos alimentos y algunas prácticas como contaminadas, cuando en realidad eran sus mentes las que estaban corrompidas e incrédulas. Por otra parte, para los puros todas las cosas son puras. Debido a que los creyentes de Creta establecieron su confianza en Cristo, centrando sus mentes en Él, ellos serían autorizados por el Espíritu de Dios para llevar vidas puras. Jesús enseñó el mismo principio en (Mat 15:11). Los objetos físicos o las prácticas externas no contaminan a una persona, pero una mente centralizada en el mal corrompe completamente. Aunque en el presente los creyentes no están involucrados con la observación de rituales judíos, el principio es aún aplicable. Deberíamos estar más involucrados con la renovación de nuestra mente y en centrarla en Jesús, en vez de observar una lista de reglas que no tienen base bíblica.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
TODAS LAS COSAS SON PURAS. Es probable que Pablo se esté refiriendo al rito de purificación de las leyes judias sobre los alimentos (cf. Mat 15:10-11; Mar 7:15; 1Ti 4:3-5). A algunos maestros los obsesionaba la distinción entre alimentos puros e impuros, y enseñaban que la debida observancia de esos detalles era esencial para la verdadera justicia. Ellos pasaban por alto el verdadero carácter moral, la pureza interior y la justicia exterior (v. Tit 1:16). Pablo afirma que si es pura la condición moral de la persona, entonces la distinción entre alimentos puros e impuros no tiene importancia moral para él. Pablo no se refiere a cosas o acciones que son moralmente malas sino sólo a la pureza ceremonial.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
corrompidos. Las cosas despreciables que practicaban esos hombres (vv. Tit 1:10-12) eran el reflejo de su propia corrupción interna. Vea Mat 15:15-20. su mente y su conciencia. Si la mente es corrupta, no puede informar bien a la conciencia y esta tampoco puede advertir a la persona sobre su mala conducta. En cambio, si la conciencia es infundida por completo por la verdad de Dios, funciona como el sistema de advertencia que Dios diseñó para beneficio de la humanidad. Vea las notas sobre 2Co 1:12 ; 2Co 4:2; 1Ti 1:19-20.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Los falsos maestros son corruptos tanto por dentro («su mente y su conciencia») como por fuera «reprobados en cuanto a toda buena obra». Cp. Mat 7:15-16.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
1:15 — «Todas las cosas son puras para los puros». Ahora Pablo afirma lo contrario de lo que decían los mandamientos de hombres que era que ciertas carnes eran prohibidas por ser impuras intrínsecamente (ver. 14).
Algunas versiones dicen «limpias», en lugar de «puras» (N.M., N.T.P, J.T.D.). En 2Ti 1:3 aparece la misma palabra griega, que allí nuestra versión dice «limpia», en lugar de «pura». Los puros, pues, son los limpios de corazón y conciencia; son fieles a la sana doctrina.
La frase «todas las cosas» se refiere en particular a la cuestión de carnes. Los judaizantes todavía insistían en que ciertas carnes no eran limpias, no admitiendo que la Ley de Moisés fue quitada, la que prohibía ciertas carnes. Pero nunca eran inmundas en sí, sino que fueron hechas así ceremonialmente por la Ley temporal de Moisés. En sí toda carne es pura, o limpia. Véanse 1Ti 4:4-5; Mar 7:15; Mar 7:18-19; Luc 11:39-41; Hch 10:15; Rom 14:14; Rom 14:20; 1Co 6:12; 1Co 10:23; 1Co 10:26; 1Co 10:30; Gál 2:11-21; Col 2:16-23. También considérense Hch 10:9-16; Hch 11:1-8; Hch 15:9; Hch 15:19-20.
Para el cristiano, toda carne es limpia, o propia, para comer, pero los judaizantes (como también los ascéticos y ciertos conversos del paganismo) consideraban equivocadamente que ciertas carnes quedaban prohibidas. Véanse 1Ti 4:1-5; Rom 14:1-6; Rom 14:20-23; 1Co 10:14-33.
Es el corazón, y no la carne, lo que tiene que ser limpio, o puro, para que Dios lo acepte. Compárese Pro 4:23.
–«mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro». Los «corrompidos» eran aquellos falsos maestros que estaban así en mente y en conciencia. Moralmente estaban corrompidos. La misma palabra griega que aparece aquí para decir «corrompidos» también aparece en Jua 18:28 (en sentido ceremonial); Heb 12:15; Jud 1:8. También se les llama «incrédulos» porque no exhibían fe apropiada hacia Cristo y su Nuevo Testamento. (No se trata de los incrédulos del mundo).
Debido a su contaminación moral, nada les era puro; es decir, nada de lo que ofrecían a Dios era aceptable en la vista de Dios; era impuro.
–«pues hasta su mente y su conciencia están corrompidos». Todo el interior de esos falsos maestros (que eran en gran parte judaizantes) estaba corrompido. Su mente (nois, como en Rom 7:23) era su inteligencia o sentido, que dirigía su voluntad. Su conciencia (suneidesis, como en 1Pe 3:16) estaba insensitiva a sus pensamientos y modos erróneos. Estaban pervertidos sus juicios morales a tal grado que ya no sentían ninguna «tristeza que es según Dios» para después arrepentirse. Véase 2Co 7:9-10.
En este versículo Pablo está diciendo, «Ustedes, los falsos hermanos judíos, son los impuros, y no ciertas carnes; y eso se debe a sus mentes y conciencias corrompidas. Todas las cosas amorales son limpias en sí. Pero para ustedes el efecto de la deshonestidad moral es que nada es puro, y su mente y su conciencia están corrompidas. Por eso Dios no les acepta en nada. Todo lo que ofrecen a Dios queda impuro».
Fuente: Notas Reeves-Partain
Mat 15:11; Mat 15:18-20; Luc 11:39-41; Rom 14:20.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
q 44 Rom 14:14
r 45 Mat 15:11; Luc 11:39
s 46 2Ts 3:2
t 47 1Co 8:7; 1Ti 1:5
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
15 (1) Esta debe de haber sido una máxima entre los cristianos. El apóstol citó esto para refutar los mandamientos de hombres (v.14), es decir, los preceptos relacionados con la abstinencia, los cuales prohibían ciertas acciones y ciertos alimentos ( 1Ti_4:3-5 ; Rom_14:20) .
15 (2) La mente es la parte principal de nuestra alma, y la conciencia es la parte principal de nuestro espíritu. Si nuestra mente está corrompida, nuestra alma se corrompe espontáneamente; y si nuestra conciencia está contaminada, indudablemente nuestro espíritu es contaminado. Todo esto se debe a la incredulidad. Lo que nos purifica es nuestra fe ( Hch_15:9).
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
La pureza es algo interior, de la mente y de la conciencia, no exterior. Cp. Luc 11:41.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
T190 El pronombre genitivo αὐτῶν aparece antes del sustantivo para evitar repetición.