Biblia

Comentario de Tito 2:13 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Tito 2:13 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

aguardando la esperanza bienaventurada, la manifestación de la gloria del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo,

2:13 — Aquí está el motivo por qué vivir «sobria, justa y piadosamente» (ver. 12). Mientras el cristiano vive así, aguarda algo.

— «aguardando». Es decir, «estar en continua espera» (NVI.), o expectativa. La misma palabra griega se encuentra en Mar 15:43; Luc 2:25; Luc 12:36; Jud 1:21.

— «la esperanza bienaventurada». Se aguarda la esperanza, al aguardar el objeto, o la realización, de ella. Es bienaventurada porque imparte felicidad, gozo y deleite. Compárense Gál 5:5; Col 1:5.

— y la manifestación gloriosa». El texto griego emplea solamente un artículo definido; es decir, «la esperanza bienaventurada y manifestación gloriosa». En lugar de «gloriosa», tradúzcase «de la gloria». Lo que se aguarda es la esperanza y epifanía (aparición) de la gloria de Cristo Jesús en su segunda venida. Compárense 1:2; Gál 5:5; Col 1:5; Flp 3:20-21; Judas 21.

En 2Ts 2:8, dice el texto, «el resplandor (aparición, epifanía) de su venida (aparecimiento, parusía). Cristo Jesús se manifestará en su segunda venida. Será gloriosa, como el fuerte brillo o resplandor de la luz.

La palabra griega para decir «manifestación» es epifaneia. Aparece también en 1Ti 6:14; 2Ti 4:8. La palabra española, «epifanía», es transliteración de la palabra griega.

Cuando Cristo se manifieste la segunda vez, el cristiano fiel será manifestado con El de manera gloriosa, Col 3:4.

— «de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo», o Cristo Jesús (según el manuscrito del texto griego). Este pasaje presenta claramente la deidad de Jesús; ¡es Dios! ¡Es nuestro gran Dios! El texto griego emplea en esta frase un solo artículo definido, diciendo, «la gloria del gran Dios y Salvador de nosotros, Cristo Jesús». No dice, «…del gran Dios y del Salvador…», como si se hiciera referencia a dos personas. Compárese Apo 1:9, «vuestro hermano y copartícipe…». (No dice, el hermano de vosotros y el copartícipe).

Los Testigos de Jehová no quieren admitir que Jesucristo es nuestro gran Dios. (Para ellos Jesucristo es un ser creado). No pueden admitir que se haga aquí referencia a una sola persona. Su interlineal tiene un solo artículo definido, pero en la traducción se ponen dos, «del Dios y (del) Salvador». La Versión Nuevo Mundo dice, «del gran Dios y de nuestro Salvador Cristo Jesús», dejando la impresión de que se hace referencia a dos personas. 2Pe 1:1-21 :1 es paralelo a este pasaje en cuanto a hacerse referencia a una sola persona, y no a dos. Allí los Testigos de Jehová se atreven a añadir a la traducción un artículo definido delante de la palabra «Salvador». Ese pasaje, como aquí en Tit 2:13, hace referencia a una sola persona; dice, «del Dios de nosotros y Salvador Jesucristo».

Otro argumento, aparte del que trata del artículo singular en el pasaje, que apunta a una sola persona en la referencia, es que la palabra «aparición» siempre se aplica a Cristo, y no a Dios el Padre. Por ejemplo, 1Ti 6:14; 2Ti 4:1; 2Ti 4:8. Aunque la «gloria» es de los dos (Luc 9:26), la epifanía es de Jesucristo.

Véanse mis comentarios sobre 2Pe 1:1 en NOTAS SOBRE 1 PEDRO Y 2 PEDRO.

Los arrianos siempre han tratado de hacer a Jesús algo menos que el Padre. Los Testigos de Jehová, como los modernistas, niegan que Jesucristo es Dios (aquí, «nuestro gran Dios»). Considérense estos pasajes: Jua 1:1; Jua 10:30; Jua 10:33; Jua 20:28; Rom 9:5; Flp 2:6; Col 2:9; Heb 1:8; 2Pe 1:1; 1Jn 5:20.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

aguardando. 1Co 1:7; Flp 3:20, Flp 3:21; 2Ti 4:8; 2Pe 3:12-14.

la esperanza. Tit 1:2; Tit 3:7; Hch 24:15; Rom 5:5; Rom 8:24, Rom 8:25; Rom 15:13; Col 1:5, Col 1:23, Col 1:27; 2Ts 2:16; Heb 6:18, Heb 6:19; 1Pe 1:3; 1Jn 3:3.

y la manifestación gloriosa. Job 19:25-27; Isa 25:9; Mat 16:27; Mat 25:31; Mat 26:64; Mar 8:38; Mar 14:62; 1Ti 6:13, 1Ti 6:14; Heb 9:28; 2Co 4:4, 2Co 4:6; Col 3:4; 2Ti 4:1, 2Ti 4:8; 1Pe 1:7; 1Jn 3:2; Apo 1:7.

de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Tit 3:4, Tit 3:6; 2Pe 3:18; 1Jn 4:14.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

LA ESPERANZA BIENAVENTURADA. «La esperanza bienaventurada» que los creyentes deben anhelar es «la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo» y la unión con Él por la eternidad (véanse Jua 14:3, nota, y el ARTÍCULO EL ARREBATAMIENTO, P. 1724. [1Ts 4:16-17]). Puede cumplirse esa esperanza en cualquier momento (cf. Mat 24:42; Luc 12:36-40; Stg 5:7-9). Así que los creyentes nunca deben abandonar su piadosa esperanza de que hoy tal vez suene la trompeta y vuelva el Señor.

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

la esperanza bienaventurada. Una referencia general a la segunda venida de Jesucristo que incluye la resurrección (cp. Rom 8:22-23; 1Co 15:51-58; Flp 3:20-21; 1Ts 4:13-18; 1Jn 3:2-3) y el reino de los santos con Cristo en gloria (2Ti 2:10). la manifestación gloriosa. Cp. 2Ti 1:10. Lit. «la aparición de la gloria». Esta será nuestra salvación de la presencia del pecado. gran Dios y Salvador. Una referencia clara a la deidad de Jesús. Cp. 2Pe 1:1.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

2:13 — Aquí está el motivo por qué vivir «sobria, justa y piadosamente» (ver. 12). Mientras el cristiano vive así, aguarda algo.
–«aguardando». Es decir, «estar en continua espera» (NVI.), o expectativa. La misma palabra griega se encuentra en Mar 15:43; Luc 2:25; Luc 12:36; Jud 1:21.
–«la esperanza bienaventurada». Se aguarda la esperanza, al aguardar el objeto, o la realización, de ella. Es bienaventurada porque imparte felicidad, gozo y deleite. Compárense Gál 5:5; Col 1:5.
–y la manifestación gloriosa». El texto griego emplea solamente un artículo definido; es decir, «la esperanza bienaventurada y manifestación gloriosa». En lugar de «gloriosa», tradúzcase «de la gloria». Lo que se aguarda es la esperanza y epifanía (aparición) de la gloria de Cristo Jesús en su segunda venida. Compárense 1:2; Gál 5:5; Col 1:5; Flp 3:20-21; Judas 21.
En 2Ts 2:8, dice el texto, «el resplandor (aparición, epifanía) de su venida (aparecimiento, parusía). Cristo Jesús se manifestará en su segunda venida. Será gloriosa, como el fuerte brillo o resplandor de la luz.
La palabra griega para decir «manifestación» es epifaneia. Aparece también en 1Ti 6:14; 2Ti 4:8. La palabra española, «epifanía», es transliteración de la palabra griega.
Cuando Cristo se manifieste la segunda vez, el cristiano fiel será manifestado con El de manera gloriosa, Col 3:4.
–«de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo», o Cristo Jesús (según el manuscrito del texto griego). Este pasaje presenta claramente la deidad de Jesús; ¡es Dios! ¡Es nuestro gran Dios! El texto griego emplea en esta frase un solo artículo definido, diciendo, «la gloria del gran Dios y Salvador de nosotros, Cristo Jesús». No dice, «…del gran Dios y del Salvador…», como si se hiciera referencia a dos personas. Compárese Apo 1:9, «vuestro hermano y copartícipe…». (No dice, el hermano de vosotros y el copartícipe).
Los Testigos de Jehová no quieren admitir que Jesucristo es nuestro gran Dios. (Para ellos Jesucristo es un ser creado). No pueden admitir que se haga aquí referencia a una sola persona. Su interlineal tiene un solo artículo definido, pero en la traducción se ponen dos, «del Dios y (del) Salvador». La Versión Nuevo Mundo dice, «del gran Dios y de nuestro Salvador Cristo Jesús», dejando la impresión de que se hace referencia a dos personas. 2Pe 1:1-21 :1 es paralelo a este pasaje en cuanto a hacerse referencia a una sola persona, y no a dos. Allí los Testigos de Jehová se atreven a añadir a la traducción un artículo definido delante de la palabra «Salvador». Ese pasaje, como aquí en Tit 2:13, hace referencia a una sola persona; dice, «del Dios de nosotros y Salvador Jesucristo».
Otro argumento, aparte del que trata del artículo singular en el pasaje, que apunta a una sola persona en la referencia, es que la palabra «aparición» siempre se aplica a Cristo, y no a Dios el Padre. Por ejemplo, 1Ti 6:14; 2Ti 4:1; 2Ti 4:8. Aunque la «gloria» es de los dos (Luc 9:26), la epifanía es de Jesucristo.
Véanse mis comentarios sobre 2Pe 1:1 en NOTAS SOBRE 1 PEDRO Y 2 PEDRO.
Los arrianos siempre han tratado de hacer a Jesús algo menos que el Padre. Los Testigos de Jehová, como los modernistas, niegan que Jesucristo es Dios (aquí, «nuestro gran Dios»). Considérense estos pasajes: Jua 1:1; Jua 10:30; Jua 10:33; Jua 20:28; Rom 9:5; Flp 2:6; Col 2:9; Heb 1:8; 2Pe 1:1; 1Jn 5:20.

Fuente: Notas Reeves-Partain

— manifestación gloriosa: Lit. epifanía. Ver segunda nota a 2Ts 2:8 y nota a 1Ti 6:14.

— Jesucristo: También puede traducirse: del gran Dios y de nuestro Salvador Jesucristo.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) Para una consideración de este v., véase Ap. 6E.

REFERENCIAS CRUZADAS

f 83 1Pe 1:13; 1Pe 1:21

g 84 Hab 3:3

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

gran Dios y Salvador Cristo Jesús. Este es uno de los varios pasajes en el N. T. donde explícitamente se le da el título de Dios a Jesucristo (Jn 1:1, 18; 20:28; Ro 9:5; 2 P 1:1).

Fuente: La Biblia de las Américas

13 (1) Esperando con confianza lo que es aceptado por fe.

13 (2) La esperanza bienaventurada es la manifestación de Cristo en Su gloria. La manifestación de Cristo nos llevará a la plena filiación, es decir, a la redención de nuestro cuerpo, a fin de que podamos disfrutar la libertad de la gloria de los hijos de Dios, para lo cual fuimos salvos ( Rom_8:21-25). Esta es la esperanza de vida eterna (1:2), una esperanza de bendición eterna, una esperanza bienaventurada en la vida eterna del Dios Triuno; Pablo llegó a ser apóstol sobre la base de tal esperanza.

13 (3) La gloria del Padre ( Mat_16:27), la cual ha sido dada al Hijo ( Jua_17:24) y a la cual nosotros, como los muchos hijos de Dios, seremos llevados ( Heb_2:10). Por Su sabiduría Dios nos predestinó antes de las edades para esta gloria ( 1Co_2:7), y el Dios de toda gracia nos llamó y nos salvó en esta eterna gloria ( 1Pe_5:10 ; 2Ti_2:10). El peso de esta gloria es sobrepujante y eterno ( 2Co_4:17), y con esta gloria seremos glorificados ( Rom_8:17 , Rom_8:30). La aparición de la gloria de Cristo, nuestro gran Dios y Salvador, es la esperanza bienaventurada que estamos aguardando.

13 (4) A través de los siglos ha habido dos escuelas de interpretación acerca de este título sagrado y divino, el cual es además notable, maravilloso y excelente: (1) que se hace referencia a dos personas, Dios y Cristo; (2) que sólo hay una persona, Jesucristo como nuestro gran Dios y Salvador, afirmándose así la deidad de Cristo. Aquí preferimos la segunda interpretación.

Esto corresponde a los dos títulos sagrados revelados en el nacimiento de Cristo: Jesús Jehová el Salvador y Emanuel Dios con nosotros ( Mat_1:21-23) . Nuestro Señor no sólo es nuestro Salvador, sino que también es Dios, y no solamente Dios, sino el gran Dios, el Dios que es grande en naturaleza, en gloria, en autoridad, en poder, en obras, en amor, en gracia y en todo atributo divino.; En 1Ti_2:5 nuestro Señor es revelado como un hombre; aquí es revelado como el gran Dios. El es hombre y Dios. Se manifestará en Su gloria divina no solamente para salvar a Su pueblo y llevarlo a Su reino eterno, sino también para introducirlo en la gloria eterna de Dios ( Heb_2:10 ; 1Pe_5:10). Por consiguiente, Su manifestación en Su gloria es nuestra esperanza bienaventurada.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

dichosa… Otra traducción posible: bendita.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

M109 ¿Significa τῆς … Ἰησοῦ: la gloria de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo; o … del gran Dios, y de nuestro Salvador Jesucristo (un sentido que se hubiera garantizado si se hubiera repetido el artículo con σωτῆρος, pero que es posible en el griego común aun sin la repetición del artículo)? En este caso en particular, existe la improbable alternativa (vea el comentario en Stg 2:1) de tomar σωτῆρος como si estuviera en aposición con τῆς δόξης, y καί con el significado: es decir. La última parte de este versículo entonces significaría: la gloria de nuestro gran Dios, es decir, nuestro Salvador Jesucristo, (comp. 2Pe 1:1); la repetición del artículo no era estrictamente necesaria para asegurar que los elementos se consideraran por separado. Por otro lado, hay la consideración importante de que la frase Dios y Salvador, en el lenguaje contemporáneo, se refería sólo a una persona (en el año 100 d. de J.C. aproximadamente). Además, el artículo pudo haberse repetido para evitar mal entendimiento, si se hubiera pensado en dos personas -T181; comp. MT84; se refiere a la misma persona -R786 y BD276[3]). [Editor. En este contexto parece que es mejor considerar que estas dos frases se refieren a una sola persona, Cristo.]

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

O, del gran Dios y Salvador nuestro

Fuente: La Biblia de las Américas

rtf1fbidisansiansicpg1252deff0fonttblf0fromanfprq2fcharset2 Wingdings 3; N dichosa.

Fuente: La Biblia Textual III Edición