Comentario de 1 Pedro 3:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Más bien, santificad en vuestros corazones a Cristo como Señor y estad siempre listos para responder a todo el que os pida razón de la esperanza que hay en vosotros, pero hacedlo con mansedumbre y reverencia.

3:15 — «sino santificad… corazones». Véase Isa 8:13. Esta versión dice, «a Dios el Señor». Otras versiones (H.A., N.M., B.A., Mod., NVI, etc.) dicen, «santificad a Cristo como Señor». Es cuestión de manuscritos. Los considerados mejores dicen, «a Cristo como Señor».

En lugar de amedrentarnos y conturbarnos (ver. 14), debemos santificar (apartar) a Cristo como Señor en nuestros corazones. Como Señor, él tiene toda potestad (Mat 28:18; Efe 1:21-23). ¡Los hombres no tienen esto! Santificamos a Cristo en nuestros corazones por medio de confiar en sus promesas, en su poder y en su bondad, de aceptar las pruebas de vida que él permita, y de no temer al hombre.

— «y estad siempre preparados». «Dispuestos» dice la misma palabra griega en Tit 3:1; «Prontos» dice la Ver. H.A. El cristiano debe ser bien informado en las verdades del evangelio, y en las evidencias que las respaldan.

— «para presentar defensa». «Dar respuesta», dice la Ver. Mod. La palabra griega, apologia, significa una «defensa» verbal (Hch 22:1; Hch 25:16; Flp 1:7; Flp 1:16; 2Ti 4:16), o respuesta (1Co 9:3).

— «con mansedumbre y reverencia». La defensa hecha no muestra desafío, arrogancia, ni amargura, pero sí es hecha con gran respeto (temor, 1:17) hacia Dios y con respecto al juicio final.

— «ante todo el que os demande razón». La defensa es hecha a personas que desean que se les dé cuenta de la esperanza en el cristiano, pero no a burladores (Mat 26:62,63; 27:12-14; Mar 15:5; Jua 19:9).

— «de la esperanza que hay en vosotros». Véanse 1:3,21; 3:5.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

sino santificad a Dios. Núm 20:12; Núm 27:14; Isa 5:16; Isa 29:23.

estad siempre preparados. Sal 119:46; Jer 26:12-16; Dan 3:16-18; Amó 7:14-17; Mat 10:18-20; Luc 21:14, Luc 21:15; Hch 4:8-12; Hch 5:29-31; Hch 21:39, Hch 21:40; Hch 22:1, Hch 22:2; Col 4:6; 2Ti 2:25.

para presentar defensa. 1Sa 12:7; Isa 1:18; Isa 41:21; Hch 24:25.

de la esperanza. 1Pe 1:3, 1Pe 1:4; Col 1:5, Col 1:23, Col 1:27; Tit 1:2; Heb 3:6; Heb 6:1, Heb 6:18, Heb 6:19.

con mansedumbre. 1Pe 3:2, 1Pe 3:4; 2Ti 2:25, 2Ti 2:26.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

santificad a Dios el Señor: Los creyentes deben reconocer la eterna santidad de Cristo reverenciándolo como el Señor del universo que está en control de todas las cosas.

presentar defensa: Pedro da por sentado que la fe cristiana será falsamente acusada. Por lo tanto, incentiva a los cristianos a tener preparadas respuestas racionales para contestar a dichas acusaciones falsas.

mansedumbre es el mismo término que se traduce como afable en el v. 1Pe 3:4. Mansedumbre no es debilidad. La Biblia indica que tanto Moisés como Cristo eran hombres mansos; sin embargo, ciertamente no eran hombres débiles. El temor implica un alto grado de reverencia o respeto.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

SANTIFICAD A DIOS EL SEÑOR EN VUESTROS CORAZONES. Pedro hace un llamado a la reverencia interior y a la entrega a Dios como Señor, que siempre dispongan al creyente a defender su causa y a explicarles el evangelio a los demás (cf. Isa 8:13), lo cual requiere que conozca la Palabra de Dios y la verdad (cf. Jua 4:4-26).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

santificad a Dios el Señor en vuestros corazones. Aquí se prefiere «Cristo» y el versículo se lee «aparten a Cristo como Señor en sus corazones». El corazón es el santuario en el que Él prefiere ser adorado. Si usted vive en comunión sumisa con el Señor Jesús, en amor y obediencia a Él, no tiene nada que temer. estad siempre preparados para presentar defensa. La palabra «apologética» proviene del término griego que se traduce aquí «defensa». Pedro la emplea en sentido informal (cp. Flp 1:16-17) e insiste en que el creyente debe entender lo que cree y por qué es cristiano, para estar en capacidad de articular sus creencias con humildad y prudencia, de una manera comprensible, razonable y bíblica. la esperanza que hay en vosotros. La salvación con su anticipación de gloria eterna.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

3:15 — «sino santificad… corazones». Véase Isa 8:13. Esta versión dice, «a Dios el Señor». Otras versiones (H.A., N.M., B.A., Mod., NVI, etc.) dicen, «santificad a Cristo como Señor». Es cuestión de manuscritos. Los considerados mejores dicen, «a Cristo como Señor».
En lugar de amedrentarnos y conturbarnos (ver. 14), debemos santificar (apartar) a Cristo como Señor en nuestros corazones. Como Señor, él tiene toda potestad (Mat 28:18; Efe 1:21-23). ¡Los hombres no tienen esto! Santificamos a Cristo en nuestros corazones por medio de confiar en sus promesas, en su poder y en su bondad, de aceptar las pruebas de vida que él permita, y de no temer al hombre.
–«y estad siempre preparados». «Dispuestos» dice la misma palabra griega en Tit 3:1; «Prontos» dice la Ver. H.A. El cristiano debe ser bien informado en las verdades del evangelio, y en las evidencias que las respaldan.
–«para presentar defensa». «Dar respuesta», dice la Ver. Mod. La palabra griega, apologia, significa una «defensa» verbal (Hch 22:1; Hch 25:16; Flp 1:7; Flp 1:16; 2Ti 4:16), o respuesta (1Co 9:3).
–«con mansedumbre y reverencia». La defensa hecha no muestra desafío, arrogancia, ni amargura, pero sí es hecha con gran respeto (temor, 1:17) hacia Dios y con respecto al juicio final.
–«ante todo el que os demande razón». La defensa es hecha a personas que desean que se les dé cuenta de la esperanza en el cristiano, pero no a burladores (Mat 26:62,63; 27:12-14; Mar 15:5; Jua 19:9).
–«de la esperanza que hay en vosotros». Véanse 1:3,21; 3:5.

Fuente: Notas Reeves-Partain

— glorifiquen: Lit. santifiquen, es decir, reconozcan lo que Cristo (o Dios) es verdaderamente (su grandeza, su sublimidad) y consiguientemente, tribútenle la correspondiente alabanza. Este es el sentido bíblico primario que tienen los conceptos de santo, santidad, santificar, en cuanto referidos a Dios. Ver nota a Rom 1:7.

— a Cristo: Bastantes mss., aunque no los mejores ni más antiguos, dicen: a Dios.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) “El Cristo como Señor”, אABC; TR: “el Señor Dios”; J7,8,11-14,16,17,24: “Jehová Dios”.

(2) “Profundo respeto.” Lit.: “temor”.

REFERENCIAS CRUZADAS

j 171 1Co 1:2

k 172 Col 4:6

l 173 Pro 15:1; 1Ti 6:11; 2Ti 2:25; Tit 3:2

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

santificad a Cristo como Señor. Es dar siempre a Cristo el lugar de prioridad en la vida, aun en el contexto de las luchas y las pruebas.

Fuente: La Biblia de las Américas

15 super (1) Si los perseguidores consiguen amedrentarnos y conturbarnos (vs.13-14), parecerá que no tenemos al Señor en nuestros corazones. Así que, al sufrir persecución debemos mostrar a otros que tenemos a Cristo como Señor en nosotros. Esto lo santifica, lo separa, de los otros dioses, y no lo degrada como si fuera semejante a los ídolos sin vida.

15 super (2) La esperanza viva de heredar la vida eterna. Véanse las notas 3 super (6) y 4 super (2)del cap.1.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

santificad a Dios (o, más probable, a Cristo). I.e., reverenciadle a Él y dadle la gloria que le pertenece, y no habrá nada que temer de lo que puedan haceros los hombres (cp. Isa 8:12-13).

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

santificad a CRISTO… Textus Receptus (TR): a DiosIsa 8:12-13.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

O, para

O, temor

Fuente: La Biblia de las Américas

TR registra Dios.

3:15 g Isa 8:12-13.

Fuente: La Biblia Textual III Edición