Comentario de 1 Pedro 4:12 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Amados, no os sorprendáis por el fuego que arde entre vosotros para poneros a prueba, como si os aconteciera cosa extraña.

4:12 — «Amados». Véase 2:11, comentarios. En vista de la persecución venida sobre ellos, Pedro expresa su simpatía y cuidado, al llamarles «amados». Dios también nos ama, aun cuando permite pruebas de fe en nuestras vidas (Heb 12:6, contexto).

— «No os sorprendáis». En el ver. 4 vimos que a los mundanos les parece cosa extraña que el cristiano no corra con ellos en sus disipaciones. Pero hay algo que no nos debe extrañar: es que venga a veces la persecución (2Ti 3:12). Dadas ciertas circunstancias en el mundo, va a haber grandes pruebas de fe. ¿No habla la historia antigua de esto? No somos los primeros que vayamos a sufrir.

— «del fuego de prueba que os ha sobrevenido». Véase 1:7, comentarios. Pedro no dice que están sufriendo persecución por fuego literal, sino habla de la gravedad, y seriedad de la persecución. Ya estaba sobre ellos el principio de esa persecución en particular, sin duda la que levantó Nerón contra los cristianos.

Esta versión no emplea la frase, «para probaros». (En la revisión del 1977 sí aparece: «Amados, no os sorprendáis de la hoguera que ha prendido en medio de vosotros para probaros…» Es una traducción muy apegada al texto griego). Considérese Sal 66:8-12. Las tribulaciones (pruebas de fe) tienen buen propósito (Rom 5:3-5), y Dios bien lo sabe. Por eso lo permite a veces y en ciertas circunstancias según su sabiduría.

— «como si… aconteciese». Una cosa extraña no es usual, pero la persecución no debe ser considerada como extraña, dada la oposición del diablo a Cristo. El cristiano tiene que preparar bien su mente antes de que venga la prueba de fe, para que una vez venida ella no se le extrañe y actúe de manera no agradable al Señor.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

no os sorprendáis. 1Pe 4:4; Isa 28:21.

del fuego. 1Pe 1:7; Dan 11:35; 1Co 3:13.

de prueba. 1Pe 5:9; 1Co 10:13; 1Ts 3:2-4; 2Ti 3:12.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Pedro instruye a los cristianos con respecto al sufrimiento. Algunos sufrimientos, cuando se experimentan por causa de Cristo, son naturales; por lo tanto, tenemos que esperarlos. Sin embargo, hay sufrimientos que vendrán específicamente de Cristo y que tendrán serias consecuencias por la eternidad. Este sufrimiento estará dirigido tanto a cristianos como a no cristianos, pero el resultado para estos grupos será radicalmente diferente.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

no os sorprendáis: Aparentemente los lectores de Pedro estaban asombrados de tener que sufrir como cristianos, especialmente al extremo que estaban sufriendo. La palabra griega que se traduce aquí como fuego de prueba también se usaba para hablar del intenso fuego que eliminaba las impurezas en los metales (1Pe 1:6, 1Pe 1:7). Para los cristianos, el propósito del sufrimiento es probar su verdadero carácter, con el fin de eliminar la escoria del pecado y permitir que la naturaleza de Cristo surja pura.

alguna cosa extraña: Los cristianos deben prepararse para el sufrimiento y esperarlo.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

FUEGO DE PRUEBA. El NT pone de relieve que las pruebas son la experiencia inevitable de los creyentes fieles en un mundo impío controlado por Satanás y opuesto al evangelio (véase el ARTÍCULO EL SUFRIMIENTO DE LOS JUSTOS, P. 657. [Job 2:7-8]). Los que se entregan a Jesucristo con devoción y fe sincera, que viven por el Espíritu y aman la verdad del evangelio, tendrán dificultades y dolores. En realidad, cuando sufren por causa de la justicia demuestran su verdadera devoción a Cristo (cf. Mat 5:10-12; Hch 14:22; Rom 8:17-18; 2Ti 2:12). Por eso los problemas que se les presentan pudieran ser un indicio de que están agradando a Dios y permaneciendo fieles a Él. Con frecuencia las pruebas acompañan la batalla de fe que libran contra el pecado, el mundo impío y Satanás (1Pe 1:6-9; Efe 6:12). A través de pruebas dolorosas Dios permite que tengan parte en su sufrimiento y forma en ellos el carácter piadoso que Él desea (Rom 5:3-5; 2Co 1:3-7; Stg 1:2-4). No obstante, cuando sufren y se mantienen fieles a Cristo, se les considera dichosos porque «el glorioso Espíritu de Dios» reposa sobre ellos (v. 1Pe 4:14, nota; véase 1Pe 2:21, nota).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

fuego de prueba. Es probable que Pablo escribiera esta carta poco antes o después del incendio de Roma (vea la Introducción: Contexto histórico), y al comienzo de los horrores de un período de persecución a los cristianos que duró doscientos años. Pedro explica que hay cuatro actitudes necesarias para ser triunfantes en la persecución: 1) esperarla (v. 1Pe 4:12), 2) regocijarse en ella (vv. 1Pe 4:13-14), 3) evaluar su causa (vv. 1Pe 4:15-18) y 4) encomendarse a Dios (v. 1Pe 4:19). alguna cosa extraña os aconteciese. Se refiere también a cosas que pueden suceder de forma «arbitraria», pero un cristiano no debe pensar que su persecución es algo que le sucede de forma accidental. Dios la permitió para que el cristiano sea probado, purgado y limpiado.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

4:12 — «Amados». Véase 2:11, comentarios. En vista de la persecución venida sobre ellos, Pedro expresa su simpatía y cuidado, al llamarles «amados». Dios también nos ama, aun cuando permite pruebas de fe en nuestras vidas (Heb 12:6, contexto).
–«No os sorprendáis». En el ver. 4 vimos que a los mundanos les parece cosa extraña que el cristiano no corra con ellos en sus disipaciones. Pero hay algo que no nos debe extrañar: es que venga a veces la persecución (2Ti 3:12). Dadas ciertas circunstancias en el mundo, va a haber grandes pruebas de fe. ¿No habla la historia antigua de esto? No somos los primeros que vayamos a sufrir.
–«del fuego de prueba que os ha sobrevenido». Véase 1:7, comentarios. Pedro no dice que están sufriendo persecución por fuego literal, sino habla de la gravedad, y seriedad de la persecución. Ya estaba sobre ellos el principio de esa persecución en particular, sin duda la que levantó Nerón contra los cristianos.
Esta versión no emplea la frase, «para probaros». (En la revisión del 1977 sí aparece: «Amados, no os sorprendáis de la hoguera que ha prendido en medio de vosotros para probaros…» Es una traducción muy apegada al texto griego). Considérese Sal 66:8-12. Las tribulaciones (pruebas de fe) tienen buen propósito (Rom 5:3-5), y Dios bien lo sabe. Por eso lo permite a veces y en ciertas circunstancias según su sabiduría.
–«como si… aconteciese». Una cosa extraña no es usual, pero la persecución no debe ser considerada como extraña, dada la oposición del diablo a Cristo. El cristiano tiene que preparar bien su mente antes de que venga la prueba de fe, para que una vez venida ella no se le extrañe y actúe de manera no agradable al Señor.

Fuente: Notas Reeves-Partain

LA PERSECUCIÓN INEVITABLE

1 Pedro 4:12-13

Queridos hermanos: No toméis la prueba de fuego que estáis pasando y que os ha sobrevenido para poneros a prueba como nada extraño; como si fuera algo del otro mundo; sino estad contentos de compartir los sufrimientos de Cristo, porque así podréis participar de la felicidad total cuando se revele Su gloria.

Sería natural que la persecución fuera una experiencia mucho más demoledora para los gentiles que para los judíos. Un gentil medio tendría muy poca experiencia de ella; pero los judíos habían sido siempre el pueblo más perseguido de la Tierra. Pedro está escribiendo a cristianos que eran gentiles, y tenía que tratar de ayudarlos mostrándoles la persecución en sus auténticos colores. Nunca es fácil ser cristiano. La vida cristiana conlleva su propio aislamiento, su propia impopularidad, sus propios problemas, sus propios sacrificios y sus propias persecuciones. Conviene, por tanto, tener en mente ciertos grandes principios.

(i) Pedro está convencido de que la persecución es inevitable. Es algo natural en los seres humanos el mirar con suspicacia y rechazar todo y a todos los que son diferentes; el cristiano es necesariamente diferente de la persona del mundo. El impacto particular de la diferencia cristiana hace más agudo este asunto. El cristiano trae al mundo los parámetros de Jesucristo. Eso es lo mismo que decir que es inevitablemente una especie de conciencia para la sociedad en la que se mueve; y muchos eliminarían de buena gana los tics molestos de la conciencia. La misma bondad del Cristianismo puede ser una ofensa para el mundo, en el que la bondad es un obstáculo.

(ii) Pedro está convencido de que la persecución es una prueba, y esto en un doble sentido. La devoción de una persona a un principio se puede medir por su voluntad de sufrir por él; por consiguiente, cualquier clase de persecución es una prueba de la fe de la persona. Pero es igualmente cierto que es solamente el cristiano auténtico el que es perseguido. No so: persigue al cristiano que hace componendas con el mundo. En un doble sentido la persecución es la prueba de la autenticidad de la fe.

(iii) Ahora llegamos a cosas que elevan el ánimo. La persecución es estar en solidaridad con los sufrimientos de Jesucristo. Cuando una persona tiene que sufrir por su cristianismo, está andando por el camino que recorrió su Maestro y compartiendo la Cruz que llevó su Maestro. Este es un pensamiento favorito del Nuevo Testamento. Si sufrimos con Él, seremos glorificados con Él (Rm 8:17 ). Pablo deseaba estar en solidaridad con los sufrimientos de Cristo (Fil 3:10 ). Si sufrimos con Él, reinaremos con Él (2 Timoteo 2:12 ). Si tenemos esto presente, cualquier cosa que tengamos que sufrir por causa de Cristo se convertirá en un privilegio y no en un castigo.

(iv) La persecución es el camino a la gloria. La Cruz es el camino a la corona. Jesucristo no quedará en deuda con nadie, y Su gozo y corona esperan a la persona que, contra viento y marea, Le permanece fiel.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento

— tremenda prueba: Lit. la prueba de fuego (o el fuego como prueba).

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Sufrir por el nombre de Cristo

Ahora Pedro vuelve al tema del sufrimiento y sugiere otras siete razones para dar aliento al cristiano, no sólo para perseverar, sino de hecho para tener regocijo en él. La experiencia del sufrimiento es (i) una prueba (12; cf. 1:6, 7) para comprobar la realidad de nuestra fe, y podemos esperar que Dios obrará para fortalecerla; (ii) no es cosa extraña (12), al contrario es un compartir de la experiencia de Cristo; (iii) un camino a la gloria para nosotros, como lo fue para Cristo (13; ver también Rom. 8:17 y Col. 1:24); (iv) una oportunidad para bendición, en una nueva experiencia con el Espíritu Santo (14); (v) una oportunidad de glorificar a Dios (14); (vi) un desafío a demostrar la relevancia del evangelio cuando el juicio comience por la casa de Dios (17); (vii) una oportunidad de consagrarnos a Dios y comprobar su fidelidad (19). Los creyentes en Cristo, en plena confianza, pueden entregar los distintos aspectos de la vida a aquel que les dio vida. Al contrario, el pecador no arrepentido no tiene nada en que esperar aquí o después una vez que Dios comience a obrar en juicio.

Notas. 12 Fuego (en gr. “exposición al fuego con intención de poner a prueba”) vuelve la vista al argumento de 1:6, 7. Extraña es el adjetivo que surge de la raíz del verbo usado antes en la frase no os sorprendáis. Por ello, sería preferible que aquí dijera “sorprendente” o que se traduzca “extraño” en ambos lugares (Besson, “extrañéis” y “extraña”). 14 En el nombre de Cristo (DHH, “por causa de Cristo”) no tiene necesariamente que significar que ya era un delito ser cristiano, pues el mismo Jesús sugirió la posibilidad de sufrir por su nombre (ver Mat. 10:22; Juan 15:21). Para más detalles ver la Introducción en lo referente a la autoría. En todas las épocas desde Jesús, los cristianos que han tratado de vivir como él han llegado a ser el blanco del menosprecio o el odio de aquellos que han sido acusados o convictos por su conducta. Algunos han considerado que el glorioso Espíritu de Dios (la palabra “espíritu” no está en el original) se refiere a la shekinah, el resplandor visible que simboliza la presencia de Dios en medio de su pueblo (Exo. 40:34, 35). Puede ser así, pero el contexto y la estructura gramatical hacen más probable que sea mejor considerarlo como el Espíritu de Dios. Este es el Espíritu de gloria ya que revela la gloria de Dios a su pueblo, haciendo que Cristo sea real para ellos y los transforme a su imagen (Juan 16:14; 2 Cor. 3:18). La frase puede haber sido acuñada de Isa. 11:2, según la LXX, aunque allí no se mencionan ni la gloria ni el poder (que es una lectura alternativa). 15 El entrometerse en asuntos ajenos puede parecer fuera de lugar en esta lista de actividades criminales, pero ése era el efecto que parecía te ner el evangelio (como en Hech. 16:18; 19:27).

16 Cristiano aparece sólo otras dos veces en el NT (Hech. 11:26; 26:28). En ambos casos se da por sentado que lo usaban los detractores como término despreciativo. Sin embargo, la gente de entonces usaba la terminación latina en -ianus (“iano” en castellano) de dos maneras que podrían echar luz sobre este uso. Los seguidores de Herodes eran llama dos “herodianos” (Mar. 3:6) y del mismo modo los “cristianos” puede haber significado “sostenedores de Cristo”. La costumbre romana era que una persona adoptada por una familia noble usara como propio el nombre familiar con la terminación -ianus. De modo que una persona adoptada en la familia de Domicio podría llamarse Domiciano. Antioquía (donde comenzó la costumbre; Hech. 11:26) era una ciudad romana y por eso es probable que los cristianos puedan haber usado el nombre para mostrar que ellos habían sido adoptados en la familia de Cristo (Rom. 8:15-17).

17 Para la idea del juicio que comienza por la casa de Dios véase Jer. 25:29; Eze. 9:6; Mal. 3:1-3; DHH, “familia de Dios”. 18 La cita de Prov. 11:31 en la LXX subraya el argumento del versículo anterior y recuerda las palabras de Jesús en Luc. 23:31. 19 Si ese sufrimiento se acepta a la luz de los vv. 17, 18, entonces lejos de darse por vencidos, los cristianos perseverarán en hacer el bien. Seguimos el ejemplo de Cristo, encomendando el resultado en las manos de Dios. El verbo encomienden fue usado por Jesús en Luc. 23:46 (citando Sal. 31:5). Todo fiel judío lo usaba como última oración nocturna, y el pensamiento aquí puede ser ése. Pablo usó el sustantivo derivado de esta raíz en 2 Tim. 1:12 para expresar su confianza en la segura protección de Dios. Creador probablemente se usa aquí para recordar a los lectores del poder de Dios (cf. 1:5 y Pablo en Fil. 1:6).

Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno

REFERENCIAS CRUZADAS

c 224 1Pe 5:9

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

fuego de prueba. Véase coment. en 1:7.

Fuente: La Biblia de las Américas

12 (1) Véase la nota 4 (1) . La persecución ardiente es cosa común para los creyentes; ellos no deben considerarlo como algo extraño o ajeno ni les debe sorprender o asombrar.

12 (2) La palabra griega traducida fuego de tribulación significa incendio, y denota cómo arde un horno de fundición donde se purifican el oro y la plata ( Pro_27:21 Sal_66:10); esto es similar a la metáfora usada en 1:7. Pedro consideró que la persecución sufrida por los creyentes era semejante a un horno ardiente usado por Dios para purificar la vida de ellos. Esta es la manera en que Dios castiga a los creyentes en el juicio de Su administración gubernamental, el cual comienza por Su propia casa (vs.17-19).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

no os sorprendáis. Pedro vuelve ahora a tratar de las pruebas por las que pasan los cristianos en el mundo, concluyendo en 1Pe 5:11.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

† Literalmente “una prueba de fuego para probarlos”.

Fuente: Versión Biblia Libre del NuevoTestamento