Comentario de 2 Pedro 2:22 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
A ellos les ha ocurrido lo del acertado proverbio: El perro se volvió a su propio vómito; y “la puerca lavada, a revolcarse en el cieno”.
2:22 — «Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio». La palabra griega para decir «proverbio» es compuesta de dos partes: para, que significa «al lado de», y «oimos», «camino». De esta combinación sale la idea de un dicho que se oye por el camino. — «El perro… en el cieno». Véase Pro 26:11. El proverbio respecto a la puerca no se encuentra en las Escrituras; no obstante, era común. Es tomada de fuentes seculares, pero siempre expresa una verdad establecida.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
El perro se volvió a su vómito. Pro 26:11.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
lo del verdadero proverbio: Los judíos consideraban a los perros y los cerdos dentro de los animales más bajos, por lo que Pedro escoge estos animales para describir a las personas que conocieron la verdad, pero volvieron atrás. El primer proverbio se encuentra en (Pro 26:11); el segundo es de la historia siria de Ahikar, que era conocida por Pedro y por sus lectores. Jesús usaba a los perros y a los cerdos para representar a la humanidad alejada de Dios (Mat 7:6). Una revisión del capítulo completo muestra que rendirse ante diferentes tendencias de la sociedad moderna como ir contra la autoridad, ser materialista, la obsesión por el sexo y por el dinero, son señales de que el corazón del individuo no ha sido tocado con el señorío de Cristo, sino que ha sucumbido a los engaños del maligno. El punto de ataque es el orgullo por el conocimiento.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
perro … cieno. Dos analogías gráficas de un apóstata. La primera es de Pro 26:11 y la segunda es original de Pedro.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
2:22 — «Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio». La palabra griega para decir «proverbio» es compuesta de dos partes: para, que significa «al lado de», y «oimos», «camino». De esta combinación sale la idea de un dicho que se oye por el camino.
–«El perro… en el cieno». Véase Pro 26:11. El proverbio respecto a la puerca no se encuentra en las Escrituras; no obstante, era común. Es tomada de fuentes seculares, pero siempre expresa una verdad establecida.
La combinación de perros y cerdos se encuentra también en Mat 7:6.
Los calvinistas hacen un gran caso de que un perro siempre es perro, que un puerco siempre es puerco. Por ejemplo, el comentario de Jamieson, Fausset y Brown, publicado por la Casa Bautista De Publicaciones, El Paso, TX. E.U.A., en la página 721 dice, comentando sobre el ver 22, «No debéis admiraros de esto: pues perros y puercos eran antes, y perros y puercos seguirán siendo». El Sr. Alberto Barnes, en su comentario sobre 2 Pedro, en la página 251,252, dice que este versículo no debe ser citado para probar que el cristiano puede caer de la gracia. Dice que los animales no cambian de naturaleza, sino que nada más actúan conforme a ella. Dice, «Este pasaje, por eso, parece demostrar que nunca había habido cambio verdadero de corazón, y por supuesto no había habido ninguna caída de la religión verdadera».
Los calvinistas ignoran el punto de Pedro. El no habla de la naturaleza de animales. El dice que los falsos maestros (2:1) habían escapado de las contaminaciones del mundo. (No dice que «parece» que sí, pero que en realidad, no). Esto lo hicieron mediante el conocimiento pleno y completo de Cristo. ¡No se trata de un caso de pretensión o de mero cambio exterior! No obstante, el calvinista, que afirma la doctrina de la imposibilidad de apostasía, tiene que negar esta declaración de Pedro. ¡Esos hombres fueron cambiados! Esos animales también fueron cambiados. El perro había depuesto lo que le contaminaba, y la puerca estaba lavada. Pero volvieron a sus hábitos pasados. El perro ¡vuelve al vómito! La puerca lavada vuelve a andar en lo que ensucia.
El texto griego no dice «el perro» ni «la puerca». No se trata de dos casos en particular. Es un proverbio que tiene un punto de énfasis. Este punto es que algo cambiado vuelve a lo de antes. Bien lo expresa la Ver. P.B., «Y les ha acontecido lo del verdadero refrán (Pro 26:11): Perro volviendo al propio vómito, y puerca lavada a revolcarse en el cenagal». El punto principal de Pedro en citar estos dos proverbios fue enseñar lo insensato y dañino de volver a algo sucio o de contaminación.
El hombre no nace con cierta «naturaleza» incambiable. (Se concede que los animales sí nacen con su propio instinto. De esto no habla Pedro, sino solamente los calvinistas). Todo hombre puede «nacer de nuevo» y llegar a ser «nueva criatura», completamente cambiado de su estado o condición espiritual anterior de cuando era pecador. Luego, puede volver a lo que dejó, a las «cosas viejas» que ya pasaron (2Co 5:17).
Fuente: Notas Reeves-Partain
Pro 26:11.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
— el perro… la cerda: Un proverbio castellano equivalente sería: “la cabra siempre tira al monte”.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
z 107 Mat 7:6
a 108 Pro 26:11
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
El perro…la puerca. La naturaleza de estos dos animales, inmundos para los judíos, describe la condición postrera de los que, habiendo conocido el camino de la justicia, se han apartado de Dios.
Fuente: La Biblia de las Américas
22 (1) Los perros y las puercas son animales inmundos según los preceptos de la santidad de Dios ( Lev_11:27 , Lev_11:7 ; Mat_7:6 y la nota 2). Los perros están acostumbrados a comer cosas asquerosas. Vomitan lo que comen y se vuelven a su propio vómito, contaminándose así internamente. Las puercas se revuelcan en el cieno, ensuciándose así externamente. Los herejes que niegan a Dios, a la larga vienen a ser como estos animales inmundos, en el sentido de que se contaminan por dentro y por fuera. (¡Qué juicio tan severo merecen conforme a la justicia de Dios en Su administración gubernamental!) Por tanto, son muy contagiosos y a los creyentes se les prohíbe tener contacto con ellos ( 2Jn_1:9-11).
22 (2) Lit., sobre.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
aquel refrán… → Pro 26:11.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
BD111(2) Κύνες se refiere a perros extraviados.
BD266(3) El artículo neutro τό tiene un sentido sustantival: lo que se encuentra en el verdadero proverbio.
MT155 y sig. El participio en voz media λουσαμένη tiene un sentido pasivo. Ciertamente si las abluciones de la puerca son realmente reflexivas, y no pasivas, diversas ideas corrientes necesitan revisión. Pero para Pedro, λουσαμένη de ninguna manera sugirió cooperación voluntaria.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
g Pro 26:11.