Comentario de Números 21:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Cuando el rey cananeo de Arad, que habitaba en el Néguev, oyó que Israel iba por el camino de Atarim, combatió contra Israel y tomó prisioneros a algunos de ellos.
el rey de Arad. Núm 33:40; Jos 12:14; Jue 1:16.
por el camino de Atarim. el Dr. Kennicott comenta, que la palabra atharim, representada por espías en nuestra versión, es en griego un nombre propio (αθαρειν, (Atharim). Núm 13:21, Núm 13:22; Núm 14:45.
peleó contra Israel. Deu 2:32; Jos 7:5; Jos 11:19, Jos 11:20; Sal 44:3, Sal 44:4.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Israel destruye a los cananeos en Horma, Núm 21:1-3.
El pueblo murmura y sufre la plaga de serpientes ardientes, Núm 21:4-6.
Ellos se arrepienten y son sanados por la serpiente de bronce, Núm 21:7-9.
Diversas jornadas de los israelitas, Núm 21:10-20.
Sehón es vencido, Núm 21:21-32,
y Og, Núm 21:33-35.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
La primera victoria militar de Israel contra los cananeos sucedió como resultado de un ataque del rey de Arad. Arad está ubicada en el Neguev, a unas 20 millas (32 km) al sur de Hebrón. Sin embargo, parece que aquí la palabra «Arad» se refiere a una región aun más al sur ya que no hay señales de una ciudad en el lugar del Arad de ese período. Es común con los nombres de los sitios bíblicos que «floten» de un lugar a otro a través de los siglos. El texto resalta que los cananeos atacaron y que no hubo provocación para ello. Israel hizo un voto de herem, lealtad a la prohibición si Jehová le daba la victoria. El pueblo de Arad era distinto de los pueblos de Edom y Moab pues estaba bajo el interdicto de Jehová. Los israelitas pelearon con valor y Jehová los ayudó, triunfaron sobre el ejército de Arad y destruyeron sus ciudades. Esta victoria fue el principio de su marcha triunfante en la Tierra Prometida. Pero, como se esperaba, incluso este cambio trajo problemas. El nombre Horma nace de la palabra herem, algo destruido completamente. Es posible que este nombre en Núm 14:45 se base en este versículo. Esto quiere decir que la región que Israel había derrotado anteriormente recibió su nombre propio en este contexto, y se insertó en la historia anterior para la conveniencia del lector.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
21. Camino de Moab.
S igue la narración con una serie de incidentes, algunos de ellos, como la victoria sobre los cananeos, desplazados de su contexto histórico; pero, en conjunto, los hechos resultan perfectameni verosímiles en la azarosa marcha de los israelitas hacia la tierra de Canaán.
Victoria Sobre el Rey de Arad (1-3).
1El cananeo, el rey de Arad, que habitaba en el Negueb, al oír que venía Israel por el camino de Atarim, los atacó y tomó prisioneros. 2Hizo entonces Israel voto a Yahvé, diciendo: “Si entregas a este pueblo en mis manos, yo destruiré sus ciudades.” 3Oyó Yahvé la voz de Israel, y le entregó el cananeo, a quien dio al anatema, destruyéndolos a ellos y a sus ciudades, por lo cual fue llamado aquel lugar Jormá.
Este relato está, sin duda, fuera de lugar. Generalmente, los críticos creen que se trata de un incidente posterior que tuvo lugar cuando las tribus israelitas entraron a sangre y fuego en Canaán. En Jue 1:17 se dice que las tribus de Judá y Simeón conquistaron una ciudad al sur del Negueb, llamada Safat, a la que cambiaron el nombre en Jormá, o condenada al “anatema” (jérem). Quizá se trate del mismo hecho, y el hagiógrafo haya trasladado esta victoria al tiempo de Moisés para deshacer el mal efecto de la derrota que los israelitas sufrieron en Jormá al querer atacar a Canaán por el sur1. Israel, vencido en alguna escaramuza por el rey cananeo de Arad en el Negueb2, en el camino de Atarim, que debía de ser la ruta caravanera3 que iba de Cades al Negueb, se rehizo y volvió a la lucha, haciendo voto a Yahvé de entregar al anatema o destrucción,(jérem) las ciudades conquistadas si obtenía la victoria. Según las leyes de la guerra entonces vigentes, el vencedor se creía dueño de las vidas y haciendas de los vencidos. Por eso se apropiaba los .Henes y reducía a esclavitud a las personas que hubieran quedado con vida. Con este voto, Israel renuncia a esas ventajas dé la guerra, y consagra a su Dios por la destrucción los bienes conquistados, haciendo de ello un don a su Dios. Era la ley del jérem o anatema, costumbre bárbara seguida por Israel y tomada del ambiente histórico, dándola un supuesto sentido religioso. En la inscripción del rey de Moab, Mesa, leemos: “Y Camós (dios de Moab) me dijo;
Ve y toma a Nebo contra Israel. Y partí de noche y la combatí desde la aurora hasta el mediodía y la tomé. Y los maté a todos: siete mil hombres, jóvenes, mujeres y doncellas y esclavas, porque yo había hecho el jérem a Astor-Camós.”4 No podemos decir, pues, que esta ley sea privativa de Israel, sino que es una de tantas costumbres bárbaras de los antiguos, practicada también por Israel5.
La Serpiente de Bronce (4-9).
4Partiéronse del monte Hor en dirección al mar Rojo, rodeando la tierra de Edom; y el pueblo, impaciente, 5murmuraba por el camino contra Dios y contra Moisés, diciendo: “¿Por qué nos habéis sacado de Egipto a morir en este desierto? No hay pan ni agua y estamos ya cansados de un tan ligero manjar como éste.” 6Mandó entonces Yahvé contra el pueblo serpientes venenosas, que los mordían, y murió mucha gente de Israel. 7El pueblo fue entonces a Moisés y le dijo: “Hemos pecado murmurando contra Yahvé y contra ti; pide a Yahvé que aleje de nosotros las serpientes.” Moisés intercedió por el pueblo, 8y Yahvé dijo a Moisés: “Hazte una serpiente de bronce y ponía sobre un asta, y cuantos mordidos la miren, sanarán.” 9Hizo, pues, Moisés una serpiente de bronce y la puso sobre un asta; y cuando alguno era mordido por una serpiente, miraba a la serpiente de bronce y se curaba.
Israel partió del monte Hor, en que dejó enterrado a Aarón, en dirección sudeste, hacia el mar Rojo. El camino que sigue es el del Araba, o sea, la prolongación del valle del Jordán y del mar Muerto, que va a terminar al golfo elanítico o de Akabah. Es terreno mísero e inhóspito y sin agua. Y no es de maravillar que el pueblo, fatigado, protestase, según era costumbre en todas las contrariedades, añorando la abundancia de Egipto y despreciando el “maná,” ligero manjar (v.6), ο de poco valor nutritivo6. Dios, en castigo, les envió serpientes venenosas, lit. “quemadores,” por las fiebres altas que producían sus picaduras, que no son raras por la estepa. Reconociendo en ello un castigo, los israelitas piden a Moisés que les libre de esta plaga. Por orden divina hace una serpiente de bronce7, y la levanta en un palo, para que los israelitas al verla consigan la curación. Se ha querido ver en este relato un vestigio de la ofiolatría, o culto a las serpientes entre los orientales. En Gezer se ha encontrado una serpiente metálica; en Susa y en Babilonia se han descubierto diversos amuletos en forma de serpiente. Y en las minas de cobre de Fuñón (cerca del lugar donde tuvo lugar el incidente bíblico) se han encontrado láminas metálicas en forma de serpiente, preparadas sin duda para usos supersticiosos. De aquí se ha querido deducir que el hagiógrafo asocia estos restos metálicos de aquella región con un milagro de Moisés relacionado con las mordeduras de las serpientes. Desde luego que el hagiógrafo no atribuye un valor mágico a la serpiente de bronce levantada por Moisés, sino que ve en ella un símbolo del poder curativo de Dios. La serpiente siempre ha sido relacionada con la medicina, porque a ella se atribuían determinadas virtudes curativas. El autor del libro de la Sabiduría hace la exégesis del pasaje bíblico: “La serpiente era un símbolo de salvación que otorgaba la salud, no por la virtud de la figura que tenían bajo sus ojos, sino por Aquel que es el Salvador de todos.”8 Los israelitas, en tiempo de Ezequías, daban culto a una serpiente de bronce llamada Nejustan (de nejóset, bronce), y la consideraban como la utilizada por Moisés para curar a los israelitas. El piadoso rey la hizo despedazar para evitar los abusos idolátricos9. Jesucristo alude al hecho del desierto, y ve en la serpiente levantada por Moisés un tipo de su elevación en la cruz: “Como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es preciso que sea levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea en El tenga la vida eterna.”10 Los Santos Padres han desarrollado este simbolismo manifiesto en el poder curativo de la serpiente y de Cristo en la cruz. En todo caso, Moisés, al levantar la serpiente, no creía emplear un procedimiento mágico para curar, sino destacar y simbolizar la omnipotencia divina, que curaba a los israelitas. A nuestra mentalidad resulta extraña la elección de este símbolo, pero debemos trasladarnos a la mentalidad oriental de los antiguos israelitas para comprenderlo, como tenemos que ser comprensivos con otros ritos extraños del Antiguo Testamento.
Itinerario a Través de Edom (10-20).
10Partiéronse los hijos de Israel y acamparon en Obot; 11y partidos de Obot, acamparon junto a lye-Abarim, en el desierto que hay frente a Moab, al oriente. 12Partidos de allí, acamparon junto al torrente Zared; 13y partidos de allí, acamparon a la otra orilla del Amón, en el desierto, que proviene del confín de los amorreos, pues el Amón es confín de Moab, entre Moab y los amorreos. 14Por eso se decía en el libro de las “Guerras de Yahvé”:
“Contra Vaheb en Sufá, contra el torrente de Amón”
15las angosturas del torrente que se extiende hacia la
y se apoya en los confines de Moab.”(región de Ar)
16De allí vinieron a Beer; es el pozo a que se refería Yahvé cuando dijo a Moisés: “Reúne al pueblo y yo le daré agua.” 17Entonces cantó Israel este canto:
“Mana, pozo; cantadle.
18Pozo cavado por los príncipes,
alumbrado por los nobles del pueblo
con sus cetros, con sus bastones.”
Del desierto fueron a Matana; 19de Matana a Najaliel, de Najaliel a Bamot, 20de Bamot al valle que hay en los llanos de Moab, a la cima del Fasga, que domina el desierto.
Continuando su camino por el Araba, Israel llegó a Asiongaber (golfo de Elán), para volver luego hacia el norte, siguiendo la frontera oriental de Edom y Moab, hasta el Amón, que separaba el reino de Moab del amor reo Seón. El itinerario es incompleto, y hay que llenar el vacío con textos de Deu 10:7 y Núm 33. La primera estación, Obot, es difícil de identificar; pero se propone un lugar al este de Edom11. lye-Abarim significa “ruinas de Abarim,” y se la ha querido identificar con jhbet-Ai, el αία del mapa de Mádaba12. El “torrente Zared” es identificado con Wady el-Hesa, al sudeste del mar Muerto13. El Amón es identificado comúnmente con Seil el-Mogib, que tiene un lecho profundo, y así señala el límite septentrional de Moab14. El texto cita a continuación un relato épico del libro Guerras de Yahvé, en el que se cantaban las gestas de Yahvé en favor de su pueblo, y quizá sea el mismo libro llamado Libro del Justo, también de carácter épico, citado en otros lugares15. Las localidades de Vaheb y Sufá son desconocidas; en cambio, Ar debe de ser Ar-Moab, la antigua capital del país16. La nueva estación de Beer, que significa pozo, debe de aludir a un alumbramiento inesperado de agua, debido a la ínter vención milagrosa de Yahvé (v.1 6). Con este motivo, un poeta, en el momento solemne en que los jefes de las tribus descubrían con sus bastones el pozo recién abierto y tapado para la inauguración solemne, declaraba la pertenencia del pozo a una tribu: “pozo cavado por los príncipes, alumbrado por los nobles del pueblo con sus cetros, con sus bastones” (v.18). En la poesía beduina popular son frecuentes estos cantos cuando se inaugura un pozo: “¡Brota, corre a borbotones agua…!” Es el paralelo del ¡Mana, pozo! del v.17b17. Matana y Najaliel son localidades no identificadas. Bamot puede ser el Bet Bamot de la estela de Mesa18. Los llanos de Moab es la meseta moabítica al norte del Amón. La “cima de Fasga” es identificada con Ras es-Siaga, a cuatro kilómetros del monte Nebo19, y “domina el desierto” o yesimon, región al pie del Fasga, cuyo nombre puede rastrearse quizá en el Sueimeh (Jirbet) actual20.
Victoria Sobre los Amorreos (21-35).
21Israel mandó embajadores a Seón, rey amorreo, para decirle: 22“Déjanos pasar por tu territorio; no iremos ni por los campos ni por las viñas, ni beberemos el agua de tus pozos; iremos por el camino real hasta salir de tus fronteras.” 23Seón se negó a dejar pasar a Israel por su territorio, y, reuniendo a toda su gente, salió al encuentro de Israel en el desierto y le dio la batalla en Yahsa. 24Israel le derrotó al filo de la espada, y se apoderó de su tierra desde el Amón hasta el Yaboq, hasta los hijos de Amón, pues Yahsa era frontera de los amonitas. 25Conquistó Israel todas estas ciudades, y habitó en las ciudades de los amorreos, en Hesebón y en todas las ciudades que de ella dependen, 26pues Hesebón era la residencia de Seón, rey de los amorreos, que había hecho antes la guerra al rey de Moab, y se había apoderado de toda su tierra hasta el Amón. 27Por eso cantaban los trovadores:
“Id a Hesebón, edificad y fortificad la ciudad de Seón.
28Fuego ha salido de Hesebón, llama de la ciudad de
que devoró las ciudades de Moab
[Seón; y consumió las alturas del Amón.
29¡Ay de ti, Moab! Has perecido, pueblo de Gamos;
fueron dados a la fuga tus hijos,
y sus hijas por cautivas del rey de los amorreos.
30Pero al rey de los amorreos, Seón,
le han arrebatado el noval desde Hesebón hasta Dibón.
Y sus mujeres, humilladas, hasta tener que encender el fuego en Mádaba.”]
31Así habitó Israel en la tierra de los amorreos. 32Mandó Moisés reconocer a Yazer, y se apoderaron de las ciudades que de ella dependían, expulsando de ellas a los amorreos que allí habitaban; 33y volviéndose, subieron camino de Basan, saliéndoles al encuentro Og, rey de Basan, con todo su pueblo para la batalla en Edray. 34Yahvé dijo a Moisés: “No le temas, que a tus manos te lo entregaré, a él, a su pueblo y toda su tierra, y harás con él lo que hiciste de Seón, rey de los amorreos, que habitaba en Hesebón.” 35Y le derrotaron a él y toda su gente, hasta no dejar ni uno, y se apoderaron de su tierra.
Llegados a la meseta de Moab, Moisés envió mensajeros para pedir paso por el territorio del rey amorreo, Seón (v.21). La denominación de amorreo es bastante genérica21, y designa una población semítica occidental que estaba extendida por Palestina, Siria y Transjordania. El rey amorreo niega el paso, y sale al encuentro de los israelitas, los cuales le vencen en Yahsa, la “Yahas” de la estela de Mesa, situada entre Mádaba y Dibón, al nordeste del mar Muerto. Los hebreos conquistaron todo el país moabita desde el Amón hasta el torrente Yaboq (Wady ez-Zerqa), al nordeste del Jordán septentrional, línea fronteriza con el reino de Og, rey de Basan, dividiendo en dos partes el territorio de Galaad. Era también línea fronteriza con el reino de Amón, que primitivamente comprendía el territorio desde el Amón al Yaboq, pero que había sido rechazado al oriente por los amorreos22. Yazer es identificada con la actual Sar, al sur de Aman. Hesebón es la actual Hesban. El redactor inserta aquí un antiguo canto de guerra que era cantado por los trovadores o mesalim, especie de poetas que en forma sentenciosa y gnómica se dedicaban a exaltar las gestas de las tribus23. No se sabe si el canto es de origen israelita o amorreo. Es un canto irónico contra los vencidos de la ciudad destruida de Ar-Moab por el rey amorreo Seón. Puede ser un canto israelita en el que se recuerda a Moab su antigua derrota a manos de Seón, que, a su vez, fue vencido por los hebreos24. Así entendido el poema, parece una invitación a los israelitas a reedificar Hesebón, destruida por ellos, porque de Hesebón partió el fuego devorador de Moab, enemigo tradicional de Israel (v.27). Caraos, dios nacional de los moabitas, ha abandonado a su pueblo (v.29). Sus hijas cautivas pueden ser las mujeres moabitas, o las ciudades dependientes de la capital Ar-Moab (v.28).
El v.30 es muy oscuro, y las versiones muy diversas. El TM dice: “Nosotros los hemos atravesado de flechas, Hesebón ha perecido hasta Dibón, y nosotros los hemos devastado hasta Nofaj, que está, junto a Mádaba.” Los LXX: “Y su raza perecerá, Hesebón hasta Dibón. Y las mujeres aún encienden el fuego sobre Moab.” Lagrange propone, corrigiendo el TM: “Y nosotros les atravesamos con flechas desde Hesebón hasta Dibón. Y los devastaremos mientras el fuego haya devorado a Mádaba.”25 La Vg: “Su yugo ha perecido desde Hesebón hasta Dibón; han llegado fatigados a Nofé y hasta Mádaba.”26 Dibán está a cinco kilómetros al norte del Amón, y en esa localidad se encontró la estela de Mesa, rey de Moab, en 1868, actualmente en el museo de Londres. Mádaba es mencionada también en esta estela, y está a ocho kilómetros de Hesebón27.
Continuando hacia el norte, los israelitas tuvieron que hacer frente al rey de Basan, Og, que reinaba desde el Yaboq hasta el Hermón. Es la Batanea de la época romana (del arameo Batan)28. Según Deu 3:11, Og era descendiente de los gigantes o refaim. El choque tuvo lugar en Edray, la actual Edreaat o Derat, al sudeste de Genesaret. La victoria fue de los israelitas, y la ciudad condenada al anatema, matando a todos sus habitantes29. La victoria sobre Seón, rey de Hesebón, y sobre Og, rey de Basan, fue cantada en la épica popular, y sus ecos aparecen en muchos salmos30. Con estas conquistas, Israel, a quien había prometido Dios la tierra de Canaán, limitada al oriente por el Jordán y mar Muerto, empieza a adueñarse de estas regiones orientales, en las que vendrán a instalarse las tribus de Rubén, Gad y Manasés.
1 Véase com. a Núm 14:45. – 2 Existe hoy un Tell Arad a 30 kilómetros’al sur de Hebrón. – 3 La Vg. y Sir. traducen “exploratorum viam,” leyendo tarim en vez de atarim. – 4 Véase G. Jean, Le Milieu Biblique II 419. – 5 Véase com. a Lev 27:28, y A. Fernández: Bi 5 (1924) 3-5. – 6 Cf. Núm 11:6. – 7 En heb. hay juego de palabras entre najas (serpiente) y nejoset (bronce). – 8 Sab 16:6-7. – 9 2Re 18:4. – 10 Jua 3:14s. – 11 Cf. RB(1800) 286. – 12 Cf. ibid., 287. – 13 Abel, Géog. I 489. – 14 Cf. Dt 2: Núm 24:36; Jos 11:2; Jue 11:13. Véase Abel, o.c., I 178-179.487-89. – 15 Cf. Jos 10:13; 2Sa 1:18. – 16 Cf. Núm 22:36. – 17 Citado por H. Gressmann, Mose und seine Zeit 349. – 18 Hay otro Bamot-Baal citado en Núm 22:41; Jos 13:17. – 19 Cf. Abel, Géog. 1380. – 20 Cf. Mallon: Bi (1929) 218-220. – 21 Cf. Núm 13:20 y com. – 22 Cf. Deu 2:20; Jue 11:13. En el Yaboq tuvo lugar la lucha del ángel con Jacob (Gen 32:22-31). – 23 Cf. Isa 14:4; Hab 2:6. – 24 Véase M. J. Lagrange: RB (1899) 548. – 25 Ibid., 552. – 26 La Bib. de Jérusalem: “Hesebón ha destruido a los niños hasta Dibón, a las mujeres hasta Nofah, a los hombres hasta Medaba.” Cantera: “de Sijón, rey amorreo, muerte les tenemos dado con saetas, y Jesbón hasta Dibón ya ganada. Hasta Nofaj devastamos, que está próxima a Medeba.” Clamer: “Los hemos herido con saetas; perdida Hesebón hasta Dibón; hemos devastado hasta Nofé, con el fuego hasta Mádaba.” – 27 Véase RB (1897) 165-184.450-458. – 28 Cf. Abel, Géog. I 275. – 29 Deu 2:34-35. – 30 Sal 135:1; Sal 136:19.
Fuente: Biblia Comentada
el rey de Arad. Este rey depredador procedía de una ciudad cananea en el sur (esto es, el Neguev).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
La primera victoria de Israel sobre los cananeos tuvo lugar en Horma, el lugar donde antes habían sido derrotados (vea Núm 14:45).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
En contraste con Núm 1:1-54; Núm 2:1-34; Núm 3:1-51; Núm 4:1-49; Núm 5:1-31; Núm 6:1-27; Núm 7:1-89; Núm 8:1-26; Núm 9:1-23; Núm 10:1-36, en Núm 11:1 tiene lugar un cambio principal. El obediente Israel se transformó en el Israel quejumbroso (Núm 11:1; Núm 14:2; Núm 14:27; Núm 14:29; Núm 14:36; Núm 16:1-3; Núm 16:41; Núm 17:5) y rebelde (Núm 14:9; Núm 17:10). Finalmente, Moisés y Aarón se rebelaron también contra el Señor (Núm 20:10; Núm 20:24). Como respuesta a la desobediencia a Israel se encendió la ira del Señor (Núm 11:1; Núm 11:10; Núm 11:33; Núm 12:9; Núm 14:18; Núm 25:3-4), que lanzó plagas sobre su pueblo (Núm 14:37; Núm 16:46-50; Núm 25:8-9; Núm 25:18), como había hecho con Faraón y los egipcios (Éxo 9:14; Éxo 12:13; Éxo 30:12). Sin embargo, aunque Dios juzgó a aquella generación de Israel, seguirá cumpliendo sus promesas a Abraham en el futuro (Núm 23:5 –Núm 24:24).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Estos capítulos registran el comienzo de la transición desde la vieja generación (representada por María y Aarón) a la nueva generación (representada por Eleazar). Geográficamente, Israel pasa de Cades (Núm 20:1) a los campos de Moab (Núm 22:1), desde donde se emprendería la conquista de la tierra. Hay un intervalo de treinta y siete años entre Núm 19:22 y Núm 20:1.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Arad es destruida. Arad era una ciudad cananea. Esta misma gente, juntamente con los amalequitas, habían destruido a algunos de los israelitas 38 años atrás en el mismo lugar, Horma (14:45). Ahora los atacan nuevamente. En esta ocasión, Israel confiaba en Dios. El juramento de Israel, “yo destruiré por completo sus ciudades”, también estaba acorde con las promesas de Dios. Los cananeos tenían que ser destruidos.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
21.5 El Salmo 78 nos dice por qué se quejaba Israel: (1) sus espíritus no eran fieles a Dios (Psa 78:8); (2) no quisieron obedecer la ley de Dios (Psa 78:10); (3) olvidaban los milagros que Dios les hacía (Psa 78:11). Nuestras quejas a menudo tienen sus raíces en algunas de estas acciones y actitudes necias. Si podemos erradicar la fuente de nuestra queja, no se anidará ni crecerá en nuestra vida.21.6 Dios utilizó serpientes venenosas para castigar al pueblo por su incredulidad y sus quejas. El desierto de Sinaí cuenta con una gran variedad de serpientes. Algunas se esconden bajo la arena y atacan sin previo aviso. Los israelitas y los egipcios las temían mucho. La mordida de una serpiente venenosa significaba, por lo general, una muerte lenta con un sufrimiento intenso.21.8, 9 Cuando colgaron en el asta la serpiente de bronce, los israelitas no conocían el significado total que Jesucristo le daría a aquel hecho (véase Joh 3:14-15). Jesús explicó que así como los israelitas habían sanado al mirar la serpiente del asta, los creyentes podían ser salvos de la enfermedad del pecado al mirar a Jesús en la cruz. No era la serpiente lo que curaba a aquella gente, sino la fe en que Dios podía curarlos. Demostraban esa fe al seguir las instrucciones de Dios. De la misma manera, nosotros debemos continuar mirando a Cristo (véase Heb 12:2).21.14 No existe registro alguno del libro de las batallas de Jehová. Lo más probable es que fuese una colección de cantos o poemas de victoria.21.27-30 Quemos, el dios nacional de Moab, era adorado como dios de la guerra. Sin embargo, este dios falso no fue de ninguna ayuda a esta nación cuando peleó contra Israel. El Dios de Israel era más fuerte que cualquiera de los dioses de guerra de Canaán.21.34 Dios aseguró a Israel que su enemigo ya estaba conquistado ¡aún desde antes que comenzara la batalla! Dios quiere darnos la victoria sobre nuestros enemigos (que, por lo general, son problemas relacionados con el pecado y no soldados armados). Pero primero, tenemos que creer que El nos puede ayudar. En segundo lugar, debemos tener la confianza que El nos ayudará. Por último, debemos seguir los pasos que nos indica.BATALLAS CONTRA SEHON Y OG : El rey Sehón negó a los israelitas el paso por su tierra, y los atacó en Jahaza, Israel lo derrotó, ocupando la tierra que se encuentra ubicada entre los ríos Arnón y Jaboc, incluyéndola ciudad capital de Hesbón. Cuando marcharon hacia el norte, derrotaron al rey Og de Basán en Edrei.LA SERPIENTE EN EL DESIERTOCompare usted mismo los textos: Num 21:7-9 y Joh 3:14-15Israelitas CristianosMordidos por serpientes Mordidos por el pecadoPoco dolor inicial, luego intenso sufrimiento Poco dolor inicial, luego intenso sufrimientoMuerte física por el veneno de las serpientes Muerte espiritual por el veneno del pecadoLa serpiente de bronce es levantada en el desierto Cristo es levantado en la cruzMirar a la serpiente salvaba la vida Mirar a Cristo nos salva de la muerte eterna
Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir
NOTAS
(1) O: “el sur”, es decir, el sur de la Tierra Prometida.
REFERENCIAS CRUZADAS
a 1083 Núm 33:40; Jos 12:14
b 1084 Núm 13:22
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
La primera victoria de Israel sobre los cananeos ocurrió en Horma, el mismo lugar donde fueron derrotados unos cuarenta años antes cuando algunos israelitas, después de oír las consecuencias de no seguir el consejo de Josué y Caleb, trataron de proseguir con la conquista de Canaán (14:40– 45).
Fuente: La Biblia de las Américas
Arad… → Núm 33:40; Atarim… Prob. topónimo. Otra traducción posible: Exploradores.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
I.e., región del sur
O, los espías
Fuente: La Biblia de las Américas
g Núm_33:40.
21.1 Atarim, prob. un topónimo. rtf1fbidisansiansicpg1252deff0fonttblf0fromanfprq2fcharset2 Wingdings 3; N Exploradores.
Fuente: La Biblia Textual III Edición
[=] *Num 33:40 *Jue 1:16
Fuente: Notas de la Biblia Latinoamericana
[8] Jn 3, 14.