Comentario de 1 Samuel 7:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Los hombres de Quiriat-jearim vinieron, subieron el arca de Jehovah y la llevaron a la casa de Abinadab, en la colina. Luego consagraron a su hijo Eleazar para que guardase el arca de Jehovah.
Quiriat-jearim. 1Sa 6:21; Jos 18:14; 2Sa 6:2; 1Cr 13:5, 1Cr 13:6; Sal 132:6.
casa de Abinadab. 2Sa 6:3, 2Sa 6:4; 1Cr 13:7; Isa 52:11.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Los de Quiriat-jearim llevan el arca a Abinadab, y santifican a Eleazar, su hijo para que la guardase, 1Sa 7:1.
Pasan veinte años, 1Sa 7:2,
Los Israelitas, con Samuel en Mizpa, 1Sa 7:3-6.
Mientras Samuel ora y sacrifica, el Señor derrota a los filisteos con truenos en Eben-ezer, 1Sa 7:7-12.
Los filisteos son vencidos, 1Sa 7:13-14.
Samuel juzga a Israel, 1Sa 7:15-17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Eleazar, cuyo nombre significa «Dios es ayuda» o «Dios es poder», estaba consagrado (literalmente apartado) para cuidar el arca. Eleazar era probablemente un miembro de la familia sacerdotal porque no había juicio sobre su ministerio ante el arca.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Reaparición de Samuel (7:2-14).
2 Mucho tiempo pasó, veinte años, desde que el arca fue depositada en Quiriat-Jearim, y toda la casa de Israel se volvió a Yahvé. 3 Dijo, pues, Samuel: “Si de todo corazón os convertís a Yahvé, quitad de en medio de vosotros los dioses extraños y las astartés; enderezad vuestro corazón a Yahvé y servidle sólo a El, y El os librará de las manos de los filisteos.” 4Los hijos de Israel quitaron todos los baales y astartés y sirvieron sólo a Yahvé. 5 Samuel les dijo: “Congregad a todo Israel en Masfa, y yo rogaré a Yahvé por vosotros.” 6 Reuniéronse en Masfa, y sacando agua, la derramaron en tierra ante Yahvé; y ayunaron aquel día, y clamaban: “Hemos pecado contra Yahvé.” 7 Samuel juzgaba a los hijos de Israel en Masfa. Habiendo sabido los filisteos que los hijos de Israel se habían congregado en Masfa, subieron sus príncipes contra Israel. Tuvieron miedo de los filisteos los hijos de Israel, 8 y dijeron a Samuel: “No ceses de clamar por nosotros a Yahvé, nuestro Dios, para que nos libre de la mano de los filisteos.” 9 Samuel tomó un cordero de leche y lo ofreció entero en holocausto a Yahvé, y clamó a Yahvé por Israel, y Yahvé lo escuchó. 10 Mientras Samuel ofrecía el holocausto, se acercaron los filisteos para atacar a Israel; pero Yahvé hizo tronar muy fuertemente aquel día sobre los filisteos y los puso en derrota, siendo batidos por los hijos de Israel. 11Los hombres de Israel, saliendo de Masfa, persiguieron a los filisteos en derrota hasta más abajo de Bet-Car. 12 Samuel cogió una piedra y la puso entre Masía y Jesana; la llamó Eben-Ezer, diciendo: “Hasta aquí nos socorrió Yahvé.” 13Así humillados, no volvieron los filisteos más contra la tierra de Israel; y pesó la mano de Yahvé sobre ellos durante toda la vida de Samuel. 14Las ciudades que los filisteos habían tomado a Israel volvieron a poder de éste, desde Acarón hasta Gat. Israel arrancó de las manos de los filisteos su territorio, y hubo también paz entre Israel y los amorreos.
El presente capítulo, tan luminoso a primera vista, encierra puntos oscuros imposibles de elucidar. El arca de la alianza es conducida a Quiriat-Jearim, ciudad perteneciente a la tetrápolis gabaonita (Jos 9:7), y, por lo mismo, israelita por adopción. Sus habitantes eran en parte cananeos y en parte israelitas. Además, por encontrarse cerca de la línea fronteriza con los filisteos, era considerada como ciudad neutral, terreno de nadie. Choca que el arca sea conducida a este pueblo y no a Silo, a menos que supongamos que los filisteos arrasaron el santuario en donde se encontraba antes. Pero aun en este supuesto no se explica el poco entusiasmo que el pueblo siente por ella y el hecho de que se confíe su custodia a un profano, Eliezer, consagrado aprisa y corriendo Que 17:5), y no a los sacerdotes y levitas que de Silo marcharon a Nob para fijar allí el tabernáculo. Mejor que en Quiriat-Jearim hubiera estado el arca en Nob, dentro del tabernáculo. ¿Por qué Samuel no se traslada a Quiriat-Jearim, al lado del arca? Ni éste, ni Saúl, ni David, hasta el día que derrotó definitivamente a los filisteos, se interesaron por ella, ni el pueblo acudía allí en peregrinación. Budde parece haber encontrado la llave que permite una solución satisfactoria. Para evitar los males que Yahvé causaba a los filisteos, determinaron éstos repatriar el arca de la alianza. Pero mientras fueron ellos dueños de Israel no permitieron que el arca de la alianza volviera a ocupar el mismo sitio que antes, reteniéndola en una ciudad cercana a la frontera con el fin de controlar la atmósfera religiosa y política que podría crearse eventualmente en torno a la misma. Parecióles que la ciudad más a propósito era Quiriat-Jearim por las siguientes razones: i) por colindar con la frontera; 2) por ser cananeos, y, por lo mismo, enemigos de los hebreos, la mayoría de sus habitantes; y 3) porque la colonia hebraica residente allí bastaba para asegurar un culto digno a Yahvé (Üesnoyers, I 220-221).
El capítulo está desplazado del contexto, no teniendo relación lógica con lo que precede. Con este capítulo quiso su autor demostrar que la monarquía no era necesaria existiendo en Israel jueces de la talla de Samuel. El texto quiere ser una preparación de la versión antimonárquica que se vislumbra en 8:1-22; 10:18-25; c.12 y 15. Samuel reaparece en el teatro de la historia igual que los antiguos jueces Que 6:6-10; 10:10-16). El pueblo de Israel se apartó del camino recto, pero, oprimido por los filisteos, se convierte al Señor. Ante la buena disposición del pueblo, Samuel congregó a Israel en Masfa Que 20:1; 1Sa 10:17), el actual Tell es-Nasbe Que 2:13). La conversión de Israel viene expresada simbólicamente con la efusión de agua delante de Yahvé (1Re 18:32-35; Lam 2:19), con el ayuno Que 20:26) y la confesión pública de los pecados. La idolatría había contaminado la tierra y era necesario purificarla. No se trata de ningún sacrificio ni libación.
En Masfa juzgaba Samuel a los hijos de Israel (v.7). De la reunión de Masfa tuvieron noticia los filisteos, que subieron para dispersar a los allí congregados, Samuel no les temía; antes bien, ofreció un cordero lechal de más de siete días (Lev 22:27) en holocausto, mientras todo Israel clamaba a Yahvé. Dios escuchó su plegaria: Hizo tronar aquel día sobre los filisteos y los puso en derrota (v.10). El trueno es la voz de Dios (Sal 18:14; Sal 29:3-9; Job 37:4-5). Con ello quiere el autor decir que desencadenó Yahvé una tempestad, con truenos y relámpagos, que atemorizó a los filisteos. De este hecho se conservó un recuerdo imperecedero (Ecli 46:19-21), como de la tempestad en tiempos de Josué en Betorón (Jos 10:10-14).
Los de Masfa persiguieron a los filisteos más allá de Bet-Car. Otros autores leen Bet-Horón en vez de Bet-Car, apoyándose en que aquella localidad es la ruta clásica de las invasiones por parte de los filisteos y de los pueblos de la costa (Jos 10:10-11). Nos parece acertada la advertencia de Desnoyers: “No es conocido Bet-Car; pero esto no autoriza la lección de Bet-Horón” (Hist. II 221). Tampoco sabemos dónde estaba emplazada Jesana, que puede corresponder a Asena (Jos 15:33), a Aslin (Abel) o a Bet Shena (De Vaux Ubach). Sobre Eben-Ezer véase 4:1. Es difícil, escribe De Vaux, que este lugar sea el mismo Deu 4:1; pero la semejanza de nombres es intencionada: esta victoria borra el recuerdo de la derrota anterior en este mismo lugar.
Lo que se dice al final del capítulo es un cuadro demasiado optimista. Es verdad que no volvieron los filisteos a la carga mientras duró la judicatura de Samuel, pero reanudaron sus ataques en tiempos de Saúl. Acarón y Gat quedaron en manos de los filisteos (Deu 9:16; Deu 10:1ss; Deu 13:2ss). Antes de David no fue nunca Israel dueño de la tierra de los filisteos (Jue 1:18; Jue 1:19; Jue 3:3).
Petición de un rey (Jue 7:15-17).
15 Samuel juzgó a Israel todo el tiempo de su vida. 16 Cada año hacía un recorrido por Betel, Caígala y Masfa, y allí, en todos estos lugares, juzgaba a Israel. 17 Volvíase luego a Rama, donde estaba su casa, y allí juzgaba a Israel. Alzó allí un altar a Yahvé.
Aun en vida de Saúl continuó Samuel ejerciendo sus funciones de juez en materia religiosa, siendo consejero del rey en asuntos militares. Su domicilio estaba en Rama (Ramathaim,Jue 1:1), pero se desplazaba a Betel (Jos 7:2), a Caígala, entre el Jordán y Jericó Qos 4:19), y Masfa (Jue 20:1). Como Gedeón (Jue 6:24), erige un altar en Rama, su patria. No era sacerdote ni levita. El derecho de erigir un altar pertenecía al jefe de familia, según costumbre muy antigua, en tiempos en que ejercía los poderes judiciales, militares y religiosos. Los reyes, que heredaron estos derechos antiguos, gozarán de gran iniciativa en materia cultual 1.
1 H. Schmóckel, Der Gott Dagan. Ursprung, Verbreitung und Wesen seines Kultes (Hei-delberg 1928).
2 L’higiéne et la medicine á través la Bible (París 1932) 73·
1 Sobre las excavaciones practicadas en el lugar, véase E. Wright, Airi §h&ns Excava-tions 6 vols. (Haverford 1931-1939).
Fuente: Biblia Comentada
7.1 El arca fue llevada a Quiriat-jearim, una ciudad cercana al campo de batalla, para custodiarla, y a Eleazar se le dio la responsabilidad de cuidarla. ¿Por qué no fue regresada al tabernáculo en Silo? Probablemente debido a las acciones perversas de los sacerdotes (2.12-17), Silo había sido capturada y destruida por los filisteos en una batalla anterior (4.1-18; Jer 26:2-6). El tabernáculo y su mobiliario estaban aparentemente a salvo, porque leemos que durante el reinado de Saúl fue establecido en Nob (Jer 21:1-6) y en Gabaón durante los reinados de David y Salomón (1Ch 16:39; 1Ch 21:29-30; 2 Crónicas 1). Sin embargo, Silo no se vuelve a mencionar en los libros históricos del Antiguo Testamento. La nueva casa de Samuel fue Ramá (1Ch 7:15-17; 1Ch 8:4), su lugar de nacimiento (más evidencia de la destrucción de Silo). SAMUELA menudo nos preguntamos cómo habrá sido la infancia de los grandes de la historia. Tenemos muy poca información acerca de los primeros años de la mayoría de las personas mencionadas en la Biblia. Samuel es una grata excepción. El vino como resultado de la respuesta de Dios a la ferviente oración de Ana por un hijo. (El nombre Samuel viene de la expresión hebrea, «pedido a Dios».) Dios moldeó a Samuel desde el principio. Como Moisés, Samuel fue llamado para desempeñar diferentes roles: juez, sacerdote, profeta, consejero y hombre de Dios en un momento crucial en la historia de Israel. Dios actuó a través de Samuel porque este estaba dispuesto a ser lo que Dios quería que fuera: su siervo.Samuel demostró que aquellos a quienes Dios encuentra fieles en las cosas pequeñas se les confiarán cosas grandes. Creció ayudando al sumo sacerdote (Elí) en el tabernáculo, hasta que Dios le encomendó otras responsabilidades. Dios pudo utilizar a Samuel porque él estaba genuinamente dedicado a El.Samuel avanzó porque estaba escuchando las instrucciones de Dios. Demasiado a menudo pedimos a Dios que controle nuestras vidas sin que renunciemos a las metas que nos hemos fijado. Pedimos a Dios que nos ayude a llegar a donde nosotros queremos. El primer paso que tenemos que dar para corregir esta tendencia es entregarle tanto el control como el destino de nuestras vidas. El segundo paso es ser obediente a lo que ya sabemos que El requiere de nosotros. El tercer paso es escuchar todas las instrucciones que provengan de su Palabra, el mapa de Dios para la vida.Puntos fuertes y logros :– Utilizado por Dios para ayudar a Israel en su transición de un pueblo tribal gobernado libremente a una monarquía– Ungió a los dos primeros reyes de Israel– Fue el último y el más efectivo de los jueces de Israel– Se lo menciona en el Salón de la Fe en Hebreos 11Debilidades y errores :– Fue incapaz de guiar a sus hijos a una relación estrecha con Dios.Lecciones de su vida :– La importancia de lo que la gente logra está directamente relacionado con su relación con Dios– La clase de personas que somos es más importante que cualquier cosa que podamos hacerDatos generales :– Dónde: Efraín– Ocupaciones: Juez, profeta, sacerdote– Familiares: Madre: Ana. Padre: Elcana. Hijos: Joel y Abías– Contemporáneos: Elí, Saúl, DavidVersículos clave :»Y Samuel creció, y Jehová estaba con él, y no dejó caer a tierra ninguna de sus palabras. Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, conoció que Samuel era fiel profeta de Jehová»(1Sa 3:19-20).Su historia se relata en 1 Samuel 1-28. También se lo menciona en Psa 99:6; Jer 15:1; Act 3:24; Act 13:20; Heb 11:32. 7.2, 3 Israel lloró y se afligió durante veinte años. El arca fue guardada como se pone una caja sin valor en un ático, y parecía como si el Señor hubiera abandonado a su pueblo. Samuel, ahora adulto, los estimuló para que actuaran diciéndoles que si realmente estaban avergonzados, debían hacer algo al respecto. Cuán fácil es para nosotros quejarnos por nuestros problemas, hasta con Dios, mientras que nos negamos a actuar, a cambiar, y a hacer lo que debemos hacer. Ni siquiera seguimos el consejo que Dios nos ha dado. ¿Ha sentido alguna vez como si Dios lo hubiera abandonado? Revise para ver si hay algo que El ya le haya dicho que haga. Quizá no reciba nuevas instrucciones hasta que haya actuado conforme a sus instrucciones previas.7.3 Samuel urgió a los israelitas para que se deshicieran de sus dioses extraños. Hoy día, los ídolos son mucho más sutiles que los dioses de madera y de piedra, pero son igualmente peligrosos. Cualquier cosa que tenga el primer lugar en nuestra vida o que nos controle se convierte en nuestro dios. Dinero, éxito, bienes materiales, orgullo o cualquiera otra cosa puede ser un ídolo si toma el lugar de Dios en nuestras vidas. Sólo Dios merece nuestro culto y adoración, y no debemos permitir que tenga rivales. Si tenemos «dioses extraños» en nuestra vida, necesitamos pedir a Dios que nos ayude a destronarlos, haciendo del verdadero Dios nuestra primera prioridad.7.4 Se creía que Baal era el hijo de El, deidad principal de los cananeos. Baal era considerado dios del trueno y de la lluvia, por lo tanto controlaba la vegetación y la agricultura. Astarot era una diosa de amor y guerra (en Babilonia recibía el nombre de Istar y Astarte o Afrodita en Grecia). Representaba la fertilidad. Los cananeos creían que mediante la unión sexual de Baal y Astarot, la tierra mágicamente se rejuvenecería y se haría fértil.7.5 Mizpa tenía un significado especial para la nación israelita. Fue en Mizpa donde se reunieron los israelitas para movilizarse contra la tribu de Benjamín (Jdg 20:1). Fue allí donde Samuel fue designado para ser juez (Jdg 7:6), y Saúl, el primer rey de Israel, fue identificado y presentado al pueblo (Jdg 10:17ss).7.6 El derramar agua en la tierra «delante de Jehová» era una señal de arrepentimiento por el pecado, volver de la idolatría y decidir obedecer exclusivamente a Dios.7.6 Samuel llegó a ser el último de una larga línea de jueces (líderes) de Israel que comenzó en los días cuando Israel conquistó la tierra prometida. Para ver una lista de estos jueces refiérase al cuadro de Jueces 2. Un juez era tanto un líder político como religioso. Dios era el líder de Israel, mientras que el juez era el vocero de Dios para el pueblo y el administrador de justicia a través del país. Mientras algunos de los jueces de Israel confiaron más en su propio juicio que en el de Dios, la obediencia de Samuel y su dedicación a Dios lo hizo ser uno de los más grandes jueces en la historia de Israel. (Para más información sobre Samuel como juez, véase la nota a 4.18.)7.12 Los israelitas tuvieron grandes dificultades con los filisteos, pero Dios los rescató. En respuesta, el pueblo puso una piedra como recordatorio de la gran ayuda y liberación de Dios. Durante los momentos difíciles, debemos recordar los momentos cruciales de nuestro pasado para que nos ayuden en el presente. Al recordar las victorias pasadas de Dios podemos ganar confianza y fortaleza para el presente.7.14 En los tiempos de Josué, los amorreos eran una tribu poderosa desparramada a lo largo de la zona de colinas a ambos lados del Jordán, con una fuerte concentración en la margen derecha de este río, frente al Mar Muerto. En el contexto de este versículo, sin embargo, amorreos es otro nombre general para todos los habitantes de Canaán que no eran israelitas.
Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir
NOTAS
(1) “En la colina”, MLXX; Vg: “en Guibeah”.
REFERENCIAS CRUZADAS
a 272 2Sa 6:2; 1Cr 13:5
b 273 2Sa 6:4; 1Cr 13:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
la llevaron a la casa de Abinadab. Aunque la devolvieron al territorio israelita, el arca quedó prácticamente en relativa oscuridad hasta que David la llevó a Jerusalén (v. 2 S 6). Más tarde fue colocada en el templo de Salomón (v. 1 R 8:1– 9), pero desapareció cuando Jerusalén fue destruida por Nabucodonosor (2 R 24:13).
Fuente: La Biblia de las Américas
[1] Algunos intérpretes convienen que Abinadab era de la estirpe de Leví y por esto sería consagrado con las ceremonias prescritas para los levitas. Num 8, 7.[3] Sucesor de Helí.[12] Esta fue la inscripción que se grabó en aquella piedra Roca del Auxilio.[ 15] Aun después de la elección del rey Saúl, Samuel continuó gozando de gran autoridad. Parece que siguió administrando justicia al pueblo y que era el consejero de la nación y del rey.[16] Este verso presenta a un excelente pastor del pueblo, que visita el país y sirve a todos. Samuel edificó en Rámata un altar al Señor, donde ejerció la función de juez.