Comentario de 1 Corintios 7:19 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

La circuncisión no es nada, y la incircuncisión no es nada; más bien, lo que vale es guardar los mandamientos de Dios.

7:19 — La circuncisión nada es, y la incircuncisión nada es, sino el guardar los mandamientos de Dios — Véanse Gál 5:6; Gál 6:15; Rom 2:28-29. Bajo la ley de Cristo, el ser circuncidado, o no, no tiene que ver con la moralidad. Bajo la ley de Moisés la circuncisión era un mandamiento para el judío, pero esa ley fue clavada en la cruz (Efe 2:14; Col 2:14). En Cristo no hay distinción entre judío y gentil (Gál 3:26-29). El cristiano, salvo por gracia, si trata de justificarse por la ley de Moisés, de la gracia cae (Gál 5:4).

No importa de cuál nacionalidad sea la persona, ni importa su identidad con cierta raza de gente. Tal consideración no le ayuda nada delante de Dios. Lo que importa es que todo el mundo esté guardando los mandamientos de Dios (Mat 7:21-23; 2Ts 1:8; Heb 5:8-9). Es falsa toda esa filosofía de que para agradar a Dios es necesario efectuar grandes cambios en el estado matrimonial y en las demás relaciones externas de la vida. No, lo que importa es que cada quien esté obedeciendo a los mandamientos de Dios dentro de las relaciones de la vida en que Dios le ha permitido hallarse.

A los sectarios que tratan de presentar a Pablo como promotor de la salvación por la fe sola, se les llama la atención a lo que él dice aquí.

Hay quienes quieren aplicar este versículo al bautismo, para probar que no es importante para el perdón de pecados. Afirman que el bautismo tomó el lugar de la circuncisión, y que la circuncisión ya no importa. Ignoran dos cosas: primero, que afirman lo que no pueden probar, pues el bautismo no tomó el lugar de nada; y segundo, el bautismo es mandamiento de Dios (Hch 2:38; Hch 10:48; Hch 22:16).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

la circuncisión. 1Co 8:8; Rom 2:25-29; Rom 3:30; Gál 5:6; Gál 6:15.

sino el guardar los mandamientos. 1Sa 15:22; Jer 7:22, Jer 7:23; Mat 5:19; Jua 15:14; 1Jn 2:3, 1Jn 2:4; 1Jn 3:22-24; 1Jn 5:2, 1Jn 5:3; Apo 22:14.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

GUARDAR LOS MANDAMIENTOS DE DIOS. ¿Cómo puede Pablo, que enfatizó tan enérgicamente la salvación por la fe (Rom 3:1-31 y Rom 4:1-25), afirmar que lo que de veras cuenta es «guardar los mandamientos de Dios»? Es que la salvación por la fe debe llevar a la obediencia, al amor y al servicio a Dios. Se requiere como mínimo ese nivel de obediencia para la fe salvadora del NT (cf. Gál 5:6; Gál 6:15).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

7:19 — La circuncisión nada es, y la incircuncisión nada es, sino el guardar los mandamientos de Dios – Véanse Gál 5:6; Gál 6:15; Rom 2:28-29. Bajo la ley de Cristo, el ser circuncidado, o no, no tiene que ver con la moralidad. Bajo la ley de Moisés la circuncisión era un mandamiento para el judío, pero esa ley fue clavada en la cruz (Efe 2:14; Col 2:14). En Cristo no hay distinción entre judío y gentil (Gál 3:26-29). El cristiano, salvo por gracia, si trata de justificarse por la ley de Moisés, de la gracia cae (Gál 5:4).
No importa de cuál nacionalidad sea la persona, ni importa su identidad con cierta raza de gente. Tal consideración no le ayuda nada delante de Dios. Lo que importa es que todo el mundo esté guardando los mandamientos de Dios (Mat 7:21-23; 2Ts 1:8; Heb 5:8-9). Es falsa toda esa filosofía de que para agradar a Dios es necesario efectuar grandes cambios en el estado matrimonial y en las demás relaciones externas de la vida. No, lo que importa es que cada quien esté obedeciendo a los mandamientos de Dios dentro de las relaciones de la vida en que Dios le ha permitido hallarse.
A los sectarios que tratan de presentar a Pablo como promotor de la salvación por la fe sola, se les llama la atención a lo que él dice aquí.
Hay quienes quieren aplicar este versículo al bautismo, para probar que no es importante para el perdón de pecados. Afirman que el bautismo tomó el lugar de la circuncisión, y que la circuncisión ya no importa. Ignoran dos cosas: primero, que afirman lo que no pueden probar, pues el bautismo no tomó el lugar de nada; y segundo, el bautismo es mandamiento de Dios (Hch 2:38; Hch 10:48; Hch 22:16).

Fuente: Notas Reeves-Partain

Rom 2:25-29; Gál 5:6; Gál 6:15.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

i 335 Rom 2:25

j 336 Gál 6:15; Col 3:11

k 337 Ecl 12:13; Jer 7:23; Gál 5:6; 1Jn 5:3

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

19 (1) Tanto la circuncisión como la incircuncisión son asuntos externos y no valen nada en realidad; lo único que importa es guardar los mandamientos de Dios ( Gál_5:6 ; 6:15; Rom_2:25-29).

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro