Comentario de 1 Juan 3:16 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
En esto hemos conocido el amor: en que él puso su vida por nosotros. También nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
3:16 — “En esto” se refiere a la frase que dice, “él puso su vida por nosotros.” — “hemos conocido el amor,” El tiempo perfecto aquí en este caso indica el conocimiento poseído ahora acerca del amor, como consecuencia de haber experimentado en tiempo pasado el sacrificio que hizo Cristo a favor nuestro. Lo conocemos porque lo vimos demostrado en la muerte de Cristo por nosotros. Véanse 2Co 5:21; Rom 5:6-10.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
en esto hemos conocido. 1Jn 4:9, 1Jn 4:10; Mat 20:28; Jua 3:16; Jua 10:15; Jua 15:13; Hch 20:28; Rom 5:8; Efe 5:2, Efe 5:25; Tit 2:13; 1Pe 1:18; 1Pe 2:24; 1Pe 3:18; Apo 1:5; Apo 5:9.
también nosotros debemos. 1Jn 2:6; 1Jn 4:11; Jua 13:34; Jua 15:12, Jua 15:13; Rom 16:4; Flp 2:17, Flp 2:30.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
El amor mostrado al hermano y la obediencia a sus mandamientos revelan una saludable relación con Dios. El asesinato y el odio quitan la vida; el amor nos da vida. Jesús es el ejemplo supremo. Caín sacrificó a su hermano; Cristo se sacrificó Él mismo. El ejemplo de Cristo no sólo se debe admirar; se debe copiar (1Jn 2:6).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
El amor de Dios se expresa por medio del sacrificio propio, no con simples palabras. Las acciones dicen más que todas las promesas y pronunciamientos que podamos hacer. En los (vv. 1Jn 3:14, 1Jn 3:15), Juan estableció la necesidad de amar a otros creyentes como nos amamos a nosotros mismos. Aquí, sin embargo, da un paso más al pedirnos que amemos a otros creyentes más de lo que nos amamos a nosotros mismos, que estemos dispuestos a dar nuestra vida por los demás, así como Cristo dio su vida por nosotros.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
En esto hemos conocido el amor. Con esta frase, Juan introduce el parámetro de amor que se refleja en el cristianismo genuino. Este sirve como la vara que mide toda expresión de amor (vea el v. 1Jn 3:18). Juan presenta la tercera característica de los hijos de Satanás en términos de su falta de amor. Los hijos de Satanás se distinguen por su indiferencia hacia las necesidades de otros (vea también los vv. 1Jn 3:12; 1Jn 3:15). él puso su vida por nosotros. Esta expresión es propia y única de Juan (Jua 10:11; Jua 10:15; Jua 10:17-18; Jua 13:37-38; Jua 15:13) se refiere a vaciarse uno mismo de algo. El amor cristiano lleva al sacrificio y la entrega de uno mismo por los demás. Cristo renunció a su propia vida por el bien de los creyentes y su sacrificio perfecto es la esencia del amor cristiano (Jua 15:12-13; Flp 2:5-8; 1Pe 2:19-23). también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. Dios llama a los cristianos a amarse unos a otros y a vivir conforme al mismo parámetro de amor que Él tuvo por nosotros (vea el v. 1Jn 3:16 a).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
3:16 — “En esto” se refiere a la frase que dice, “él puso su vida por nosotros.”
— “hemos conocido el amor,” El tiempo perfecto aquí en este caso indica el conocimiento poseído ahora acerca del amor, como consecuencia de haber experimentado en tiempo pasado el sacrificio que hizo Cristo a favor nuestro. Lo conocemos porque lo vimos demostrado en la muerte de Cristo por nosotros. Véanse 2Co 5:21; Rom 5:6-10.
— “en que él puso su vida por nosotros;” Véase Jua 10:11; Jua 10:17-18. Murió por nosotros (1:7; 2:2; Tit 2:14). Su muerte fue sustitucionaria (Mat 20:28; Gál 2:20; Efe 5:2). “Vida” aquí traduce la palabra griega psuke, a veces traducida “alma” (Heb 10:39).
— “también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.” El tema tratado es el amor. Habiendo conocido el amor por medio de ser los recipientes del amor de Cristo, manifestado en su muerte por nosotros, debemos nosotros imitar su ejemplo al amar a los hermanos, dando nuestras vidas por ellos, cuando el caso lo exige. Véanse Jua 15:12-13. Compárense Jua 13:37-38; Rom 16:3-4; Flp 2:30.
Caín es ejemplo del aborrecimiento que mata a otros; Cristo, del amor que pone vida por otros. El aborrecimiento quita porque es egoísta; el amor se sacrifica por el bien de otros. Debemos imitar a Cristo, quien nos es el ejemplo supremo de amor. Debemos siempre sacrificarnos por el bien espiritual de los hermanos.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Jua 10:11; Jua 15:17-18; Jua 15:13; Gál 2:20; 1Ti 2:6; 1Ts 2:8; Tit 2:14.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
El amor es práctico. 16 Hemos conocido el amor, en el sentido específicamente cristiano, debido a lo que vemos en el Calvario donde él puso su vida por nosotros (como a menudo ocurre en esta epístola, él no está definido, pero en este pasaje no hay duda alguna de que se refiere a Jesús). Puesto que Cristo, a quien los cristianos deben su inspiración, murió de tal manera por los hombres, nosotros también debemos po ner nuestras vidas por los hermanos. Esta es la calidad del amor que se les exige siempre a los cristianos.
17 El entregar la vida por la fe lit., sin duda ocurrió muy pocas veces, aun en el primer siglo. Pero el amor tiene otras avenidas y se lo requiere permanentemente en la vida diaria. La palabra traducida bienes (gr. bion, solamente aquí y en 2:16 de esta epístola) no es común con esa connotación; habitualmente significa “vida”. Pero el sentido es claro. Ve (gr. theore) significa más que una mirada de paso. El hombre ve a su hermano durante un período lo suficientemente prolongado para conocer bien la situación, pero le cierra su corazón (lit. “cierra sus entrañas”). Es la parte del cuerpo donde según los griegos se asentaban las emociones. Por lo tanto el uso de ese término significaba que el hombre estaba emocionalmente comprometido. Para los griegos significaba, por lo común, que estaba enojado, si bien también incluía otras emociones. Pero para los cristianos la misma expresión significaba ser movido a compasión. Si la persona no muestra compasión, demuestra claramente que el amor de Dios (que puede interpretarse co mo nuestro amor por Dios tanto como el amor de Dios por nosotros) no mora en él. 18 Nuevamente encontramos la expresión familiar hijitos, al exhortar Juan al verdadero amor. El amor no se reduce a un asunto de palabras. Hecho y verdad valen mucho más que palabra y lengua.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) O: “vida”. Gr.: psy·kjén; lat.: á·ni·mam; J17,18,22(heb.): naf·schóh, “su alma”. Véase Ap. 4A.
(2) O: “vidas”.
(3) Lit.: “los”.
REFERENCIAS CRUZADAS
n 151 Jua 13:1
ñ 152 Jua 3:16; Jua 15:13; Rom 8:32
o 153 Jua 13:15; Rom 16:4; 1Ts 2:8
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
16 super (1) Lit, alma.
16 super (2) Lit, almas.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
Se requiere del creyente un amor que pueda llegar al sacrificio de si mismo. Aun que no son muchos los llamados a sacrificar sus propias vidas, todos pueden hacer el sacrificio de desprenderse de algunos de sus bienes de este mundo (véase nota en 1Jn 2:16). I.e., las cosas con las que se pueden satisfacer las necesidades materiales de la vida.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
T139 Ὅτι introduce una cláusula que está en aposición con ἐν τούτῳ: por esto sabemos … que (comp. 1Jn 2:3).