Comentario de 1 Samuel 9:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Un día antes que llegase Saúl, Jehovah le había revelado al oído a Samuel, diciendo:
Jehová había revelado. 1Sa 9:17; 1Sa 15:1; Sal 25:14; Amó 3:7; Mar 11:2-4; Mar 14:13-16; Hch 13:21; Hch 27:23.
al oído de Samuel. 1Sa 20:2; 2Sa 7:27; Job 33:16.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Éxo 3:7; Éxo 3:9; Jue 3:9; Jue 3:15; Hch 9:10-16.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
Samuel recibe a Saúl. Hasta aquí el relato ha sido muy claro en explicar que ningún ser humano había planeado que Samuel y Saúl se conocieran. Dios había encaminado los movimientos de Saúl, y ahora le revelaba directamente a Samuel que Saúl era el elegido por él para ser rey. Así que Samuel reconoció a Saúl cuando ambos se encontraron, y también lo que debía hacerse para que Saúl fuera rey. Pero Saúl siguió en la ignorancia respecto a los planes de Dios a lo largo de los acontecimientos de este capítulo: Samuel gradualmente le fue haciendo comprender los planes especiales de Dios para él. En el v. 20, Samuel se refirió a lo más preciado en Israel; el lector entendía que se refería al deseo de tener un rey, pero este comentario naturalmente desconcertó a Saúl. Luego, la acción de Samuel en el v. 24 le demostró a Saúl que era un huésped de honor, pero sin revelarle todavía toda la verdad. La sección continúa para destacar que lejos de intentar apropiarse de la monarquía y el poder, Saúl aún ahora desconoce humildemente lo que sería su papel en el futuro. Saúl no tomó el poder, ni Samuel promovió a ningún amigo propio para ser rey; Saúl fue elegido absolutamente por Dios.
La palabra “rey” no aparece en este capítulo. El v. 16 y 10:1 usan en cambio la palabra soberano (heb. nagid). El significado exacto de la palabra heb. está en discusión; posiblemente el sentido es de un “designado a ser rey”, con la implicación de que Saúl no era en realidad rey hasta haber tenido la ceremonia pública en Mizpa descrita en el cap. 10. Sea como fuere, en el contexto es improbable que la palabra sea muy diferente de rey, porque el verbo ungir, usado aquí, implica rey. Se aclara la función de Saúl como líder: Su deber es librar a Israel de los filisteos y gobernar (lit. “contener, controlar”) a los israelitas. De esta manera Dios supliría, por medio de Saúl, las dos necesidades políticas más importantes de la época. La primera era la derrota del enemigo, que de otra manera hubiera arrasado con Israel hasta hacerla desaparecer del mapa. La otra era la necesidad interna de Israel de estar unida y tener un gobierno fuerte.
Nota. 27 Samuel se aseguró de que fuera un ungimiento privado; ni siquiera su criado sabía el secreto. El primer ungimiento de David también fue en privado (16:1-13). En ambos casos, sus reinados en realidad no empezaron hasta haber realizado una ceremonia pública.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
REFERENCIAS CRUZADAS
u 371 1Sa 20:2; 2Sa 7:27; Job 33:16; Sal 25:14; Sal 99:6; Amó 3:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Lit., había destapado el oído de