Biblia

Comentario de 1 Tesalonicenses 2:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de 1 Tesalonicenses 2:15 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Estos mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas; a nosotros nos han perseguido; no agradan a Dios y se oponen a todos los hombres,

2:15, 16 los cuales mataron al Señor Jesús — (Hch 2:22-23; Hch 3:13-15). Hoy en día muchos quieren minimizar la culpa de los judíos, echándola en Pilato y los romanos, pero recuérdese Mat 27:25, “Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos”. Desde luego, no estaban solos en este crimen, pues Judas participó, los romanos participaron y, desde luego, todos los hombres, siendo pecadores, tuvimos gran parte en ese evento. Al matarlo llevaron a cabo el plan de Dios para nuestra redención (Hch 2:22-23). Si estaban dispuestos a matar a su propio Mesías, entonces con más razón perseguirían a los discípulos de El.

— y a sus propios profetas, — Mat 21:33-40; Mat 23:29-37; Hch 7:52. Mataron a los profetas pero no por eso invalidaron su mensaje.

— y a nosotros nos expulsaron; — Hch 17:5-10. Como instigaron a Pilato en contra de Jesús, así también instigaron a los gentiles en contra de Pablo y sus compañeros.

— y no agradan a Dios, — Jua 16:2; Rom 10:2.

— y se oponen a todos los hombres, — ¿cómo? impidiéndonos (lit., prohibiéndonos, LBLA, margen) hablar a los gentiles para que éstos se salven; — No sólo rechazaron a Pablo y sus compañeros, sino que también se negaron a permitir que los gentiles les escucharan. No sólo no querían entrar en el reino ellos mismos, sino que prohibieron que otros entraran. No querían participar de la gracia de Dios; pero tampoco querían que los gentiles lo hicieran. A través de los años los judíos han odiado a las otras naciones y razas. De manera clara y enfática Lucas describe la profunda hostilidad de los judíos (p. ej., Hch 13:45; Hch 18:6). En cada pueblo y en cada oportunidad se oponían a Pablo y a su obra de evangelizar a los gentiles. La única esperanza para la salvación de los gentiles es el evangelio (Rom 1:16), pero los judíos estaban bien resueltos a impedir su salvación. “Recorréis mar y tierra para hacer un prosélito” (Mat 23:15); es decir, querían que los gentiles llegaran a ser judíos, pero de ninguna manera aceptaron que llegaran a ser simplemente cristianos.

Jesús les había dicho, “¡Ay de vosotros, intérpretes de la ley! porque habéis quitado la llave de la ciencia; vosotros mismos no entrasteis, y a los que entraban se lo impedisteis” (Luc 11:52). Están condenados doblemente, primero por sus propios pecados, y segundo por llevar la sangre de otros en sus manos al prohibir que oyeran el evangelio (RCHL).

Esta afirmación de Pablo acerca de la obra diabólica de los judíos “no tiene paralelo en los escritos de Pablo” (FFB). Lo que dice aquí no contradice lo que dice en Rom 9:1-5; Rom 10:1-2; más bien, lo que dice a los tesalonicenses hace aun más extraordinario lo que dice a los romanos.

Jesús denuncia a los que ponen tropiezos delante de sus discípulos: “Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar” (Mat 18:6). En cualquier país uno de los actos principales de la guerrilla es el hacer explotar puentes y destruir caminos, porque este es el medio más efectivo para arruinar la economía. Figuradamente esto es lo que los judíos hicieron y es lo que todos los falsos maestros hacen.

— así colman ellos siempre la medida de sus pecados, pues vino sobre ellos la ira hasta el extremo. — “¡Vosotros también llenad la medida de vuestros padres!” (Mat 22:32). Compárese Gén 15:16, “aún no ha llegado a su colmo la maldad del amorreo hasta aquí”; en el tiempo de Josué llegó a su colmo. De esa manera Pablo dice que los judíos estaban bajo la ira de Dios (Mat 21:43; Mat 22:7; Mat 23:38; Mat 24:15-22).

Por siglos los judíos habían sido rebeldes contra Dios, y al crucificar a Cristo llenaron la medida de (llenaban hasta el borde) sus pecados (“el resultado natural debido a los continuos pecados” ATR). “Siempre ciegos y obstinados, los judíos llenaron la medida de sus pecados por su tratamiento de Cristo y los apóstoles” (MV). Para Pablo el impedir que los apóstoles predicaran el evangelio a los gentiles fue el colmo de las transgresiones de los judíos.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

mataron al Señor Jesús. Mat 5:12; Mat 21:35-39; Mat 23:31-35, Mat 23:37; Mat 27:25; Luc 11:48-51; Luc 13:33, Luc 13:34; Hch 2:23; Hch 3:15; Hch 4:10; Hch 5:30; Hch 7:52.

y nos expulsaron. Amó 7:12; Hch 22:18-21.

no agradan a Dios. Hch 12:3; 1Co 10:5.

se oponen a todos los hombres. Est 3:8; Luc 11:52, Luc 11:53.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

y a nosotros nos expulsaron: Pablo dice a los tesalonicenses que no deberían sorprenderse de sufrir por causa de Cristo ya que sus compañeros en Judea, incluso él mismo, ya sufrían debido al evangelio. La hostilidad hacia la iglesia representa ciertamente la hostilidad hacia Cristo (lea las palabras de Cristo a Pablo en Hch 9:4, Hch 9:5).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

los cuales mataron al Señor Jesús. Es incuestionable que los judíos fueron responsables por la muerte de su Mesías, aunque los romanos fueron quienes llevaron a cabo la ejecución. Los judíos fueron quienes fraguaron el caso en su contra y exigieron su muerte a voz en cuello (cp. Luc 23:1-24; Luc 23:34-38), de la misma forma en la que mataron a los profetas (cp. Mat 22:37; Mar 5:1-8; Hch 7:51-52).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

se oponen a todos los hombres. Así como la voluntad de Dios es que todos los hombres se salven (1Ti 2:4; 2Pe 3:9), la voluntad de los judíos era que ninguno encontrara la salvación en Cristo (v. 1Ts 2:16). Pablo se había aferrado antes a esta blasfemia e intentó erradicar por todos los medios la predicación del evangelio (cp. 1Ti 1:12-17).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

2:15, 16 los cuales mataron al Señor Jesús — (Hch 2:22-23; Hch 3:13-15). Hoy en día muchos quieren minimizar la culpa de los judíos, echándola en Pilato y los romanos, pero recuérdese Mat 27:25, “Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos”. Desde luego, no estaban solos en este crimen, pues Judas participó, los romanos participaron y, desde luego, todos los hombres, siendo pecadores, tuvimos gran parte en ese evento. Al matarlo llevaron a cabo el plan de Dios para nuestra redención (Hch 2:22-23). Si estaban dispuestos a matar a su propio Mesías, entonces con más razón perseguirían a los discípulos de El.
— y a sus propios profetas, — Mat 21:33-40; Mat 23:29-37; Hch 7:52. Mataron a los profetas pero no por eso invalidaron su mensaje.
— y a nosotros nos expulsaron; — Hch 17:5-10. Como instigaron a Pilato en contra de Jesús, así también instigaron a los gentiles en contra de Pablo y sus compañeros.
— y no agradan a Dios, — Jua 16:2; Rom 10:2.
— y se oponen a todos los hombres, — ¿cómo? impidiéndonos (lit., prohibiéndonos, LBLA, margen) hablar a los gentiles para que éstos se salven; — No sólo rechazaron a Pablo y sus compañeros, sino que también se negaron a permitir que los gentiles les escucharan. No sólo no querían entrar en el reino ellos mismos, sino que prohibieron que otros entraran. No querían participar de la gracia de Dios; pero tampoco querían que los gentiles lo hicieran. A través de los años los judíos han odiado a las otras naciones y razas. De manera clara y enfática Lucas describe la profunda hostilidad de los judíos (p. ej., Hch 13:45; Hch 18:6). En cada pueblo y en cada oportunidad se oponían a Pablo y a su obra de evangelizar a los gentiles. La única esperanza para la salvación de los gentiles es el evangelio (Rom 1:16), pero los judíos estaban bien resueltos a impedir su salvación. “Recorréis mar y tierra para hacer un prosélito” (Mat 23:15); es decir, querían que los gentiles llegaran a ser judíos, pero de ninguna manera aceptaron que llegaran a ser simplemente cristianos.
Jesús les había dicho, “¡Ay de vosotros, intérpretes de la ley! porque habéis quitado la llave de la ciencia; vosotros mismos no entrasteis, y a los que entraban se lo impedisteis” (Luc 11:52). Están condenados doblemente, primero por sus propios pecados, y segundo por llevar la sangre de otros en sus manos al prohibir que oyeran el evangelio (RCHL).
Esta afirmación de Pablo acerca de la obra diabólica de los judíos “no tiene paralelo en los escritos de Pablo” (FFB). Lo que dice aquí no contradice lo que dice en Rom 9:1-5; Rom 10:1-2; más bien, lo que dice a los tesalonicenses hace aun más extraordinario lo que dice a los romanos.
Jesús denuncia a los que ponen tropiezos delante de sus discípulos: “Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar” (Mat 18:6). En cualquier país uno de los actos principales de la guerrilla es el hacer explotar puentes y destruir caminos, porque este es el medio más efectivo para arruinar la economía. Figuradamente esto es lo que los judíos hicieron y es lo que todos los falsos maestros hacen.
— así colman ellos siempre la medida de sus pecados, pues vino sobre ellos la ira hasta el extremo. – “¡Vosotros también llenad la medida de vuestros padres!” (Mat 22:32). Compárese Gén 15:16, “aún no ha llegado a su colmo la maldad del amorreo hasta aquí”; en el tiempo de Josué llegó a su colmo. De esa manera Pablo dice que los judíos estaban bajo la ira de Dios (Mat 21:43; Mat 22:7; Mat 23:38; Mat 24:15-22).
Por siglos los judíos habían sido rebeldes contra Dios, y al crucificar a Cristo llenaron la medida de (llenaban hasta el borde) sus pecados (“el resultado natural debido a los continuos pecados” ATR). “Siempre ciegos y obstinados, los judíos llenaron la medida de sus pecados por su tratamiento de Cristo y los apóstoles” (MV). Para Pablo el impedir que los apóstoles predicaran el evangelio a los gentiles fue el colmo de las transgresiones de los judíos.

Fuente: Notas Reeves-Partain

REFERENCIAS CRUZADAS

f 57 Hch 2:23

g 58 Mat 5:12; Hch 7:52

h 59 Mat 23:34; Hch 21:13

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

profetas… El TR registra sus propios profetas; expulsaron…Hch 9:23; Hch 9:29; Hch 13:45; Hch 13:50; Hch 14:2; Hch 14:5; Hch 14:19; Hch 17:5; Hch 17:13; Hch 18:12. Otra traducción posible: persiguieron.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

R1205 Pablo usa la hipérbole en: se oponen a todos los hombres.

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

O, nos persiguieron

Lit., y

Fuente: La Biblia de las Américas

El TR registra sus propios profetas.

2:15 g Hch 9:23, Hch 9:29; Hch 13:45, Hch 13:50; Hch 14:2, Hch 14:5, Hch 14:19; Hch 17:5, Hch 17:13; Hch 18:12. N persiguieron.

Fuente: La Biblia Textual III Edición