Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que entre vosotros trabajan, que os presiden en el Señor y que os dan instrucción.
5:12 Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden (dirigen, LBLA; la palabra presidir o dirigir traduce el verbo PROISTEMI, “lit., ‘estar de pie ante’ y, de ahí, conducir, dirigir, ocuparse en, se traduce ‘presidir’ con referencia a la iglesia, Rom 12:8, 1Ts 5:12” (WEV). Este verbo se encuentra en 1Ti 3:4, “gobierne bien su casa”; 1Ti 5:17, “los ancianos que gobiernan bien”; Rom 12:8, “el que preside”) en el Señor, y os amonestan; — Lucas dice (Hch 14:23) que en el segundo viaje Pablo y sus compañeros “constituyeron ancianos en cada iglesia”. En Hch 20:17-35 leemos lo que Pablo dijo a los ancianos (obispos) de Efeso. Otros textos hablan de los ancianos (1Ti 3:1-7; Tit 1:5-11). En las cartas a los tesalonicenses Pablo no emplea los términos ancianos, obispos o pastores, pero sí habla de los que “os presiden en el Señor” y los ancianos son los que deben presidir en las congregaciones. Sin embargo, por algún tiempo las iglesias no tenían ancianos (Hch 14:22-23), pero sí, un liderazgo responsable. Los apóstoles y sus compañeros predicaban el evangelio, convertían a la gente, establecían iglesias y los apóstoles impartían los dones espirituales sobre ciertos hermanos. De esta manera había aun en las iglesias más nuevas profetas y, por eso, Pablo dice a los tesalonicenses, “No menospreciéis las profecías” (5:20). Lucas dice que “Judas y Silas… eran profetas” (Hch 15:32). Dice que “Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón el que se llamaba Niger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el tetrarca, y Saulo” (Hch 13:1). También leemos de los compañeros íntimos de Pablo (p. ej., Hch 20:4).Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
que reconozcáis. 1Co 16:18; Flp 2:19; Heb 13:7, Heb 13:17.
a los que trabajan entre. 1Ts 2:9; Mat 9:37, Mat 9:38; Luc 10:1, Luc 10:2, Luc 10:7; Jua 4:38; Hch 20:35; 1Co 3:9; 1Co 15:10; 1Co 16:16; 2Co 5:9; 2Co 6:1; 2Co 11:23; Gál 4:11; Flp 2:16; Col 1:29; 1Ti 5:17, 1Ti 5:18; 2Ti 2:6; Apo 2:3.
y os presiden en el Señor. Hch 20:28; 1Co 12:28; Tit 1:5; Heb 13:7, Heb 13:17; 1Pe 5:2, 1Pe 5:3; Apo 1:20; Apo 2:1, Apo 2:8, Apo 2:12, Apo 2:18; Apo 3:1, Apo 3:7, Apo 3:14.
y os amonestan, o instruyen. 1Ts 5:14; 1Ti 5:1, 1Ti 5:20; Tit 1:3; Tit 2:15.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Pablo pasa de su presentación de la enseñanza profética a la amonestación práctica. Es importante que piense en dos auditorios diferentes al dar su instrucción. Los «hermanos» del v. 1Ts 5:12 son la comunidad completa de cristianos en Tesalónica. Ellos deben honrar a sus líderes y a vivir en paz entre sí. Los otros «hermanos» son los líderes de la congregación que tienen muchas responsabilidades ante el pueblo para asegurar el crecimiento espiritual de los creyentes y mantener el orden en la iglesia. El liderazgo de la iglesia puede hacer que el pueblo de Dios glorifique a Cristo y crezca espiritualmente o puede destruir la efectividad del pueblo de Dios. No todas las divisiones y dificultades que enfrenta la Iglesia se deben a falsos maestros que entran en la Iglesia o miembros conflictivos de ella. Hay veces en que el liderazgo no sigue al Espíritu ni escucha la amonestación de los apóstoles relativa a la forma de guiar al pueblo de Dios (1Pe 5:2,1Pe 5:3).
EN FOCO
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«Espíritu»
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(Gr. pneuma) (1Ts 5:23; Luc 8:55; 1Co 5:5) # en Strong G4151; alma (Gr. psujé) (1Ts 5:23; Efe 6:6; Flp 1:27) # en Strong G5590; cuerpo (r. sóma) (1Ts 5:23; Mat 6:22; Heb 4:12) # en Strong G4983: Este es el único lugar en el NT. donde se implica el ser tripartito de una persona. Incluso en este pasaje, los tres constituyen una persona en su totalidad. El espíritu permite que una persona se contacte con el Espíritu divino y es la parte que el Espíritu vivifica al tiempo de la regeneración (Jua 3:6; Rom 8:16). La palabra griega psujé que se traduce alma, significa «vida». Los escritores del NT. usan esta palabra para hablar de la personalidad de alguien o de la esencia interior que la anima. Finalmente, estos escritores identifican el cuerpo, el ser físico de una persona, como una parte separada del alma y el espíritu. Como lo indica este versículo, Dios obra desde el interior hacia afuera, santificando todo nuestro ser para que podamos vivir con Él para siempre.
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Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Significativamente, Pablo combina la profecía con las enseñanzas prácticas para la vida del cristiano. Dios nunca se propuso que la profecía fuera un campo para debate académico, sino una verdad que proporcionaría esperanza a los creyentes y dirección a sus vidas. En los versículos 1Ts 5:12-22, Pablo describe las características de una persona que vive a la luz del inminente regreso de Cristo.
reconozcáis: Dado que en la iglesia de Tesalónica todos eran convertidos recientes, quizás se hacía difícil a algunos reconocer el liderazgo de otros. Pablo enseña a los tesalonicenses la sumisión, no el individualismo y el rechazo de la autoridad (Efe 5:21). Destaca que la autoridad de los líderes proviene del Señor. Pablo amonesta a los creyentes para que aprecien y se sometan a esos líderes congregacionales. Deberían tenerlos en alta estima debido a la importante labor que estaban haciendo. Al mismo tiempo, los creyentes iban a trabajar juntos para mantener la paz entre sí. Obsérvese los pronombres en plural; los tesalonicenses seguían el patrón de la iglesia de Jerusalén y de todas las iglesias del NT. al tener más de una persona como líder (Hch 6:1-7).
EN FOCO
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«Epístola»
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(Gr. epistolé) (1Ts 5:27; 2Co 3:1-13; 2Ts 2:2, 2Ts 2:15; 2Pe 3:1, 2Pe 3:16) # en Strong G1992: Este vocablo griego se vierte al castellano como carta. Significa una carta escrita, ya sea correspondencia personal (como 2 y 3 de Juan; 2Jn 1:12; 3Jn 1:13), o correspondencia oficial (como Hch 15:23-29; Hch 23:26-30), o un tratado formal (como Romanos; Rom 16:22). A veces se enviaban cartas de recomendación con emisarios para establecer sus credenciales entre aquellos que visitaban. En 2 Corintios, Pablo llamó a los creyentes de Corinto sus cartas vivas de recomendación de Dios (2Co 3:1-3). Aquí Pablo exhorta a los tesalonicenses a leer su carta para toda la iglesia para que todos pudieran aprovecharse de su enseñanza.
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Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
que reconozcáis. Esto no significa un simple reconocimiento facial, sino que los creyentes deben conocer a sus pastores lo suficiente como para apreciarlos de manera íntima y respetarlos a causa de su valor e importancia para el Cuerpo. La obra de los pastores se resume en una descripción triple que incluye: 1) trabajar hasta el cansancio; 2) supervisar como «obispos», cuyo significado literal es pararse frente al rebaño para conducirlos en el camino de la justicia, y 3) amonestar e instruir en las verdades de la Palabra de Dios. Cp. Heb 13:7; Heb 13:17.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
5:12 Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden (dirigen, LBLA; la palabra presidir o dirigir traduce el verbo PROISTEMI, “lit., ‘estar de pie ante’ y, de ahí, conducir, dirigir, ocuparse en, se traduce ‘presidir’ con referencia a la iglesia, Rom 12:8, 1Ts 5:12” (WEV). Este verbo se encuentra en 1Ti 3:4, “gobierne bien su casa”; 1Ti 5:17, “los ancianos que gobiernan bien”; Rom 12:8, “el que preside”) en el Señor, y os amonestan; — Lucas dice (Hch 14:23) que en el segundo viaje Pablo y sus compañeros “constituyeron ancianos en cada iglesia”. En Hch 20:17-35 leemos lo que Pablo dijo a los ancianos (obispos) de Efeso. Otros textos hablan de los ancianos (1Ti 3:1-7; Tit 1:5-11).
En las cartas a los tesalonicenses Pablo no emplea los términos ancianos, obispos o pastores, pero sí habla de los que “os presiden en el Señor” y los ancianos son los que deben presidir en las congregaciones. Sin embargo, por algún tiempo las iglesias no tenían ancianos (Hch 14:22-23), pero sí, un liderazgo responsable. Los apóstoles y sus compañeros predicaban el evangelio, convertían a la gente, establecían iglesias y los apóstoles impartían los dones espirituales sobre ciertos hermanos. De esta manera había aun en las iglesias más nuevas profetas y, por eso, Pablo dice a los tesalonicenses, “No menospreciéis las profecías” (5:20). Lucas dice que “Judas y Silas… eran profetas” (Hch 15:32). Dice que “Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón el que se llamaba Niger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el tetrarca, y Saulo” (Hch 13:1). También leemos de los compañeros íntimos de Pablo (p. ej., Hch 20:4).
Pablo habla de muchos hermanos fieles, activos y responsables en la iglesia. Dice a los corintios (1Co 16:15), “Hermanos, ya sabéis que la familia de Estéfanas es las primicias de Acaya, y que ellos se han dedicado al servicio de los santos. 16 Os ruego que os sujetéis a personas como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan”. Así pues aun las iglesias sin ancianos tenían maestros calificados para enseñar, guiar y servirles en el Señor.
Este pensamiento es importante. No debemos tratar de disculparnos por no tener ancianos, pero en realidad muchas congregaciones que no tienen ancianos no están desprovistas de maestros calificados, y tales maestros deben ser reconocidos y estimados “por causa de su obra”. Es esencial el liderazgo responsable para que la iglesia lleve a cabo un culto ordenado (1Co 14:40), como también para edificarse y madurar espiritualmente. Sin dirección responsable la congregación se corrompe con error doctrinal, no practica la disciplina y se llena de contiendas y disensiones y pronto se destruye.
Fuente: Notas Reeves-Partain
CONSEJO A UNA IGLESIA
1 Tesalonicenses 5:12-22
Os rogamos, hermanos, que tengáis consideración con los que trabajan entre vosotros y los que os presiden en el Señor y os exhortan. Tenedlos en alta estima y amor por la obra que están realizando.
Estad en paz entre vosotros.
Os insistimos, hermanos, en que advirtáis a los remolones, estimuléis a los pusilánimes, apoyéis a los débiles y tengáis paciencia con todos.
Aseguraos de que nadie devuelva mal por mal. Proponeos siempre buscar el bien del otro y de todos.
Manteneos siempre gozosos.
No dejéis nunca de orar.
Sed agradecidos por todo.
Porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Jesucristo.
No apaguéis los dones del Espíritu, ni toméis a la ligera las manifestaciones del don de profecía.
Poned a prueba todas las cosas, no dejéis escapar lo bueno.
Manteneos bien lejos de toda clase de mal.
Pablo pone fin a su carta con una sarta de joyas de buenos consejos. Los dispone de una manera resumida, pero cada uno de ellos merece nuestra atenta consideración.
Respetad a vuestros dirigentes, dice Pablo; y la razón por la que deben respetarlos es la obra que llevan a cabo. No es cuestión de prestigio personal; es la labor lo que hace grande a una persona, y es el servicio que está prestando lo que constituye su emblema de honor.
Vivid en paz. Es imposible predicar el Evangelio del amor en un ambiente envenenado de odio. Es mejor marcharse de una congregación en la que no se es feliz ni se hace felices a otros, y buscarse una en la que se pueda vivir en paz.
El versículo 14 selecciona a los que necesitan un cuidado y una atención especiales. La palabra para remolones describía originalmente al soldado que había abandonado el ejército; así es que la frase quiere decir: «Advertid a los desertores.» Los pusilánimes son literalmente los que tienen el alma pequeña. En todas las comunidades hay hermanos desanimados que temen instintivamente lo peor, pero también debe de haber cristianos que, siendo animosos, ayudan a otros a ser valientes. «Sed apoyo de los débiles» es un consejo precioso. En vez de dejar que el hermano débil sea arrastrado a la deriva y acabe por desaparecer totalmente, la comunidad cristiana debe hacer un esfuerzo para sujetarle para que no se pierda. Se deben forjar ligaduras de comunión y de persuasión para retener al que está en peligro de descarriarse. Ser pacientes con todos es tal vez lo más difícil de todo, porque eso de aguantar de buena gana a los tontos es una asignatura de doctorado.
No seáis vengativos, dice Pablo. Aunque haya alguien que busque nuestro mal, debemos conquistarle buscando su bien.
Los versículos 16-18 nos dan tres señales de la iglesia genuina. (i) Es una iglesia feliz. Hay en ella un ambiente de gozo que hace que sus miembros se sientan como disfrutando de un baño de sol. El verdadero Cristianismo es una verdadera gozada, y no un funeral. (ii) Es una iglesia que ora. Puede que nuestras oraciones fueran más efectivas si recordáramos que «oran mejor juntos los que oran también a solas.» (iii) Es una iglesia agradecida. Siempre hay algo por lo que dar gracias; hasta en el día más aciago se pueden contar las bendiciones. Debemos recordar que si vamos de cara al sol las sombras caerán detrás de nosotros, pero si le volvemos la espalda al sol todas las sombras nos irán por delante.
En los versículos 19 y 20 Pablo advierte a los tesalonicenses que no desprecien los dones espirituales. Los profetas eran los equivalentes de los predicadores de nuestro tiempo, los que llevaban el mensaje de Dios a la congregación. Pablo está diciendo realmente: «Si una persona tiene algo que decir, no se lo impidáis.»
Los versículos 21 y 22 describen el deber constante del cristiano. Debe usar a Cristo como la piedra de toque con la que probar todas las cosas; y aunque sea difícil debe seguir haciendo el bien y apartándose de todo lo que sea malo.
Cuando una iglesia vive a la altura del consejo de Pablo, alumbra como una luz que brilla en un lugar oscuro; tiene gozo en sí y poder para ganar a otros.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
1Co 16:16; 1Co 16:18; 1Ti 5:17; Heb 13:7.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
— presidirlos. El verbo griego utilizado permite también traducir: atenderlos (ver, por una parte, Rom 12:8; 1Ti 3:4; 1Ti 5:12; 1Ti 5:17; y por otra, Tit 3:8; Tit 3:14).
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
Instrucciones Para la Vida en la Iglesia
Hay una tercera sección de enseñanza que parece ser a primera vista una serie de instrucciones generales para la vida conjunta en la iglesia. Pablo dio una enseñanza similar a otras congregaciones (ver especialmente Rom. 12), pero aquí está dirigida particularmente a la situación en Tesalónica. La enseñanza puede ser dividida en términos gene rales en cinco secciones (12, 13, 14, 15, 16-18, 19-22) seguida por una oración (23, 24).
12, 13 La primera sección trata de la actitud en general de la iglesia para con sus líderes. Ningún título específico se usa para ellos (más tarde pala bras como ancianos, obispos y diáconos se hicieron más comunes), y se describen en función de las cosas que hacían. Estaban involucrados en lo que era trabajo duro (un término usado generalmente por Pablo mismo y por los misioneros para el trabajo cristiano, pero también por los líderes locales), presidían la congregación, una frase que puede referirse a ejercer autoridad o mostrar interés y cuidado (especialmente si eran personas más pudientes que daban de sus recursos a la congregación, cf. Rom. 16:1, 2), y advertían a las personas que necesitaban dirección. De este modo ejercían autoridad en la iglesia; y era necesa rio a aquellos sujetos a su autoridad que reconocieran la posición de los líderes y les mostraran la debida estima unida con amor. Vivid en paz puede sugerir algún peligro de división entre los líderes y otros creyentes.
14 Esto puede estar conectado con el próximo punto, la necesidad de dirección espiritual para algunas personas en la iglesia. Es digno de mención el hecho de que Pablo inste a la iglesia en general y no sólo a los líderes a cuidar del resto de la congregación. Pablo puede haber tenido especialmente en mente un grupo en la iglesia que necesitaba dirección, pero que se negaba a prestar atención. Estos eran creyentes desordenados (la palabra ge neralmente significa “desordenadamente”, pero puede referirse específicamente a estar desocupado y en el contexto este significado es más probable; ver 4:11; 2 Tes. 3:6-13). Los de poco ánimo o “abatidos de corazón” pueden ser los tristes y desalentados en el 4-13-5:11. Los débiles pueden ser aquellos que fueron atacados por la opresión y tentación y encuentran que era difícil resistir; ellos necesitaban personas que se pondrán a su lado y los sostendrán. Los que dan tal ayuda necesitan tener paciencia para tolerar a las personas y sus torpezas y aun su oposición a ser ayudados.
15 Que existía en la iglesia un espíritu de represalia se indica por el próximo mandato: no devolver mal por mal, sino mostrar siempre benevolencia aun cuando uno haya sido tratado con aspereza. Nótese que esto no era exclusivo del grupo de creyentes, sino que era para ser manifestado para con todos también. Esta actitud iba más allá de la moralidad de la época y era típicamente cristiana (Rom. 12:17, 19-21; 1 Ped. 3:9; cf. Mat. 5:38-42, 43-48).
16-18 Una serie de recomendaciones breves e incisivas indica la base del vivir cristiano. Son muy generales y podrían aplicarse a cualquier grupo de creyentes. Los cristianos tienen buena base para el gozo tanto en su experiencia de salvación como en su esperanza de lo que Dios hará en el futuro, pero necesitan expresar ese gozo. Hay un justo y adecuado lugar para la expresión de una emoción alegre. Los cristianos deben también orar; aquí proba blemente en el sentido de hacer peticiones a Dios, ya que el próximo mandato tiene que ver con la necesidad de ser agradecido. Común a los tres mandatos es el énfasis sobre el cumplimiento de ellos todo el tiempo y en todas las circunstancias; esto no quiere decir, p. ej. que uno ora ininterrumpidamente, sino que uno ora regular y frecuentemente. Tal estilo de vida es posible, Pablo agrega que es el propósito de Dios; él quiere que su pueblo esté gozoso, fiel en la adoración y agradecido, y él lo posibilita para que así sea.
19-22 Otra breve serie de declaraciones está relacionada con el Espíritu y sus dones. Lo que aparece en detalle en 1 Cor. 12-14 está declarado aquí resumidamente. El Espíritu es poderoso y activo co mo fuego en la congregación (cf. Rom. 12:11; 2 Tim. 1:6 para la metáfora). Los dones para el ministerio estaban siendo ejercitados, pero algunas personas estaban tratando de suprimirlos (no sabemos exactamente cómo), pero es malo intentarlo. En particular Pablo subrayó la necesidad de valorar las declaraciones de los profetas. Posiblemente la iglesia había tenido una mala experiencia con ellos (cf. 1 Jn. 4:1-3), y en lugar de ejercitar discernimiento entre las verdaderas y falsas profecías, estaban limitando toda la actividad. La iglesia debería más bien examinarlo todo, es decir, evaluar las declaraciones de los profetas (1 Cor. 12:10; 14:29). Se debería retener lo bueno y rechazar cualquier cosa que fuera incorrecta en las enseñanzas proféticas. (Los vv. 21, 22 se pueden entender de una manera más general, pero tienen una aplicación más estrecha en este contexto.)
23, 24 Finalmente, Pablo eleva una oración por sus lectores (cf. 3:11-13) y el mismo Dios está personalmente interesado por ellos. El es la fuente de las bendiciones espirituales, aquí resumidas como paz, y por lo tanto es correcto orar para que él capacite a los que son llamados “santos” a llegar a ser cada vez más santos en todo su ser. Pablo está pensando en un proceso continuo, y el resultado ideal será que en cualquier momento que el Señor regrese encontrará a su pueblo completamente sin mancha en todo vuestro ser. Tanto espíritu, como alma y cuerpo es una manera de decir “completamente” en referencia a los tres aspectos del ser hu mano: la vida en relación con Dios, la personalidad humana y el cuerpo a través del cual uno actúa y se expresa a sí mismo. Aunque la vida cristiana demanda un esfuerzo humano, en el análisis final todo depende de Dios mismo que es fiel. Los que confían en él están confiando en que él los preservará hasta el fin, y tienen todas las razones para creer que él es digno de confianza.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) O: “los dirigen; llevan la delantera entre ustedes”. Lit.: “parados delante”. Gr.: pro·i·sta·mé·nous.
REFERENCIAS CRUZADAS
d 164 Rom 12:8
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
trabajan…dirigen…instruyen. Esta triple descripción de los líderes de la iglesia incluye: trabajar sin descanso, guiar a la gente a un vida justa y enseñarles las verdades de la Palabra de Dios. Instruir también involucra amonestar y corregir a los que están en error (vers. 14).
Fuente: La Biblia de las Américas
12 (1) Reconocer y así tener respeto y estima por alguien.
12 (2) Aquí el apóstol probablemente se refiere a los ancianos que laboran en la enseñanza y tienen el liderazgo entre los creyentes ( 1Ti_5:17).
12 (3) Estar al frente no es principalmente gobernar, sino establecer un ejemplo al hacer primero las cosas, para que otros puedan seguir. Los ancianos no solamente deben laborar en la enseñanza, sino también actuar dando ejemplo. El ejemplo puede llegar a ser la base para amonestar.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
reconocer… Lit. sepáis.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
O, que estiméis, u, honréis
U, os presiden
U, os amonestan
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit. sepáis.