Comentario de 1 Timoteo 1:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

según el evangelio de la gloria del Dios bendito, que me ha sido encomendado.

1:11

— según el glorioso evangelio del Dios bendito — Compárese Rom 2:16; 2Co 4:4. El texto griego dice literalmente, «el evangelio de la gloria del bendito Dios», y así se expresan las versiones ASV., P.B., H.A., JTD, RVA. La idea es que el evangelio revela la gloria de Dios manifestada en la obra de Cristo.

La palabra «según» conecta todo lo que ha dicho Pablo desde el ver. 9 con referencia a la ley y la aplicación correcta de ella. Lo que el evangelio enseña comprueba lo que Pablo afirma. No hay ninguna contradicción entre la Ley (usada legítimamente, ver. 8) y el evangelio. El evangelio revela que la ley tiene a todo hombre bajo pecado (Gál 3:22), y que el bendito Dios nos muestra su gloria al ofrecernos el perdón en Cristo Jesús.

Lo que Pablo llama «la sana doctrina», ver. 10, ahora lo llama «el evangelio». La falsa distinción, hecha por sectarios y por algunos de mis hermanos en Cristo, entre doctrina y evangelio, en estos dos versículos es claramente desmentida.

La «doctrina» (considerada por ellos como diversificada y no necesaria para la salvación) y el «evangelio» (según ellos lo que salva ) ¡no son términos mutuamente exclusivos! La sana doctrina, y el evangelio de la gloria del Dios bendito, constituyen el mismo mensaje.

— que a mí me ha sido encomendado — Véase Tit 1:3; 1Ts 2:4; 1Co 9:17; Gál 2:7. El texto griego da énfasis al pronombre «yo» (Pablo). Lo expresa así la Ver. L.A., «que a mí se me ha confiado», y la Ver. NTP., «del que fui yo encargado». Pablo enfáticamente afirma su autoridad sobre los referidos «doctores de la ley», ver. 7, que actuaban ilegítimamente, ver. 8. Ahora, ¿bajo cuál comisión divina operaban aquellos falsos maestros?

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

según el glorioso evangelio. Sal 138:2; Luc 2:10, Luc 2:11, Luc 2:14; Rom 2:16; 2Co 3:8-11; 2Co 4:4, 2Co 4:6; Efe 1:6, Efe 1:12; Efe 2:7; Efe 3:10; 1Pe 1:11, 1Pe 1:12.

del Dios bendito. 1Ti 6:15.

me ha sido encomendado. 1Ti 2:7; 1Ti 6:20; 1Co 4:1, 1Co 4:2; 1Co 9:17; 2Co 5:18-20; Gál 2:7; Col 1:25; 1Ts 2:4; 2Ti 1:11, 2Ti 1:14; 2Ti 2:2; Tit 1:3.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

según el glorioso evangelio: Esta frase debería interpretarse en su contexto inmediato, una discusión sobre el propósito de la Ley. El uso apropiado de la Ley es para demostrar el pecado humano y nuestra necesidad de las buenas nuevas de que Cristo nos salvó de la esclavitud de la Ley y de nuestros propios pecados.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

el glorioso evangelio. El evangelio revela la gloria de Dios, es decir, las perfecciones de su persona o sus atributos que incluyen: su santidad (aborrecimiento del pecado), su justicia (exigencia justa de castigo por las violaciones a su ley) y su gracia (perdón del pecado). Esos atributos particulares son definitivos para cualquier presentación eficaz del evangelio. encomendado. Una palabra griega que se refiere a confiar algo de valor a otra persona. Dios encomendó a Pablo la comunicación y la vigilancia de su verdad revelada. (Cp. 1Ti 2:7; 1Ti 6:20-21; Rom 15:15-16; 1Co 4:1-2; 1Co 9:17; 2Co 5:18-20; Gál 2:7; Col 1:25; 1Ts 2:4).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

1:11 — según el glorioso evangelio del Dios bendito — Compárese Rom 2:16; 2Co 4:4. El texto griego dice literalmente, «el evangelio de la gloria del bendito Dios», y así se expresan las versiones ASV., P.B., H.A., JTD, RVA. La idea es que el evangelio revela la gloria de Dios manifestada en la obra de Cristo.
La palabra «según» conecta todo lo que ha dicho Pablo desde el ver. 9 con referencia a la ley y la aplicación correcta de ella. Lo que el evangelio enseña comprueba lo que Pablo afirma. No hay ninguna contradicción entre la Ley (usada legítimamente, ver. 8) y el evangelio. El evangelio revela que la ley tiene a todo hombre bajo pecado (Gál 3:22), y que el bendito Dios nos muestra su gloria al ofrecernos el perdón en Cristo Jesús.
Lo que Pablo llama «la sana doctrina», ver. 10, ahora lo llama «el evangelio». La falsa distinción, hecha por sectarios y por algunos de mis hermanos en Cristo, entre doctrina y evangelio, en estos dos versículos es claramente desmentida.
La «doctrina» (considerada por ellos como diversificada y no necesaria para la salvación) y el «evangelio» (según ellos lo que salva ) ¡no son términos mutuamente exclusivos! La sana doctrina, y el evangelio de la gloria del Dios bendito, constituyen el mismo mensaje.
— que a mí me ha sido encomendado — Véase Tit 1:3; 1Ts 2:4; 1Co 9:17; Gál 2:7. El texto griego da énfasis al pronombre «yo» (Pablo). Lo expresa así la Ver. L.A., «que a mí se me ha confiado», y la Ver. NTP., «del que fui yo encargado». Pablo enfáticamente afirma su autoridad sobre los referidos «doctores de la ley», ver. 7, que actuaban ilegítimamente, ver. 8. Ahora, ¿bajo cuál comisión divina operaban aquellos falsos maestros?

Fuente: Notas Reeves-Partain

— mensaje evangélico: Lit. evangelio. Ver notas a Mar 1:1 y Rom 1:1.

— el Dios de la felicidad: O también: el bienaventurado Dios: Sólo aquí y en Tm 1Ti 6:15 se aplica a Dios este apelativo.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

1Ti 2:7; Gál 1:16; 2Ti 1:11; 2Ti 4:17; Tit 1:3.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

c 29 Sal 104:31

d 30 Gál 2:7; Col 1:25; 1Ts 2:4

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

evangelio. Véase coment. en Mr 1:1.

Fuente: La Biblia de las Américas

11 (1) El evangelio de la gloria del Dios bendito es una expresión excelente. Se refiere a la economía de Dios, mencionada en el v.4. El evangelio encomendado al apóstol Pablo es el resplandor de la gloria del Dios bendito. Al impartir la vida y naturaleza de Dios en Cristo dentro de los escogidos de Dios, este evangelio resplandece con la gloria de Dios, en la cual Dios es bendito entre Su pueblo. Esta es la comisión y el ministerio que el apóstol recibió del Señor (v.12). Este evangelio debe ser comúnmente enseñado y predicado en una iglesia local.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

R485 Aquí el nominativo con la voz pasiva llega a ser el acusativo predicativo: el cual se me ha encomendado. [Editor. Realmente este es un acusativo retenido con un verbo en voz pasiva, pero provee la misma traducción (comp. 1Ts 2:4 y G?l 2:7).]

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego