Destruimos los argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios; llevamos cautivo todo pensamiento a la obediencia de Cristo,
10:5 — «derribando argumentos… de Dios». «derribando razonamientos», dice la Ver. Moderna, y otras. La verdad es capaz de vencer a todo razonamiento humano que se ensalza contra el conocimiento de Dios. La humana sabiduría, basada en la altivez del corazón del incrédulo, es hueca y transparente. La espada del Espíritu, que es la palabra de Dios» (Efe 6:17), la derriba fácilmente. El hombre que se opone a la verdad de Dios (a Dios mismo se opone), es arrogante, vano, y presuntuoso. Sus razonamientos reflejan su vanidad. Está en contra del conocimiento de Dios porque la palabra de Dios está en contra de él. Véase 1Co 3:18-23. — «y llevando cautivo… a Cristo». No obstante, la palabra de Dios es poderosa en el proceso de cambiar el pensar del hombre, trayéndole a la obediencia a Cristo. Hombres grandes y humildes, reyes y esclavos, han sido persuadidos a obedecer al evangelio de Cristo por medio de la predicación de la verdad (1Co 1:18-31). Las legislaciones humanas a cierto grado controlan al hombre, pero solamente el evangelio tiene el poder de cambiar el corazón del hombre «sabio en este siglo» (Rom 1:16). Cambiado el corazón, hay esperanza de cambios vitales y perdurables en la sociedad humana. Las leyes humanas no lo logran.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
derribando argumentos, o especulaciones. Luc 1:51; Hch 4:25, Hch 4:26; Rom 1:21; 1Co 1:19, 1Co 1:27-29; 1Co 3:19.
y toda altivez. Éxo 5:2; Éxo 9:16, Éxo 9:17; 2Re 19:22, 2Re 19:28; Sal 18:27; Job 40:11, Job 40:12; Job 42:6; Sal 10:4; Isa 2:11, Isa 2:12, Isa 2:17; Isa 60:14; Eze 17:24; Dan 4:37; Dan 5:23-30; Hch 9:4-6; Flp 3:4-9; 2Ts 2:4, 2Ts 2:8.
y cautivando. Mat 11:29, Mat 11:30; Rom 7:23.
todo pensamiento. Gén 8:21; Deu 15:9; Sal 139:2; Pro 15:26; Pro 24:9; Isa 55:7; Isa 59:7; Jer 4:14; Mat 15:19; Heb 4:12.
a la obediencia a Cristo. Sal 18:44; Sal 110:2, Sal 110:3; Rom 1:5; Rom 16:26; Heb 5:9; 1Pe 1:2, 1Pe 1:14, 1Pe 1:15, 1Pe 1:22.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
LLEVANDO CAUTIVO TODO PENSAMIENTO. La lucha del creyente comprende poner todos los pensamientos en línea con la voluntad de Cristo. El no hacerlo lleva a la inmoralidad y a la muerte espiritual (Rom 6:16; Rom 6:23; Rom 8:13). Se deben seguir los cuatro pasos siguientes para someter todo pensamiento al señorío de Cristo:
(1) estar consciente de que Dios conoce cada pensamiento y que nada hay oculto para El (Sal 94:11; Sal 139:2; Sal 139:4; Sal 139:23-24); y que hay que dar cuenta a Dios de los pensamientos, las palabras y las acciones (2Co 5:10; Ecl 12:14; Mat 12:35-37; Rom 14:12);
(2) tener presente que la mente es un campo de batalla; que algunos pensamientos se originan en la persona, mientras que otros proceden directamente del enemigo; que para llevar cada pensamiento cautivo se requiere la lucha espiritual contra la naturaleza pecaminosa y las fuerzas satánicas (Efe 6:12-13; cf. Mat 4:3-11); que hay que resistir con firmeza y rechazar el mal y los pensamientos impuros en el nombre del Señor Jesucristo (Flp 4:8), y recordar que los creyentes vencen al adversario por la sangre del Cordero, el testimonio que dan y la persistencia en darles respuesta negativa al diablo, a la tentación y al pecado (Tit 2:11-12; Stg 4:7; Apo 12:11; cf. Mat 4:3-11);
(3) resolver fijar la mente en Cristo y en las cosas celestiales, y no en las terrenales (Flp 3:19; Col 3:2), porque la mente sometida al Espíritu es vida y paz (Rom 8:6-7); ocupar la mente en la Palabra de Dios (Sal 1:1-3; Sal 19:7-14; Sal 119:1-176) y en todo lo que merece respeto, admiración o elogio (Flp 4:8); y
(4) siempre tener cuidado con lo que ven los ojos y oyen los oídos, negándose resueltamente a que
(a) los ojos sean instrumento para la lujuria (Job 31:1; 1Jn 2:16), o a
(b) ocupar los ojos en cosas indignas o malas, ya sean de libros, revistas, fotografías, programas de televisión o de la vida diaria (Sal 101:3; Isa 33:14-15; Rom 13:14).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
argumentos. Pensamientos, ideas, especulaciones, razonamientos, filosofías y religiones falsas son las fortalezas ideológicas en las que se refugian los hombres para oponerse a Dios y al evangelio (cp. 1Co 3:20). llevando cautivo todo pensamiento. Esto se refiere a la destrucción total de las fortalezas de la sabiduría humana y satánica y al rescate de los que están en ellas para que no sean condenados por las mentiras que los esclavizaron.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
10:5 — «derribando argumentos… de Dios». «derribando razonamientos», dice la Ver. Moderna, y otras. La verdad es capaz de vencer a todo razonamiento humano que se ensalza contra el conocimiento de Dios. La humana sabiduría, basada en la altivez del corazón del incrédulo, es hueca y transparente. La espada del Espíritu, que es la palabra de Dios» (Efe 6:17), la derriba fácilmente. El hombre que se opone a la verdad de Dios (a Dios mismo se opone), es arrogante, vano, y presuntuoso. Sus razonamientos reflejan su vanidad. Está en contra del conocimiento de Dios porque la palabra de Dios está en contra de él. Véase 1Co 3:18-23.
–«y llevando cautivo… a Cristo». No obstante, la palabra de Dios es poderosa en el proceso de cambiar el pensar del hombre, trayéndole a la obediencia a Cristo. Hombres grandes y humildes, reyes y esclavos, han sido persuadidos a obedecer al evangelio de Cristo por medio de la predicación de la verdad (1Co 1:18-31). Las legislaciones humanas a cierto grado controlan al hombre, pero solamente el evangelio tiene el poder de cambiar el corazón del hombre «sabio en este siglo» (Rom 1:16). Cambiado el corazón, hay esperanza de cambios vitales y perdurables en la sociedad humana. Las leyes humanas no lo logran.
Fuente: Notas Reeves-Partain
REFERENCIAS CRUZADAS
j 355 1Co 1:19; 1Co 3:19; 2Ti 2:25
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
5 super (1) Los argumentos y pensamientos están en la mente y pertenecen a ella. Estos son las fortalezas de Satanás, el adversario de Dios, las cuales están en las mentes de quienes desobedecen a Dios. Por medio de la guerra espiritual, los razonamientos deben ser derribados y todo pensamiento debe ser llevado cautivo a la obediencia a Cristo.
5 super (2) Todo lo altivo que se encuentre en la mentalidad reprobada, lo cual se opone al conocimiento de Dios. Esto también debe ser derribado por las armas espirituales de modo que ya no se levante contra el conocimiento de Dios.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
R500 Τὴν ὑπακοὴν τοῦ Χριστοῦ significa: obediencia a Cristo (un genitivo de complemento directo).
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
O, refutando argumentos
Lit., toda cosa altiva