Comentario de 2 Pedro 1:6 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, perseverancia; a la perseverancia, devoción;

1:6 — «al conocimiento, dominio propio». Inherente en la palabra griega para decir «dominio propio» es el concepto de «fuerza». La idea es de tener fuerza en el control de sí. La palabra griega aparece en Hch 24:25 («dominio propio») y en Gál 5:23 («templanza»). En forma adjetival aparece en Tit 1:8 («dueño de sí mismo»). En 2Ti 3:3 vemos la palabra en forma negativa («intemperantes»). Otras versiones emplean las palabras «gobierno de sí mismos» (N.M.), «moderación» (NTP.), «templanza» (T.A.), y «dominio de sí mismo» (NVI). Dios ha dado al hombre ciertos poderes (como el sexo, el hambre, el habla, etcétera), los cuales el hombre carnal abusa, en lugar de hacer buen uso de ellos, según la Palabra de Dios. El cristiano ejercita fuerza en dominar estos poderes de Dios, usando bien la lengua, el sexo, el hambre, y tales cosas, dentro de los usos y las relaciones para los cuales Dios los diseñó. En el ejercicio del conocimiento suple la fuerza para ser dueño de sí mismo. El hombre es responsable de sus hechos; no tiene excusa para la esclavitud de los vicios. Se va a controlar y restringir al grado de suplirse el conocimiento de las Escrituras.

— «al dominio propio, paciencia». La palabra griega, de la cual viene esta palabra, «paciencia», lleva en sí la idea de permanecer bajo (la prueba), o quedarse atrás, mientras que otros prosiguen a la apostasía. La persona paciente no es movida por la persecución. Véanse Stg 1:4; Stg 5:11; Rom 8:25; Heb 12:1. En lugar de negar la fe (para escapar la persecución; Apo 2:13; Mat 10:32-33), dice Pedro que los hermanos suplan la perseverancia. En el ejercicio del dominio propio, se puede suplir la paciencia para llevar las pruebas de la vida, sin ser movidas las personas por ellas. Compárese Hch 20:23-24.

— «a la paciencia, piedad». Sobre «piedad», véase 1:3, comentarios. Aparece la palabra griega (para «piedad») en 1Ti 2:2; 1Ti 3:16; 1Ti 4:7-8; 1Ti 6:3; 1Ti 6:5-6; 1Ti 6:11. El cristiano no es estoico; no sufre por sufrir. Su paciencia (perseverancia en el tiempo de prueba) es debida al fuerte deseo de agradar a Dios. En el ejercicio de la paciencia, suministra piedad de vida.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

dominio propio. Hch 24:25; 1Co 9:25; Gál 5:23; Tit 1:8; Tit 2:2.

paciencia. Sal 37:7; Luc 8:15; Luc 21:19; Rom 2:7; Rom 5:3, Rom 5:4; Rom 8:25; Rom 15:4; 2Co 6:4; Col 1:11; 1Ts 1:3; 2Ts 1:4; 2Ts 3:5; Heb 6:12, Heb 6:15; Heb 10:36; Heb 12:1; Stg 1:3, Stg 1:4; Stg 5:7-10; Apo 1:9; Apo 2:2; Apo 13:10; Apo 14:12.

piedad. 2Pe 1:3; 2Pe 3:11; Gén 5:24; Isa 57:1; 1Ti 2:2, 1Ti 2:10; 1Ti 3:16; 1Ti 4:7, 1Ti 4:8; 1Ti 6:3, 1Ti 6:6, 1Ti 6:11; 2Ti 3:5; Tit 1:1.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

dominio propio significa gobernar las emociones propias, en vez de que ellas nos controlen. Los falsos maestros, cuyas opiniones Pedro estaba exponiendo, creían que el conocimiento liberaba a las personas de la necesidad de controlar sus pasiones.

paciencia: Una persona que tiene dominio propio no sucumbirá fácilmente ante el desánimo o ante la tentación de abandonar. El hecho de ver que todas las circunstancias vienen de la mano de un padre cariñoso que está en control de todas las cosas, es el secreto de la perseverancia y de la paciencia.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

dominio propio. Lit. «contenerse». En el tiempo de Pedro el autocontrol era una característica de los atletas que debían contenerse y disciplinarse a sí mismos. El cristiano también debe controlar por iniciativa propia la carne, las pasiones y los deseos corporales, antes que dejarse controlar por ellos (cp. 1Co 9:27; Gál 5:23). La virtud guiada por el conocimiento disciplina los deseos para convertirlos en esclavo y no amo en la vida del creyente. paciencia. También se requiere perseverancia o resistencia para hacer lo que es correcto, sin ceder a la tentación o a la prueba. La paciencia es el poder para mantenerse firme sin dar el brazo a torcer. Es la virtud que puede soportar, no solo con resignación, sino por la motivación de una esperanza vibrante. piedad. Vea la nota sobre el v.2Pe 1:3.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

1:6 — «al conocimiento, dominio propio». Inherente en la palabra griega para decir «dominio propio» es el concepto de «fuerza». La idea es de tener fuerza en el control de sí. La palabra griega aparece en Hch 24:25 («dominio propio») y en Gál 5:23 («templanza»). En forma adjetival aparece en Tit 1:8 («dueño de sí mismo»). En 2Ti 3:3 vemos la palabra en forma negativa («intemperantes»). Otras versiones emplean las palabras «gobierno de sí mismos» (N.M.), «moderación» (NTP.), «templanza» (T.A.), y «dominio de sí mismo» (NVI). Dios ha dado al hombre ciertos poderes (como el sexo, el hambre, el habla, etcétera), los cuales el hombre carnal abusa, en lugar de hacer buen uso de ellos, según la Palabra de Dios. El cristiano ejercita fuerza en dominar estos poderes de Dios, usando bien la lengua, el sexo, el hambre, y tales cosas, dentro de los usos y las relaciones para los cuales Dios los diseñó. En el ejercicio del conocimiento suple la fuerza para ser dueño de sí mismo. El hombre es responsable de sus hechos; no tiene excusa para la esclavitud de los vicios. Se va a controlar y restringir al grado de suplirse el conocimiento de las Escrituras.
–«al dominio propio, paciencia». La palabra griega, de la cual viene esta palabra, «paciencia», lleva en sí la idea de permanecer bajo (la prueba), o quedarse atrás, mientras que otros prosiguen a la apostasía. La persona paciente no es movida por la persecución. Véanse Stg 1:4; Stg 5:11; Rom 8:25; Heb 12:1. En lugar de negar la fe (para escapar la persecución; Apo 2:13; Mat 10:32-33), dice Pedro que los hermanos suplan la perseverancia. En el ejercicio del dominio propio, se puede suplir la paciencia para llevar las pruebas de la vida, sin ser movidas las personas por ellas. Compárese Hch 20:23-24.
–«a la paciencia, piedad». Sobre «piedad», véase 1:3, comentarios. Aparece la palabra griega (para «piedad») en 1Ti 2:2; 1Ti 3:16; 1Ti 4:7-8; 1Ti 6:3; 1Ti 6:5-6; 1Ti 6:11. El cristiano no es estoico; no sufre por sufrir. Su paciencia (perseverancia en el tiempo de prueba) es debida al fuerte deseo de agradar a Dios. En el ejercicio de la paciencia, suministra piedad de vida.

Fuente: Notas Reeves-Partain

Rom 5:2-5; Gál 5:22-23.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

r 18 1Co 9:25; 2Ti 2:24

s 19 2Pe 2:9

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

6 super (1) O, sobriedad; el ejercicio de control y restricción de uno mismo en las pasiones, deseos y hábitos. Esto debe suministrarse y desarrollarse en el conocimiento para el debido crecimiento en vida.

6 super (2) Ejercer dominio propio consiste en tratar con uno mismo; perseverar consiste en ser longánimes para con otros y soportar las circunstancias.

6 super (3) Una vida que es como Dios y que expresa a Dios. Mientras ejercemos control sobre nosotros mismos y somos longánimes para con los demás y soportamos las circunstancias, es necesario que en nuestra vida espiritual se desarrolle la piedad para que seamos como Dios y le expresemos.

Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro

dominio propio. Como en Gál 5:23 (RV 1977).

piedad. La actitud y conducta de una persona que es temerosa de Dios.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie