Pues el que no tiene estas cosas es ciego y tiene la vista corta, habiendo olvidado la purificación de sus pecados pasados.
1:9 — «Pero el que… es ciego». La palabra «pero» no cabe; el texto griego dice, GAR (pues, porque). Pedro da la razón de por qué el cristiano debe poseer tales cualidades; es que si no las tiene, entonces es ciego, etcétera. Varias versiones dicen, «pues» o «porque» (T.A., N.M., B.A., H.A., etcétera). La consecuencia de no tener estas cosas es fatal. La frase «no tener» no traduce la palabra griega (que es diferente a la usada en el ver. 8) tan bien como «no estar presentes» (Ver. N.M.), o «carece» (Ver. 1977). El que carece de estas cosas es ciego, espiritualmente hablando. Luego Pedro añade: «muopadzo» (cerrar + ojos); ha cerrado los ojos, o ve solamente lo próximo al ojo. Así lo expresa el texto griego. El cristiano, que no va supliéndose estas cualidades, voluntariamente cierra los ojos, y por eso ve solamente las cosas cercanas, las de este mundo (cosas materiales), y no las de lejos, las celestiales (cosas espirituales). De esa palabra griega tenemos en español la palabra «miopía». muopadzon puede ser traducida, «ver muy apenas, o solamente lo que queda próximo al ojo».Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
el que no tiene. 2Pe 1:5-7; Mar 10:21; Luc 18:22; Gál 5:6, Gál 5:13; Stg 2:14-26.
es ciego. Jua 9:40, Jua 9:41; 2Co 4:3, 2Co 4:4; 1Jn 2:9-11; Apo 3:17.
habiendo olvidado la purificación. 2Pe 1:4; 2Pe 2:18-20; Rom 6:1-4, Rom 6:11; Efe 5:26; Heb 9:14; 1Pe 3:21; 1Jn 1:7.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
La falta de fruto (v. 2Pe 1:8) en la vida de un creyente puede provenir de dos factores: ceguera y olvido. Una persona de vista muy corta es alguien que sólo busca los valores materiales y terrenales (lo que está más a mano) y no ve las realidades espirituales eternas. Al preocuparse sólo de las cosas de esta vida, dicha persona se vuelve ciega para las cosas de Dios, olvidando el poderoso sentido de limpieza que se produce al volverse a Cristo.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
estas cosas. Las cualidades mencionadas en los vv. 2Pe 1:5-7 (vea el v. 2Pe 1:10). la vista muy corta; es ciego. Un cristiano de profesión que carece de las virtudes mencionadas aquí es incapaz de discernir su condición espiritual verdadera y por ende no puede tener seguridad de su salvación. olvidado. La falta de una búsqueda diligente de las virtudes espirituales produce amnesia espiritual. Una persona así es incapaz de discernir su condición espiritual y no tendrá confianza en cuanto a su profesión de fe. Es posible que sea salva y que llegue a poseer todas las bendiciones descritas en los vv. 2Pe 1:3-4, pero sin las excelencias gloriosas de los vv. 2Pe 1:5-7 vivirá en duda y temor.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
1:9 — «Pero el que… es ciego». La palabra «pero» no cabe; el texto griego dice, GAR (pues, porque). Pedro da la razón de por qué el cristiano debe poseer tales cualidades; es que si no las tiene, entonces es ciego, etcétera. Varias versiones dicen, «pues» o «porque» (T.A., N.M., B.A., H.A., etcétera). La consecuencia de no tener estas cosas es fatal.
La frase «no tener» no traduce la palabra griega (que es diferente a la usada en el ver. 8) tan bien como «no estar presentes» (Ver. N.M.), o «carece» (Ver. 1977). El que carece de estas cosas es ciego, espiritualmente hablando. Luego Pedro añade: «muopadzo» (cerrar + ojos); ha cerrado los ojos, o ve solamente lo próximo al ojo. Así lo expresa el texto griego. El cristiano, que no va supliéndose estas cualidades, voluntariamente cierra los ojos, y por eso ve solamente las cosas cercanas, las de este mundo (cosas materiales), y no las de lejos, las celestiales (cosas espirituales). De esa palabra griega tenemos en español la palabra «miopía». muopadzon puede ser traducida, «ver muy apenas, o solamente lo que queda próximo al ojo».
Notemos estas dos traducciones: (1) «Porque si estas cosas no están presentes en alguien, está ciego, cerrando los ojos» (Ver. N.M.). Esta versión está muy pegada al texto griego en las frases «no están presentes», y «cerrando los ojos», porque la acción indicada es la de la persona misma. (2) «pues quien no las posee, está ciego; cierra los ojos» (Ver. JTD.). Esta versión dice «posee», como si el verbo fuera el mismo que el en ver. 8, y no es así, pero dice bien al decir, «cierra los ojos». Recuérdese: Pedro atribuye la ceguera espiritual del cristiano a sus propios hechos.
–«habiendo olvidado… pecados». Esta persona no sencillamente se olvida, sino, según el texto griego, ¡recibe el olvido! Ella misma es responsable por el caso. La Ver. N.M. dice, «se ha hecho olvidadizo». «ha echado al olvido», dice la Ver. B.J., y la N.C. dice, «ha dado al olvido». La MOD. dice, «habiendo ya logrado olvidarse». La Biblia pone toda la responsabilidad en la persona misma, mientras que la filosofía humana procura echar la culpa de todo a la sociedad, a la suerte, a las condiciones sociales y económicas, etcétera.
El limpiamiento de sus «antiguos pecados» (Ver. H.A., MOD.) aconteció cuando fue bautizado en Cristo (Hch 2:38; Hch 22:16; Efe 5:26; Heb 10:22; Tit 3:5; 1Pe 3:21).
Si el cristiano no procura activamente suplir las cualidades de los vv. 5-7, va a tener voluntariamente un olvido de la purificación de su alma, y va a quedar ciego, y corto de vista, en cuanto a su necesidad de esas cosas, y no viéndolas, se ocupará en lo único que sí ve, que son las cosas de cerca, de este mundo, que conducen a la muerte eterna.
Fuente: Notas Reeves-Partain
NOTAS
(1) O: “ciego, pues ve sólo lo que está cerca”.
REFERENCIAS CRUZADAS
v 22 1Jn 2:9; Rev 3:17
w 23 Stg 1:25
x 24 Heb 9:14; 1Jn 1:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
el que…es ciego. Esta frase describe la condición del que dice que tiene fe, pero no crece en lo espiritual. Su vista se limita al punto de vista del mundo (cp. Ro 12:2; Col 3:1, 2), de modo que es ciego a las virtudes mencionadas en los vers. 5– 7.
purificación. A través de su muerte expiatoria, Cristo de una vez y para siempre proveyó purificación de los pecados (He 1:3; 9:14).
Fuente: La Biblia de las Américas
9 (1) Véase la nota 8 (1) .
9 (2) La raíz de esta palabra significa cerrar los ojos (a causa de una luz intensa); por tanto, significa ser corto de vista. Así que, tener la vista muy corta equivale a ser espiritualmente ciego, incapaz de ver algo más de la vida divina y de la naturaleza divina del Dios Triuno, depositadas en los creyentes como suministro abundante para ellos.
9 (3) En el griego la frase tiene el sentido de estar dispuestos a olvidar, es decir, dispuestos a olvidar la experiencia de la purificación de nuestros antiguos pecados. Esta purificación se efectuó para que pudiéramos avanzar en la vida divina al participar de la naturaleza divina a fin de alcanzar la madurez de vida. Esto no significa que neguemos la afirmación fiel que hicimos cuando creímos en Cristo y fuimos bautizados en El, ni tampoco que perdamos la certeza de la salvación que recibimos en ese momento, sino qué se refiere a descuidar lo que el comienzo de la salvación significó para nosotros.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
sus antiguos pecados. Los pecados cometidos antes de su conversión.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
R542 El pronombre relativo, ᾧ se puede usar como un dativo posesivo con πάρεστιν: para quien estas no son.
R962 Ocasionalmente, cuando una cláusula relativa es indefinida, el negativo μή aparece con el indicativo (como ocurre aquí).
T190 Αὐτοῦ aquí no es enfático, a pesar de su posición.
H290 Μυωπάζω se forma de μύωψ que significa: corto de vista (es decir, uno que ajusta sus ojos [μύει] para ver).