Biblia

Comentario de 2 Pedro 2:20 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de 2 Pedro 2:20 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Porque si los que se han escapado de las contaminaciones del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo se enredan de nuevo en ellas y son vencidos, el último estado les viene a ser peor que el primero.

2:20 — «Ciertamente, si… mundo». Se trata de los falsos maestros. Ellos habían sido convertidos a Cristo. Véanse NOTAS SOBRE Heb 6:4-6; Heb 10:26, comentarios. En su conversión a Cristo habían «escapado» de las poluciones espirituales (1:4). Véase también Efe 4:20-21.

La palabra griega para decir «contaminaciones» es miasma, que se encuentra solamente aquí. Significa «polución», pero literalmente teñir de un color a otro. Los cristianos tienen su ropa emblanquecida; ahora la carnalidad teñiría esa ropa. De esa palabra griega viene por transliteración «miasma», «emanación perniciosa que se desprende de las substancias animales o vegetales en descomposición».

Véase miasmos (el acto de contaminar), y mi comentario, en el ver. 10 («inmundicia»). Allí Pedro habla de concupiscencias que contaminan, o dejan en polución.

La «polución» o «contaminación» de este versículo corresponde a la «corrupción» del ver. 19 y a la «lascivia» o «disoluciones» del ver. 18.

— «por el conocimiento… Jesucristo». El texto griego no dice «por», sino «en», caso dativo, significando el medio. Dice la Ver. B.A., «mediante el conocimiento», y la Ver. Mod., «por medio del conocimiento».

Otra vez aparece la palabra griega epignosis. Véanse 1:2,3,8, comentarios. Aparece en forma verbal en el próximo versículo dos veces («haber conocido»). Es mediante el conocimiento pleno y completo del Señor y Salvador Jesucristo que la persona se escapa de la polución moral de este mundo. Las personas bajo consideración por Pedro habían sido convertidas genuinamente (y no exteriormente y en apariencia solamente, como afirman los calvinistas).

— «enredándose… vencidos». La palabra griega para decir «enredar» se emplea solamente aquí y en 2Ti 2:4. De ella por transliteración viene la palabra «implicar». Deja la idea de involucrar, entretejer, entrelazar.

La figura empleada por Pedro es la de coger a peces en la red. Los falsos maestros fueron entrampados por su propia carnada (vv. 14,18, seducciones). Sobre «vencidos», véase el versículo anterior, comentarios sobre esta palabra.

El hombre nace inocente. Cuando primero peca, es «enredado» en el pecado; otra vez es enredado cuando apostata de la verdad que le libertó.

— «su postrer estado… primero». La palabra «peor» de este versículo hace contraste con la palabra «mejor» del próximo.

Pedro no era «calvinista»; el Espíritu Santo no le guió a enseñar «la imposibilidad de apostasía», que significa que es «imposible caer de la gracia de Dios para ser finalmente perdido».

El postrer estado del apóstata es peor que el primero porque ahora tiene su conciencia cauterizada (1Ti 4:2). Ahora tiene conocimiento pleno y completo de la verdad, y por eso es más responsable delante de Dios (Luc 12:47-48).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

si habiéndose ellos escapado. 2Pe 2:18; 2Pe 1:4; Mat 12:43-45; Luc 11:24-26; Heb 6:4-8; Heb 10:26, Heb 10:27.

por el conocimiento. 2Pe 1:2.

sus postrer estado. Núm 24:20; Deu 32:29; Flp 3:19.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Las personas a las que se hace referencia en estos versículos han provocado considerables diferencias de opinión entre los comentaristas. Generalmente, son cuatro los puntos de vista que se postulan. Primero, algunos creen que la palabra ellos se refiere a los falsos maestros que se mencionan en los versículos precedentes, en vez de las personas engañadas por ellos. Una segunda posición dice que la conexión aparente entre el final del v. 2Pe 2:18 («los que verdaderamente habían huido de los que viven en error») y el principio del v. 2Pe 2:20 («si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo») probablemente significa que ese «ellos» se refiere a los que no son salvados y que han sido simples «oyentes» del evangelio (v. 2Pe 2:18). Tercero, algunos piensan que tanto los falsos maestros así como sus convertidos están en la mira y que ambos pueden perder su salvación. La cuarta perspectiva propone que ese «ellos» se refiere a nuevos convertidos a quienes se les advierte del peligro de enredarse en un estilo de vida lleno de sensualidad que los llevará a una vida menos satisfactoria que la que tenían antes de ser salvos.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

habiéndose ellos escapado: El sujeto de esta frase son los maestros herejes que son llamados «esclavos de corrupción» en el (v. 2Pe 2:19). Este versículo parece indicar que los maestros escaparon formalmente de la corrupción de este mundo a través de un completo y vivo conocimiento de Cristo. Ahora, sin embargo, ellos han caído nuevamente en inmoralidad, incluso volviéndose maestros de estilos de vida pecaminosos. Como resultado, su postrer estado viene a ser peor que el primero. Lo más probable es que esta frase se tomara de las palabras de Jesús en (Mat 12:45) y probablemente reflejan lo que Pedro recuerda de esa ocasión.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

ESCAPADO… ENREDÁNDOSE OTRA VEZ. Es evidente que los vv. 2Pe 2:20-22 quieren decir que algunos de los falsos maestros una vez fueron redimidos del poder del pecado y luego perdieron la salvación (cf. v. 2Pe 2:1; 2Pe 2:15).

Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena

escapado de las contaminaciones del mundo. «Contaminaciones» alude a la noción de vapores venenosos o putrefactos. En sentido moral, el mundo hiede a influencia mortífera. Pedro advierte que en algún momento dado los falsos maestros y sus seguidores quisieron escapar de la contaminación del sistema del mundo y quisieron refugiarse en la religión, y hasta en Jesucristo (pero en sus propios términos y no en los de Dios; vea las notas sobre el v. 2Pe 2:1). Sin embargo, estos falsos maestros nunca se han convertido de verdad a Cristo. Oyeron el evangelio verdadero y se inclinaron hacia él pero después rechazaron al Cristo de ese evangelio. En esto consiste la apostasía, similar a la cometida por las personas descrita en Heb 10:26-27. Su fin postrero es mucho peor que el primero (para otros ejemplos de apostasía, vea Luc 11:24-26; Luc 12:47-48; 1Co 10:1-12; Heb 3:12-18; Heb 6:6; Heb 10:26; Heb 10:38 ss; 1Jn 2:19; Jud 1:4-6).

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

2:20 — «Ciertamente, si… mundo». Se trata de los falsos maestros. Ellos habían sido convertidos a Cristo. Véanse NOTAS SOBRE Heb 6:4-6; Heb 10:26, comentarios. En su conversión a Cristo habían «escapado» de las poluciones espirituales (1:4). Véase también Efe 4:20-21.
La palabra griega para decir «contaminaciones» es miasma, que se encuentra solamente aquí. Significa «polución», pero literalmente teñir de un color a otro. Los cristianos tienen su ropa emblanquecida; ahora la carnalidad teñiría esa ropa. De esa palabra griega viene por transliteración «miasma», «emanación perniciosa que se desprende de las substancias animales o vegetales en descomposición».
Véase miasmos (el acto de contaminar), y mi comentario, en el ver. 10 («inmundicia»). Allí Pedro habla de concupiscencias que contaminan, o dejan en polución.
La «polución» o «contaminación» de este versículo corresponde a la «corrupción» del ver. 19 y a la «lascivia» o «disoluciones» del ver. 18.
–«por el conocimiento… Jesucristo». El texto griego no dice «por», sino «en», caso dativo, significando el medio. Dice la Ver. B.A., «mediante el conocimiento», y la Ver. Mod., «por medio del conocimiento».
Otra vez aparece la palabra griega epignosis. Véanse 1:2,3,8, comentarios. Aparece en forma verbal en el próximo versículo dos veces («haber conocido»). Es mediante el conocimiento pleno y completo del Señor y Salvador Jesucristo que la persona se escapa de la polución moral de este mundo. Las personas bajo consideración por Pedro habían sido convertidas genuinamente (y no exteriormente y en apariencia solamente, como afirman los calvinistas).
–«enredándose… vencidos». La palabra griega para decir «enredar» se emplea solamente aquí y en 2Ti 2:4. De ella por transliteración viene la palabra «implicar». Deja la idea de involucrar, entretejer, entrelazar.
La figura empleada por Pedro es la de coger a peces en la red. Los falsos maestros fueron entrampados por su propia carnada (vv. 14,18, seducciones). Sobre «vencidos», véase el versículo anterior, comentarios sobre esta palabra.
El hombre nace inocente. Cuando primero peca, es «enredado» en el pecado; otra vez es enredado cuando apostata de la verdad que le libertó.
–«su postrer estado… primero». La palabra «peor» de este versículo hace contraste con la palabra «mejor» del próximo.
Pedro no era «calvinista»; el Espíritu Santo no le guió a enseñar «la imposibilidad de apostasía», que significa que es «imposible caer de la gracia de Dios para ser finalmente perdido».
El postrer estado del apóstata es peor que el primero porque ahora tiene su conciencia cauterizada (1Ti 4:2). Ahora tiene conocimiento pleno y completo de la verdad, y por eso es más responsable delante de Dios (Luc 12:47-48).

Fuente: Notas Reeves-Partain

Mat 12:45.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

NOTAS

(1) Lit.: “habiendo sido entretejidos”.

REFERENCIAS CRUZADAS

u 102 2Pe 1:4

v 103 Heb 6:4

w 104 Mat 12:45; Luc 11:26; Heb 10:26

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

de nuevo son enredados. Es decir, los falsos profetas no fueron genuinamente salvos; porque aunque se acercaron al evangelio, después rechazaron al Cristo que el evangelio presenta (cp. He 10:26– 27).

Fuente: La Biblia de las Américas

escapado de las contaminaciones del mundo. Parece ser que estos maestros habían hecho alguna forma de profesión de la verdad, sin poseer la nueva vida en Cristo. Después rechazaron lo que habían profesado, haciéndose esclavos de la corrupción (v. 2Pe 2:19) y mostrando su verdadera condición, natural y sin cambio real (v. 2Pe 2:22).

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

del Señor… TR: de nuestro Señor.

Fuente: Biblia Textual IV Edición

TR añade nuestro.

Fuente: La Biblia Textual III Edición