Comentario de 2 Reyes 4:18 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Cuando el niño creció, sucedió cierto día que fue a donde estaban su padre y los segadores.
con los segadores. Rut 2:4.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
la cama del varón de Dios: La acción de la sunamita habla de su fidelidad. A pesar de su irresistible dolor, ella estableció el destino de su hijo al lado de Eliseo, a través de cuyas palabras, y por la misericordia de Dios, ella obtuvo a su hijo la primera vez. Al poner el cuerpo sobre la cama del hombre de Dios también mantuvo la muerte en secreto hasta que pudo llamar a Eliseo. Nuevamente compare la historia de Elías y el hijo de la mujer de Sarepta (1Re 17:17-24).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
1Re 17:17-24+.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
El hijo de la mujer sunamita es resucitado. Esta historia tiene aspectos similares a la historia de Elías y cómo revivió al hijo de la viuda de Sarepta (1 Rey. 17). En ambos casos, el milagro ocurrió en la cama del profeta en un altillo (o aposento alto) y consistió en una acción repetida. Pero la historia actual se cuenta con más detalles que la anterior y con mucha más acerbidad. Y en esta ocasión se declara inequívocamente que el niño había muerto.
La acción de la mujer al acostar al niño muerto sobre la cama del profeta y al ir en busca de él sugiere que tenía fe en que podría resucitar a su niño. Se cuenta de manera simple pero conmovedora cómo volvió a vivir el niño y cómo se reunió con su madre. Dios, por medio de su siervo, había manifestado una vez más su poder sobre la vida y la muerte.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
REFERENCIAS CRUZADAS
b 164 Mat 13:30
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Lit., a