Y del humo salieron langostas sobre la tierra, y les fue dado poder como tienen poder los escorpiones de la tierra.
9:3 — Y del humo salieron langostas sobre la tierra; y se les dio poder, como tienen poder los escorpiones de la tierra — Y del humo salieron langostas — Compárese Éxo 10:4-15. Joe 1:1-20; Joe 2:1-32 describe la obra destructora de un ejército de langosta que Dios envió contra Judá para humillarle; Judá se arrepintió. Aquí tenemos un cuadro simbólico de destrucción obrada por Satanás en las vidas de los incrédulos. (El nombre Abadón, o Apolión, significa «destructor»Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
y del humo salieron langostas. Éxo 10:4-15; Jue 7:12; Isa 33:4; Joe 1:4; Joe 2:25; Nah 3:15, Nah 3:17.
como tienen poder los escorpiones. Apo 9:5, Apo 9:10, Apo 9:11; Deu 8:15; 1Re 12:11; Eze 2:6; Luc 10:19.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
En las sociedades agrícolas de la antigüedad, se sentía un gran temor por las langostas, debido a que devoraban las cosechas. En Éxo 10:12-15, una plaga de langostas arrasó con lo que quedó de las cosechas egipcias. En Joe 1:2 se habla de una invasión de langostas que usó el Señor para castigar a la impenitente Judá, lo que constituye una antesala del día del Señor. Tal vez, este pasaje se basa en las visiones de los vv. Apo 9:2-10. Los escorpiones pican con sus colas y causan gran dolor e incluso la muerte (v. Apo 9:10). El único punto de comparación entre las langostas y los escorpiones es que tienen aguijones en sus colas (v. Apo 9:10).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
SALIERON LANGOSTAS SOBRE LA TIERRA. Estas langostas representan un incremento en el número de los demonios y en la actividad demoniaca desatada en la tierra hacia el fin de la historia (véanse la nota anterior y Mat 25:31, nota sobre los ángeles caídos). Ellos tienen el poder de escorpiones para causar dolor y miseria (v. Apo 9:10). Su ataque se dirige contra la maldad en la tierra por un período de cinco meses (vv. Apo 9:5; Apo 9:10), aunque no se les permite atormentar a los creyentes (v. Apo 9:4).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
langostas. Un insecto que desciende en enjambres tan espesos que pueden oscurecer el sol y devastar toda la vegetación. En la década de los cincuenta un enjambre de langostas devoró todo lo que pudiera crecer en varios cientos de miles de kilómetros cuadrados en las planicies de los Estados Unidos. Sin embargo, no se trata aquí de langostas normales, sino de unas que han sido preparadas de manera especial como coraza exterior de demonios que de forma similar a insectos devoradores, traerán desolación masiva (vea las notas sobre Joe 2:2 ; Joe 2:4). En el original, Juan utilizó nueve veces la palabra «como» en su descripción, pero le resultó difícil describir lo que vio de una manera que el lector de su tiempo pudiera entender. escorpiones. Un arácnido que habita en regiones calientes y secas, que posee una cola erguida con un aguijón ponzoñoso. La víctima de un escorpión se retuerce en agonía, produce espuma en la boca y rechina sus dientes por causa del dolor. Los demonios en forma de langostas son capaces de infligir daño físico y quizá también espiritual, como el escorpión (v. Apo 9:5).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
9:3 — Y del humo salieron langostas sobre la tierra; y se les dio poder, como tienen poder los escorpiones de la tierra —
— Y del humo salieron langostas — Compárese Éxo 10:4-15. Joe 1:1-20; Joe 2:1-32 describe la obra destructora de un ejército de langosta que Dios envió contra Judá para humillarle; Judá se arrepintió. Aquí tenemos un cuadro simbólico de destrucción obrada por Satanás en las vidas de los incrédulos. (El nombre Abadón, o Apolión, significa «destructor»–versículo 11). El pecado trae en sí la semilla de destrucción.
— y se les dio poder — Dios no detiene al diablo para que no haga su obra; al contrario, lo deja. Dios permite que los pecadores sufran las consecuencias de sus pecados, para despertar en ellos un reconocimiento de la necesidad de arrepentirse. Compárese Rom 1:27.
Fuente: Notas Reeves-Partain
LAS LANGOSTAS DEL ABISMO
Apocalipsis 9:3-12
Del humo salieron langostas por la tierra, y se les dio una fuerza como la de los escorpiones de la tierra. Se les dijo que no dañaran la hierba de la tierra, ni ninguno de los vegetales ni de los árboles, sino solo a los hombres que no tuvieran en la frente el sello de Dios. No se les permitía matarlos, sino que los torturaran cinco meses. Su tortura era como la que infligen los escorpiones cuando pican; y esos días la gente buscará la muerte pero no podrá hallarla, y anhelarán morir, pero la muerte les huirá.
Mal comparado, las langostas eran como caballos listos para la guerra; llevaban en la cabeza lo que parecían coronas de oro. Tenían caras como de seres humanos, y pelo como el de las mujeres; y sus dientes eran como los de los leones. Tenían escamas como corazas de hierro, y el ruido de sus alas era como el estruendo de muchos carros de combate cuando se lanzan a la batalla. Tenían colas como escorpiones con aguijones, y tenían poder en la cola como para producir un daño a las personas durante cinco meses. Como rey sobre ellas tienen al ángel del abismo sin fondo que se llama Abadón en hebreo y Apolión en griego.
El primer ay ya ha pasado. Todavía le tienen que seguir otros dos.
Del humo que salía del pozo del abismo llegó una invasión terrible de langostas. La devastación y el terror que pueden causar las langostas es casi increíble. Por todo el Antiguo Testamento las langostas son el prototipo de la destrucción, y la descripción-más gráfica y realista y terrible de ellas y de su poder destructivo se encuentra en los dos primeros capítulos de Joel, que contienen la descripción de una plaga de langostas; y es de esos dos capítulos de donde Juan toma muchos de sus materiales. Arruinaron las viñas y desnudaron los árboles de su corteza; los campos estaban arruinados, y destruyeron la cosecha de cereales; todos los árboles del campo fueron destruidos y se secaron, y las ovejas y las cabras se morían de hambre porque no quedaba pasto Jl 1:7-18 ). Son como un gran ejército poderoso que oscurece el mismo cielo; son tan destructivas como un incendio del que no se salva nada; son como caballos y corren como carros de combate, con un ruido como el del fuego cuando prende en la hojarasca; marchan en formación como hombres de guerra; escalan montañas, suben a las casas y entran por las ventanas haciendo temblar de miedo a toda la tierra (Jl 2:1-11 ). Es conveniente leer los dos capítulos de Joel para compararlos con la descripción de Apocalipsis.
En su comentario de Joel, G. R. Driver reúne los Hechos acerca de las langostas en las notas y especialmenté en un apéndice especial; y muestra que las palabras de Joel y del Apocalipsis no son una exageración.
Las langostas se reproducen en lugares desiertos e invaden y devoran los cultivos. Tienen unos cinco centímetros de largo, y una envergadura en las alas de diez a doce. Son de la misma familia que el grillo casero y el saltamontes. Viajan en columnas de treinta metros de profundidad y hasta siete kilómetros de frente. Cuando aparece una nube de langostas, es como si hubiera habido un eclipse de sol, y no se pueden ver grandes edificios desde una distancia de cincuenta metros.
La destrucción que causan es increíble. Cuando han pasado por un área, no queda ni una brizna de hierba; los árboles quedan descortezados. La tierra en la que se han asentado se queda como si hubiera sido arrasada por el fuego; no queda ni un ser vivo. Su capacidad de destrucción se puede apreciar perfectamente por el hecho histórico de lo que sucedió en Argelia en 1866 cuando la invadió una plaga de langosta, y tan total fue su destrucción que 200.000 personas murieron de hambre en los días sucesivos.
El ruido que producen millones de alas de langostas se compara con el del agua al caer en la rueda de un molino o el sonido de una gran catarata. Cuando millones de langostas se aposentan en un terreno, el sonido de sus mandíbulas devorando se ha comparado con el de un gran fuego en una llanura. Su sonido cuando están en marcha es como el que una tempestad en un bosque.
Siempre se ha notado que la cabeza de la langosta es como la de un caballo en miniatura. Por esa razón la palabra italiana para langosta es cavaletta, y la alemana Heupferd.
Cuando se trasladan avanzan inexorablemente como un ejército con sus mandos. Se han hecho zanjas, encendido fuegos, y hasta disparado cañones para intentar detenerlas, pero sin éxito; vienen arrolladoramente en columna ordenada subiendo colinas, invadiendo edificios y dejando la tierra arrasada a su paso.
No hay una visitación más destructiva en el mundo que la de las langostas, y esta es la terrible devastación que ve Juan, aunque las langostas demoníacas del abismo son diferentes de las que se conocen en el mundo.
LAS LANGOSTAS DEMONÍACAS
Apocalipsis 9:3-12 (conclusión)
En hebreo hay bastantes nombres diferentes para designar la langosta, que revelan su poder destructor. Se la llama gazam, desmochador o esquilmador, describiendo cómo cercena toda la vegetación de la tierra; se la llama arbel, enjambre, tropel, describiendo la inmensidad de su número; hasil, consumidor o consumador, describiendo la devastación total que produce; solam, engullidor o aniquilador; hargol, galopante, describiendo su rápido progreso por la tierra; tselatsel, crujiente, por el sonido que hace al volar o al comer.
En este pasaje no es la vegetación de la tierra lo que van a atacar las langostas; de hecho, se les ha prohibido que lo hagan (versículo 4); su ataque va dirigido a las personas que no tengan el sello de Dios en la frente.
Las langostas ordinarias devastan la vegetación, pero no son peligrosas para las personas; pero las langostas demoníacas tienen el aguijón de un escorpión, uno de los azotes de Palestina. De forma, el escorpión es como un cangrejo de río pequeño, con pinzas para sujetar sus presas. Tiene una cola larga, que curva adelante por encima de la cabeza, y en su extremo hay una pinza curva con la que ataca, y que segrega un veneno cuando pica. El escorpión puede llegar a los quince centímetros de largo; abunda en las grietas de los muros, y literalmente debajo de todas las piedras. Los que van de campada nos dicen que hay que levantar todas las piedras cuando se pone la tienda para cerciorarse de que no hay escorpiones. Su picadura es peor que la del avispón; no es fatal de necesidad, pero puede causar la muerte. Las langostas demoníacas tienen adicionalmente el poder de los escorpiones.
Su ataque durará cinco meses. La explicación de esto de los cinco meses es muy probablemente que la vida de una langosta, desde que nace, luego como larva, y hasta la muerte, dura cinco meses. Es como si dijéramos que la tierra sufrirá el ataque lo que dura una generación de langostas.
El sufrimiento que causarán las langostas será tal que la gente querrá morirse, pero no podrá. Job habla de la miseria suprema de los que ansían la muerte, pero no les llega Job 3:21 ); y Jeremías habla del día cuando se preferirá morir a seguir viviendo Jer 8:3 ). Un escritor latino, Comelio Gallo, dice: » Peor que ninguna herida es desear la muerte y no poder morirse.»
El rey de las langostas satánicas se llama Abadón en hebreo y Apolión en griego. Abaddón quiere decir en hebreo destrucción; sale con la mayor frecuencia en las frases » muerte y destrucción,» e » infierno y destrucción» (Job 26:6 ; Job 28:22 ; Job 31:12 ; Sal 88:11 ; Pr 15:11 ; Pr 27:20 ). Apollyón es el participio de presente del verbo griego apollyein, destruir, y por tanto quiere decir El Destructor. Es apropiado que el rey de las langostas demoníacas se llame Destrucción o Destructor.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
— plaga de langostas: Estas langostas equivalen a lo que en castellano suelen llamarse saltamontes, pero de gran tamaño. Eran célebres en Oriente las plagas de estas langostas que, volando en enormes colonias, arrasaban a su paso todo tipo de vegetación (ver Éxo 10:12-15; Jer 51:27; Joe 1:1-20; Joe 2:1-32; Sab 16:9; etc.). En el presente pasaje simbolizan a una serie de poderes infernales con un enorme poder destructor.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
REFERENCIAS CRUZADAS
h 430 Éxo 10:4; Éxo 10:12
i 431 Deu 8:15; Luc 11:12
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
3 super (1) Estas langostas no son como las mencionadas en Éxo_10:12-15, dado que éstas tienen colas como escorpiones, y también aguijones, y dañan a los hombres (v.10). Han de estar poseídas por demonios, porque salen del humo que proviene del pozo del abismo, la morada, de los demonios (v.2).
3 super (2) Lit., autoridad. Así también en los vs.10, 19.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
langostas. El hecho de que estas criaturas salgan del abismo, y la extraña descripción que de ellas se hace en los vv. Apo 9:7-11, indican que son demoníacas.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
langostas… → Éxo 10:12-15.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
Lit., hacia
O, como el poder que tienen
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit. autoridad.
9.3 Lit. autoridad
9.3 g Éxo_10:12-15.