Por esta razón también nosotros, desde el día en que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros y de rogar que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría y plena comprensión espiritual;
desde el día que lo oímos. Col 1:3, Col 1:4, Col 1:6; Rom 1:8-10; Efe 1:15, Efe 1:16.
no cesamos de orar. 1Sa 12:23; Hch 12:5; Flp 1:4; 1Ts 1:3; 1Ts 5:17; 2Ts 1:11; 2Ti 1:3, 2Ti 1:4; Flm 1:4.
y de pedir que seáis llenos. 1Co 1:5; Efe 1:15-20; Efe 3:14-19; Flp 1:9-11.
del conocimiento de su voluntad. Col 4:12; Sal 143:10; Jua 7:17; Rom 12:2; Efe 5:10, Efe 5:17; Efe 6:6; Heb 10:36; Heb 13:21; 1Pe 2:15; 1Pe 4:2; 1Jn 2:17.
en toda sabiduría. Col 3:16; Col 4:5; Sal 119:99; Efe 1:8; Stg 1:5; Stg 3:17.
e inteligencia espiritual. 1Jn 5:20.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
La oración de Pablo por sus hermanos colosenses es un modelo para nosotros. Tan pronto como supo de la nueva fe de los colosenses, comenzó a rogarle a Dios por ellos, pidiéndole que les diera conocimiento, sabiduría, fortaleza y alegría. Ora para que los nuevos creyentes en Colosas puedan crecer en la madurez de Cristo para que caminen delante de Dios, complaciéndolo y haciendo buenas obras.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
La principal preocupación de Pablo es que los colosenses estén llenos de conocimiento sobre la voluntad de Dios. El deseo de servir a Dios es en vano sin el conocimiento apropiado del que queremos servir. De este modo, Pablo ora para que este pueblo esté lleno del conocimiento que abarca toda la sabiduría e inteligencia espiritual. La sabiduría es la obra exterior práctica del conocimiento (Stg 3:17) y el conocimiento no se puede separar de la inteligencia espiritual que viene por medio del discernimiento que otorga el Espíritu Santo.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
NO CESAMOS DE ORAR POR VOSOTROS. Esta es una de las cuatro grandes oraciones apostólicas de Pablo, pronunciadas bajo la inspiración del Espíritu (las otras tres se encuentran en Efe 1:16-19; Efe 3:14-19; y Flp 1:9-11). Con esas oraciones se aprende a orar por los demás, como por ejemplo los hijos, los amigos, los hermanos en la fe, los misioneros y los pastores. Se debe orar para que ellos
(1) entiendan la voluntad de Dios,
(2) obtengan la sabiduría espiritual,
(3) vivan en santidad agradando al Señor,
(4) lleven fruto para Cristo,
(5) sean fortalecidos espiritualmente por el Espíritu Santo,
(6) perseveren en la fe y en la justicia,
(7) den gradas al Padre,
(8) continúen en la esperanza del cielo,
(9) conozcan la cercanía de Cristo,
(10) conozcan el amor de Cristo,
(11) sean llenos con la plenitud de Dios,
(12) muestren amor y cariño a los demás,
(13) disciernan el mal,
(14) sean sin mancha e irreprensibles y
(15) anhelen el regreso de Cristo.
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
CONOCIMIENTO DE SU VOLUNTAD. El conocimiento de la voluntad de Dios resulta de la oración y del permanecer en su Palabra y en la comunión con Él. Sólo esa clase de conocimiento da por resultado la sabiduría y el entendimiento espiritual, y transforma el corazón y la vida (vv. Col 1:9-11; véase Flp 1:9, nota).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
del conocimiento de su voluntad. La palabra griega que se traduce «conocimiento» es la corriente, con una preposición añadida que intensifica su significado. No es una impresión o sentimiento interior, sino un conocimiento profundo y total de la voluntad de Dios que ha sido revelada por completo y de manera definitiva en la Palabra de Dios (Col 3:16; Efe 5:17; 1Ts 4:3; 1Ts 5:18; 1Ti 2:4; 1Pe 2:13; 1Pe 2:15; 1Pe 4:19). sabiduría e inteligencia espiritual. Aquí «espiritual» es el adjetivo que se aplica a «sabiduría» (la capacidad de acumular y organizar los principios bíblicos) y a «inteligencia» (la aplicación de esos principios a la vida diaria).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
LA ESENCIA DE LA INTERCESIÓN
Colosenses 1:9-11
Eso, de hecho, es lo que nos hace orar por vosotros incesantemente desde el día que lo supimos, pidiéndole a Dios que estéis llenos de un creciente conocimiento de Su voluntad, con toda sabiduría y entendimiento espiritual, para que os podáis conducir de una manera digna de los que tienen tal Señor, y de tal manera que Le agradéis totalmente, llevando fruto de toda buena obra y creciendo en un conocimiento cada vez más pleno de Dios; y que sigáis fortaleciéndoos con todo vigor de acuerdo con Su glorioso poder para que poseáis toda fortaleza y paciencia con gozo.
Es algo de lo más precioso el escuchar las oraciones de un santo por sus amigos; y eso es lo que escuchamos en este pasaje. Bien puede decirse que nos enseña más acerca de la intercesión que casi ningún otro pasaje del Nuevo Testamento. Aquí aprendemos, como dice C. F. D. Moule, que hay dos peticiones básicas que se han de hacer en la oración: el discernimiento de la voluntad de Dios, y seguidamente el poder para cumplirla.
(i) La oración empieza por pedir que seamos llenos de un conocimiento siempre en aumento de la voluntad de Dios. Su supremo objetivo es el conocimiento de la voluntad de Dios. Se trata, no tanto de hacer que Dios nos preste atención, como de que Le escuchemos nosotros a Él; no debemos estar tratando de convencer a Dios para que haga lo que nosotros queremos, sino de descubrir lo que Él quiere que nosotros hagamos. Resulta que muchas veces lo que estamos pidiendo es: » Dios, acomoda Tu voluntad a la nuestra,» cuando lo que deberíamos pedir es: » Hágase Tu voluntad.» El primer objetivo de la oración no es tanto decirle cosas a Dios como escuchar lo que Él nos quiere decir.
Este conocimiento de Dios se ha de traducir a nuestra situación humana particular. Pedimos sabiduría y entendimiento espiritual. La sabiduría espiritual es en griego sofía, que se podría describir como conocimiento de los primeros principios. El conocimiento es synesis, que es lo que los griegos describían a veces como un conocimiento crítico, con lo que querían decir la habilidad de aplicar los primeros principios a cualquier situación dada que nos pueda surgir en la vida. Así es que, cuando Pablo pide que sus anllgos tengan sabiduría y entendimiento, está pidiendo que puedan entender las grandes verdades del Evangelio y puedan ser capaces de aplicarlas a las decisiones y las tareas que les sobrevengan en la vida cotidiana. Uno puede que sea profesor de teología y falle en la práctica; que pueda escribir y disertar sobre las verdades eternas, y sin embargo sea una nulidad para aplicarlas a las cosas que le salgan al paso en la vida de cada día. El cristiano tiene que saber lo que quiere decir el Cristianismo, no en el vacío, sino en los asuntos de la vida.
(iii) Este conocimiento de la voluntad de Dios y esta sabiduría deben conducir a la conducta correcta. Pablo pide que sus amigos se conduzcan de tal manera que agraden a Dios. No hay nada en el mundo más práctico que la oración. No es evasión de la realidad. La oración y la acción van de la mano. Oramos, no para evadir las responsabilidades de la vida, sino para cumplirlas.
(iv) Para esto necesitamos poder. Por tanto, Pablo pide que sus amigos sean fortalecidos con el poder de Dios. El gran problema de la vida no es saber lo que tenemos que hacer, sino hacerlo. En la mayoría de los casos somos conscientes en cualquier situación dada de lo que debemos hacer; lo difícil es poner ese conocimiento en acción. Lo que necesitamos es poder, y lo recibimos mediante la oración. Si Dios no hiciera más que decirnos cuál es Su voluntad, podríamos encontrarnos en una situación frustrante. Mediante la oración alcanzamos el mayor don del mundo: conocimiento y poder.
LOS TRES GRANDES DONES
Colosenses 1:9-11 (conclusión)
Lo que podríamos llamar la parte intercesora de la oración de Pablo termina con la petición de tres grandes cualidades. Pide que sus amigos Colosenses posean toda fortaleza, paciencia y gozo.
Fortaleza y paciencia son dos grandes palabras griegas que van juntas muchas veces. Fortaleza es hypomoné, y paciencia es makrothymía. Hay una cierta semejanza y una cierta diferencia entre estas dos palabras. No sería totalmente cierto decir que siempre se observa en griego esta diferencia, pero sí cuando van juntas.
Hypomoné se traduce por paciencia en la Reina-Valera en casi todos los casos; pero no quiere decir paciencia en el sentido corriente de bajar la cabeza y dejar pasar la marea de los acontecimientós,_ sin ofrecer resistencia. Quiere decir, no solamente la habilidad de soportar cosas, sino la habilidad, al soportarlas, de cambiarlas en gloria. Es una paciencia conquistadora. Hypomoné es la habilidad de tratar triunfalmente cualquier cosa que la vida nos pueda hacer.
Makrothymía se suele traducir por longanimidad o por paciencia en la Reina-Valera. Quiere decir básicamente paciencia con las personas. Es la cualidad de mente y de corazón que le permite a uno soportar a las personas desagradables, maliciosas y crueles sin dejarse amargar, y sin que su torpeza le haga a uno desesperar, ni su necedad le irrite, ni su desamor altere su amor. Makrothymía es el espíritu que no pierde nunca la paciencia con las personas, ni deja de creer y esperar en ellas.
Así es que Pablo pide para sus amigos hypomoné, la fortaleza que no se deja dominar en ninguna situación, y makrothymía, la paciencia que ninguna persona puede derrotar. Pide que los cristianos sean tales que ninguna circunstancia pueda derrotar su fuerza ni ningún ser humano pueda derrotar su amor. La fortaleza del cristiano ante los acontecimientos y su paciencia con las personas deben ser indestructibles.
Además de todo esto pide gozo. El camino cristiano no es una pelea lúgubre con las circunstancias y las personas, sino una actitud radiane y soleada ante la vida. El gozo cristiano se mantiene en cualesquiera circunstancias. Como C. F. D. Moule decía: » Si el gozo no está enraizado en el suelo del sufrimiento, es superficial.» Es fácil estar gozoso cuando las cosas nos van bien; pero la luminosidad cristiana es algo que no pueden ahogar todas las sombras de la vida.
Por tanto la oración cristiana es: «Dame, Señor, la victoria sobre todas las circunstancias, la paciencia con todas las personas, y el gozo que ninguna circunstancia ni persona me pueda quitar.»
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
Efe 1:16-18; Efe 3:14-19; Flp 1:9.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
la Oracion Pidiendo Conocimiento y Conducta Piadosa
A medida que Pablo despliega el contenido de su oración a favor de los colosenses, introduce muchos de los temas más importantes de la carta. Estos versículos anuncian a los lectores lo que él piensa que es lo importante y, por implicación, instan a los colosenses a responder en una forma positiva. En otras palabras, la oración de Pablo es que ellos puedan conocer la voluntad de Dios y tener el poder para cumplirla. El vínculo estrecho entre el agradecimiento de los vv. 3-8 y el párrafo de intercesión de los vv. 9-14 muestra que Pablo era un verdadero pastor: Estaba agradecido a Dios por el progreso de los colosenses, pero deseaba también que crecieran en su comprensión y conducta piadosa, y trataran con la falsa enseñanza que estaba haciendo incursión en la iglesia. Pudo haber querido también que sus lectores usaran esta oración como un modelo en su propia oración a Dios. Seguramente es una de las más bellas en sus cartas (cf. Ef. 1:17-19; 3:14-19) y ha servido de ejemplo para las generaciones posteriores de cristianos.
9 Desde el día en que se enteró de su progreso como cristianos, el Apóstol no sólo ofreció un constante agradecimiento a Dios el Padre; también oraba por ellos. Sabiendo que a quien él había rogado le daría rica y abundantemente (Fil. 4:19; cf. Rom. 15:13; Stg. 1:5), Pablo y sus colegas oraron constantemente para que sus oyentes recibieran “plenitud” (un término aparentemente usado por los falsos maestros) de bendiciones de la mano amorosa de Dios: rogando que seáis llenos del conocimiento de su voluntad. El Apóstol quedaría satisfecho con nada menos que su completa madurez cristiana. El conocimiento por el cual él rogaba se distingue de otro conocimiento porque consiste de sabiduría y plena comprensión de toda clase en el nivel espiritual. La voluntad de Dios, que usualmente es más amplia que su voluntad personal para la vida cristiana individual, a veces describe su plan de elección y de salvación (Ef. 1:5, 9). Aquí esto tiene que ver con la completa obediencia de los lectores, la cual será visible en sus acciones (cf. Rom. 12:1, 2).
10 Aunque hay un fuerte énfasis sobre el conocimiento y sabiduría (lo cual incluye un elemento intelectual que permite a los colosenses oponerse al error), este conocimiento por el que Pablo oraba tenía que ver con la conducta correcta: para que andéis como es digno del Señor. Pablo usa a menudo el término “andar” para describir la vida cristiana (Rom. 6:4; 8:4; Gál. 5:16; Ef. 4:1; Fil. 3:17). Los colosenses deberían vivir de una manera que fuera digna de aquel a quien confesaban como Señor. Agregando más, el Apóstol ora por ellos a fin de agradarle en todo, una expresión que describe no una actitud amedrentada en la presencia de un su perior, sino una conducta que honre al Señor porque surge de una gozosa obediencia a él. En otro lugar Pablo menciona la necesidad de que los cristianos agraden a Dios (o a otros, como resultado de su obediencia a él) antes de agradarse a sí mismos (Rom. 8:8; 15:1-3; 1 Cor. 7:32). Esto debe darse en todas las esferas, en todo. Pablo entonces detalla aun más lo que involucra un andar digno del Señor (lit. “cami nando dignamente en el Señor”). Los creyentes han de llevar fruto en toda buena obra. El evangelio ha llevado fruto al producir acciones piadosas en los colosenses (6), y Pablo ahora ruega para que ellos puedan ser fructíferos en todas las cosas que hacen. Los creyentes han de crecer en el conocimiento de Dios. A medida que responden a esa relación personal que ya tienen con Dios, la relación crecerá y su comprensión de él se profundizará. 11 Y que seáis fortalecidos con todo poder indica cómo han de vivir en una forma digna del Señor. Las normas puestas delante de los colosenses eran altas, más altas que las de los falsos maes tros, y podrían parecer imposibles de alcanzar. Pero esto no es el caso. Pablo amontona términos de poder y fuerza para subrayar que nada menos que el poder del Dios Todopoderoso obrando dentro de ellos los capacitará para vivir en una forma que es agradable a él; conforme a su gloriosa potencia. Es más que suficiente para las necesidades de los colosenses; y esta fuerza será dada a ellos día tras día a medida que confronten las más diversas situaciones (el tiempo presente del verbo seáis fortalecidos indica la continua fortaleza de Dios). La manifestación de su divino poder no se da en milagros espectaculares, sino en toda perseverancia y paciencia, particularmente frente a la oposición. Al soportar pacientemente los sufrimientos, los cristianos muestran que tienen puestas sus esperanzas en Dios.
12-14 Finalmente, Pablo da gracias al Padre … con gozo porque esto también le agrada a él. “Acción de gracias” en las cartas de Pablo se refiere a una actitud mental que se expresa exteriormente y a menudo públicamente. Al mencionar nosotros lo que Dios ha hecho de pura gracia en su Hijo, otros cristianos serán animados a alabarle también, y en la medida en que la acción de gracias se incremente, Dios es glorificado (2 Cor. 1:11; 4:15). La acción de gracias gozosa es una actividad en la que los cristianos deberían participar más regularmente. Hay buenas razones para ello. De hecho, la acción de gracias al Padre en forma regular es una marca distintiva de un verdadero cristiano.
12 El Todopoderoso ha obrado a favor de ellos y ya les ha preparado una herencia eterna. Este lenguaje está lleno de ecos del AT y recuerda la primera promesa dada a Abram (Gén. 13:14-17) que fue renovada más tarde a Israel (Núm. 26:52-56). La herencia a la que Pablo se refiere pertenece al más alto nivel y a un orden más perdurable que el de la tierra de Canaán, ya que está con los santos en luz, es decir, en el reino de la luz de la era por venir, en los cielos mismos. Pertenece a una dimensión espiritual, imposible de ser saqueada por la guerra, hambre o cosa semejante. Esta herencia es la “esperanza reservada para vosotros en los cielos” (1:5; cf. 3:1-4) y no es ningún otro que el Señor Jesús mismo. 13, 14 Explican el significado del v. 12, enfatizando el cambio notable que Dios trajo en el día de la conversión de los colosenses. Como otros, ellos habían estado bajo el control del malo y pertenecían a su terrible dominio: la autoridad de las tinieblas. Las circunstancias de ellos se describen en 1:21: estaban separados de Dios, hostiles a él y eran hacedores de maldad. Pero él nos ha librado (nos incluye a Pablo y a otros creyentes también) de esa tiranía de las tinieblas. El los ha librado de la esclavitud (como en el éxodo) y los transfirió a su reino donde reina su Hijo amado. Este cambio de dominio se describe vívidamente en términos de “luz” y “tinieblas”; ahora los colosenses eran “hijos de luz” (cf. 1 Tes. 5:5) y han de vivir acordes con ello. El reino de su Hijo amado es una referencia al reino de Dios o al reinado de él en el tiempo presente antes de la segunda venida del Señor Jesús. 14 En este reino donde Jesucristo es el Señor hay redención, es decir, libertad para los que estaban en cautiverio espiritual (el precio pagado es la muerte de Jesús; Ef. 1:7; 1 Ped. 1:18). Esta redención que es una posesión actual de los colosenses, está estrechamente ligada con el perdón de los pecados. “La redención libera del poder del pecado y ofrece perdón de su culpa” (D. Guthrie).
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
NOTAS
(1) Lit.: “hacer petición”.
REFERENCIAS CRUZADAS
q 17 Efe 1:16; Stg 5:16
r 18 Flp 1:9
s 19 1Co 2:7; Col 2:3
t 20 2Ti 2:7; 1Jn 5:20
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
9 (1) Aquí la voluntad de Dios se refiere a Su voluntad con respecto a Su propósito eterno, es decir, con respecto a Su economía tocante a Cristo ( Efe_1:5 , Efe_1:9 , Efe_1:11), y no a Su voluntad con respecto a cosas secundarias.
9 (2) La sabiduría y el entendimiento espirituales provienen del Espíritu de Dios, el cual está en nuestro espíritu, en contraste con la filosofía gnóstica, la cual está meramente en la mente humana entenebrecida. La sabiduría está en nuestro espíritu y sirve para que nosotros percibamos la voluntad eterna de Dios; el entendimiento espiritual está en nuestra mente, la cual ha sido renovada por el Espíritu, y sirve para que entendamos e interpretemos lo que percibimos en nuestro espíritu.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
de orar… y de pedir… Lit. orando… y pidiendo; pleno conocimiento… El gr. es pleonástico.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R485 La verdadera voz pasiva de unos verbos retiene el acusativo del complemento directo. Esto sucede con los verbos en voz activa que tienen dos acusativos en voz activa (llenos de conocimiento -T247).
R600 La preposición ἐπί compuesta con el sustantivo tiene la idea perfectiva: verdadero conocimiento.
R784 La frase prepositiva (ἐν …) es predicativa, y no atributiva (es decir, se usa con el verbo, y no con el sustantivo; significa: que ustedes puedan ser llenos … en toda sabiduría espiritual).
R993 Ἵνα se usa después de αἰτούμενοι para indicar el contenido de la petición (las peticiones de las oraciones): y pedir que.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Lit., lo oímos
O, verdadero conocimiento
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit. orandou8230? y pidiendo.
1.9 El gr. es pleonástico.