Mirad que nadie os lleve cautivos por medio de filosofías y vanas sutilezas, conforme a la tradición de hombres, conforme a los principios elementales del mundo, y no conforme a Cristo.
2:8 Mirad que nadie os engañe (que nadie os haga cautivos, LBLA) — Que no los lleven como despojos de la guerra . Después de la guerra los victoriosos celebraban su victoria haciendo pasar a los cautivos por las calles de la ciudad, presentándolos como los despojos de la guerra, y después del desfile entraban en una dura esclavitud. Pablo dijo a los colosenses (1:13, 14) que el Padre «nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados». De esa manera tenían acceso a «todas las riquezas que proceden de una plena seguridad de comprensión, resultando en un verdadero conocimiento del misterio de Dios, es decir, de Cristo» (2:2). ¿Alcanzarían estas riquezas si volvieran a la esclavitud? Habiendo sido redimido o librado de las «tinieblas» (p. ej., la filosofía hueca, sea del judaísmo o del paganismo), deberían hacer todo lo posible por evitar tal esclavitud. Ya no eran esclavos de nadie, sino ciudadanos libres en el servicio de Cristo, pero los herejes querían hacerles esclavos de los mandamientos y tradiciones de los hombres. Compárese Gál 4:9 : «Mas ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os queréis volver a esclavizar?»Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
mirad que nadie. Deu 6:12; Mat 7:15; Mat 10:17; Mat 16:6; Flp 3:2; 2Pe 3:17.
os engañe. Col 2:18; Cnt 2:15; Jer 29:8; Rom 16:17; Efe 5:6; Heb 13:9; 2Jn 1:8.
por medio de filosofías. Hch 17:18, Hch 17:32; Rom 1:21, Rom 1:22; 1Co 1:19-23; 1Co 3:18, 1Co 3:19; 1Co 15:35, 1Co 15:36; 2Co 10:5; 1Ti 6:20; 2Ti 2:17, 2Ti 2:18; 2Ti 3:13.
según las tradiciones de los hombres. Col 2:22; Mat 15:2-9; Mar 7:3-13; Gál 1:14; 1Pe 1:18.
los rudimentos del mundo. Col 2:20; Gál 4:3, Gál 4:9; Efe 2:2.
y no según Cristo. Efe 4:20.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
En ocasiones se utiliza este versículo para enseñar que los cristianos no deben ni leer ni estudiar filosofía. Pero eso no es lo que quiere decir Pablo. Él mismo es un adepto a la filosofía, lo que se evidencia en su interacción con los filósofos estoicos y epicúreos en Atenas (Hch 17:1-34). Lo que sí hace, es advertir a los creyentes que no adopten ninguna filosofía que no este en conformidad con el conocimiento de Cristo. Los falsos maestros de Colosas mezclaron las filosofías terrenales con el evangelio. Pablo dice que estas filosofías son rudimentos del mundo, los que algunos interpretan como «espíritus» o «ángeles» que controlan supuestamente la vida de una persona (Gál 4:3, Gál 4:9). Parece más probable que la palabra rudimento se refiera a los reglamentos que ciertos maestros buscan imponer a los creyentes conforme a los dictámenes de la filosofía humana. La fuerte acusación de Pablo en contra de los heréticos radica en que esa enseñanza no es según Cristo, por lo mismo, ellos no andaban en el camino de Cristo (vv. Gál 4:6, Gál 4:7).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
FILOSOFÍAS Y HUECAS SUTILEZAS… NO SEGÚN CRISTO. Pablo advierte que hay que cuidarse de todas las filosofías, religiones y tradiciones que pongan énfasis en el desempeño humano aparte de Dios y de su revelación escrita. Hoy día una de las más mayores amenazas filosóficas al cristianismo bíblico es «el humanismo secular». Esa ha llegado a ser la filosofía fundamental y la religión aceptada en la mayor parte de la educación secular, de la administración pública y de la sociedad en general, y es el punto de vista que sostiene la mayoría de los noticieros y de los medios de comunicación de todo el mundo.
(1) ¿Qué enseña la filosofía del humanismo?
(a) Enseña que la humanidad, el universo y todo lo que existe se componen sólo de materia y energía configuradas dentro de su forma presente por pura casualidad,
(b) Enseña que los seres humanos no han sido creados por un Dios personal, sino que son producto de un proceso casual evolutivo,
(c) Rechaza la creencia en un Dios personal e infinito, y niega que la Biblia sea la inspirada revelación de Dios a la raza humana,
(d) Sostiene que no hay conocimiento aparte del descubrimiento humano y que la razón humana determina la ética apropiada para la sociedad, de modo que el ser humano se convierte en la autoridad suprema,
(e) Procura modificar o perfeccionar la conducta humana mediante la educación, la redistribución económica, la psicología moderna y la sabiduría humana,
(f) Enseña que las normas morales no son absolutas sino relativas, determinadas por lo que hace felices a las personas y les produce placer o le parece bueno a la sociedad según las normas establecidas por sus dirigentes; de ese modo se rechazan los valores y la moralidad de la Biblia,
(g) Considera la realización humana, la satisfacción y el placer como los bienes de la vida en primer orden,
(h) Sostiene que las personas debieran aprender a contender con la muerte y con las dificultades de la vida sin creer en Dios ni depender de Él.
(2) La filosofía del humanismo partió de Satanás y es una expresión de la mentira de Satanás de que los seres humanos pueden ser como Dios (Gén 3:5). La Biblia identifica a los humanistas como los que «cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador» (Rom 1:25).
(3) Todos los dirigentes cristianos, pastores y padres deben hacer cuanto puedan para proteger a sus hijos de las enseñanzas humanistas, poniendo al descubierto el error que contienen e infundiéndoles un piadoso desprecio por su influencia destructiva (Rom 1:20-32; 2Co 10:4-5; 2Ti 3:1-10; Jud 1:4-20; véanse 1Co 1:20. nota; 2Pe 2:19. nota).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
os engañe. Este es el término que significa «robar». Los maestros falsos que tienen éxito en hacer que las personas crean mentiras, les roban la verdad, la salvación y la bendición de Dios. filosofías y huecas sutilezas. Es la única vez que ocurre el término «filosofía» (lit. «amor a la sabiduría») en el NT. La palabra se refería más que a una disciplina académica y describía cualquier teoría acerca de Dios, el mundo o el significado de la vida. Los que acogieron la herejía propagada en Colosas la usaban para describir el supuesto conocimiento superior que según ellos habían alcanzado. Sin embargo, Pablo equipara la filosofía de los falsos maestros con «huecas sutilezas», es decir, engaños despreciables; (cp. 1Ti 6:20; vea la nota sobre 2Co 10:5. los rudimentos del mundo. Vea la nota sobre el v.Col 2:20; Gál 4:3). Lejos de ser un conocimiento avanzado y más profundo, las creencias de los falsos maestros eran simplistas e inmaduras como todas las demás especulaciones, ideologías, filosofías y psicologías inventadas en el sistema caído satánico y humano.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
2:8 Mirad que nadie os engañe (que nadie os haga cautivos, LBLA) — Que no los lleven como despojos de la guerra . Después de la guerra los victoriosos celebraban su victoria haciendo pasar a los cautivos por las calles de la ciudad, presentándolos como los despojos de la guerra, y después del desfile entraban en una dura esclavitud.
Pablo dijo a los colosenses (1:13, 14) que el Padre «nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados». De esa manera tenían acceso a «todas las riquezas que proceden de una plena seguridad de comprensión, resultando en un verdadero conocimiento del misterio de Dios, es decir, de Cristo» (2:2). ¿Alcanzarían estas riquezas si volvieran a la esclavitud? Habiendo sido redimido o librado de las «tinieblas» (p. ej., la filosofía hueca, sea del judaísmo o del paganismo), deberían hacer todo lo posible por evitar tal esclavitud. Ya no eran esclavos de nadie, sino ciudadanos libres en el servicio de Cristo, pero los herejes querían hacerles esclavos de los mandamientos y tradiciones de los hombres. Compárese Gál 4:9 : «Mas ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os queréis volver a esclavizar?»
Al igual que los judaizantes los herejes colosenses querían agregar otras cosas para «ayudar» al evangelio, «no asiéndose de la Cabeza» (2:19). Esto sería como prender una lámpara de petróleo para aumentar la luz del sol. Sería como si uno dejara un automóvil de ocho cilindros para andar en bicicleta; es decir, era simplemente volver atrás.
También significa que para salvarnos Cristo no era suficiente. La Iglesia Católica Romana sufre del mismo mal: agrega a María y a los «santos» porque cree que la mediación de Cristo no es adecuada. Para los tales Cristo no es único («un sólo Mediador», 1Ti 2:5), sino que es necesario que haya muchos intermediarios entre Dios y los hombres.
— por medio de filosofías — no necesariamente filosofía pagana, pues en este contexto obviamente Pablo habla principalmente de reglamentos judaicos; según Josefo, en aquellos tiempos cualquier sistema de pensamiento o de disciplina moral se llamaba una filosofía. El dijo que había tres formas de filosofía entre los judíos: la escuela de los fariseos, la de los saduceos y la de los esenios (GH). Los esenios eran ascéticos (2:20-23).
La filosofía (literalmente, amar el conocimiento o la sabiduría) es el análisis de los principios fundamentales del pensamiento y de la conducta. Todo sistema de filosofía humana lleva a la ruina, porque «el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos» (Jer 10:23). La salvación no podía efectuarse por medio de la filosofía humana. Todos los esfuerzos para encontrar la justicia en sistemas del pensamiento humano despojan a los hombres, robándoles de la verdadera justicia que se encuentra en Cristo. «Todas las filosofías de los hombres, todos los engaños de la sabiduría humana, y todos los rudimentos del mundo descubiertos por el razonamiento humano despojan a los hombres, arruinan sus almas, guiándoles a la muerte eterna por alejarlos de Dios y su salvación» (DL).
Pablo no dice que los herejes de Colosas rechazaban del todo el evangelio. Más bien parece que querían agregarle su filosofía, pero con la adición de cualquier filosofía humana, el evangelio pierde su pureza y, por consiguiente, pierde su poder para salvar (Rom 1:16). Los judíos querían agregar al evangelio algunas de las leyes de Moisés (2:11,16) y los que tenían ideas gnósticas querían agregar el conocimiento de los misterios. Los dos creían que con la adición de sus enseñanzas perfeccionaban al evangelio, pero en realidad estaban renunciando al evangelio. El agregar equivale a cambiar, y un evangelio cambiado es «otro evangelio» (Gál 1:6-9).
— y huecas (vanas, LBLA) sutilezas, — engaños, «APATE, aquello que da una falsa impresión, ya sea por apariencia, afirmación, o influencia, se dice de las riquezas, Mat 13:22; Mar 4:19; del pecado, Heb 3:13. La frase ‘deseos engañosos’ significa deseos excitados por engaños, de los que el engaño es su fuerza… En 2Ts 2:10, ‘todo engaño de iniquidad’ significa todo tipo de palabras y acciones carentes de escrúpulos, con el designio de engañar… En Col 2:8, ‘huecas sutilezas’ sugiere que el engaño está vacío de provecho» (WEV).
— según las tradiciones de los hombres, — La Biblia presenta el plan divino para la salvación del hombre, pero lastimosamente los hombres tienen sus propios planes para salvar, planes originados por los hombres y transmitidos de hombres a hombres, pero el agua no corre a un nivel más alto que el de su fuente (DL).
La palabra tradición (PARADOSIS) quiere decir simplemente «una transmisión», algo transmitido de una persona a otra. Pablo emplea esta misma palabra al hablar de lo que él recibió del Señor y entregó a los hermanos (p. ej., 1Co 11:2; 1Co 11:23; 1Co 15:3; 2Ts 2:15; 2Ts 3:6, véase LBLA, margen). Si la tradición viene de parte de Cristo a través de los apóstoles, es la verdadera enseñanza de Dios, pero si tiene su origen en la mente del hombre, entonces es tradición humana y, por eso, condenable (Mat 15:8-9; Col 2:8). Los falsos maestros suelen decir que aunque tal o cual tradición no aparezcan en las Escrituras, sí proviene de los labios de Jesús o de los apóstoles, pero toda enseñanza que no se encuentra en las Escrituras no es de Cristo sino de los hombres.
— conforme a los rudimentos (principios elementales, LBLA) del mundo, y no según Cristo. — Los rudimentos son el abecedario de la filosofía (religión) judaica o gentil. Los herejes presentaban estas cosas rudimentarias (cosas de niños) como superiores al evangelio. El resto del capítulo enumera estos rudimentos: 2:11-13, querían imponer la circuncisión física; 2:14-17, querían imponer los reglamentos de la ley de Moisés con respecto a comida y bebida, días de fiesta, luna nueva y días de reposo; 2:18, querían imponer el culto a los ángeles; y 2:20-23, querían imponer los reglamentos ascéticos. Si los colosenses hubieran aceptado estos rudimentos o mandamientos y doctrinas de hombres, habrían sido «despojos» para los falsos maestros, porque la aceptación de los reglamentos de hombres esclaviza.
Véase también Gál 4:3; Gál 4:9, «débiles y pobres rudimentos» (sin poder y riqueza espirituales). Las prácticas mencionadas por Pablo en este capítulo no podían salvar y no podían ayudar (edificar) a los salvos. «No tienen valor alguno contra los apetitos de la carne» (2:23). Compárense los peregrinajes, las penitencias, el celibato, los votos de pobreza, etc. del catolicismo; ¿qué tanta fuerza tienen para hacer más espirituales a los que las practican?
Fuente: Notas Reeves-Partain
LAS TRADICIONES Y LAS ESTRELLAS
Colosenses 2:8-10
Manteneos alerta, no sea que alguien os capture y os haga esclavos insistiendo en la necesidad de una supuesta filosofía que no es más que una huera quimera, una teoría que se ha ido transmitiendo humanamente que tiene que ver con los rudimentos de este mundo pero no con Cristo; porque es en Él en Quien reside la plenitud de la naturaleza divina, y es en Él, Que es el Cabeza de todos los poderes y las autoridades, en Quien vosotros habéis hallado esta plenitud.
Pablo empieza trazando una semblanza gráfica de los falsos maestros. Habla de los que quieren capturaros y haceros sus esclavos. La palabra original es sylagóguein, que se podría referir a un traficante de esclavos que se llevara cautivas a personas de un país conquistado para venderlas como esclavos. Para Pablo era sorprendente y trágico que los que habían sido liberados (Col 1:12-14 ) pudieran estar dispuestos a sómeterse a una nueva y desastrosa esclavitud.
Estos maestros ofrecían una filosofía que presentaban como necesaria además de la enseñanza de Cristo y de las palabras del Evangelio.
(i) Era una filosofía que les había sido transmitida en una tradición humana. Los gnósticos tenían la costumbre de pretender que su enseñanza especial procedía directamente de la boca del mismo Jesús, algunas veces de María, otras de Mateo y otras de Pedro. Decían de hecho que había cosas que Jesús no había dicho a la multitud, sino solamente a unos pocos escogidos. La acusación que Pablo les hacía a esos maestros era que su tradición era puramente humana. No tenía ninguna base en la Escritura; era un producto de la mente humana, y no un mensaje de la Palabra de Dios. El hablar así no era caer en el fundamentalismo o someterse a la tiranía de la palabra escrita, sino mantener que ninguna enseñanza puede ser verdaderamente cristiana si se aparta de las verdades básicas de la Escritura y de la Palabra de Dios.
(ii) Era una filosofía que tenía que ver con los elementos de este mundo. Esta es una frase que se ha discutido mucho y cuyo significado está todavía en duda. La palabra para elementos es stoijeia, que tiene dos significados.
(a) Quiere decir literalmente cosas que se colocan en una hilera; por ejemplo, una fila de soldados. Pero uno de sus sentidos más corrientes es las letras del alfabeto, sin duda porque forman una serie que se puede colocar en fila. De ahí que pueda querer decir también la instrucción elemental en cualquier asunto. Solemos hablar del A B C de un tema siempre que nos referimos a los primeros pasos en su tratamiento. Es posible que sea ese el sentido aquí. Puede que Pablo quisiera decir: «Esos falsos maestros pretenden daros un conocimiento muy avanzado y profundo, cuando en realidad no es más que algo rudimentario, porque es un conocimiento meramente humano. El verdadero conocimiento, la auténtica plenitud de Dios, está en Jesucristo. Si les prestáis atención a esos supuestos maestros, lejos de recibir un conocimiento espiritual profundo, estáis retrocediendo a una instrucción elemental que deberíais haber dejado atrás hace mucho.»
(b) Stoijeia tiene un segundo significado. Quiere decir los espíritus elementales del mundo, y especialmente los espíritus de las estrellas y los planetas. Todavía sigue habiendo personas que toman la astrología en serio. Llevan emblemas de los signos del zodíaco, y se leen las columnas de ciertas revistas que tratan de lo que suponen que pronostican los, cuerpos celestes. Pero casi nos es imposible darnos cuenta de lo dominado que estaba el mundo antiguo con la idea de la influencia de los espíritus elementales y de las estrellas. La astrología era entonces, como ha dicho alguien, la reina de las ciencias. Hasta hombres de la talla de Julio César y Augusto, tan cínicos como Tiberio y tan equilibrados como Vespasiano, no daban ningún paso sin consultarlo con las estrellas. Alejandro Magno creía en la influencia de las estrellas. Casi todo el mundo creía que sus vidas estaban determinadas por ellas. Si uno nacía bajo un signo afortunado, le iría bien; si bajo un signo desafortunado, no podía esperar la felicidad; si una empresa había de tener éxito, había que tener en cuenta las estrellas. Se era esclavo de ellas.
Había una posibilidad de escapar a su influencia: si se sabían las consignas y las fórmulas correctas; y una gran parte de la enseñanza esotérica del gnosticismo y de otras creencias y filosofías por el estilo era el conocimiento que pretendían impartir a sus fieles para que se pudieran evadir del poder de las estrellas; y es muy probable que fuera eso lo que ofrecían los falsos maestros Colosenses. Decían: «Jesucristo está muy bien, puede hacer algo por vosotros; pero no puede ayudaros a escapar a la influencia de las estrellas. Somos nosotros los únicos que tenemos ese conocimiento secreto que os lo garantiza.» Pablo, que era lo suficientemente hijo de su tiempo para creer en esos espíritus elementales, respondía: «No necesitáis más que a Cristo para vencer los poderes del universo; porque es en El en Quien se halla nada menos que la plenitud de Dios, y Él está a la cabeza de todo poder y autoridad, porque fue Él Quien los creó.»
Los maestros gnósticos ofrecían una filosofía adicional; Pablo insistía en la suficiencia triunfadora de Cristo para vencer cualquier poder en cualquier parte del universo. No se puede creer al mismo tiempo en el poder de Cristo y en la influencia ineludible de las estrellas.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
ADICIONES A CRISTO
Colosenses 2:8-23
Manteneos alerta, no sea que alguien os capture y os haga esclavos insistiendo en la necesidad de una supuesta filosofía que no es más que una huera quimera, una teoría que se ha ido transmitiendo humanamente que tiene que ver con los rudimentos de este mundo pero no con Cristo; porque es en Él en Quien reside la plenitud de la naturaleza divina, y es en Él, Que es el Cabeza de todos los poderes y las autoridades, en Quien vosotros habéis hallado esta plenitud. Es en Él en Quien habéis sido circuncidados con una circuncisión no hecha con manos humanas, sino que consiste en despojaros de la totalidad de la parte de vuestra persona que está dominada por la naturaleza humana pecadora, cosa que pudisteis experimentar en la circuncisión cristiana. Fuisteis sepultados con Él en el acto del Bautismo, en el que también surgisteis a una nueva vida con Él mediante vuestra fe en la obra-eficaz de Dios, Que Le resucitó de los muertos. Ha sido Dios Quien os ha dado la vida con Cristo cuando estabais muertos en vuestros pecados y no erais más que paganos incircuncisos. Os perdonó todos vuestros pecados, y borró la lista de cargos que exponía todas las deudas que habíais reconocido, una lista de cargos que estaba basada en las ordenanzas de la Ley y que estaba totalmente en contra vuestra. Él la clavó en Su Cruz y la quitó de la vista; y también despojó de todo su poder a las potencias y autoridades, y las expuso públicamente a la vergüenza, llevándolas cautivas en Su marcha triunfal por medio de la Cruz.
Que nadie os lleve a juicio en asuntos de comida o bebida, o en relación con celebraciones anuales o lunas nuevas mensuales o sábados semanales. Estas no son más que las sombras de cosas por venir; pero el Cuerpo es el mismo Cristo. Que nadie os despoje de vuestro galardón haciendo alarde de una humildad ostentosa, de dar culto a los ángeles ni de supuestas visiones, presumiendo orgullosamente porque está dominado por su naturaleza humana pecadora y está desasido del Que es la Cabeza; de Quien todo el cuerpo, sustentado y unido por las articulaciones y los músculos, se desarrolla con el crecimiento que solo puede dar Dios.
Si habéis muerto con Cristo a los rudimentos de este mundo, ¿por qué seguís sometiéndoos a sus reglas y reglamentos como si aún estuvierais viviendo en un mundo sin Dios? «¡No uses! ¡No pruebes! ¡No toques!» son sus consignas. Esas son reglas que se enseñan e imponen humanamente en relación con cosas que están destinadas a desaparecer tan pronto como se usan; que tienen una cierta reputación de sabiduría porque se autoimponen devoción y falsa humildad y dureza con el cuerpo, pero no tienen ninguna eficacia para remediar las tendencias de la naturaleza humana pecadora.
No cabe duda de que para nosotros este es uno de los pasajes más difíciles de todos los que escribió Pablo, pero estaría más claro que el agua para los que lo oyeran o leyeran en su tiempo. Nos resulta difícil porque está lleno de alusiones a la falsa enseñanza que amenazaba con dar al traste con la iglesia colosense. No sabemos exactamente cuál era esa enseñanza, y por tanto las alusiones nos resultan oscuras y no podemos más que suponer; pero todas las frases darían en el blanco en la mente y el corazón de los Colosenses.
Es tan difícil que nos proponemos tratarlo de una manera diferente de la que tenemos por costumbre. Lo presentamos primero en conjunto, más como una paráfrasis que como una traducción. Entresacaremos las ideas clave, porque así nos será posible ver las líneas principales de la falsa enseñanza que inquietaba a los Colosenses; y después de considerarlo en conjunto, lo examinaremos en secciones más pequeñas.
Una cosa que está clara es que los falsos maestros querían que los Colosenses aceptaran lo que hemos titoulado las adiciones a Cristo. Enseñaban que Jesucristo no era suficiente; que no era único; que era una entre muchas manifestaciones de Dios, y que era necesario conocer y reconocer a otros poderes divinos en adición a Él. Podemos distinguir en el texto de Pablo alusiones a cinco adiciones a Cristo que querían proponer los falsos maestros.
(i) Querían enseñar a los creyentes una filosofía adicional (versículo 8). Según ellos lo veían, la verdad sencilla que Jesús había predicado y que se conservaba en el Evangelio no era suficiente. Había que completarla con un sistema elaborado de pensamiento seudofilosófico que era demasiado difícil para la gente normal y corriente y que no podían entender nada más que los intelectuales.
(ii) Querían que los creyentes aceptaran un sistema de astrología (versículo 8). Como veremos, hay dudas acerca de su significado; pero creemos que lo más probable es que los rudimentos del mundo fueran los espíritus elementales del universo, especialmente de las estrellas y los planetas. Los falsos maestros enseñaban que se estaba todavía bajo estas influencias, y se necesitaba un conocimiento especial, más allá del que Jesús pudiera darles, para liberarse de aquellas.
(iii) Querían imponerles a los cristianos la circuncisión (versículo 11). La fe no era suficiente; había que añadirle la circuncisión. Una señal en la carne había de tomar el lugar de la actitud del corazón, o por lo menos había de añadírsele.
(iv) Querían establecer reglas y reglamentos ascéticos (versículos 16, 20-23). Querían introducir toda clase de reglas y normas acerca de lo que se podía comer y beber, y acerca de los días que se debían considerar de fiesta y de ayuno. Había que recuperar todas las antiguas leyes judías, y muchas más.
(v) Querían introducir el culto a los ángeles (versículo 18). Enseñaban que Jesús no era más que uno de muchos intermediarios entre Dios y la humanidad, y que había que dar culto a todos esos intermediarios.
Se puede ver que aquí había una mezcla de gnosticismo y judaísmo. El conocimiento intelectual y la astrología procedían del gnosticismo, y el ascetismo y las reglas y normas y la circuncisión, del judaísmo. Lo que sucedía era lo siguiente. Ya hemos visto que los gnósticos creían que se necesitaba para la salvación toda clase de conocimientos especiales además del Evangelio. Y había judíos que se aliaban con los gnósticos y declaraban que el conocimiento especial que se requería era el que aportaba el judaísmo. Esto explica por qué se combinaban en la enseñanza de los falsos maestros Colosenses las creencias del gnosticismo y las prácticas del judaísmo.
Lo único cierto es que los falsos maestros enseñaban que Jesucristo y Su enseñanza y obra no eran suficientes para la salvación. Estudiemos ahora este pasaje por partes.
Fuente: Comentario al Nuevo Testamento
Col 2:4; 1Ti 4:1-2; 2Ti 4:3; Tit 1:10-14, 2Pe 2:3.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
— especulaciones filosóficas: Aparece aquí en el texto griego, y por única vez en todo el NT, el término filosofía, utilizado en sentido peyorativo como sinónimo de vana especulación religiosa.
— potencias cósmicas: Ver nota a Gál 4:3.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) Lit.: “seducción”.
REFERENCIAS CRUZADAS
p 99 Heb 13:9
q 100 1Co 2:13; 2Pe 1:16
r 101 Efe 5:6
s 102 Gál 4:3
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
principios elementales del mundo. Se refiere a reglas y regulaciones religiosas de esa época, por medio de las cuales algunos procuraban justificarse a sí mismos (Gá 4:3, 9).
Fuente: La Biblia de las Américas
8 (1) Esto se refiere a la enseñanza gnóstica, una mezcla de las filosofías judía, oriental y griega, lo cual es una hueca sutileza.
8 (2) La tradición está relacionada con la cultura y tiene su origen en la misma. La fuente de la enseñanza gnóstica en Colosas era la tradición de los hombres; no se basaba en los escritos revelados acerca de Dios, sino en las prácticas tradicionales de los hombres.
8 (3) La misma expresión, los rudimentos del mundo, se usa en Gál_4:3 (véase la nota). Aquí se refiere a las enseñanzas rudimentarias de los judíos y de los gentiles, que consisten en observancias ritualistas con relación a comer carne, a bebidas, lavamientos, ascetismo y otros asuntos.
8 (4) Cristo es el principio que rige toda sabiduría y todo conocimiento genuinos, la realidad de toda enseñanza genuina, y la única medida de todo concepto aceptable a Dios. El enfoque de este libro es Cristo como nuestro todo.
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
huecas sutilezas. Pablo tiene así en poco a la «filosofía» de Colosas.
conforme a los rudimentos del mundo. O, según los espíritus elementales del Universo; i.e., los espíritus cósmicos del sincretismo helenístico. Parece ser que su filosofía implicaba la normativa de la vida religiosa mediante la observación del movimiento de los astros, que ellos asociaban con los poderes de los ángeles a quienes algunos adoraban (v. Col 2:18). En esta porción, Pablo usa el vocabulario de los herejes, dando a las palabras su verdadero sentido, y refutándoles con los propios términos que ellos usaban (p.ej., perfecto, Col 1:28; misterio, Col 2:2; sabiduría y conocimiento, Col 2:3; rudimentos del mundo, Col 2:8; cabeza, Col 2:10).
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
haya… Lit. llegará a haber; presuposiciones del mundo… Gr. stoijeíon. Lit. elementos del mundo → §253.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R1116 El tiempo presente de συλαγωγῶν se usa con un sentido reiterativo: que nadie los engañe repetidamente.
R1159 Se usa el negativo μή porque la cláusula indica propósito (introduce una claúsula objetiva -BD206; se usa en una declaración de precaución; toda la cláusula debe traducirse: ¡Tengan cuidado! Quizá haya alguno que … -MT192). [Editor. Cuando Pablo usa βλέπετε μή, el negativo introduce una cláusula de complemento directo (comp. 1Co 8:9 y G?l 5:15); aunque aquí puede también denotar alguna idea subjetiva de advertencia.]
M106 La primera parte de este versículo debe traducirse: Tengan cuidado de que nadie los despoje (o que los convierta en despojo).
MT228 El uso del participio con artículo en lugar de una cláusula relativa da dirección e individualidad a la referencia: alguien que quiera.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
O, las normas
Fuente: La Biblia de las Américas
Lit. habrá
2.8 Es decir, las presuposiciones en las que el hombre basa sus realidades, aparte del Dios vivo revelado en el Mesías.