Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios.
2:8 — «por gracia sois salvos por medio de la fe». La fuente, la base, de la salvación es Dios, no los hombres. Dios provee la salvación, cosa que el hombre no puede hacer, porque no puede proveerse un salvador (no puede morir por sus propios pecados). Ninguna filosofía, ningún código de preceptos morales, ninguna ley humana puede efectuar nuestra salvación. Aun la ley de Moisés, aunque era de Dios, no podía salvar al hombre, porque «la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados» (Heb 10:4). «Porque la ley… nunca puede… hacer perfectos a los que se acercan» (Heb 10:1). Mucho menos puede la ley de Moisés salvar ahora, ya que fue abrogada (Col 2:14; Heb 7:12; Heb 10:9). La gracia de Dios, revelada en el evangelio de Jesús, es la única esperanza del hombre.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
porque por gracia sois salvos. Efe 2:5; Rom 3:24; 2Ts 1:9.
por medio de la fe. Mar 16:16; Luc 7:50; Jua 3:14-18, Jua 3:36; Jua 5:24; Jua 6:27-29, Jua 6:35, Jua 6:40; Hch 13:39; Hch 15:7-9; Hch 16:31; Rom 3:22-26; Rom 4:5, Rom 4:16; Rom 10:9, Rom 10:10; Gál 3:14, Gál 3:22; 1Jn 5:10-12.
esto no de vosotros. Efe 2:10; Efe 1:19; Mat 16:17; Jua 1:12, Jua 1:13; Jua 6:37, Jua 6:44, Jua 6:65; Hch 14:27; Hch 16:14; Rom 10:14, Rom 10:17; Flp 1:29; Col 2:12; Stg 1:16-18.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Es por gracia que los cristianos son salvos. La fuente de la salvación es la gracia de Dios, la fe es el canal, no el origen. Es Dios sólo el que salva. Jamás la salvación se origina en los esfuerzos de las personas; esta proviene siempre de la bondad de Dios. Verdaderamente, «la salvación es de Jehová» (Jon 2:9). La conjugación en pasado del verbo salvar indica en este pasaje que la salvación del creyente se verificó en el pasado, en la cruz.
don de Dios: Nada podemos hacer para ganar nuestra salvación. Hay quienes sugieren que don de Dios modifica a la palabra fe en este versículo. De este modo, lo que Pablo nos dice es que ni siquiera nuestra creencia en Dios se origina en nosotros; también ella es un regalo, de modo que nadie puede enorgullecerse de su posición como cristiano. Todo lo recibimos de nuestro misericordioso y bondadoso padre.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
POR GRACIA… POR MEDIO DE LA FE. Véase el ARTÍCULO LA FE Y LA GRACIA, P. 1582. [Rom 5:21]
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
la fe; y esto no de vosotros. «Esto» se refiere a todo lo incluido en la declaración anterior sobre la salvación y no solo a la gracia, sino a la fe. Aunque se requiere que los hombres crean para ser salvos, hasta la fe es parte del don de Dios que salva y no puede ejercerse con base en algún poder personal. La gracia de Dios es preeminente en todos los aspectos de la salvación (cp. Rom 3:20; Gál 2:16).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
2:8 — «por gracia sois salvos por medio de la fe». La fuente, la base, de la salvación es Dios, no los hombres. Dios provee la salvación, cosa que el hombre no puede hacer, porque no puede proveerse un salvador (no puede morir por sus propios pecados). Ninguna filosofía, ningún código de preceptos morales, ninguna ley humana puede efectuar nuestra salvación.
Aun la ley de Moisés, aunque era de Dios, no podía salvar al hombre, porque «la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados» (Heb 10:4). «Porque la ley… nunca puede… hacer perfectos a los que se acercan» (Heb 10:1). Mucho menos puede la ley de Moisés salvar ahora, ya que fue abrogada (Col 2:14; Heb 7:12; Heb 10:9). La gracia de Dios, revelada en el evangelio de Jesús, es la única esperanza del hombre.
— «por medio de la fe». Si la palabra «fe» se usa en sentido objetivo, se refiere al evangelio, como en Gál 3:25; Jud 1:3, etc. Si se usa en sentido subjetivo, se refiere a nuestra fe en su forma comprensiva; es decir, la obediencia al evangelio.
— «esto no de vosotros, pues es don de Dios». «Esto», este asunto (la salvación por gracia) es don de Dios; no es algo originado por el hombre.
Algunos evangélicos han dicho que «esto» se refiere a la fe, que la fe no es de nosotros, sino que es don de Dios. Esta teoría coincide con el concepto erróneo de la «naturaleza corrupta» del hombre que no le permite creer hasta que Dios haya intervenido en alguna forma especial y aparte del evangelio.
La palabra «esto» en inglés («this») es ambigua, pero ni en inglés permite la gramática esta interpretación, menos en español.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Ahora se retoma la expresión parentética de Efe 2:5 y se reafirma, poniendo así de relieve la idea central del pasaje. Hemos sido objeto de la acción salvadora de Dios, la hemos recibido (participio pasivo), y todo esto por su gracia. En este párrafo esta idea de la gracia se acentúa excluyendo elementos que son ajenos a ella y definiendo así sus rasgos fundamentales.
La salvación es obra de Dios; nace de su extraordinaria y abundante gracia; se recibe por medio de la fe; no tiene su origen en nosotros, la humanidad; no depende de nuestras buenas obras y acciones; es un regalo de Dios con el propósito de eliminar toda arrogancia y presunción humanas. Así pues, se pone de relieve un hecho fundamental: las obras y méritos humanos no pueden de manera alguna lograr la salvación. Esta es posible única y exclusivamente por la gracia de Dios. Y si bien las obras no son condición para la salvación, no por obras (v. Efe 2:9), sí son consecuencia y expresión ineludible de la misma: para buenas obras (v. Efe 2:10).
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
REFERENCIAS CRUZADAS
q 84 Rom 4:16
r 85 Jua 6:44
s 86 Jua 1:12
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
por gracia…por medio de la fe. La gracia es la base sobre la cual Dios salva al pecador, y la fe es el medio por el cual los creyentes reciben la salvación (v. coment. en Ro 3:24).
Fuente: La Biblia de las Américas
8 (1) La palabra porque presenta la razón por la cual Dios muestra Su gracia (v.7). Puesto que hemos sido salvos por Su gracia, Dios puede mostrar tal gracia.
8 (2) La gracia es Dios infundido en nosotros. Por lo tanto, ser salvos por gracia significa ser salvos por medio de que el Dios Triuno procesado se imparta en nosotros.
8 (3) La fe es lo que da sustantividad a lo invisible ( Heb_11:1). Por fe damos sustantividad a todo lo que Cristo ha cumplido por nosotros. Es por esta capacidad de dar sustantividad a lo invisible que hemos sido salvos por gracia.
La acción gratuita de la gracia de Dios nos salvó por medio de tal fe. La fe que tenemos es la fe con la cual creemos en Cristo, y es Cristo en nosotros como nuestra fe (véase la nota 22 (1) de Ro 3).
8 (4) La palabra esto no se refiere a la fe, sino al hecho de que «por gracia habéis sido salvos por medio de la fe».
Fuente: Comentario Del Nuevo Testamento Versión Recobro
La salvación es por gracia…mediante la fe. La fe comporta conocimiento de evangelio (Rom 10:14), reconocimiento de la verdad de su mensaje y recepción personal del Salvador (Jua 1:12). Las obras no pueden salvar (v. Efe 2:9), pero las buenas obras siempre siguen a la salvación (v. Efe 2:10; Stg 2:17).
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
fe… → §159; no de vosotros… Es decir, no proviene de vosotros.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
R704 En este versículo, el pronombre τοῦτο no se refiere a πίστεως, sino más bien a la idea de salvación que aparece en la cláusula anterior.
M18 y sig. No siempre es fácil ver la fuerza de la distinción entre el perfecto simple y el perifrástico. Por ejemplo, ¿se alteraría el sentido si por la oración χάριτί ἐστε σεσῳσμένοι, se hubiera escrito χάριτί σέσῳσθε? Quizá la respuesta sea que éste es también un ejemplo en que el participio tiene poco o ningún significado temporal y prácticamente es adjetival: como resultado de un favor gratuito ustedes son salvos. Sin embargo, tiene buen sentido la traducción: ustedes han sido salvos, por tanto, disfruten su presente condición (comp. el comentario sobre el v. 5).
T45 Καὶ τοῦτο significa: y en verdad (καί con el pronombre demostrativo es enfático -BD442[9]).
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
Es decir, no proviene de vosotros.