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Comentario de Ester 9:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Comentario de Ester 9:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

El día 13 del mes duodécimo, que es el mes de Adar, cuando habían de ser ejecutados la palabra del rey y su decreto, el mismo día en que los enemigos de los judíos esperaban ganar poder sobre ellos, ocurrió todo lo contrario. Porque fueron los judíos los que ganaron poder sobre los que les aborrecían.

Año 452 a.C.

En el mes duodécimo. Est 3:7, Est 3:13; Est 8:12.

en que esperaban los enemigos. Hch 12:11.

sucedió lo contrario. Deu 32:36; 2Sa 22:41; Sal 30:11; Isa 14:1, Isa 14:2; Isa 60:14-16; Apo 11:18.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Los judíos matan a sus enemigos, y a los diez hijos de Amán, Est 9:1-11.

Asuero, a petición de Ester, concede otro día de matanza, Est 9:12-19.

Los dos días de Purim son hechos días festivos, Est 9:20-32.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

Los judíos se juntaron en todo el reino para descargar su mano o matar (Est 2:21) a los que procuraban su mal. Sus enemigos no podían vencerlos debido al temor que les tenían. Esto incluía el temor al Dios de los judíos.

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Venganza de los judíos (9:1-19).

Los judíos, en situación ventajosa (9:1-4).
1 Al duodécimo mes, que es el mes de Adar, el día trece del mes, el día en que debía cumplirse el edicto del rey y en que los enemigos de los judíos habían pensado dominarlos, fue lo contrario lo que sucedió, y los judíos dominaron a sus enemigos. 2 Reuniéronse los judíos en sus ciudades, en todas las provincias del rey Asuero, para poner la mano sobre todos aquellos que buscaban su perdición; y nadie pudo resistirlos, porque el temor de ellos se había apoderado de todos los pueblos. 3 Y todos los jefes de las provincias, los sátrapas, los gobernadores y los funcionarios del rey, apoyaron a los judíos, por el temor que les inspiraba Mardoqueo; 4 pues era Mardoqueo poderoso en la casa del rey, y su fama se esparció por todas las provincias, porque se hacía de día en día más poderoso.

A consecuencia de la carta de Mardoqueo cambió totalmente el cariz de los acontecimientos señalados para el 13 del mes de Adar (3:12). Desde el edicto de Mardoqueo hasta el citado día transcurrieron, según 8:9, nueve meses, durante los cuales pudieron los judíos reunirse (8:11), organizarse para mejor repeler la agresión, ¿Atreviéronse los persas a molestar a los judíos? Conociendo el contenido del decreto real y sabiendo que Mardoqueo era “poderoso en palacio,” que su fama iba en aumento, no es probable que los persas atacaran a los judíos, salvo pocas excepciones.

Matanzas en Susa (9:5-10).
5 Los judíos hirieron a espada a todos sus enemigos, los mataron y los hicieron perecer, y trataron como quisieron a los que les eran hostiles. 6 En Susa, la ciudadela, mataron los judíos, haciéndolos perecer, a quinientos hombres, 7 y degollaron a Parsandata, Dalfón, Asfata, 8 Porata, Adalía, Arudata, 9 Par-masta, Arisai, Aridai y Baizata, 10 los diez hijos de Aman, hijo de Hamedata, el enemigo de los judíos; pero éstos no se dieron al pillaje.

Los términos del texto sugieren claramente que había algo más que una defensa. Todos los que se habían mostrado contrarios a los judíos eran víctimas de los mismos. Aquellos que les resistieron fueron objeto de malos tratos: “trataron como quisieron a los que les eran hostiles.” ¿Hubo víctimas de parte de los judíos? Sin duda (9:16), porque no todos se resignaron a morir pasivamente.

Ansiedad del rey (9:11-16).
11 Llegó aquel día a conocimiento del rey el número de los muertos en la ciudadela de Susa, 12 y el rey dijo a Ester: “Los judíos han matado y hecho perecer en Susa, la ciudadela, a quinientos hombres y a diez hijos de Aman. ¿Qué habrán hecho en el resto de las provincias del rey? ¿Qué más pides? ¿Qué más quieres? Se te concederá, lo tendrás.” 13 Ester respondió: “Si al rey le parece bien, que les sea permitido a los judíos de Susa obrar también mañana conforme al edicto de hoy, Y Que se cuelgue en la horca a los diez hijos de Aman.” 14 El rey mandó que así se hiciera, y se publicó el edicto en Susa. 15 Los judíos de Susa se reunieron de nuevo el día catorce del mes de Adar, y mataron en Susa a trescientos hombres; pero tampoco se dieron al pillaje. 16 Los otros judíos que había en las provincias del rey se reunieron y defendieron su vida, y se procuraron reposo librándose de sus enemigos, y mataron a setenta y cinco mil, pero no se dieron al pillaje.

Llegó la noticia de la hecatombe a oídos del rey, quien se alarmó por las proporciones que tomaba la reacción judía. Llevado por dos sentimientos, de ansiedad uno y de satisfacción el otro, se dirigió a la reina, diciéndole: “¿Qué más pides?” esperando que Ester le manifestara su gratitud y satisfacción por haber escuchado su ruego. Pero ¡cuál no fue su asombro al escuchar de labios de Ester la petición de prórroga de la matanza por espacio de otro día! Pero no quiso contrariarla y accedió a su ruego. La ansiedad del rey estaba muy justificada por las noticias alarmantes sobre la gran cantidad de víctimas. El texto hebraico habla de setenta y cinco mil muertos; los LXX los reducen a quince mil, y Luciano a diez mil ciento siete. Como hemos anotado, se exageran extraordinariamente las cifras con el fin de demostrar a los pueblos e individuos que, en caso de molestar a los judíos, se exponen a sufrir un castigo ejemplar.

Día conmemorativo (9:17-19).
17 Esto sucedió el día trece del mes de Adar. Los judíos se aquietaron el catorce, haciendo de él un día de banquetes y regocijo. 18 Los que había en Susa, que se habían reunido el trece y el catorce, se aquietaron el quince, haciendo de él un día de banquetes y regocijo. 19 Por eso los judíos del campo, que habitan ciudades no amuralladas, hacen del día catorce del mes de Adar un día de banquete y de fiesta, en que se mandan presentes los unos a los otros.

Señala el autor las razones históricas que dieron origen a la fiesta de Purim. Los judíos cumplieron matemáticamente la orden contenida en la carta de Mardoqueo. El 13 de Adar, los judíos de las provincias se vengaron a placer de sus enemigos, apoyados por las autoridades, exterminando a cuantos se habían mostrado contrarios a ellos. La petición de Ester hizo que se prorrogara otro día la matanza en Susa, destinando uno a los antijudíos de la ciudadela y otro a los de la población de Susa. Con ello se explica el porqué, en tiempos del autor, las gentes de provincia anticipaban en un día la fiesta de la liberación. Acaso se trata de una explicación popular de un hecho que no tiene justificación histórica.

Institución de la fiesta de Purim (9:20-22).
20 Mardoqueo escribió estas cosas y envió cartas a los judíos de todas las provincias del rey Asuero, cercanas y lejanas, 21 mandándoles celebrar todos los años el día catorce y el quince del mes de Adar, 22 como días en que habían obtenido el reposo, librándose de sus enemigos, y celebrar el mes en que su tristeza habíase convertido en alegría, y su desolación en regocijo; y de hacer de estos días días de festín y de alegría, en que se mandan presentes los unos a los otros y se distribuyen dones a los indigentes.

Nos hallamos en la parte jurídica del libro de Ester. Algunos creen que la sección 9:20-32 procede de una fuente distinta de la del resto del libro, presentando un estilo propio, que se caracteriza por las repeticiones e insistencia en los mismos temas. Según Patón, pudo el autor encontrar esta sección en una antigua historia judía.
Mardoqueo, en su calidad de jefe religioso, se dirige a todos los judíos de cerca y de lejos (Isa 57:19; Jer 25:26; Dan 9:7), encareciéndoles la celebración de la fiesta de la liberación. El día del triunfo de los judíos se celebrará con ruidosos banquetes (Dan 16:22; Dan 9:17), en los cuales se beberá vino en abundancia, permitiéndose la bebida hasta el límite de no poder distinguir entre las palabras “maldito sea Aman” y “bendito sea Mardoqueo.” La fiesta tuvo siempre un carácter profano, alcanzando proporciones comparables a la de los carnavales, vistiendo las mujeres trajes de hombre y adoptando éstos la indumentaria femenina. En un principio prescribía el Talmud (Meg. 2a) que en los pueblos se leyera el libro de Ester el día 14 de Adar, y en ningún caso antes del 11 ni después del 14. La lectura en las sinagogas era interrumpida con imprecaciones contra los enemigos del pueblo judaico. En conmemoración del ayuno de Ester (Dan 4:3-16) se observó un día de ayuno.

Adopción oficial de la fiesta (Dan 9:23-28).
23 Los judíos se comprometieron a hacer lo que ya habían comenzado y les mandaba Mardoqueo; 24 porque Aman, hijo de Hamedata, agagita, enemigo de todos los judíos, había concebido el proyecto de exterminarlos y había echado el “pur,” es decir, la suerte, para matarlos y exterminarlos; 25 pero, habiéndose presentado Ester al rey, mandó el rey por escrito hacer recaer sobre la cabeza de Aman el maligno proyecto que él había hecho contra los judíos, y le colgó de la horca a él y a sus hijos.26 Por eso se llaman estos días “purim,” del nombre de “pur.” Conforme al contenido de esta carta, según lo que ellos mismos habían visto y les había sucedido, 27 los judíos tomaron por ellos, por su descendencia y por todos aquellos que a ellos se unieron, la resolución y el compromiso irrevocable de celebrar cada año estos dos días al modo y al tiempo prescritos. 28 Estos días habían de ser celebrados y recordados de generación en generación, en cada familia, en cada provincia y en cada ciudad, y estos días de “purim” no habían de ser jamás abolidos entre los judíos, ni borrado su recuerdo entre sus descendientes.

Los judíos se habían adelantado a los deseos de Mardoqueo, ya que celebraban la fiesta con anterioridad y conforme a lo que se les dijo en la carta (Dan 16:22). Pero, al recibir el nuevo escrito de Mardoqueo, determinaron prorrogar la fiesta un día más,

Intervención de Ester en favor de la fiesta (Dan 9:29-32).
29 La reina Ester, hija de Abigaíl, y el judío Mardoqueo escribieron con instancia a los judíos por segunda vez para confirmar su carta acerca de los “purim,” 30 y se mandaron cartas a todos los judíos, a las ciento veintisiete provincias del rey Asuero. Contenían palabras de paz y fidelidad, prescribiendo los días de “purim” al tiempo fijado, 31 como el judío Mardoqueo y la reina Ester los habían establecido, para ellos y para toda su posteridad, y añadiendo prescripciones de ayunos y lamentaciones. 32 Así, la orden de Ester confirmó la institución de los “purim,” y esto fue escrito en el libro.

La carta escrita por Mardoqueo (v.23-24) iba refrendada por Ester con el fin de asegurar más su cumplimiento. ¿Supone esto que la primera carta de Mardoqueo (v.20-22) no consiguió la finalidad que pretendía? Como el lector puede observar, presenta el texto gran número de repeticiones, que engendran confusión. A partir Deu 9:19 se habla de la doble manera de celebrar la fiesta de purim. En g.26b se la considera como de origen tradicional, y en 9:20.26a.29 como institucional. Tres cartas se mencionan: dos de Mardoqueo (9:20-22; 9:24-26) y una de Ester (9:29-32). En esta última aparece la noticia inesperada de que los judíos deben prepararse a esta fiesta con ayunos y abstinencias. La fiesta de Purim celebróse desde muy antiguo. La recuerdan el 2 Mac 15:36-37, con el nombre de “día de Mardoqueo,” y Flavio Josefo (11:6:11-13). Según el Talmud, el día 13 había reunión en la sinagoga y se distribuían limosnas a los pobres.

Interpretación del sueño (10:5-13).
5 Y dijo Mardoqueo: “Del Señor viene esto. Recuerdo, en efecto, el sueño que acerca de estos sucesos tuve, de los cuales ninguno ha quedado sin cumplimiento: 6 la fuentecilla que se convirtió en río de muchas aguas y la lucecita convertida en sol. El río es Ester, a quien el rey tomó por esposa, haciéndola reina. 7 Los dos dragones éramos yo y Aman, 8 y las naciones son las que se juntaron para acabar con el nombre judío. 9 Mi pueblo es este mismo Israel, los que clamaron a Dios y fueron salvos. Salvó el Señor a su pueblo y nos sacó de todos estos males, haciendo señales y prodigios grandes, cuales no se vieron entre las naciones. 10 Por esto estableció dos suertes: una para el pueblo de Dios y otra para todas las otras naciones. n Y estas dos suertes han llegado a su hora y tiempo, es decir, en el día del juicio delante de Dios. 12 Y se acordó el Señor de su pueblo y salió por la causa de su heredad. 13 Por esto serán celebrados por ellos estos días en el mes de Adar, los días catorce y quince del mes, con grande concurso, alegría y exaltación, delante de Dios, de generación en generación para siempre, en el pueblo de Israel.”

El redactor griego empezó el libro narrando un sueño que tuvo Mardoqueo, con lo cual quería poner de relieve la intervención providencial de Dios en la trama de esta historia. Transcurridos aproximadamente once años, vuelve Mardoqueo su mirada hacia atrás y, después de un examen ponderado de los hechos, reconoce que todo cuanto ha acaecido fue predicho y anunciado de antemano por Dios.

Epístola sobre los “Purim.”

El año cuarto del reinado de Tolomeo y Cleopatra, Dositeo, que se decía sacerdote y levita, y Tolomeo, su hijo, trajeron la presente epístola sobre los “purim,” que dicen ser auténtica y haber sido traducida por Lisímaco el de Tolomeo, vecino de Jerusalén.

El autor del texto griego fue, probablemente, algún jefe de la comunidad judaica. Dice haber recibido “la presente epístola sobre los purim,” a saber, el libro de Ester, de la comunidad de Palestina (2Ma 2:14-16). Defiende su autenticidad, afirmando que es una traducción hecha por Lisímaco, hijo de cierto Tolomeo, perteneciente a la comunidad de Jerusalén. Una vez conocido el origen del texto, se añade que Dositeo, “que se decía sacerdote y levita,” lo introdujo en Egipto. Ambos, Dositeo y su hijo Tolomeo, tienen interés en hacer constar que esta traducción de Ester es la mejor y que, por lo mismo, debe recibirse. Además debe notarse la noticia de que el libro procedía de Palestina, lo cual prueba la dependencia de los judíos de la Diáspora de las autoridades de Jerusalén en cuestiones disciplinares y cultuales. ¿Cuándo el libro fue introducido en Egipto? No es posible dar una respuesta definitiva, por ser muchos los Tolomeos que reinaron en Egipto, unos trece, y ser muy común el nombre de Gleopatra. Los pareceres se inclinan preferentemente entre las dos siguientes parejas reales: 1) Tolomeo VIII, Soter II, llamado Latiré (116-80), casado sucesivamente con Cleopatra IV y V; 2) Tolomeo XIV (51-44 a.C.), que asoció al imperio a su hermana Cleopatra. Fue ésta derrotada por Octavio Augusto en la batalla de Accio el año 30.

Fuente: Biblia Comentada

el mes duodécimo. El período de febrero-marzo. Aquí tenemos una enérgica declaración con respecto a la preservación providencial por parte de Dios de la raza judía en armonía con la promesa incondicional de Dios a Abraham (Gén 17:1-8). Esta liberación providencial está en contraste con la liberación milagrosa por parte de Dios de los judíos de Egipto; pero en ambos casos se cumplió el mismo fin por obra del poder sobrenatural de Dios.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

— cambiaron las cosas: Más que exaltar la venganza, el autor ha querido ilustrar el tema de la inversión de las situaciones a favor de los judíos oprimidos, aspecto que expresa recurriendo a la forma de los relatos de las guerras de Israel y a la ley del talión.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

Los Judios Salen Victoriosos

1-4 Cuando llegó el día fatal, el 13 de Adar, los judíos … ganaron poder sobre los que les aborrecían. El autor resume el resultado de los eventos del día para que el lector no tenga dudas; las víctimas llegaron a ser los victoriosos. En realidad, da la impresión de que mucha de la oposición desapareció debido al apoyo de Mardoqueo tanto a nivel popular como de liderazgo. Su énfasis en el temor que Mardoqueo y su pueblo inspiraban, da a entender alguna intervención más que humana, como si el temor a Dios se hubiera apoderado de la población con la rápida inversión de la suerte judía. Se divulgó la idea de que Mardoqueo no sería quitado del poder en el futuro cercano. Era alguien con quien tendrían que tratar, de allí su anhelo por apoyarlo.

5-10 Sin embargo, el derramamiento de sangre no se podía evitar del todo, y se registran las víctimas. Los números, sin duda, son mucho menores que lo que hubieran sido si los judíos hubieran sido las víctimas, o si no hubiera habido aprobación por la justicia de su causa. Amán evidentemente seguía teniendo sus fieles seguidores, listos para apoyar el liderazgo que proveyeran sus hijos. Este núcleo de resistencia potencial dentro de la ciudadela de Susa fue el primero en ser eliminado. Hacer una lista de los nombres de los hijos muertos de Amán era reforzar la derrota total de Amán. No quedó ni uno que apoyara su causa. Pero la propiedad de la familia permaneció intacta. Tres veces declaró el autor: no echaron mano a sus despojos (10, 15, 16). De acuerdo con el ejemplo de Abraham, preferían no enriquecerse por medio de la derrota de su enemigo (Gén. 14:23). Tal dominio propio, poco común, no pasaría desapercibido y hablaría a favor de los judíos aumentando la estima del pueblo.

11-17 La forma tan despreocupada en que el rey se refirió a la pérdida de 500 hombres, los hijos de Amán y un número no conocido de hombres en las provincias, sólo para ofrecer a su reina la oportunidad de extender el derramamiento de sangre, es espantosa. Ester, a su vez, se portó como una “dama de hierro”, interesada en exhibir la caída de Amán ahorcando públicamente los cuerpos de sus hijos, y completar la ejecución de otros enemigos de los judíos en la ciudad de Susa, más allá de la acrópolis. Para lograrlo, Ester pidió un día más, y murieron 300 hombres más. En otras partes del imperio el número total de 75.000 hombres muertos por los gue rreros de la resistencia judía implica que el decreto de Amán se había implementado. Suponiendo que todas las 127 provincias hayan estado involucradas, cada una hubiera perdido al rededor de 600 hombres, menos que la ciudad de Susa sola. Por lo tanto, los judíos tuvieron reposo de sus enemigos. Su liberación de la destrucción tenía que ser celebrada, de allí la institución de un día festivo en el día 14 de Adar, una vez que había pasado el temido día 13. Sin embargo, en Susa, el 15 era día de celebración por la petición adicional de Ester. Por todos lados se compartían alegremente comidas fes tivas, asegurando que nadie fuera excluido. Por lo tanto, la intención de Amán de exterminar a la raza judía tuvo el efecto de reforzar los lazos entre sus miembros, y aumentar el espíritu comunitario entre ellos al recordar su peligro compartido y su liberación.

Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno

9.5-16 Amán había decretado que el día 13 del mes 12 cualquiera persona podía matar a los judíos y tomar sus propiedades. El decreto de Mardoqueo no anulaba el de Amán ya que no podía ser apelada ninguna ley firmada por el rey. En cambio, Mardoqueo hizo que el rey firmara una nueva ley dando a los judíos el derecho de defenderse. Cuando llegó el día temido, hubo una gran lucha, sin embargo, los judíos mataron sólo a aquellos que quisieron matarlos, y no tomaron las posesiones de sus enemigos aun cuando podían (8.11; 9.10, 16). No se registraron disturbios adicionales después de los dos días de matanza, por lo que fue obvio que el egoísmo y la venganza no fueron los motivos principales de los judíos. Simplemente querían defenderse ellos y a sus familias de quienes los odiaban.9.12 El rey parece estar más preocupado por los deseos de Ester que por la masacre de sus súbditos.9.19-22 Las personas tienden a tener mala memoria cuando se trata de la fidelidad de Dios. Para ayudar a combatir esto, Mardoqueo escribió estos hechos y alentó al pueblo a la celebración de una fiesta anual que conmemorara el histórico día de Purim. Las fiestas, alegría y entrega de obsequios son formas importantes para recordar los hechos específicos de Dios. En la actualidad celebramos la conmemoración de grandes acontecimientos como el nacimiento y la resurrección de Jesucristo. No permita que la celebración o el intercambio de regalos oculten el significado de estos grandes acontecimientos.9.29-31 Entre los judíos, se esperaba que las mujeres estuvieran calladas, sirvieran en casa y permanecieran al margen de la vida religiosa y política. Sin embargo, Ester fue una judía que rompió con las normas culturales, yendo más allá del papel que se esperaba de ella al arriesgar su vida y ayudar al pueblo de Dios. Cualquiera que sea su lugar en la vida, Dios puede usarlo. Esté abierto, disponible y listo, porque Dios puede utilizarlo para hacer lo que otros incluso hasta tienen miedo de

Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir

NOTAS

(1) “Hubo un volverse a lo contrario.” En heb. estas palabras son un solo verbo en el infinitivo absoluto, indefinido en cuanto a tiempo, e impersonal.

REFERENCIAS CRUZADAS

a 311 Est 3:7; Est 8:12

b 312 Est 3:13

c 313 Deu 32:36; 2Sa 22:41; Sal 30:11

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

sucedió lo contrario. Aquí el narrador dice explícitamente lo que el lector había comprendido a lo largo de la historia: que el mal se vuelve contra los que lo perpetran (cp. vers. 22, 23).

Fuente: La Biblia de las Américas

sucedió lo contrario. Otra demostración de la providencia soberana de Dios.

Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie

Lit., trece en él

Lit., se acercaron

Fuente: La Biblia de las Américas

[=] *Sal 18:41

[.] Nos cuesta mucho entender cómo el pueblo de Dios pudo cometer tales masacres y cómo este libro sagrado pudo aplaudirlas. Es porque estamos acostumbrados a pensar la religión en términos cristianos y ésta nos parece inseparable del amor, incluso a los enemigos; pero esto último era algo impensable para los que todavía no habían sido tocados directa o indirectamente por el Evangelio. Nuestros antepasados en la fe eran tan fanáticos cuanto convencidos de ser el pueblo elegido por Dios. La pedagogía de Dios se manifiesta todo a lo largo de la Biblia, pero la violencia fue lo que le pareció más difícil de sacar del corazón humano. Los mismos profetas no fueron conscientes de la violencia que llevaban adentro cuando pedían el castigo de los pueblos enemigos. En Génesis 34, el autor sagrado se escandaliza porque un hombre de Siquem violó a una hija de Jacob, pero no juzga las represalias que siguieron (v. 25-29). En todos los lugares del mundo la solidaridad, la justicia, la moral sólo valían al interior del grupo y es ya muy digno de notar que la Biblia proteja el derecho de los extranjeros, especialmente en el Deuteronomio. Las palabras de Jesús en Mt 5,45-48 son realmente nuevas. Pero el sentido de un prójimo que puede ser cualquier hombre cerca de mí, el amor universal y la religión no-violenta en que Dios mismo acepta ser rechazado, son secretos que únicamente el Hijo de Dios podía enseñarnos.

Fuente: Notas de la Biblia Latinoamericana

[1] Por las nuevas órdenes del rey, se invirtió la situación.

Fuente: Notas Torres Amat