Comentario de Ezequiel 3:16 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Aconteció al cabo de los siete días que vino a mí la palabra de Jehovah, diciendo:
Y aconteció. Jer 42:7.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
El servicio profético de Ezequiel era básicamente advertir y recordar al pueblo las consecuencias benéficas de volverse del mal y los desastrosos resultados de rehusar vivir por las estipulaciones del pacto de Moisés, que los rescataría de una existencia vacía.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Eze 3:16-27; Eze 4:1-17; Eze 5:1-17; Eze 6:1-14; Eze 7:1-27; Eze 8:1-18; Eze 9:1-11; Eze 10:1-22; Eze 11:1-25; Eze 12:1-28; Eze 13:1-23; Eze 14:1-23; Eze 15:1-8; Eze 16:1-63; Eze 17:1-24; Eze 18:1-32; Eze 19:1-14; Eze 20:1-49; Eze 20:45-27; Eze 22:1-31; Eze 23:1-49; Eze 24:1-27 : Oráculos contra Jerusalén y sus habitantes: Esta primera parte del libro de Ezequiel tiene como destinatarios a los israelitas. Lo más importante en el contexto del libro es contemplar cómo el Señor abandona el Templo y la ciudad de Jerusalén, a los que ya no considera lugares dignos de su gloria. El Señor no está atado a ningún sistema político o religioso.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
La responsabilidad del centinela
Después de pasar varios días recuperándose del trauma de su visión inicial, Ezequiel recibe un segundo, breve mensaje. Esta vez sus responsabilidades son delineadas, juntamente con las penalidades por evadir sus deberes (cf. 33:1-9). El privilegio de ser llamado a ser un siervo de Dios trae responsabilidades consigo. La fiel ejecución de estas responsabilidades es más importante que si tiene éxito o no.
17 Ezequiel es constituido como un centinela para Israel, para entregarles el mensaje de Dios. 18, 20 Si no transmite las advertencias de Dios a alguno, será tenido por responsable del destino de esa persona. 19-21 Al transmitir el mensaje él habrá cumplido su deber, aun si el receptor del mensaje lo ignora.
Nota. 14 Centinela: la tarea del centinela era estar alerta a cualquier peligro que amenazara la ciudad.