Comentario de Ezequiel 5:1 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia
Y tú, oh hijo de hombre, toma una cuchilla afilada, una navaja de barbero. Tómala y hazla pasar sobre tu cabeza y sobre tu barba. Luego toma una balanza para pesar y reparte los pelos.
hijo del hombre. En esta expresión emblemática, el profeta representa a la nación judía; su pelo representa la gente; la navaja a los caldeos; el cortar el pelo, las calamidades y desgracias que vienen sobre ellos; las balanzas, la exacta distribución de los juicios divinos; la tercera parte del pelo quemado, aquellos destruídos en la ciudad; la tercera parte heridos con cuchillo, aquellos asesinados intentando escapar; la tercera parte esparcidos a los vientos, aquellos que escaparon a otras naciones; unos pocos pelos en su ropa, aquellos dejados con Gedalías; y el quemar a éstos, su destrucción en Egipto. Tómate un cuchillo afilado. Eze 44:20; Lev 21:5; Isa 7:20.
una balanza de pesar. Dan 5:27.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Por medio del símbolo del cabello, Eze 5:1-4,
se muestra el juicio de Jerusalén por su rebelión, Eze 5:5-11;
por hambre, espada, y dispersión, Eze 5:12-17.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Afeitarse la cabeza era un acto que demostraba vergüenza o desgracia en la cultura hebrea (Eze 7:18; 2Sa 10:4). También representaba un tipo de duelo pagano prohibido por la ley (Eze 27:31; Deu 14:1; Isa 15:2; Isa 22:12). Afeitarse la cabeza era una señal de deshonra, lo que hacía que un sacerdote como Ezequiel fuera impuro, y además incapaz de cumplir con sus responsabilidades en el Templo (Lev 21:5). Este mensaje decía al pueblo que estaba a punto de ser humillado y deshonrado.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
TÓMATE UN CUCHILLO AGUDO. Los cabellos de la cabeza y la barba afeitados de Ezequiel, divididos en tres partes, simbolizaban el destino de los habitantes de Jerusalén. La tercera parte que fue incendiada representaba a los que morirían de pestilencia o de hambre; otra tercera parte caería a espada, y la última tercera parte sería esparcida en el exilio (v. Eze 5:12).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
5. Dispersión de los Habitantes de Juda.
Continúan las acciones simbólicas para significar la trágica suerte de los moradores de Jerusalén. No sólo serán cercados y padecerán grandes estrecheces en el asedio, sino que al final serán unos asesinados y otros dispersos. El profeta, con todas estas predicciones, salía al paso del infundado optimismo de sus compatriotas, que creían cerca la hora de la liberación total y, sobre todo, no concebían que la Ciudad Santa pudiera caer en manos del enemigo.
Depopulación de Judá y de Jerusalén (1-4).
1 Hijo de hombre, toma una espada afilada y empléala como navaja de barbero para raerte cabellos y barba. Toma luego una balanza justa y reparte el pelo. 2 Un tercio lo quemarás al fuego en medio de la ciudad, mientras se cumplen los días del asedio; otro tercio lo herirás con la espada en derredor de ella,y el otro tercio lo esparcirás al viento y yo lo perseguiré con la espada desnuda. 3 Toma también de ellos unos pocos, contados, y átalos a la orla de tu manto. 4 Toma otros pocos y los echas en medio del fuego, que se quemen. De ahí saldrá el fuego para toda la casa de Israel.
No se especifica el momento histórico de esta nueva acción simbólica. El profeta debe rasurarse la barba y cabellos. Lo primero resultaba un gran sacrificio para los orientales, que están orgullosos de su barba. En Isa 7:20 se habla del ejército asirio como “navaja alquilada” para quitar a Judá toda su virilidad. En Ezequiel, el sentido es algo diverso. Debe dividir sus cabellos y barba rasurada en tres mitades l, que habían de pesarse en una balanza, símbolo de la justicia divina (v.1). Un tercio será entregado al fuego en medio de la ciudad (v.2) sobre el ladrillo o tableta de barro donde había trazado el plano de Jerusalén. Así, dentro del trazado de la ciudad debe quemar parte de su barba para indicar a los habitantes de Jerusalén que morirán durante el asedio por la peste y el hambre. Otro tercio de pelos los herirá con la espada, simbolizando a los que habían de caer por la espada, y un tercio será esparcido al viento, con lo que se indica la suerte de los deportados y dispersos en la huida por los diversos países; su destino será tan trágico, que ni así se verán libres, ya que Yahvé los perseguirá con la espada (v.3). Pero de éstos se salvará un resto; por eso se dice que debe ligarlos a la orla de su manto (v.3), es decir, conservarlos con el mayor cuidado2. El v.4 es comúnmente considerado como glosa para recalcar el castigo, pues el fuego parece simbolizar las diversas calamidades que se cernerán sobre la casa de Israel.
Castigo de la rebeldía de Jerusalén (5-17).
5 Así dice el Señor, Yahvé: Esta es Jerusalén. Yo la había puesto en medio de las gentes y de las tierras que están en derredor suyo. 6 Ella se rebeló contra mis mandatos, malvada, más que las gentes, y contra mis leyes, más que las tierras que están en torno suyo, despreciando mis mandamientos y mis leyes y no andando por ellos. 7 Por tanto, así dice Yahvé: Por ser más rebelde que las gentes que os rodean, y no haber seguido mis mandamientos, y no haber obrado según mis leyes, y hasta ni siquiera no haber hecho según las costumbres de las gentes que están en torno vuestro, 8 por eso así dice el Señor, Yahvé: Heme aquí contra ti a mi vez para hacer justicia en ti, a la vista de las gentes, 9 y haré en ti lo que no hice jamás, y como jamás volveré a hacer por todas sus abominaciones. 10 Por eso dentro de ti se comerán los padres a sus hijos, y los hijos se comerán a sus padres; cumpliré en ti mis juicios, y lo que de ti reste, lo esparciré a todos los vientos. 11Por mi vida, dice el Señor, Yahvé, ya que tú has profanado mi santuario con todas tus fornicaciones, yo también te abatiré a ti, sin que perdone mi ojo, sin misericordia. 12 Una tercera parte de ti morirá dentro, de pestilencia y de hambre; otra tercera parte caerá en derredor tuyo a la espada, y la otra tercera parte la esparciré a todos los vientos, e iré tras ella con la espada desenvainada. 13 Cumpliré mi furor y saciaré en ellos mi ira, y tomaré satisfacción, y sabrán que yo, Yahvé, he hablado en mi indignación cuando desfogue en ellos mi furor. 14 Te tornaré en desierto y en oprobio de las gentes que están en derredor tuyo, a los ojos de todos, 15 y serás el oprobio y el escarnio, el espanto y el escarmiento de las gentes que están en derredor de ti, cuando en medio de ti haga justicia con furor o indignación, con terrible ira. Yo, Yahvé, lo he dicho. 16 Cuando dispare yo contra ellos las perniciosas saetas del hambre, que los llevarán a la destrucción, que lanzaré yo para destruirlos, y acreciente vuestra hambre y os quite todo sustento de pan, 17 cuando lance contra vosotros el hambre y las bestias feroces que te dejarán sin hijos, y pasen por tus calles la pestilencia y el estrago, y haga caer sobre ti la espada. Yo, Yahvé, he hablado.”
Yahvé echa en cara a Jerusalén, la predilecta, el haber sido más culpable que los mismos pueblos paganos que la rodeaban. El profeta declara, en nombre de Dios, la razón teológica de su inminente y definitivo castigo. Toda la historia de Judá ha sido una serie de transgresiones y rebeldías contra su Dios, que con tanto amor los había llamado y protegido contra innumerables peligros. La había puesto en medio de las gentes (v.6), lo que geográficamente es exacto, ya que Palestina estaba en la encrucijada de los dos grandes imperios, el asirio y el egipcio 3. Israel superó en malicia a las otras naciones, en cuanto que, teniendo una revelación especial, no quiso someterse a los preceptos divinos, y aun se puso por debajo de las costumbres de las gentes (v.7), ya que no se sabe de ningún pueblo que haya renegado de su dios nacional, mientras que Israel reiteradamente ha abandonado a su Dios para seguir a los ídolos de otros pueblos4. Esta abominación merece un castigo desconocido, cual es el terrible asedio de Jerusalén con sus terribles escenas de antropofagia (v.10) 5.
El pecado más grave de Israel fue el de la idolatría. El santuario de Jerusalén había sido profanado con imágenes de ídolos extraños (v.11); tus fornicaciones puede tener el sentido metafórico de idolatrías, como es común en los profetas, y el sentido literal de actos de prostitución sagrada, corrientes en los santuarios cananeos. Como consecuencia de sus abominaciones, unos morirán por el hambre y la peste; otros, por la espada, y otros tendrán que huir perseguidos por el mismo Señor (v.12). Con ello Jerusalén será objeto de oprobio y de escarmiento entre las naciones (v.14) 6. Entonces conocerán todos que Yahvé ha hablado (v.17), manifestándose en su pleno furor por las transgresiones de su pueblo.
1 Según los LXX, son cuatro partes, pero el contexto pide tres. – 2 Cf. Eze 11:14-15; Jer 24:5-29; Num 15:38. – 3 Cf. Eze 38:12. – 4 Jer 2:10. – 5 Cf. 2Re 15:283; Lev 26:29; Deu 28:53; Lam 2:20; Lam 4:10. – 6 Cf. Jer 7:34; Lev 26:31; Lam 1:1; Lam 2:6; Lam 3:11; Jer 18:16; Deu 19:8.
Fuente: Biblia Comentada
una navaja de barbero. La señal que comunicó al afeitarse por completo ilustraba la humillación severa que vendría a mano de los enemigos, y hace hincapié en calamidades que vendrán sobre tres segmentos de Jerusalén debido a la conquista de los babilonios. Algunos fueron castigados con fuego, es decir, pestilencia y hambre (v. Eze 5:12), otros murieron a espada del enemigo y otros fueron dispersados y murieron fuera de la ciudad (cp. el v. Eze 5:12). Una pequeña porción de su pelo que quedó atada a su vestimenta (v. Eze 5:3) ilustraba al remanente que quedaría, pero algunos de ellos también fueron sometidos a otras calamidades (v. Eze 5:4; cp. Eze 6:8; Jer 41:1-18; Jer 42:1-22; Jer 43:1-13; Jer 44:1-30).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Aquí se presenta la primera serie de profecías dadas en el transcurso de un año, acerca de la conquista de Jerusalén por parte de los babilonios en 586 a.C.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
— divide el pelo: Nueva imagen o signo profético para representar a los habitantes de Jerusalén.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
le dice que afeite su cabeza y su rostro. Cuando haya terminado de representar el sitio, él ha de quemar una tercera parte de su cabello dentro de la ciudad. Otro tercio será golpeado por la espada alrededor de toda la ciudad. El tercio restante será esparcido al viento. Unos pocos cabellos serán guardados en su manto; otros pocos serán quemados.
Fuente: Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno
5.1-10 Rasurarse la cabeza era un signo de luto, humillación y arrepentimiento. Se le dijo a Ezequiel que rasurara su cabeza y su barba y que luego dividiera el pelo en tres partes, simbolizando lo que iba a suceder al pueblo en Jerusalén (véase 5.12). Junto con las profecías verbales, Dios pidió a Ezequiel que utilizara imágenes visuales para llamar la atención del pueblo y grabar en su mente una impresión indeleble. De la misma forma que Dios le dio a Ezequiel medios creativos para comunicar su mensaje a los cautivos, podemos comunicar nosotros en forma creativa las buenas nuevas acerca de Dios a una generación perdida.5.3, 4 Una pequeña porción del pelo que Ezequiel colocó en su ropa simbolizaba el pequeño remanente de fieles que Dios preservaría. Pero incluso algunas personas de este remanente serían juzgadas y destruidas debido a que su fe no era genuina. ¿De qué lado permanecerá usted en el castigo venidero? Mat 7:22-23 advierte que muchos de los que creen ser salvos no lo son. Asegúrese de que su compromiso sea vital y de corazón.5.7 La maldad del pueblo era tan grande que ni siquiera podían guardar las leyes de las naciones paganas a su alrededor, ¡ni mencionar las de Dios!5.11 Contaminar el templo, morada de Dios, al adorar ídolos y practicar el mal dentro de sus propias paredes era un pecado grave. En el Nuevo Testamento, sabemos que ahora Dios mora dentro de aquellos que son suyos. Nuestros cuerpos son su templo (véase 1Co 6:19). En la actualidad contaminamos el templo de Dios al permitir que la murmuración, la amargura, el amor al dinero, las mentiras o cualesquiera otras acciones o actitudes malas sean parte de nuestra vida. Al pedir al Espíritu Santo que nos ayude, podemos evitar contaminar su templo, nuestros cuerpos.5.13 ¿Ha visto alguna vez que alguien trate de disciplinar a un hijo diciendo: «si lo haces una vez más…»? Si el padre no cumple su palabra, el niño aprende a no escuchar. Las amenazas vacías hacen que el tiro salga por la culata. Dios iba a castigar a los israelitas por sus pecados flagrantes y quería que supieran que cumpliría lo que había dicho. El pueblo aprendió por las malas que Dios siempre cumple su Palabra. Demasiada gente ignora las advertencias de Dios, considerándolas como amenazas vacías. Sin embargo, Dios cumple sus amenazas. No cometa el error de pensar que Dios no habla en serio.ACTOS DE OBEDIENCIA DE EZEQUIEL2.1: Se levantó y escuchó el mensaje de Dios3.24-27: Se encerró en su casa3.27: Proclamó fielmente el mensaje de Dios4.1ss: Dibujó un mapa de la ciudad de Jerusalén en un adobe4.4, 5: Permaneció sobre su costado izquierdo durante 390 días4.6: Permaneció sobre su costado derecho durante 40 días4.9-17: Siguió instrucciones específicas para cocinar5.1-4: Se afeitó su cabeza y su barba12.3-7: Abandonó su casa para demostrar el cautiverio13.1ss: Habló en contra de los falsos profetas19.1ss: Cantó un lamento concerniente a los líderes21.2: Profetizó en contra de Israel y del templo21.19-23: Marcó dos caminos para el rey de Babilonia24.16, 17: No hizo duelo por la muerte de su esposa
Fuente: Comentarios de la Biblia del Diario Vivir
NOTAS
(1) Lit.: “dividirlos”.
REFERENCIAS CRUZADAS
a 176 Lev 21:5; Eze 44:20
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
sobre tu cabeza…navaja de barbero. Este acto simbólico muestra la suerte del pueblo en la ciudad sitiada. Rasurarse de esta manera era vergonzoso (2 S 10:4– 5); para un sacerdote era una profanación (Lv 21:5).
Fuente: La Biblia de las Américas
El cabello de la cabeza rasurada de Ezequiel representaba cuatro grupos de entre el pueblo: una parte sería destruida en la ciudad; otra moriría en la batalla; otra parte llevada en cautiverio y un remanente fiel (unos pocos, v. Eze 5:3) que sería sometido a pruebas adicionales.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
Lit., y divídelos
Fuente: La Biblia de las Américas
[16] Llama saetas del hambre a las tempestades, la sequía y los insectos nocivos, como la langosta.