Comentario de Gálatas 5:10 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Yo confío en el Señor con respecto a vosotros que no pensaréis de ninguna otra manera; y el que os inquieta llevará su castigo, sea quien sea.

5:10

— Yo confío respecto de vosotros en el Señor, que no pensaréis de otro modo; — Aquí Pablo expresa optimismo con respecto a los hermanos gálatas (compárense 3:4; 4:6, 7; y varias veces les llama «hermanos»). «Y tenemos confianza respecto a vosotros en el Señor, en que hacéis y haréis lo que os hemos mandado» (2Ts 3:4). «Pero en cuanto a vosotros, oh amados, estamos persuadidos de cosas mejores, y que pertenecen a la salvación, aunque hablamos así… Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma» (Hebrews 6:9; 10;39). «Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo» (Flp 1:6).

— mas el que os perturba — Casi siempre la «pequeña minoría» tiene su cabecilla o cacique. Aquí Pablo dice «el que os perturba», sin nombrarlo como hizo en otros casos (1Ti 1:20; 2Ti 2:17) y como Juan hizo (3Jn 1:9-10), pero los hermanos sabían de quien hablaba. En otros versículos usa el plural (1:7; 4:17; 5:12; 6:13). Con respecto a perturbar (o turbar) al pueblo de Dios, véanse también Jos 7:25; 1Re 18:17-18.

— llevará la sentencia, quienquiera que sea. — 1:8, 9. Compárese 3Jn 1:9-10. Pero lo triste es que también los que siguen a los falsos maestros tendrán que llevar la sentencia (Mat 15:14).

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

yo confío de vosotros. Gál 4:11, Gál 4:20; 2Co 1:15; 2Co 2:3; 2Co 7:16; 2Co 8:22; 2Ts 3:4; Flm 1:21.

mas el que os inquieta. Gál 1:7; Gál 2:4; Gál 3:1; Gál 4:17; Gál 6:12, Gál 6:13, Gál 6:17; Hch 15:1, Hch 15:2, Hch 15:24; 1Jn 2:18-26.

llevará el juicio. Gál 5:12; 1Co 5:5; 2Co 2:6; 2Co 10:2, 2Co 10:6; 2Co 13:10; 1Ti 1:20.

quienquiera que sea. Gál 2:6; 2Co 5:16.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

confío respecto de vosotros. Pablo expresa la seguridad alentadora de que el Señor será fiel en sustentar a los suyos para que no caigan en la herejía. Vea Jua 6:39-40; Jua 10:28-29; Rom 8:31-39; Flp 1:6-7. Ellos perseverarán y serán preservados (Jud 1:24). la sentencia. Todos los maestros falsos incurrirán juicio severo y condenación devastadora. Vea las notas sobre 2Pe 2:2-3 ; 2Pe 2:9.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

5:10 — Yo confío respecto de vosotros en el Señor, que no pensaréis de otro modo; — Aquí Pablo expresa optimismo con respecto a los hermanos gálatas (compárense 3:4; 4:6, 7; y varias veces les llama «hermanos»). «Y tenemos confianza respecto a vosotros en el Señor, en que hacéis y haréis lo que os hemos mandado» (2Ts 3:4). «Pero en cuanto a vosotros, oh amados, estamos persuadidos de cosas mejores, y que pertenecen a la salvación, aunque hablamos así… Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma» (Hebrews 6:9; 10;39). «Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo» (Flp 1:6).
— mas el que os perturba — Casi siempre la «pequeña minoría» tiene su cabecilla o cacique. Aquí Pablo dice «el que os perturba», sin nombrarlo como hizo en otros casos (1Ti 1:20; 2Ti 2:17) y como Juan hizo (3Jn 1:9-10), pero los hermanos sabían de quien hablaba. En otros versículos usa el plural (1:7; 4:17; 5:12; 6:13). Con respecto a perturbar (o turbar) al pueblo de Dios, véanse también Jos 7:25; 1Re 18:17-18.
— llevará la sentencia, quienquiera que sea. — 1:8, 9. Compárese 3Jn 1:9-10. Pero lo triste es que también los que siguen a los falsos maestros tendrán que llevar la sentencia (Mat 15:14).

Fuente: Notas Reeves-Partain

El contenido de este versículo es emocionalmente fuerte, pues combina una expresión de confianza con una amenaza, ambas con fundamento en el Señor. Pablo hace un cambio que va de una actitud de desesperación (Gál 4:19-20) a una expresión de confianza en sus convertidos gálatas: «y yo tengo confianza en el Señor de que ustedes no van a pensar de otro modo» (DHH96). La confianza de Pablo se funda “en el Señor”, base de la seguridad del apóstol.

Pablo quiere hacer sentir a los gálatas que existe una fuerza de unidad muy grande entre él y ellos, y cree que la misma permitirá que los gálatas acepten su razonamiento: «Puesto que somos cristianos, estoy seguro de que ustedes estarán de acuerdo conmigo» (TLA). También se puede traducir: “Los conozco muy bien, y por eso estoy bien confiado en ustedes”, “debido a que estamos unidos por la fe en el Señor, yo estoy seguro de que ustedes compartirán mi convicción”.

La amenaza se dirige contra quien está causando disturbios en la comunidad, propagando una enseñanza contraria a la de Pablo: «pero Dios castigará a ese que los anda perturbando, no importa quién sea» (DHH96). Algunos estudiosos opinan que Pablo tiene en mente a una persona específica, tal vez el líder de los misioneros rivales, y que la expresión quienquiera que sea indica que tiene una posición elevada dentro del grupo.

El verbo griego “perturbar” está en participio, una especie de gerundio, y señaliza una acción en proceso. Ha sido también traducido en este versículo como «el que os alborota» (NBE), «el que los está perturbando» (NVI), «el que los amotina» (BA).

En conjunto, proponemos la siguiente traducción: “Debido a que estamos unidos con el Señor, estoy seguro de que ustedes verán las cosas de la misma manera que yo. La persona que les causa perturbación, no importa cuán importante se crea, va a sufrir un castigo de parte de Dios”.

Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción

NOTAS

(1) “Tengo confianza en Jehová con relación a ustedes”, J7,8.

REFERENCIAS CRUZADAS

o 249 Jua 17:21; Gál 3:28

p 250 2Co 2:3

q 251 Gál 1:7

r 252 2Co 11:15

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

R746 Οὐδὲν ἄλλο significa: nada más.

Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego

Lit., hacia

O, sentencia

Fuente: La Biblia de las Américas

?V. 10a:? ?Yo confío en vosotros, en el Señor, que no pensaréis de otro modo.? ??Muy bien atempera el apóstol sus palabras para que no se crea que él deposita su confianza en el? ?hombre. «Confío en vosotros», pero no con miras a vosotros mismos, sino «en el Señor». Y si bien el? ?sentido seria el mismo si dijera: «Yo confío respecto de vosotros en el Señor», hay sin embargo cierto? ?oculto énfasis que no sé definir, pero que me hace preferir la formulación «hebraizante», como podría? ?llamársela, empleada por Pablo: «Confío en vosotros en el Señor». Pues también esto parece ser una especie? ?de leve lisonja emanada de su solicitud paternal, a saber, que Pablo confía, sí, en ellos, pero sólo “en el? ?Señor». Y tiempo sería también de que por fin nos resultase familiar la palabra «pensaréis» (sapietis), de? ?tan frecuente uso en el Nuevo Testamento, a menudo con el significado de «sabiduría», «prudencia», como? ?en ?Romanos 8? (v. 6): «La prudencia de la carne es muerte».?35? Pues aquello que se designa con esta palabra,? ?y que es llamado también empeño del ánimo, intento, intención, parecer, sentido, sentimiento, opinión,? ?juicio, propósito, designio, plan, reflexión, mente» etc., todo esto está expresado en esa palabra griega? ?öñüíçìá, o öñüíçóéò.?36? Por eso dice el ?Salmo 1? (v. 1): «Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo? ?de malos», lo que en alemán se llama «gutdunckel», como cuando decimos «es dunckt mich so recht».?37? ??«De otro modo» no puede referirse a lo que precede inmediatamente, sino que debe ser relacionado con el? ?contenido básico de la epístola entera. El sentido será entonces éste: «Aprendisteis de mí el evangelio;? ?espero que no pensaréis en nada nuevo, nada distinto, que no introduciréis cambios». Nuevamente, el? ?apóstol se expresa en forma muy afable y se limita a una piadosa conjetura; pues de hecho, los gálatas ya? ?habían comenzado a pensar otra cosa, u otra cosa había comenzado a parecerles buena.? ??V. 10b:? ?Mas el que os perturba, llevará la sentencia, quienquiera que sea.? ??«El que os perturba» quiere decir: el que mediante sus doctrinas propias os aparta de la fe verdadera? ?y os desplaza de la posición que ocupabais. Pero al que así os perturba, ¿no le podrá excusar su celo? ?piadoso, o como dicen, su «buena intención»?38? ¿O su ignorancia? ¿O el hecho de que es un discípulo de los? ?apóstoles, y un discípulo nada insignificante? «¡No!», dice Pablo: «quienquiera que sea», y por más destacado? ?que sea: ha cometido un grave pecado, y «llevará su sentencia». También éste es un modo de hablar? ?característico de la Escritura: «llevar su carga, su juicio, su iniquidad», que indica que las personas en? ?cuestión serán condenadas. En efecto: los que están en Cristo no llevan su carga, sino que, como dice Isaías? ?en el cap. 53 (v. 4, 6), Cristo mismo «llevó nuestras enfermedades», y «el Señor cargó en él los pecados de? ?todos nosotros». Pero en sí, todo hombre está obligado a llevar su propio pecado, a pesar de que no tiene la? ?capacidad para ello, como leemos en el ?Salmo 37? (38:4): «Porque mis iniquidades han sobrepasado mi? ?cabeza; y como carga pesada se han agravado sobre mi».? ??Es, pues, algo horrible lo que Pablo dice aquí: «llevará su sentencia». Fíjate también en la audacia? ?soberana con que desposee al perturbador de toda prerrogativa personal: «quienquiera que sea, eso no me? ?interesa; sea apóstol o discípulo de los apóstoles, el prestigio personal nada tiene que ver». Ahí vemos cuan? ?profundamente desprecia Pablo la «acepción de personas», y cuán grandes males son perpetrados al amparo? ?del renombre y la falsa apariencia que los hombres suelen darse. Y ni esto es suficiente para poder? ?disuadirnos de que con los ojos abiertos, voluntariamente, y hasta con placer, nos dejemos seducir por la? ?ostentación de santidad, autoridad, potestad, reglamento, privilegios, y otras vanidades por el estilo. Porque? ?en la iglesia de hoy día ya no está permitido decir: «quienquiera que sea», sino que basta con decir:? ?«este hombre opina así, así lo quiere, así lo ordena», para que se lo tome como veredicto de la iglesia entera.? ??Mientras tanto, ciertos preconizadores del anticristo han llegado al extremo de sostener, con desvergonzada? ?consecuencia, que nadie debe decir a otro: «¿Por qué haces esto?», y al que menos se lo debe decir es al? ?Romano Pontífice. Para éste, dicen además, «no hay juez en la tierra»,?39? y «Cristo no habría hecho provisión? ?suficiente para su iglesia si no hubiese otorgado a un hombre un poder equivalente al que posee él? ?mismo». Palabras como éstas, más insensatas que la peor de las impiedades, son precisamente las que? ?nuestro siglo merece oír: son la justa recompensa por los «méritos» que hemos hecho en nuestro servir a? ?Cristo.? ?

Fuente: Comentario de Gálatas por Martin Lutero

* O, “juicio”.

Fuente: Versión Biblia Libre del NuevoTestamento