Pero si os mordéis y os coméis los unos a los otros, mirad que no seáis consumidos los unos por los otros.
5:15 — Pero si os mordéis (palabra usada comúnmente de víboras) y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. — 2Co 11:20. La vida de la congregación es destruida por los mismos miembros. En inglés los que difaman se llaman backbiters (los que muerden la espalda), Pro 25:23; 2Co 12:20.Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain
Gál 5:26; 2Sa 2:26, 2Sa 2:27; Isa 9:20, Isa 9:21; Isa 11:5-9, Isa 11:13; 1Co 3:3; 1Co 6:6-8; 2Co 11:20; 2Co 12:20; Stg 3:14-18; Stg 4:1-3.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Cuando los cristianos dan paso a sus deseos pecaminosos (v. Gál 5:13), comienzan a disputar y a criticarse los unos a otros. Ese comportamiento egoísta nos llevará a la propia destrucción. Quienes critican y atacan terminan, por lo general, consumidos en peleas inútiles.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
os mordéis y os coméis unos a otros. La imagen corresponde a animales salvajes que se atacan y devoran entre sí, una demostración gráfica de lo que sucede en el campo espiritual si los creyentes no se aman y sirven unos a otros.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
5:15 — Pero si os mordéis (palabra usada comúnmente de víboras) y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. — 2Co 11:20. La vida de la congregación es destruida por los mismos miembros. En inglés los que difaman se llaman backbiters (los que muerden la espalda), Pro 25:23; 2Co 12:20.
Fuente: Notas Reeves-Partain
Nuevamente Pablo utiliza una fuerte figura de lenguaje: Pero si os mordéis y os coméis unos a otros. Puede ser que Pablo sólo esté contraponiendo esta posibilidad de daño mutuo al mandamiento del amor. Sin embargo, también es posible que esté aludiendo a una situación real de enemistades y pleitos en las comunidades gálatas. La forma condicional del griego que se usa aquí permite ambas interpretaciones, además de que expresa cierta nota de advertencia que es bien comunicada por varias versiones: «Tengan cuidado, porque si ustedes se muerden y se comen unos a otros» (DHH96), «pero atención, que si os mordéis y devoráis unos a otros» (BP), «les advierto que, si pelean y se hacen daño» (TLA).
El final de la frase no es del todo claro, y tal vez sea un intento de Pablo de poner en paralelo los efectos del “amor a toda la gente” y lo que sucede cuando este amor no existe: Mirad que también no os consumáis unos a otros. Este mirad es equivalente al “mucho ojo”, “estén alertas” o “pónganse vivos”, expresiones del lenguaje coloquial en varias regiones latinoamericanas.
Según Pablo, son los mismos gálatas, o el compañerismo cristiano entre ellos, lo que puede ser destruido. Por esta razón, varias versiones comunican esta frase como una advertencia: «Llegarán a destruirse entre ustedes mismos» (DHH96), «terminarán por destruirse unos a otros» (TLA), «os vais a destrozar mutuamente» (NBE), «acabaréis consumiéndoos todos» (BP), “al final estarán por los suelos con tanto zafarrancho”.
Pablo está usando los verbos en tiempo presente, lo cual parece indicar que está pensando en una situación actual. Esto significa que el esfuerzo de los maestros rivales ha causado caos y confusión entre los creyentes gálatas, quienes recurren a las agresiones para defender sus posturas.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
REFERENCIAS CRUZADAS
b 262 Stg 3:14
c 263 Pro 24:29; Stg 4:2
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
M152 Hay dos casos en que aparecen cláusulas condicionales en el N.T., las cuales son perfectamente correctas en su forma gramatical, pero inconsecuentes en el sentido lógico, según parece (G?l 5:15; Stg 3:14). En ambos casos, la cláusula imperativa es válida si la condición de la prótasis se cumple o no. Lógicamente, las cláusulas imperativas deben estar en futuro de indicativo: si ustedes continúan así, también …
MT124 En el v. 15, miren que no, difícilmente pudiera considerarse como una prohibición.
Fuente: Ayuda gramatical para el Estudio del Nuevo Testamento Griego
?V. 15:? ?Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no seáis consumidos unos de otros.? ??Cuando el apóstol quiere exhortar a sus lectores al amor, casi siempre añade, en todas sus cartas,? ?que sean todos de un mismo sentir, que no se envanezcan el uno contra el otro a causa de los dones que en? ?diferente medida se les han concedido (?1 Co. 4: 6?; ?Ro. 12: 3?). Es ésta la razón de por qué les presenta, en? ?Romanos 12? (v. 4 y siglas.) y ?1 Corintios 12? (v. 12 y siglas.) el cuadro del cuerpo y los miembros, mostrándoles? ?cómo los miembros se tratan entre sí con solicitud, y cómo uno sirve al otro y pone empeño en no? ?dañarlo. El apóstol sabe muy bien que los gálatas son seres humanos; sabe también que cuanto más extraordinarios? ?sean los dones, tanto más perniciosos son cuando falta el amor. El conocimiento envanece; el? ?manejo del poder envanece; en fin: todo envanece, excepto el amor; el amor edifica (?1 Co. 8:1?). Sólo el? ?amor usa todas las cosas en la forma correcta, porque invierte todos los dones de Dios no en la satisfacción? ?de sus propios gustos, sino en el servicio a los demás. Donde no hay amor hay rivalidades, hay contiendas? ?y disputas; allí la gente «no piensa de sí con cordura, sino que tiene más alto concepto de sí que el que debe? ?tener», como se lee en ?Romanos 12? (v. 3). Este, digo, me parece ser el mal que el apóstol toca en el presente? ?pasaje; porque es el que más trabas pone al servicio del amor. Pues mientras que cada cual se envanezca a? ?causa del don que se le ha dado, y sólo piense en cómo usarlo para mejorar su propia posición en lugar de? ?pensar en cómo servir con ese don a algún otro, -mientras tanto forzosamente se levantan rivalidades y? ?envidia, mutuo desprecio, calumnia, condenación, juicio inconsiderado, ira, odio, lenguaje violento, malicia,? ?etc. En ?Efesios 4? (v. 1 y siglas.) y ?Filipenses 2? (v. 1 y siglas.), Pablo detalla este pensamiento en forma? ?amplia; pues aquí sólo lo menciona de paso.? ??Lo que el apóstol quiere decir es, pues, lo siguiente: «Sé que sois seres humanos, y que podéis caer? ?en tentación mientras que uno quiera aparecer como más excelente que otro, y mientras que no queráis ser? ?«buenos administradores de la multiforme gracia de Dios» (1 P. 4:10) que está en vosotros: Pero tened? ?cuidado de que no os calumniéis ni os mordáis unos a otros ni deis lugar a esta clase de tentación; sino por? ?el contrario, como ya dije antes, servios por amor los unos a los otros, cada uno con el don con que ha sido? ?enriquecido, «el uno en la enseñanza, el otro en el repartir con liberalidad», como se expone más extensamente? ?en ?Romanos 12? (v. 3 y sigtes.). Pero no de manera tal que el que enseña se envanezca frente al que? ?está en condiciones de repartir, porque éste tal vez no esté repartiendo tanto como aquel otro quisiera. Ni? ?tampoco de manera tal que el que está en condiciones de repartir se envanezca frente al que enseña, porque? ?tal vez le parezca que él no necesita. la enseñanza de aquél. La misma regla se debe seguir con respecto a? ?todos los demás dones, Pues como acabo de señalar, ese género de envanecimiento se produce muy fácilmente? ?en los que tienen una determinada capacidad: se jactan entonces de no necesitar a los demás, el? ?resultado es que «no sirven por amor los unos a los otra sino que «se consumen» en mutuo desprecio, en? ?odio, arrogancia, calumnia, etc.? ?