Pero Abraham se inclinó ante el pueblo de la tierra.
Ver Gén 23:7; Gén 18:2; Gén 19:1.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Yo daré el precio: Abraham no estaba interesado en el terreno, y nuevamente ofreció comprar la cueva. (A lo mejor, pensaba que un regalo ganado tan fácilmente, podría ser fácilmente quitado después de un tiempo.) En todo caso, cuando Abraham habla de precio, no se refiere al mismo dinero que actualmente usamos. Aún no se habían inventado las monedas, no las inventaron hasta el 650 a.C. Lo que Abraham ofrecía era un generoso peso en plata.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Lit., la